El año escolar se había acabado. Sun retiró sus calificaciones y las llevo donde su padre para firmarlas, pero este estaba hablando por teléfono.

---- si tiene o no pareja, no es de tu incumbencia. ¿Llamas solo para esto? No seas loca. - se escuchaba molesto - no le mandas mensajes, no la llamas, no buscas tener contacto con ella, ¿De que me estás hablando? Por algo no te dieron a tenencia a vos, porque estás loca. Anda con el psiquiatra y dejá a Sol en paz, sus notan son buenas y no causa problemas, dejala vivir y respirar. Tóxica.

Sabía que se trataba de su madre. Era más que obvio, pero prefirió no molestar.

Dejó el papel en la mesa de la sala principal y subió a su cuarto, ignorando la charla telefónica de los adultos.

¿Le sorprendía? No, verdaderamente no.

Su madre se empeñaba en no permitirle aprender cosas de la vida normal. Tal vez por miedo, eso queria pensar Sun.

Jeno era quien le ayudaba con sus notas, estudiando juntos y haciendo resúmenes de las clases para ponerse al día y comprender todo desde un principio.

Ella no lo conocía, Lee era alguien responsable que terminó por contagiarle su responsabilidad. Se había acostumbrado a hacer esos resúmenes después de las clases para completar sus tareas más fácil de lo que pensaría. 

Ahora se sentía más tranquila con ella lejos. Su padre era exigente..y no tanto, solo pedía buenas notas, no excelentes, buenas.

Trabajaba mucho pero pasaba los días libres con Sun, salían a comer o le ayudaba con algunas tareas. Era participativo en lo que podía y cuando podía, era algo que su madre nunca hizo.

Se sentía más libre aquí, tenía tareas que realizar, obligaciones que cumplir y podía manejarse a su tiempo. Estaba cómoda, estaba bien.

Sabía que si se enteraba armaría un gran revuelo, porque "podía ser una distracción", "se volverá idiota" y sin contar que durante mucho tiempo crítico su físico de manera pasiva, diciendo que monera quien para que alguien volteara a verla o se fijara en ella más que como una amiga o las  respuestas de una tarea.

Le dolió irse, pero fue lo mejor. Un cambio muy abrupto, pero se encontró con gente muy buena que le ayudaba en todo lo que podía necesitar.

¿Que más podía pedir?

---- ¿Solecito? - su padre se asomó por la puerta con una sonrisa - un diez en lengua, es excelente. ¿Quieres salir para festejar?

---- estoy..algo cansada. - se arropó mejor entre las sábanas - ¿Mañana?

---- salgo tarde, pero vamos por hamburguesas. - chocó sus nudillos contra el marco - invita a Jeno si quieres.

---- lo haré.

Los mensajes de su madre no pararon en toda la tarde, los ignoraba porque sabía de qué se trataba.

Pero en algún punto, un empujón de confianza le hizo contestar una de sus llamadas.

---- Sol, ¿Por qué no con..?

---- mamá, ya sé lo que vas a decir. No quiero escucharte, estoy tratando de descansar después de haber aprobado todas las materias y no puedo cerrar los ojos porque ya estás rompiéndome las bolas con tus llamadas y mensajes increpandome cómo si tener novio fuese un crimen. - ¿En algún momento pensó hablarle así a su madre? No, en verdad no - ¿En todo este tiempo nunca cuestionaste por qué decidí irme con papá, por qué no te dieron la tenencia o por qué no me permiten estar cerca tuyo?  Me haces mal, destruyes cada pequeña gota de autoestima que llegue a tener y parece que tampoco sos consciente de eso. No quiero volver a hablar porque me hace sentir mal, voy a hablar de esto con la abogada porque ya no soporto todo esto. - suspiró después de un largo tiempo -  y sé que papá es lo suficientemente boludo como para no hacerlo con tal de no hacerte mal, porque lastimosamente él te sigue queriendo. - soltó una pequeña risa - ¿Sabés que es peor? Que yo también. Chau.

Cortó la llamada y cubrió su rostro, despejando este del cabello cuando su padre entró.

---- ¿Todo bien?

---- sí, todo bien.

Ambos sabían que no era así.

---- ¿Era mamá?

Solo asintió, sonriendo leve para relajarlo. Él le correspondió, intentando no dejar ver su molestia.

---- ahora quiero un helado.

---- vamos por ese helado, rayito.

***

Jeno salía del gimnasio junto con Jaemin. Sí, ambos estaban yendo hasta en vacaciones, porque ninguno tenía nada más interesante que hacer.

Donghyuck los esperaba afuera, mientras se comía un helado. Jeno lo miró extrañado, hacía mucho frío para eso.

---- te vas a enfermar.

---- no me interesa. - le dió un mordisco, recibiendo muecas de sus amigos - vamos a casa, quiero molestar a Minsuk.

No estaban muy lejos de casa, los tres se juntarian para hacer una de sus famosas pijamadas.

---- ¿Y? Cómo va todo con Sun. - Jaemin habló después de un rato - falta poco para el año.

---- pues..bien, vamos despacio.

---- ¿Tienes planeado algo para el aniversario? - Haechan se metió, tirando un papelito en un tacho de basura -

---- no, aún no..- acomodó la mochila en su espalda, sintiendo el frío colarse por su ropa - podríamos ir de viaje..no lo sé. Cumplo la mayoría dentro de poco.

---- ¡Es verdad! - Nana se escandalizó, fingiendo llorar - nuestro nene..

Donghyuck se aferró a su brazo, sollozando dramáticamente.

---- ya no es un cachorro, ahora es todo un perro de peleas..

Aprovechó para tocar los brazos de Jeno, logrando que este se alejara disgustado.

---- pero si fuese Sun, ahí si te dejas, eh.

---- de eso de trata el consentimiento, imbécil.

Si habitación se transformaba en una cueva por los próximos dos días. Apenas salian, solo por comida e ir al baño, nada más.

Casi no dormían, y al que dormía primero...mejor no hablar de como amanecía.

Minsuk abrió la puerta, cambiando su semblante cuando Haechan movió su mano en saludo.

---- Minmin, ¿Cómo estás? - Jaemin le sonrió, sentía que moriría -

---- bi-bien..- se corrio de la puerta, dandole pase libre a los chicos, pero cerró después de que Jeno pasara.

---- Hey! - rezongó Lee, golpeando la puerta repetidas veces - ¡Jeno, dile algo!

El mayor volteó a verla, ella sonreía inocente en su dirección.

---- algo.

---- ¡Jeno!

N/A: si no leyeron mi comunicado por tablero, les aviso que esta historia tendrá entre 30 - 35 caps.