El grupo llevaba un buen rato intentando recuperar oxígeno para salir nuevamente al escenario.

La imponente destreza coreográfica de la siguiente performance "Black Swan" requiere de estar alerta en cada uno de sus sentidos, lo más despiertos posibles, la mayor concentración en la coordinación de sus pasos, lo más relajadas sus gargantas para poder acoplar la vertiginosa danza a la resonancia vocal emitida.

Los gritos desaforados y desgarrados de los fans retumban en los conductos auditivos de cada uno de los siete jóvenes brillantes que prometen romper el escenario dejando hasta el último vestigio de su alma en cada movimiento que remarcan sus ansiosos cuerpos.

Pero a un costado del imponente escenario, más bien escondido de toda posibilidad de intercambio de palabras con los miembros de su banda que son cómo su familia, se encuentra agazapado, el menor de los siete privilegiados. Meditando profundamente en una palabra que encontró adentro de una galleta de la fortuna durante la hora del almuerzo, y que cuando todos reían y vitoreaban de ansiedad y compromiso ante la venidera presentación; él se quedó simplemente pasmado con la pequeña esquela entre los dedos de sus manos funcionando como una maldita bomba desestabilizadora de su precaria cordura.

—¡Hey Jung Kook! ¿Te encuentras bien? —entre el tumulto se escuchan las palabras de Nam a sus espaldas, mientras un personal del staff trata de seguirle el paso para retocar una vez más su maquillaje.

Y reuniendo coraje como hace tanto tiempo viene acumulando, se da la vuelta y lo encara instalando en su rostro la máscara que suele acompañarlo cuando últimamente percibe un creciente nudo en su garganta.

—Claro que si Nam, solo repasaba mentalmente el diseño de la coreografía para ultimar los detalles y que nada se me escape. — Suelta el menor, tratando de ocultar sus emociones.

Dicho esto y bajo el atento escrutinio del líder que no le creyó ni la cuarta parte de lo que le dijo, observa a lo lejos a otro integrante acomodando dirigentemente sus prendas.

Ángel...

Ángel es poco, para describir lo que percibe en el medio de su pecho al verlo tan precioso, tan etéreo, tan cercano y a la vez tan lejos. Que cree que en cualquier momento una parte de su cuerpo reaccionará por instinto reclamando frente a todos lo que siente como suyo.

"Un minuto y salimos..."

Se escucha fuerte y claro en el micrófono de sus oídos. Así que inspirando profundamente y tomando coraje de aquellos que no sabes de dónde sacas, se incorpora para darse aliento entre ellos como tantas otras veces.

La única diferencia ahora, es de que abrirá la performance con un solo que luego combinará con el amor de su vida...

Sí, así como sonó de intensas esas palabras, así retumba ansioso su palpitante corazón entre medio de sus costillas.

Presiente que le falta el aire y se muere, cada vez que el recorrido de sus orbes se encuentran de pasada.

—¿Listo JungKooki?

El dulce sonido de los labios de Jimin hace estragos en su débil impronta. Y la maldita voz interior que lo taladra, le dicta que espabile de una buena vez y tome conciencia del lugar en donde se encuentran.

Inspira una nueva bocanada de aire y advierte como la tierra bajo sus pies se estremece.

Entonces, sacude sus manos un parvo mientras trata de no direccionar de repente sus ojos y evitar chocar sus miradas quedando completamente desnudo por quedar tan expuesto.

Y exhalando hasta el alma en un fuerte suspiro, le regala un asentimiento de cabeza al hombre que le demostró lo que significa sentir la necesidad de darlo todo por alguien, pero siempre poniéndose uno primero...

"¿Acaso, ustedes son pareja?"

Habría dicho Jin una tarde de juegos, cuando sus cuerpos hablaban sin necesidad de palabras y en el ambiente se percibía la tensión flotando como pequeños cúmulos de dos seres que se encontraron a través del tiempo.

"Me gustas JungKooki... Y demasiado"

Le habría confesado mirándolo a los ojos y hace tan solo unas semanas, el etéreo ser que ocupa el cuerpo terrenal bajo el nombramiento de Park Jimin. Pero al darse cuenta del nerviosismo de su estampa en ese preciso momento, el ángel habría rematado con un:

"Lo siento... no fue mi intención incomodarte" seguido de un pronunciado puchero.

¡Y maldita sea! Que todavía no se perdona el no haber reaccionado a tiempo.

Porque aunque Jimin siguió compartiendo momentos con él, nunca más fueron a solas... Y mucho menos cuando tenían una ola de conciertos en puerta y un excesivo ensayo para la presentación de apertura de la performance venidera.

—Lo harás genial, ya verás. —Le murmura Jimin apretando sus sudadas manos y perdiendo sus ojitos en dos finas líneas.

Y el mundo detiene su andar cuando aquel hombre que puso su mundo de cabezas, le transmite tanta paz en un simple roce de manos...

Y

rebuscando del oxígeno que resta de la saturación de sus pulmones, se ubica a oscuras en el medio del escenario mientras se disponen eximios bailarines a su costado para acompañar la actuación en vivo que marcará el comienzo de algo...

Las luces difuminadas en el suelo y a su alrededor, simulan un eclipse total. Donde él ve con claridad, lo que antes le faltó mirar:

La comunión de sus fervientes corazones en conjunto...

Y cuando los melódicos sonidos retumban de golpe en sus pabellones auditivos, la adrenalina que descarga lo transporta a ese lugar donde se aferra para ser el profesional que luchó por años ser... Dará lo mejor de él así como sabe que su aliciente lo hará otro tanto y más, si es necesario.

Dos corazones que comparten la pasión del escenario y que laten desaforados por obra y gracia de sus fanáticos.

Cuando sostiene la mano de Jimin, una cálida corriente recorre su cuerpo de pies a cabeza. Y sobre que lo eleva hacia el final de su acto, lo observa terminar con suma gracia su destreza. Logrando inundar su pecho, de acrecentadas emociones desbordantes.

Lo siguiente fue un veloz cambio de ropa para estar de acuerdo los siete y empezar con la coreografía propiamente dicha cuando el último par de integrantes, de por terminado sus solos.

Su agitada respiración favorece a que los latidos de su aficionado pecho se confundan con la adrenalina del momento y así tratar de pasar desapercibidas sus ganas.

Pero cuando retumba la letra de la canción que te marca diciéndote:
¡Despierta! No puede sacar sus ojos de la estampa del receptor de cada uno de sus suspiros.

🎶Haz lo tuyo 🎶

🎶Haz lo tuyo conmigo ahora🎶

🎶Haz lo tuyo🎶

🎶Haz lo tuyo conmigo ahora🎶

🎶¿Que es lo mío?🎶

🎶¿Que es lo mío? Dímelo ahora🎶

🎶Dímelo ahora...🎶

Y mientras Jung kook baila con la gracia y destreza que su cuerpo le permite, no puede dejar de admirar a su talentoso aliciente. En tanto se le viene a la memoria como flashes, la pequeña esquela de la galleta que dictaba de solo un vocablo...

"Atrévete"

En una impoluta caligrafía que lo hacía sonar aún más profundo...

Así que exacerbado en nervios que se mezclan con desaforados latidos, mientras dan por terminada la coreografía y las luces comienzan a bajar lentamente como una agónica manta.

Observa al dueño de sus recurrentes pensamientos acercarse hacia su cuerpo, con la más hermosa sonrisa enmarcada en su precioso rostro, luego de saludarse con el resto de los miembros.

Y envalentonado en dejarse llevar por lo que dicta la razón del corazón sin hacer caso al qué dirán o lo que es o no correcto... Lo atrapa entre sus firmes brazos para acercarse despacio a depositar un tímido roce de labios cargado de sumo afecto.

Dos latidos que se unen en una sola canción...

La melodía del más bello amor correspondido entre dos personas que fueron capaces de reconocerse en los ojos del otro.

—C-creo... que con un simple: "lo hicimos bien" me bastaba... J-Jungkooki.

Las risas de ambos más sus sonrojos fueron interrumpidos en pleno proceso de decirse ambos "te amo" a través de sus miradas, por los exacerbados vítores del público presente.

Familia querida que la vida puso en sus caminos, amigos incondicionales que estarán para librar fervientes batallas y una masa de público que observó a través de grandes pantallas, lo más hermoso de este mundo.

Una demostración del más puro amor correspondido...

Haw maldita sea!! Es lo único que he escrito de ellos siendo ellos mismos. Y la verdad, es que me ha encantado. 😍

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