027.
Pasó una semana.
Una semana la cual Jungkook sintió como una jodida eternidad y tortura. Con Jimin ahora en aislamiento por tiempo indefinido, se encontraba solo todo el tiempo. Era melancólico, pues inconscientemente extrañaba a Jimin. A pesar de que estuviera molesto con él, también se sentía preocupado porque al estar en ese lugar, no tenía idea de su bienestar. Si estaba bien o si estaba mal.
Y claramente, se arrepentía de haberle dichos aquellas cosas a Jimin. Porque tenía razón, muy en el fondo él sabía que Jimin no le había engañado. Sin embargo no entendía porque había llegado a creérselo por un momento, y es que todo era tanta coincidencia que sus pensamientos e intuición le jugaron una mala pasada.
Él no había delatado a Jimin. ¿Qué carajos? Eso lo había mantenido pensando todo el tiempo, porque era demasiado raro. Era como si el universo hubiese conspirado contra ellos o quisiera separarlos. Por lo que había comenzando a investigar por su propia cuenta qué había detrás de todo esto.
Y lo descubrió. Bueno, Taehyung lo hizo. Ya que se había ofrecido a ayudarle.
—Todo estuvo planeado —dijo Taehyung— Los escuché, a Jaesoo y Taemin hablar en los baños. Ellos planearon todo esto para vengarse de nosotros.
—¿Qué? —suelta Jungkook, asombrado— No puedo creerlo, esos hijos de puta... ¿Cómo?
—No lo sé con exactitud, pero primero, Jimin no te engañó, eso fue invento de ellos y le pagaron a unos cuantos reclusos para que esparcieran el rumor de que los vieron.
Jungkook gimió de frustración, cubriendo su rostro y sintiéndose una mierda.
—Joder, me cago en la puta. Soy un imbécil...
—Descuida, Jeon. No fue tu culpa, no tenías idea.
—Sí, pero tuve la opción de no creer. Yo sabía que no era verdad, pero... ¡Jodida mierda! —exclama— Necesito ver a Jimin, necesito disculparme con él y decirle toda la verdad.
—También fueron los que delataron a Jimin, pagaron a un funcionario para que diera tu nombre.
—Necesito ir a aislamiento —sentenció— Mierda, quiero saber como está... —entonces una idea vino a su cabeza y volteó hacia Taehyung— Golpéame.
—¿Qué?
—Anda, pégame —pide mientras se acerca— Necesito que me ayudes, por favor.
Jungkook mira a Taehyung de forma suplicante, por lo que no le queda de otra que suspirar y asentir. Entonces comienzan a simular que peleaban para llamar la atención de algún funcionario cerca. En cuestión de segundos, uno se asomó en la entrada y rápidamente agarró a Jeon, quien en momento se voltea y le propina un duro golpe en la cara.
Firmando inmediatamente su sentencia pues era sancionado el agredir a un funcionario.
——— [ 🖤 ] ———
Jimin estaba sobre la dura e incómoda cama en aislamiento, pasando suavemente sus dedos sobre la pared de cemento mientras divagaba en sus profundos pensamientos hasta que escucha como la celda de al lado es abierta. Sinceramente no le interesó en lo más mínimo, no le apetecía establecer alguna conversación con el tipo que estuviese al lado o algo por el estilo.
Pero cuando los guardias se fueron y volvió a quedar todo en silencio, escuchó una voz conocida provenir desde las pequeñas rejillas de ventilación que conectaba con la otra habitación.
—¿Jimin?
Alzó la cabeza de la almohada, frunciendo el ceño y lentamente salió de la cama para dirigirse hacia la rejilla que estaba en uno de los extremos de la pared.
—¡Jimin! ¿Estás ahí?
—¿Jungkook? —murmuró extrañado para recostarse a la pared y sentarse en el suelo.
Jungkook estaba en la misma posición pero del otro lado, con la espalda en la pared y su rostro cerca de la rejillas para que Jimin le escuchara.
—¿Estás bien?
—Sí, estoy bien.
—¿Seguro?
—Sí... —suspira— ¿Qué haces aquí?
Hubo un corto silencio.
—Quería verte —confesó Jeon.
—¿Tú has venido aquí sólo para verme? —repitió, ligeramente sorprendido.
—Sí. He tenido una pelea con un funcionario para venir a verte.
Jimin resopla, mirando el cielo raso de la celda y negando lentamente con la cabeza.
—Estás demente. ¿Qué mierda quieres? Ahora mismo, eres la última persona con la que quiero hablar. Juro que si te tuviera al frente no dudaría en volver a golpearte, sólo eres un completo idiota.
Jungkook suspira, asintiendo con la cabeza.
—Lo sé.
—¿Qué?
—Lo sé. Por eso vine, porque tenías razón. Tenías razón en todo. Tú no te follaste a nadie, todo fue invento de Taemin y la pandilla de Kang.
Jimin presionó sus labios, suspirando pesadamente y sintiendo unas ganas de golpear algo.
—Lo sabía...
—También fueron lo que te delataron. Jimin, fueron ellos. No yo. Jamás te haría algo así.
—Y yo jamás te engañaría.
Quedaron nuevamente en un crudo silencio, logrando escuchar sólo las respiraciones del otro y cayendo en cuenta de lo estúpidos que se habían comportado.
—Jimin, lo siento... —Jungkook decide romper el silencio con voz ahogada, comenzando a llorar— Lo siento mucho, cariño...
Jimin muerde su labio inferior e inconscientemente sus ojos se llenan de lágrimas.
—También lo lamento, Jungkook.
—Fui un total imbécil, debí haberte creído...
—Me dolió muchísimo que dudaras de mí... —murmura el pelirosa con voz rota— Me conoces desde hace dos años... ¿Cómo mierda pensaste que podría hacerte eso?
—Lo sé... Fue muy estúpido —concuerda el pelinegro, limpiando sus lágrimas— Simplemente yo... No lo sé, no quería que me volvieran a ver la cara de idiota... Y me cegué por completo sin importar nada.
Jimin traga saliva, sintiendo las lágrimas bajar por su rostro.
—Yo no soy tu ex novia... No es mi jodido problema que ahora tengas una especie de trauma, sin embargo, lo entiendo... Pero no tenías que decirme todas esas cosas hirientes...
—Lo sé, perdóname...
—Vale, ya pasó. No podemos cambiar el pasado y ambos actuamos sin pensar dos veces las cosas... —murmura con voz débil— Sin embargo... estuve pensando seriamente a qué vamos con todo esto... ¿Qué estamos haciendo?
Jungkook frunce el ceño, moviéndose un poco de su posición.
—¿A qué te refieres?
—A lo nuestro... —suspira— Es como si nunca quisiéramos aceptar la realidad de que tú y yo no vamos a llegar a ningún lado juntos. ¿Lo sabes, verdad?
—¿De qué demonios hablas? ¿Por qué dices eso?
—Seamos realistas, querido. Jamás hubieras decidido estar conmigo de no ser porque terminaste en la cárcel, y menos yo contigo. Somos de diferentes clases sociales. Tan pronto como salgas de aquí, vas a conseguir otro empleo y probablemente encuentres a una hermosa mujer que te haga compañía... —sus labios tiemblan al igual que su voz— Aún después de dos años no confiamos completamente en el otro, o sea, ¿cómo...? —se detuvo así mismo, suspirando con fuerza— Solamente estás conmigo porque no te queda de otra... Como todos lo hacen.
Jungkook niega con la cabeza desesperadamente.
—No, Jimin. No pienses eso porque no va a pasar y no es así... —entonces gruñe, golpeando la pared y sintiendo sus ojos picar— ¡Joder! ¿No lo entiendes? Yo te amo. ¿Oíste? Te amo —inmediatamente escucha a Jimin romper en llanto— Y no voy a dejarte por nada de este mundo, porque me he enamorado de ti, no quiero una mujer, te quiero a ti.
—P-Pero, Jungkook...
—¡Te quiero a ti, Jimin! —le interrumpe, acercándose a la rejilla para que le escuchase de forma más clara— Porque te amo, grábatelo en la puta cabeza, te amo.
Por increíble que parezca, habían sido muy pocas veces, inclusive contadas las veces en la que se habían dicho "Te amo". Pues, ambos eran personas que les costaba expresar sus sentimientos y preferían demostrar su amor con acciones en vez de palabras. Sin embargo, cuando decían te amo, lo decían con sinceridad y desde el fondo de sus corazones. Porque realmente lo sentían, realmente se amaban.
Jimin mantenía su rostro oculto entre sus piernas, sin parar de sollozar.
—Y-Yo también te amo, pijo de mierda... Te amo muchísimo.
Jungkook comenzó a reír entre lágrimas, negando con la cabeza.
—Definitivamente somos unos tóxicos de mierda... Y ya perdí la cuenta de todas las veces en las que he dicho que somos un completo desastre juntos...
—Pero aún sigues aquí —dice Jimin, sonriendo— Y yo también...
—Estamos locos... —admite Jungkook— Pero tú estás más loco, tú eres un psicópata, cariño.
Jimin ríe.
—No exageres...
—¿Qué no exagere? ¡Intentaste matarme!
—Oh, cierto... Vale, tienes razón.
Ambos comienzan a reír al mismo tiempo, rompiendo poco a poco la tensión y resentimiento que sentían por el otro. Volviendo nuevamente a ser la pareja imperfecta que siempre eran, como si nada hubiese pasado.
Jungkook hace una mueca, mirando desde su posición toda su celda vacía y suspirando.
—Joder, quiero verte... quiero tenerte entre mis brazos y besarte...
—Yo también... Pero tendremos que esperar mil años para eso, no tengo idea de cuándo me sacarán...
—Pues esperaré mil años si es necesario.
Jimin sonrió, limpiando su nariz y ojos.
—Es increíble que no seas gay, y siempre suenas como uno.
—Soy bisexual, puedo sonar de la forma que yo quiera.
—Claro... ¿Te quedarás por mucho tiempo?
Jungkook suspira.
—Una semana cuando mucho.
—Es suficiente para mí, probablemente esté aquí por meses.
—Sí... —gimió frustrado— Mierda, te extraño tanto. Procuraré meterme en problemas más seguido sólo para venir a verte.
—No seas un idiota.
—Un idiota por ti, cariño.
Y ahora el verdadero idiota era Jimin quien sonreía con las mejillas sonrojadas.
—Te detesto, porque claramente yo haría lo mismo.
—¿Ves? Somos unos putos locos por el otro y nadie lo puede negar. Pero no estoy acostumbrado a estar solo en esa celda, te necesito a mi lado, sin ti, las ganas de morirme aumentan al cien por ciento.
Frunciendo el ceño, Jimin observa la rejilla.
—¿Quieres morir?
—Sólo cuando tú lo hagas.
Ambos sonrieron levemente. Aunque la felicidad no duró mucho cuando Jimin cayó en cuenta de todo lo sucedido, y de quien era la culpa.
—¿Puedo pedirte una cosa?
—Lo que sea.
—Taemin tiene que pagar por lo que hizo.
Jungkook suspira de forma pesada y asiente con la cabeza.
—Por supuesto. Voy a matarlo.
—No —dice Jimin de inmediato, mordiendo el interior de su mejilla— Yo voy a hacerlo.
—Pero tú-
—Lo sé, estoy aquí, pero necesito matarlo con mis propias manos... Además no quiero que mates a alguien por mí.
—Jimin, yo mataría por ti. Sabes perfectamente que no me importa nada, una vez lo hice, y lo volvería a hacer si es necesario.
—Le sumarán más años a tu sentencia si matas a alguien en la cárcel y descubren que fuiste tú. Por favor, no quiero que te quedes más tiempo aquí...
Jungkook bufó.
—Me quedan ocho años, ¿qué más da?
—Que no te volvería a ver nunca.
Hubo un repentino y crudo silencio entre ambos. Pues el tema sobre sus sentencias era muy delicado e incógnito, no siempre les gustaba tocarlo porque les perturbaba la realidad y lo que convendría. Jimin saldría en dos años, y Jungkook en ocho, había bastante diferencia.
—Así que yo lo haré —continuó Park— Mírale el lado positivo, así probablemente saldremos juntos...
—Espera... ¿Serías capaz de aumentar tu condena para quedarte más tiempo conmigo? —deduce Jeon, completamente asombrado y confundido.
El pelirosa comienza a reír suavemente, negando con la cabeza y jugando con sus dedos.
—Es increíble que te sorprendas... hasta yo me sorprendo de las idioteces que puedo llegar a hacer sólo por amor... Estoy en la cárcel porque me enamoré de un imbécil... Y ahora dejaré que me aumenten más años porque me enamoré de otro imbécil, soy un caso perdido...
—¿Y tú crees que yo voy a dejar que hagas eso?
—No te estoy pidiendo permiso, Jeon. Te estoy avisando.
El pelinegro suspiró con pesadez mientras pasaba una mano por su rostro.
—Jimin... No lo hagas.
—Y lo que te iba a pedir desde un principio... —continúa Park, ignorándole— Es que no quiero que hagas nada al respecto.
—¿Cómo? —frunce el ceño— ¿Esperas que no haga nada? ¿Quieres que me aguante a no romperles la cara a esos imbéciles?
—Exactamente.
—Pero-
—Hazlo por mí, amor —pide Jimin con voz suave— Por favor...
Jungkook se queda en silencio, golpeando el interior de su mejilla con su lengua mientras miraba el cemento del suelo y lo meditaba.
—Vale... —dice finalmente— Si es lo que quieres... No haré nada.
—Promételo.
—Te lo prometo, cariño.
Jimin sonrió, mordiendo su labio inferior y mirando hacia arriba, comenzando a pensar en un plan para vengarse de Taemin. O en pocas palabras, finalmente acabar con él.
Oficialmente la guerra había comenzado.
Bueno, bueno, los tortolitos se reconciliaron como la pareja goals que son 😍 joda, estuvo larga y motivacional la charla.
Also, muchísimas gracias por los 10K. Literalmente me quedé en shock viendo la pantalla como por cinco minutos porque no me lo creía, es que jamás pensé en llegar a esa cantidad. Y bueno, gracias por apoyar lo que sale de mi cabeza. Les quiero mucho <3 Cuídense y usen mascarilla, chau.
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