único
Ambos llegaron a su hogar, Jungwon, molesto como siempre mientras detrás suyo, venía Sunoo a intentar calmar la frustración de su Omega, aunque claro, él internamente estaba triste y molesto como lo está su esposo.
—¡No es justo!, ¡Ya estoy cansado de todo esto!—Jungwon terminó por tomar asiento en el sofá, Sunoo rápidamente se sentó a su lado viendo a su esposo tapar su rostro con sus manos
—Won...—Llamó el Omega al otro, Jungwon no levantó su vista
—Sun... Estoy molesto, cansado de que en todos los lugares a dónde vamos no nieguen la oportunidad de tener un hijo.—Las lágrimas brotaron de los ojos del Omega menor, estás se colaban entre sus manos
Sunoo suspiró y se acercó a su Omega, quitó sus manos con cuidado y dejo un beso en su mejilla, compartían la misma frustración, pero no podían hacer nada más que eso, llorar y frustrarse.
Desde hace dos años, la joven pareja de Omegas querían formar una familia, al principio, pensaban en adoptar. Fueron a muchos orfanatos por el país y en todos, les negaron el proceso de adopción, pues eran una pareja de Omegas, que ante los ojos de la sociedad, no era bien visto que los Omegas se relacionaran romántica y sexualmente entre ellos.
Quisieron pasar por alto ese hecho y decidieron otra opción, inseminación artificial, fueron a muchos centros medicos y laboratorios para realizar el proceso, y de igual forma les negaban su petición. Por último, decidieron realizar un método para que ambos pusieran tener su hijo biológico, y de igual forma, se les fue negado. No importa a dónde fueran y cuánta fé tuvieran, en todos los lugares eran negados y la excusa siempre era la misma.
Desde que se conocieron, ambos supieron al instante que sentían atracción el uno por el otro. Cuando solo eran unos adolescentes y terminaban escondiéndose en el mismo lugar debido a las críticas y burlas de sus compañeros.
Por años estuvieron trabajando duro y ahorrando todo el dinero que pudieran, Jungwon le propuso matrimonio a Sunoo y este aceptó con toda la alegría. Viajaron a otro país para poder casarse tranquilamente y así fue. Volvieron a Corea con la esperanza de que tal vez todo sería diferente una vez estuvieran juntos en unión civil, pero todo empeoró de cierta forma. Los padres de ambos se enteraron no solo de su relación, sino de que habían viajado a otro país para casarse. Sunoo recibió el rechazo de sus padres y familiares, perdiendo conexión con todos ellos, por otro lado, Jungwon le fue peor, no solo el rechazo de su familia entera, su abuelo y su padre Alfas lo golpearon hasta dejarlo casi moribundo, se negaban a tener un "Omega con delirios de Alfa" en la familia, por suerte y destino, Sunoo llegó a la casa de los padres de su esposo y logro sacarlo de ahí y llevarlo a un hospital.
Estaban solos en el mundo, pocas personas entendían lo que realmente sentían el uno por el otro, sin importar que tan malo estuviera visto por la sociedad, ambos se amaban.
Sunoo abrazó a Jungwon, dejo que este llorara libremente mientras acariciaba su espalda, acomodando de vez en cuando los cabellos dorados del Omega menor mientras hipaba, su vínculo les hacía sentir lo mismo, aunque, el mayor sabia que debía mantener la calma o el Omega menor terminaría peor.
—Tranquilo Wonie... Todo esto se podrá solucionar. Recuerda que algunos laboratorios y hospitales nos dijeron que nos llamarían si podían hacer algo por nosotros...—Sunoo sintió como Jungwon se levantaba bruscamente del sofá
—¡ESO ES UNA VIL MENTIRA!, ¡NO VAN A HACER NADA POR NOSOTROS Y LO SABES!—En su rostro se reflejaban todos esos sentimientos negativos que tenía, Sunoo sentía su corazón partirse por ver a su pareja de ese modo
Si bien, podían olvidar el tema de su familia y seguir viviendo los dos juntos, Jungwon deseaba y anhelaba tener un hijo junto a su hermoso Omega, le hacía tanta ilusión ver a Sunoo cuidando, amando y mimando a su hijo. Pero todos sud planes parecían hundirse cada vez más.
—Won... Debemos pensar en otra cosa, ambos queremos y deseamos nuestra familia.—Sunoo se levantó del sofá para tomar las manos de su esposo
—La única forma en que eso pase es que yo fuera un estúpido Alfa...—Dijo, agachando su cabeza y se notaba cierta molestia y sarcasmo en su comentario
—No digas eso Yang Jungwon, eres Omega y eres mi Omega, mi esposo y el ser que yo más amo en este planeta. Si queremos nuestra familia debemos buscar alternativas.—Dijo Sunoo mirando a los ojos de su pareja
—No podemos costear otro viaje a Tailandia para realizar estos procesos...—Jungwon parecía decaer con cada palabra que salía de sus labios
—Estoy seguro que Tailandia no es una opción que se ajuste a nuestros presupuestos, tendríamos que pagar un buenos hospedaje duradero, no tendríamos trabajo y tendríamos que pagar el tratamiento de inseminación o el arduo papeleo para adoptar.—Sunoo suspiró, quería darle esperanzas a su Omega, ¿Pero de qué le servirían si todo era un gran gasto?
Jungwon soltó las manos de su Omega, no quería comentarle aquel plan, pues, a penas lo pensó lo descarto por completo incluso si era una opción viable a pesar de sus múltiples negaciones.
—Hay algo que debo decirte. Es una alternativa que pensé por un momento cuando nos negaron la adopción, es estúpida y no es favorable para nuestro entorno.—Jungwon se cruzó de brazos, los ojos de Sunoo brillaron con alegría
—¿Podrías decirme que tienes en mente, amor?—Sunoo se acercó a Jungwon y lo abrazó, este rodó los ojos pues sabía que su esposo hacia eso a propósito para obtener una respuesta, odiaba lo adorable que era su Omega
—¿Solo necesitamos el esperma de un Alfa o Beta, cierto?, estuve pensando en que podríamos buscar un Alfa o Beta, asegurarnos de que este sano, quiera esa cantidad de dinero destinadas a nuestros métodos y que nos done su esperma. Podríamos invitarlo a nuestro hogar, que se masturbe en el baño y nos de en un frasco su esperma, le damos en dinero y cuando se marche, buscaremos la forma de meter ese esperma dentro de ti.—Las mejillas de Jungwon se encendieron en carmesí, era un plan estúpido ahora que lo decía en voz alta
Sunoo se quedó pensativo por un momento, sintiendo la presión en el aire y el sentimiento de culpa de su esposo por haber comentado eso, sin embargo, sabía que solo había una respuesta para ello.
★
Riki miraba el dinero que tenía en sus manos, tragó en seco mientras buscaba lo más barato que podría comprar en el supermercado, tan solo necesitaba comer esa tarde pues ya estuvo posponiendo mucho su comida.
«Mierda, no tengo para la comida y no puedo gastar lo poco que tengo.» pensó, caminaba por los pasillos viendo los precios de los productos.
«O como, o pago en alquiler del departamento o pago los servicios.» sintió la presión sobre sus hombros, ¿Como un joven Alfa podía tener tantos problemas financieros?
Nishimura Riki, un Alfa japonés que decidió mudarse a Corea del Sur una vez terminó sus estudios en su país natal, sus padres le ayudaban con dinero, pero, no era suficiente para todos sus gastos. Tenía un algunos empleos de medio tiempo mientras terminaba su carrera universitaria, pero en todos ganaba una miseria, el dinero que sus padres le enviaban lo destinaba a los servicios y el alquiler, pero está vez, sus padres no le enviaron una gran cantidad pues también tenían gastos en Japón, más el de su hermana mayor y su hermana menor.
Estuvo muchas noches pensando en volver a Japón para evitar este tipo de situación, pero quería seguir firme en su decisión, incluso si sacrificaba su estómago para pagar otras cosas.
«Solo compraré un par de sopas instantáneas, serán mi almuerzo y mi desayuno de mañana, hoy no me toca cenar.» pensó mientras tomaba las sopas del estante. Camino hacia la caja registradora y pago de estás, guardandolas en su bolso y saliendo del lugar y caminar en dirección a su pequeño departamento.
Mientras caminaba, miró hacia un pequeño puesto dónde personas colocaban afiches en busca de trabajadores. Su mirada se poso en dos personas, una de cabellos negros y otra de cabellos rubios, el rubio colocó un afiche en esta y pronto ambas personas se marcharon, Riki se acercó con cautela al lugar para observar el afiche que se colocó. Tal vez otro trabajo no le vendría nada mal.
Una vez estuvo en el lugar, tomó el afiche en sus manos quitandolo del tablero, comenzó a leer de este en su mente.
«Se solicita Alfa o Beta interesados en un trabajo sencillo y de un solo día, no se requiere ninguna experiencia y la paga será de tres millones de wons en adelante, contacta a este número si estás interesado.» Riki levantó su vista y miró a los alrededores, guardia el afiche en su chaqueta y camino casi corriendo hasta su departamento para llamar al número que aprecia en el papel.
Una vez llegó, dejo las sopas sobre la mesa y fue hasta su única habitación, se tiró sobre la cama y quitó su chaqueta, la hoja la dejo sobre su cama.
«¿Qué tal si es una estafa?, ¿O me van a secuestrar?» pregunto, sacando su teléfono de sus bolsillos.
«Debo arriesgarme, ¡Podría hacer mercado, pagar el alquiler, servicios y hacer mercado por casi un mes entero!» comenzó a marcar el número en su teléfono, se mordio su labio y marco de este, esperando con todo corazón que de verdad no fuera un sueño, o una gran estafa.
—Buenas tardes, ¿Con quién tengo el gusto de hablar?—Escuchó la voz en la otra línea, una voz bastante atractiva
—Bue-Burnas tardes... Vi el afiche que colocaron cerca del supermercado Nahm, me interesa el trabajo.—Riki apretó el borde de su camisa
—Claro que si, ¿Le parece bien si programamos una cita para reunirnos?—Los ojos de Riki brillaron al escuchar aquellas palabras
—¡Me parece bien!, si quiere hoy mismo podemos reunirnos y mañana comenzaré a trabajar.—Dijo entusiasmado el Alfa, escuchó en la otra línea una risita
—Bueno, le estaré enviando la dirección para el encuentro, pero antes, me gustaría saber su nombre y su edad.—Preguntó la otra voz
—Nishimura Riki, y tengo veinte años.—Dijo, aún no podía creer que iba a ganar todo ese dinero
—Es un un muchacho joven... Bueno, no importa, con tal de que sea mayor de edad no va a correr con ningún gasto.—Riki no entendió a lo que se refería aquella voz, lo paso por alto y siguió como si nada
—Estaré esperando la dirección para la cita. Nos vemos.—
—Está bien, enviaré ya mismo la dirección. Nos vemos joven Nishimura.—
La persona en la otra línea colgó, Riki no pudo evitar soltar chillidos de alegría cuando supo que en trabajo estaba destinado a ser suyo, tenía suerte de que aquellas personas estaban colocando aquel afiche cuando iba pasando por ahí.
Su teléfono vibró en señal de que un mensaje había llegado, era el número al que había marcado.
“Hola, está es la dirección a la que debes ir, nos vemos ahí en una hora.”
Riki se fijo en la dirección, al parecer se encontraría en una zona donde habían bastantes casas bonitas. No importaba si tenía que limpiar toda esa casa, lo haría y se ganaría todo ese dinero.
«Hoy la vida me está sonriendo de una bonita manera.» pensó, mientras se levantaba del colchón y se acercó al armario a buscar sus mejores prendas.
★
Riki se bajó del taxi, se despidió del Beta que lo había traído hasta la dirección. No importaba si se gastaba su poco dinero en un vehículo, lo necesitaba para llegar lo más temprano posible a su cita con sus futuros jefes.
«Tal vez si les agrado me puedan asignar más tareas, así tal vez pueda ganar mucho más y tener un buen sustento asegurado.» pensó mientras se acercaba a la puerta.
Una vez estuvo frente a esta, tragó en seco y tocó de esta, rápidamente fue abierta y sus mejillas se tornaron rojas cuando un lindo Omega de cabellos negros abrió de esta.
—¿Debes ser Nishimura Riki, cierto?—Habló el Omega
—Si... Soy él.—Dijo un poco nervioso
—Puedes pasar, siéntete como en casa.—Dijo dándole una amable sonrisa, Riki suspiró e ingresó a la vivienda
El interior de esta era cálido y acogedor, digno de un hogar estable y bonito. Tan solo entrando habían fotos de ese Omega con lo que parecía ser su esposo. Riki las miro de reojo y luego siguió caminando detrás del pelinegro. Llegaron a la sala de la casa y definitivamente era mucho más grande que la de su departamento.
—Toma asiento, mi esposo está en la cocina.—Dijo con una amable sonrisa, Riki aceptó y tomó asiento el el cómodo sofá
Espero unos cuantos minutos en silencio, el Omega de cabellos negros no parecía querer iniciar una conversación con él hasta que su dichoso esposo estuviera presente. Apareció otro Omega rubio trayendo una bandeja con algunas galletas, no parecían horneadas por él pero agradecían el detalle de comida gratis.
—Mucho gusto, soy Yang Jungwon, la persona con la que hablaste hace una hora por teléfono, y él es mi esposo, Yang Sunoo.—Dijo presentándose así mismo y a su esposo
Riki miró sorprendido a la pareja, su olfato no mentia, ambos eran Omegas. ¿Dos Omegas podían casarse?, muchas preguntas comenzaron a llegar a su mente. Sin embargo, no se le hacía para nada extraño, pues sabía que para gustos, colores.
—Mucho gusto.—Saludó Sunoo, ambos Omegas se miraron y esperaron que aquel Alfa no saliera disgustado de ahí
—Mucho gus-gusto... No pensé que dos Omegas podrían casarse... ¡No lo digo como un comentario malo!, simplemente, aquí en Corea...—
—Lo sabemos, aquí no es normal esto, nos casamos en el extranjero y vivimos aquí, nos amamos y no importa lo que piensen los demás.—Volvió a decir Sunoo
—Bueno, dejemos de lado este tema sobre nuestro matrimonio y a lo que vinimos. Primero, necesito saber si te has realizado exámenes de sangre y enfermedades.—Preguntó Jungwon tomando asiento en en sofá al frente del de Nishimura
Riki parpadeo muchas veces, ¿Qué clase de entrevista de trabajo sería esta?
—Ammm, bueno, cuando me mudé a Corea hace algunos meses atrás me hice unos exámenes generales... No tengo enfermedades de transmisión sexual o alguna otra que yo conozca.—Dijo, se sentía un poco avergonzado al comentar esto delante de personas que apenas y sabía sus nombres
—¿Tuvo relaciones sexuales después de esos exámenes?—Preguntó con una ceja enarcada, el Omega pelinegro solo miraba hacia otro lado intentando no avergonzarse con la charla, incluso si ya habían hablado eso durante toda la semana
—N-No, no he tenido tiempo para conseguir a alguien.—Admitió el Alfa rascando su nuca avergonzado
—Por lo que nos damos cuenta eres un Alfa, supongo que es mejor, el esperma de un Alfa garantiza más un embarazo que el de un Beta.—Jungwon tomó su mentón, Riki afirmó con la cabeza y luego abrió los ojos sorprendido al escuchar esas palabras
—¿Qué el esperma de que y de qué, perdón?—Miró a la pareja, estos se miraron entre ellos y se avergonzaron
—Oh cierto... No te hemos mencionado de que va este trabajo.—Dijo Sunoo avergonzado
—Como te mencionanos anteriormente, somos una pareja de Omegas, hace un par de años decidimos formar nuestra familia pero se nos han negado todos los métodos posibles, por ende, tomamos esta decisión un poco arriesgada.—Jungwon tomó una galleta y la comió
—Necesitamos un donante de esperma. No te preocupes, no vamos a tener relaciones sexuales contigo, solamente necesitamos que nos des tu esperma, te pagaremos y si gustas podemos olvidar todo esto. No te vamos a exigir nada, ni dinero ni paternidad.—Dijo Sunoo apretando la mano de su esposo, Jungwon afirmó con la cabeza
El Alfa no podía creer lo que estaba escuchando, ¿De veras le pagarían tanto dinero solo por darles su esperma?, aunque estaba en shock, en el fondo sintió lastima por las pareja, tuvieron que recorrer a ese método para poder formar su anhelada familia, no entendía como la sociedad no podía aceptar las relaciones de mismos subgéneros, aunque claro, a duras penas su sociedad aceptaba parejas de Alfas machos con Omegas machos y Alfas hembras con Omegas hembras.
—S-Si no deseas hacer esto no estás obligado, puedes retirarte si gustas y puedes olvidar que esto paso.—Nuevamente hablo Sunoo, parándose de inmediato del sofá
—N-No... S-Si me gustaría hacerlo... Pero, ¿Exactamente que debo hacer?, me comentaron que no tendré que relacionarme sexualmente con ninguno así qué...—
—Te daremos este frasco—Jungwon saco de sus bolsillos un frasco de muestra que había comprado en la farmacia—, puedes usar el baño si gustas, de veras nos has ayudado demasiado, no sabes lo feliz que nos estás haciendo con tu decisión.—Dijo Jungwon estirando su mano, ofreciéndole el frasco de muestra al Alfa
Riki suspiró y lo tomó, miró la sonrisa en ambos Omegas y podía jurar que estaban reteniendo sus lágrimas de felicidad.
—Acompañame, el baño queda por aquí.—Jungwon caminó y fue seguido por el Alfa
Ambos llegaron hasta una puerta, Jungwon se paró al frente de esta con una sonrisa y abrazo repentinamente al Alfa.
—Gracias... En serio, muchas gracias, mi esposo y yo hemos estado anhelando tanto esto.—El Omega de separó del Alfa y abrió la puerta del baño, Riki entró dentro de este y tragó en seco
—Puedes tomarte el tiempo que gustes, si deseas podemos retirarnos la casa y...—
—No, no hay problema, haré esto rápido.—Dijo con sus mejillas rojas
Jungwon aceptó y cerró la puerta del baño, dejando solo al Alfa el cual, se apoyo en el lavamanos y miró su reflejo en el espejo.
«Vaya, no pensé que esto fuera a pasar, pensé que tal vez solo me podrían a hacer la limpieza o cocinar algo, pero, ¿Mi esperma?, ¿Es acaso esto un sueño de mal gusto?
«Bueno, a lo que vine, haré esto rápido y me iré con una buena paga.» Riki desabrochó su pantalón y bajo el cierre de este. El pantalón cayó al suelo, pronto tomó el borde de sus boxer y bajo de estos, cayeron juntos a los pantalones.
Quería al menos tener comodidad, así que quitó las prendas de sus piernas y luego, quitó sus zapatos y medias. Por último la camisa que traía puesta hasta quedar totalmente desnudo. Se dió cuenta que la ducha tenía un buen espacio así que decidió meterse en esta, se sentó sobre en suelo de baldosas frías y comenzó a utilizar su imaginación para crear escenarios eróticos que le ayudarán a masturbarse.
Comenzó a masajear su miembro aún flácido, aunque su imaginación no estaba ayudando, el tacto de sus calidas manos en contraste al suelo le ayudaban a despertar el erotismo. Con una de sus manos masajeaba con cuidado su miembro el cual poco a poco comenzaba a erectarse, mientras que con la otra comenzó a masajear uno de sus pezones. El frasco de muestra estaba a su lado en en suelo, abierto y esperando a ser llenado con su esperma para ser entregado a los Omegas que se encontraban afuera.
Quería crear escenarios ficticios con personas ficticias, sin embargo, no podía evitar comenzar a imaginar a esos dos lindos Omegas con los que hablo. Con tan solo pensar en sus rostros su miembro desperto de golpe, al parecer su cuerpo reaccionaba ante la pareja que se encontraba afuera.
¿Si necesitaban su esperma, entonces él podía imaginar escenarios con ellos?, le parecía justo en ese momento.
Todo tipos de escenarios imaginarios llegaron a su mente, si antes se había preguntado como podían dos Omegas casarse, ahora se preguntaba, ¿Como dos Omegas pasaban sus celos juntos?, ¿O como se relacionaban sexualmente?, entendía que tal vez su relación solo podía ser romántica, ¿Pero en sus celos?, comenzó a imaginar toda clase de escenarios con Jungwon y Sunoo como protagonistas.
Comenzó a imaginar como estos se besaban, como estos se desvestian el uno al otro en un acalorado roce de sus miembros. Luego, imagino como estos, ya desnudos sobre la cama, tenían diferentes formas de intimidad. Desde turnandose para follar al otro, metiéndose sus dedos simultáneamente, usando juguetes sexuales, frotándose, todo tipo de escenarios eróticos que su mente podía imaginar.
Su cuerpo reaccionaba de manera exquisita a sus pensamientos, por ende, sus feromonas comenzaron a volar por los aires, incluso saliendo del baño y llegar a la sala, dónde ambos Omegas esperaban al Alfa pacientemente.
—Puedo oler su aroma desde acá.—Comentó Sunoo, apretando un poco sus piernas
—Yo también... Huele a café, uno exquisito.—Dijo Jungwon, olfateando el aire
No contaban con que el Alfa tuviera unas feromonas bastante fuertes, las mejillas de ambos estaban totalmente rojas mientras apretaban sus puños y piernas.
Sunoo se levantó del sofá, sus labios se encontraban cubiertos por sus manos mientras unas lágrimas se escurrían por sus mejillas. Había comenzado a lubricar por el aroma del Alfa, sentía que estaba traicionando a Jungwon.
—Y-Yo...—Pudo sentir la vergüenza recorriendo todo su cuerpo, las feromonas del Alfa estaban nublado su juicio y sobre todo, su relación
Jungwon también se levantó del sofá y se acercó a su esposo, el cual se mantenía estático delante del sofá. Una vez estuvo frente a él lo rodeo con sus brazos, sus manos en un movimiento rápido fueron a parar a sus glúteos, masajeando de estos sobre la tela del pantalón, sintiendo la humedad de esta en el proceso.
—No importa amor... Me gusta cuando pareces necesitado.—Dijo a los oidos del Omega mayor, Sunoo llevó sus manos a los hombros del menor
Apretó de estos mientras las manos de Jungwon se colaban entre sus pantalones, también sentía las feromonas del Alfa en el aire, y al igual que a su pareja, estás estaban afectandolo de igual forma. Los labios de ambos se unieron en un casto beso, con ayuda de su muslo Yang comenzó a masajear el miembro de Sunoo, el cual gemia por el tacto del menor.
Las feromonas afectaban a ambos Omegas que sentían la fuerte necesidad de relacionarse, no importa si entre ellos con él Alfa... El Alfa que estaba en su baño. Los ojos de ambos cambiaron de color indicando que habían perdido su moral, solo pensaban en aquel Alfa y en como lo necesitaban para satisfacer sus necesidades.
Ambos se dirigieron hacia el baño y tocaron la puerta de este para llamar su atención.
—Alfa... ¿Se encuentra bien?—Preguntó Jungwon apegándose a la puerta, inhalando aquel embriagador aroma que desprendía
Al escuchar la voz del Omega, Riki se levantó de la ducha y camino hacia la puerta del baño, no importaba si estaba desnudo, podía oler la necesidad de ambos Omegas, ¿Y por qué no cumplirla?, al abrirla se encontró con la pareja de Omegas, quienes tenían sus ojos de color amarillo, sus mejillas sonrojadas y sus labios indicaban que se habían estado besando previamente.
—Sé que me necesitan, así que, les dejaré hacer lo que quieran.—Habló Riki, de inmediato ambos Omegas jalaron al joven y lo guiaron hasta su habitación
Una vez estuvieron dentro de está, Riki tomó asiento en la cama y vió como ambos Omegas se arrodillaban en el suelo, Jungwon tomó el falo del Alfa y comenzó a masturbarlo, mientras sus Sunoo con sus labios besaba y chupaba el glande. Riki solo gimoteaba, era impresionante como en toda su vida solo se había acostado con un Omega, y ahora, tenía una pareja de Omegas delante suyo dispuestos a hacer lo que fuera necesario para satisfacer todo lo que necesitaban.
—Lindos~—Riki acarició la cabellera de ambos con sus manos, Jungwon y Sunoo se rotaban para chupar el miembro del Alfa junto a sus testículos
Poco a poco ambos Omegas se iban deshaciendo de sus prendas hasta quedar completamente desnudos, el pene del Alfa creció más ante tal erótica vista. El lubricante natural de ambos chorreaba por entre sus piernas, Nishimura llevo sus dedos a los anos de ambos y comenzó a tentar de estos, acariciando e intentando meter sus dedos dentro de estos.
Riki introdujo dos dedos en cada Omega, quienes gemian y se dedicaban a besar y chupar su miembro, el cual, a pesar de toda la estimulación, no sentía la necesidad de correrse aún.
—Toman tan bien mis dedos~ que lindos son ustedes dos~—Riki saco del interior sus dedos, la pareja de Omegas se sintiero vacíos
Nishimura se levantó de la cama y se sentó en una silla que había en la habitación, ambos Omegas, a pesar de estar extasiados, se miraron confundidos buscando alguna respuesta ante la repentina acción del Alfa.
—Pero, no se las voy a dejar así de fácil preciosos, denme un pequeño estímulo para darles lo que necesitan~—El Alfa miró a ambos Omegas con orgullo, estos dos entendieron a qué se refería Riki
Ambos se subieron en la cama y pronto juntaron sus labios, sus piernas se encontraban entrelazadas mientras sus miembros creaban fricción, generando más estimulación en ambos.
—Voy a follarte, amorcito.—Dijo Jungwon, posicionandose en medio de las piernas de su pareja
Riki miró con una sonrisa a ambos Omegas, entonces así podría responder las preguntas que se hacia en el baño.
Jungwon introdujo su miembro dentro de Sunoo, causándole un gran gemido a este, el tamaño de su Omega no era igual al de un Omega promedio, era lo suficientemente grande para complacer sus necesidades sexuales.
El Omega menor se movía con velocidad, mirando de reojo al Alfa sentado, el cual masturbaba su miembro de manera lenta. Verlos, le causaba una mezcla de sentimientos que recién descubre más el placer de su deseo carnal.
Los gemidos de ambos Omegas, como Jungwon movía sus caderas y penetraba a su esposo, el choque de ambas pieles, todo era magnífico, solo tenía que ser un donante de esperma y terminó teniendo a ambos Omegas esperando por él.
El momento fue fugaz cuando Jungwon eyaculó dentro de Sunoo, ambos soltaron un gemido agudo, pocos segundos segundos después Sunoo termino sobre su abdomen, ambos trataban de buscar el aire que se les había escapado de sus pulmones. Jungwon cayó sobre el pecho de su amado, el Omega mayor rodeo con sus brazos la espalda de su amado mientras repartía besos en su mejilla.
Era su momento.
—Lo hicieron bien, ahora es mi turno.—Nishimura se levantó de la silla y caminó hacía la cama, subiéndose al colchón y arrodillandose estando en este
—Sunoo...—Dijo Jungwon un poco agotado, Riki soltó una risita
—Pero primero vas tu, precioso, luego me follare a tu esposo y voy a darle el hijo que ambos quieren.—Riki se posicionó detrás de Jungwon, alineó su miembro dentro del Omega menor y poco a poco comenzó a introducirse dentro de él
Jungwon soltó un grito, para ser honestos, nunca antes incluso siendo Omega, había recibido un pene, con su esposo había tomado un rol dominante, ambos se sentían cómodos con eso y nunca pensaron en cambiar, pero, con un Alfa como Nishimura Riki y su aroma, estaba perdido.
—Ummmm, ¿Nunca te han atendido aquí atrás, bebé?—Riki acarició el vientre de Jungwon, este se movió hacia adelante, su miembro aún se encontraba dentro de Sunoo, lo que significaba que se enterró aún más dentro de su esposo
—N-No...—Dijo Jungwon, sus manos apretaron la cadera de de Sunoo, el cual, cómo reflejo, terminó mordiendo el cuello del Omega, el cual, sintió una corriente de placer recorriendo cada rincón de su cuerpo
Una vez dentro del Omega, Riki calmo con besos en el cuello y nuca a Jungwon, quien parecía tenso ante su intromisión, incluso cuando uso sus dedos se dió cuenta de que Jungwon no era atendido en su zona trasera. Pero siempre podía haber una primera vez, ¿Cierto?
Con movimientos suaves y delicados comenzó un vaivén, saliendo y entrando dentro de Jungwon, quien, no se pudo estar quieto, y de igual forma movía sus caderas embistiendo a Sunoo.
Mientras el Alfa penetraba al Omega menor, este penetraba al Omega mayor. Con palabras no podía describir lo que sentía en ese momento, pero sus ojos que se tornaron en blanco, sus manos dejando marcas en la cadera de su esposo mientras que las de Nishimura tomaban la suya, era... Una sensación muy diferente a lo que era su zona de confort.
—Son tan lindos... Ojalá esto pasara más seguido...—Riki comenzó a dejar mordiscos en el cuello de Jungwon, sin la necesidad de marcarlo pues, tal vez se arrepentirían de todo eso al siguiente día
Ambos Omegas no dijeron ni una sola palabra, solo podían decir balbuceos y gemidos. El Alfa sintió una picazón en su vientre indicando que estaba próximo a correrse, salió del interior de Jungwon y dió unas palmadas en los glúteos de este.
—Cariño, necesito que me presentes a tu esposo, estoy a unos cuantos minutos de mi climax y quieres que embarace a tu chico, ¿No es así?—Susurró Nishimura al oído de Jungwon, aunque Sunoo también pudo escuchar aquellas palabras
Jungwon gruño y salió del interior de Sunoo, no sabía si este se sentía celoso si Riki lo penetrara, pero, aún estando de acuerdo en esto, le generaban celos que otro penetrara a su Omega.
—Buen chico.—Riki beso los labios de Jungwon, este se sorprendió por la repentina acción pero continuo con el beso, mirando de reojo como Sunoo lubricaba aún más con aquella escena
—Se gentil, o te mato.—Dijo una vez el beso acabo, Nishimura rio
—Lo seré por el momento.—Le contesto con un guiño acompañado
Alineó su miembro nuevamente en el otro Omega, la piernas de Sunoo fueron tomadas por Jungwon para darle más facilidad a Riki de realizar su acción. Las manos del Alfa dieron al vientre del Omega mayor, y de una sola estocada entro por completo en este.
—¡AGH!~ ¡ES TAN GRANDE!—Chilló Sunoo, nunca antes en su vida se había acostado con un Alfa, su esposo fue su primera y únicas veces
—Te tendrás que acostumbrar, cariño~ porque si no es efectiva está vez, lo haremos hasta que quede preñado de mis hijos.—La frente de Nishimura, cubierta por sudor y sus cabellos lo hacían ver jodidamente sexi
Riki comenzó sus movimientos, a diferencia de Jungwon, con Sunoo no tuvo tanta piedad, penetrando con rapidez de este y sintiendo como sus paredes se expandían para darle paso a su miembro.
—Vamos, preña a mi esposo.—Susurró Jungwon, este se inclinó para comenzar a chupar los pezones rosados de Sunoo, quien chillaba de placer mientras masajeaba su miembro nuevamente
Los movimientos de Riki eran bruscos, la lengua y dientes de Jungwon jugueteaban con sus pezones haciéndole perder todo tipo de razón, su miembro paso a ser masturbado por Riki, quien veía con una sonrisa el desastre que eran ambos. Con su otra mano, nuevamente penetro a Jungwon con sus dedos, sacándole un gemido sobre el pezón de Sunoo.
Pasaron unos minutos, que los tres pensaron que eran infinitos, Nishimura anunció su orgasmo con un gemido grave, mientras echaba su cabeza hacia atrás y su miembro buscaba la forma más adecuada para comenzar a lanzar su esperma dentro del Omega.
Su orgasmo llegó, estallando a chorros dentro de Sunoo, quien terminó por correrse por segunda vez en las manos del Alfa. Naturalmente, por la estimulación en su próstata, Jungwon también termino por correrse mientras chupaba los pezones de su esposo.
Ambos Omegas cayeron rendidos sobre la cama, abrazándose y sintiendo en aroma del otro. Riki observó el hermoso desastre que había hecho. Terminó cayendo entre ambos Omegas y los dos le cedieron el medio, ambos Omegas se pegaron a él y lo abrazaron, buscaron el calor del Alfa después de una larga jornada de sexo.
«Ja, no puedo creerlo, termine metiendo mis narices en un matrimonio.» dijo, mientras recuperaba el aire y sentía a ambos Omegas buscando su cuello, para tener más de cerca su aroma.
—Tal vez... En un futuro los marqué a ambos.—Dijo Riki, ambos Omegas asintieron y cerraron sus ojos, buscando descansar
Y tal vez, en un futuro no muy lejano, Nishimura Riki terminó siendo el tercer integrante de la relación, aunque ambos Omegas mantenían aún vivo su amor.
FIN
★
HOLAAAAAAAA les traje lo que les debía :]
Espero les guste, siento que no es lo mejor que pude escribir pero es honesto, al menos.
Recuerden que ustedes son libres de corregirme algún error ortográfico.
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