Siete meses de noviazgo

Sun se había quedado dormida sobre Jeno, mientras este jugaba con Jaemin y Haechan online.

La pelirroja tenía su cabeza apoyada en la mejilla de él y Jeno no se movería por nada del mundo, quería dejarla descansar y terminar la partida.

Ese día Sun se quedaría a dormir en su casa, pero ya eran las tres de la mañana y Jeno seguía jugando, por eso la invitó a acompañarlo pero el sueño le ganó.

Por unos días, el padre de Sun debía quedarse en el trabajo y, después de charlar con los padres de Jeno, aceptó dejarla a su cargo por esos pocos días.

Jeno estaba más que encantado de pasar los días con Sun. Ambos eran lo suficientemente silenciosos y ruidosos como para comprenderse. No era tedioso ni jodido pasar más de cinco horas juntos.

---- bien..- cerró el juego - voy a dormir, chicos.

---- tengo hambre. - contestó Donghyuck - duerman bien.

---- chicos..- Jaemin no habló por unos segundos, creando incertidumbre - los quiero.

---- nos vemos.

---- sí, chau.

Escucharon la risa de Jaemin antes de cortar la llamada por discord y finalmente apagó su computadora.

Su silla con rueditas le ayudó a moverse cerca de la cama, dónde intentó despertar a la chica en su regazo.

---- hey..- despejó su rostro del cabello - despierta, dormilona..

Pellizcó suave sus mejillas, intentando obtener alguna reacción de ella.

---- no..- frunció el ceño y volvió a acomodarse, está vez subiendo sus piernas y tirándose hacia un lado -

Jeno la sujetó mejor, terminando por permitirle acomodarse al estilo nupcial y escuchar pequeños ronquidos.

Le daba lastima tener que despertarla, así que no le quedaba otra que cargarla hasta el colchón.

Estaba cerca, eso era bueno, así que la dejó recostada allí, mientras él terminaba de apagar las luces de su habitación.

---- Jeno...- escuchó su balbuceo - aquí..

Palmeó su lado, apenas abriendo los ojos.

---- señorita, usted debe ir al baño y lavarse los dientes, cambiarse y recién dormir. - carcajeó mientras se acercaba - vamos, vamos...

Sun frunció el ceño y se dió la vuelta, ignorandolo por completo e intentando nuevamente dormir.

El pelinegro llevó su mano derecha a la cintura de Sun e hizo cosquillas, rogando por su atención.

La pelirroja pataleó, quejándose mientras impedía que los dedos de su novio siguiesen atancandola.

Jeno juró morir de ternura cuando vio el rostro molesto y adormilado de Sun, con un puchero apenas marcado de manera inconsciente y sus cabellos despeinados.

---- te odio..- murmuró ella -

Pero él, se agachó a su altura para atrapar sus labios. Los movió suavemente, Sun correspondió y perdieron varios segundos en eso.

---- vamos, arriba. - finalizó con un beso en su nariz - al baño y podemos dormir.

Las mejillas de Sun se pintaron se rosado al escuchar eso, aún estaba algo tímida respecto a dormir con Jeno, pero era de lo más cómodo de la vida.

¿Una curiosidad? Jeno adoraba ser abrazado al dormir o abrazar, ambas son buenas opciones. Le gustaba, secretamente, recibir atención de cualquier forma: una mirada, tomar su mano, acariciar su cabello, cualquier cosa que le dejara en claro que tenía su atención.

Pero ahora estabas cargando a un koala dormilón hasta el baño. Sun se acomodó en el lavamanos, acostumbrandose a la luz que había allí.

Jeno le alcanzó su cepillo de dientes ya con la pasta puesta y listo para usar.

Ambos cepillaban sus dientes, o eso creía Jeno. No podía verla ya que ella tenía su frente afirmada al hombro del chico y mantenía los ojos cerrados.

El índice de Jeno picó las costillas de Sun y esta reaccionó, volviendo a cepillar sus dientes en tiempo récord.

Le pasó un vaso de agua y enjuagó su boca, volviendo a acomodar sus brazos al rededor del cuello de Jeno.

---- ¿Esto estaba incluído en aceptar ser mi novia? - sujetó mejor desde sus muslos, apagando la luz del baño y volviendo a su cuarto -

---- ¿Esperar a que termines de jugar, estaba incluído en que seas mi novio?

Él besó su coronilla y finalmente cerró la puerta de su cuarto. Solo quedaba las luces led azules encendidas.

Sun se quedó sentada unos segundos en la cama y después le dirigió la mirada.

---- ¿Jeno? - sonrió leve -

Con sus ojos entrecerrados, alzó un poco su rostro, dándole a entender que escuchaba.

---- ¿Puedes usar..?

---- no.

---- ¡Jeno..!

---- no.

---- ¡Pero!

---- que no.

Jaemin les había regalado, para molestar a Jeno, pijamas a juego. Eran de color rosita y banco, con conejitos como estampado.

---- no seas aburrido..

---- ¿Que me das a cambio? - peinó el cabello de Sun con cuidado -

Los ojos marrones de ella brillaron antes tirar de su remera para acercarlo más.

---- ¿Que quieres?

No lo culpen. Aún es un adolescente con hormonas alborotadas y eso que dijo Sun solo lo puso nervioso. Más aún cuando noto que remojó sus labios para luego sonreír.

Sus ojos viajaron, inconscientemente, a la camisa que llevaba puesta. Dejaba ver qué no traía puesto su sostén y a penas se marcaban sus pezones en ella.

Si lo hacía o no con doble sentido, Jeno no tenía por qué pensar en eso. Probablemente sería incomodo si ella pudiese leer sus pensamientos.

Se alejó por eso, por nervios. Porque su cabeza le hizo pasar una mala jugada y su imaginación, en cuestión de segundos, modificó toda la situación.

No, no, no, esto estaba mal.

---- me lo podré, pero nada de fotos. - a pasos torpes, caminó al armario - me cambiaré en el baño..

Y si que necesitaba ir, su entrepierna comenzaba a marcarse más y más.

---- claro..- buscó su bolso y sacó el pijama - nada de fotos.

Sabía que eso era mentira. Sun encontraría la forma de tomarle una fotografía, pero no le enojaba para nada, solo eran discusiones llenas de ridiculeces y risas porque uno tenía fotos peores del otro.

Cerró la puerta del baño y su respiración intentó regularse.

¿Por qué ahora? ¿Por qué con algo tan inocente?

¿Por qué ahora surgían estos pensamientos en su cabeza? Nunca le había pasado. Tal vez porque antes no fue cercano a tener amigas o novias, entonces todo golpeaba rápidamente ahora.

No lo sabe, pero no quería hacerlo.

Era obvio que sabía que hacer, pero no quería. Se sentiría mal si lo hacía, porque ella nunca había dado indicio de querer generar eso en él. Era asqueroso si se ponía en lugar de ella y lo imaginaba.

Bueno..a él no le gustaría que hagan eso si fuese Sun. Pero tampoco podía salir así, lamentablemente se notaba demasiado y cuando más pasaba, más atención necesitaba.

Lavó su rostro con agua fría, pensando que eso podría ayudarle, pero no veía efecto alguno.

Trabajó en su respiración, deseando que mágicamente la erección dejase de existir y pudiese acostarse con su adorable novia y hablar de tonterías hasta caer dormidos.

Pero no. Su mente parecía estar planeando otra cosa y no lo dejaba en paz.

Miró hacia abajo, confirmando que aún estaba ese bulto en sus pantalones.

"Es algo normal que les pasa a los adolescentes, no hay que asustarse..es normal. Solo...pasó"

Cruzó por su cabeza la opción de masturbarse y acabar con esto, pero...

Bueno, Sun no tenía que enterarse..

¡Ay, no! ¡No podía!

"No estás cometiendo ningún crimen, es algo necesario, es tu libertad sexual y..Sun está afuera, Sun está esperando y yo solo.."

Sin sobrepensar más, bajó sus pantalones y boxers, liberando su erección. Rodeó con su mano esta y la movió levemente, intentando que el líquido preseminal ayudara con el trabajo.

***

Se aseguró de no tardar mucho, pero lo hizo. Por eso, al terminar, buscó una mascarilla, poniéndosela en el rostro y saliendo con el pijama rosado.

Sun estaba dormida con el teléfono en manos, acomodada bajó las suaves colchas y con la cabeza en la almohada blanca.

Miró la hora en su celular, eran las cuatro y diez. Extremadamente tarde para alguien como Sun, quien acostumbraba a dormirse antes de las dos de la madrugada.

Ahora, en vacaciones, alargaba sus horas de sueño e intentaba dormir más tarde, pero las cuatro era un horario demasiado difícil para mantenerse despierta.

Jeno suspiró y sacó la mascarilla de su rostro, notando que no tenía que fingir nada y la tiró al cesto de basura. Apagó las luces azules y el velador, acomodándose al lado de la pelirroja, sacándole el celular y dejándolo en la mesa de luz.

Estaba ahora más tranquilo, nada que molestara en sus pantalo-..

Sun se acercó a su cuerpo, chocando su espalda con el pecho de Jeno y acomodando sus piernas de manera tal, que estuviesen haciendo la típica posición de "cuchara"

Jeno no dudó en abrazar su cintura y cerrar sus ojos, centrándose en conciliar el sueño, pero Sun habló en voz baja:

---- tardaste mucho..

---- lo siento.

---- Uhm..- asintió con su cabeza - buenas noches.

---- descansa, Sunnie.