Cuando Yusei abrió sus adormilados ojos se encontró con la imagen de un Riku con el cabello húmedo y otro tipo de pantalón, uno de vestir, completamente opuesto al que llevaba cuando él llegó al estudio. Las pequeñas gotas de pintura que habían estado en el pecho del castaño ya no se encontraban allí y se podía oler en el aire alguna clase de perfume suave.

-Ey, despertaste -Riku le sonrió mientras abrochaba un cinturón a su cadera -Dejé el baño preparado por si querías bañarte.

Yusei lo observó una última vez antes de desviar su mirada a la pequeña manta que cubría sus genitales, con sus mejillas rojas, y sin atreverse a mirarlo nuevamente, pidió -¿Puedes darte la vuelta? La manta no cubrirá todo.

-He visto todo de ti, Yusei -el castaño rió sin malicia -Pero, si es lo que deseas, está bien.

Una vez que riku le dio la espalda, Yusei se puso de pie lo más rápido que su cuerpo se lo permitió. Maldijo en voz baja cuando su dedo pequeño del pie fue víctima de sus despistados y rápidos pasos al llevarse por delante la pata de la mesa.

-¿Estas bien? -Riku logró dar dos pasos hasta que lo detuvo.

-No mires y sí, estoy bien -Yusei logró decir antes de salir corriendo al baño.

Una vez allí, dejó descansar su cuerpo sobre las frías paredes del cuarto y respiró hondo. Estaba seguro que Riku no olvidaría que él debía darle una respuesta,tenía que tomar una decisión lo más rápido posible de lo contrario sería víctima de las insistencia del castaño.

[🌼]

Una hora más tarde, Yusei se encontraba en la entrada de su casa junto con Riku. Se sentía un adolescente, el hombre lo había traído y se negó rotundamente a dejarlo venir solo. Riku no insistió en el camino de regreso a su hogar, pero cuando lo vio salir del auto y seguirlo, supo que hablarían en ese momento.

-¿Pensaste sobre lo que te dije? - Riku lo miró expectante.

-Sólo han pasado unas horas desde que me lo dijiste -Yusei frunció el ceño, realmente estaba esperando no cometer ningún error con respecto a su respuesta.

-Lo siento, estoy ansioso.

Yusei enterró sus dedos en su sedoso cabello y tuvo el impulso de tirar de ellos por la frustración que le traía la situación.

-De acuerdo, pasa. Hablaremos dentro. -Yusei le dio la espalda inmediatamente después de invitarlo a pasar. Le ponía extremadamente nervioso estar afuera de la casa y que cualquier persona pudiera verlos o escuchar su conversación.

Abrió la puerta de su casa y fue recibido con el leve aroma a vainilla, normalmente antes de irse encendía el aromatizador para que se mantuviera el buen olor y olvidarse del de las calles.

Inmediatamente se sacó sus zapatillas y se adentró completamente a su casa, de reojo vio cómo Riku imitaba sus pasos y lo seguía como un cachorro, algo de esa situación le pareció adorable y graciosa. Se negó a sonreír, por más que fuera muy leve, nada de esa situación tendría que gustarle.

Dejó que su cuerpo se desplomara sobre su mullido sofá y apretó sus sienes con sus dedos, necesitaba procesar lo que diría un poco más, buscar las palabras correctas para expresarse.

-Dado que las opciones que me has dado son limitadas, me veo en la situación de aceptar tu trato. Estaré contigo seis meses y... -Yusei se calló, no quería pronunciar esas palabras.

- Y si te enamoras de mí dentro de ese lapso, estaremos juntos y no habrá divorcio. -Concluyó Riku.

-Quiero poner unas condiciones -Yusei hizo oídos sordos -Tú también podrás poner las que desees.

-Te escucho. -Riku le dio la palabra y Yusei juró ver la sombra de una sonrisa victoriosa.

Levantando su dedo pulgar, Yusei enumeró -Primero, quiero que en estos seis meses me muestres tu verdadero yo, no te conozco. Conozco al riku que es un empresario y un casanova, no al que es aficionado por el arte y se le ilumina la cara cada vez que toma un pincel. Segundo... - levantó el dedo índice - No quiero que me cortejes, no necesito flores y chocolates, lo único que pido de ti es sinceridad. Tercero, - su dedo medio fue mostrado a su contrario - Si la cagas, si vuelves a estar con tus amantes o cualquier situación donde mi integridad física y psíquica se vea afectada, el trato queda deshecho, no importa si sólo han pasado dos semanas, me darás el divorcio sin chistar

El asombro estaba pintado muy claramente en la cara de su contrario. Al parecer él jamás esperó que Yusei dejara sus puntos claros.

-Me parece bien - Riku asintió levemente. - Dado que no lo haz mencionado, tocaré el tema del sexo.

Las mejillas y la punta de las orejas nívea de Yusei tomaron un leve color carmesí.

-Imagino que como ahora seremos una pareja real, el sexo esta incluido y que no lo haz mencionado porque lo dabas por sentado. -Riku lo observó con brillantes ojos negros. -También me pediste sinceridad, por lo que me veo en obligación de decirte que estas dos veces que hicimos el amor no usé protección.

-Estas bromeando conmigo, ¿verdad? -El corazón del hombre latía fuertemente, como si estuviera luchando por salirse de por su garganta. -¡No juegues sucio! -Yusei habló, preso del enojo.

-¡No lo hago! -Riku se puso de pie, sintiéndose mal por haberle hecho aquello a Yusei -Admito que al principio sí lo hice con esa intención, pero luego me di cuenta que no era el camino correcto.

-Mierda, Riku -Yusei se dejó caer como peso muerto mientras su cabeza procesaba los diferentes escenarios. -Si llego a estar embarazado e incumples algo de lo que te he dicho no dudaré en el divorcio, sólo serás el padre de mi hijo pero no mi esposo, ¿te quedó claro?

-Más claro que el agua -Riku se dejó caer a su lado -Quiero pedir una cosa más.

-No estás en posición de hacer tal cosa. -Yusei no se atrevía a mirarlo.

-Quiero que hablemos de nuestra boda y del pasado. Sé que no te gusta hurgar en viejas heridas, pero es necesario. Quiero comprenderte y conocerte más a fondo, Yusei

-Yo... está bien, pero no ahora. -Yusei  lo miró de reojo.

-Quiero preguntarte algo más. -El castaño sonó tímido, provocando que Yusei lo mirara extrañado -¿viviremos juntos?

-Probablemente, definamoslo a fin de mes. Mi libro saldrá en tres semanas y realmente necesito poner mi atención allí ahora.

-Bien... de cualquier manera tengo que lidiar con las empresas de Asia por lo que tengo que viajar dentro de unos días, pero para fin de mes ya estaré de nuevo aquí y me estableceré junto a ti.

Yusei no pudo evitar darle una mirada desconfiada al castaño, "viajes" para él eran sinónimo de que Riku se reencontrará con alguno de sus múltiples amantes.

-Oye... -Sintió los cálidos dedos de riku en su fruncido entrecejo-Esa vida ya acabó. Sólo serán negocios.

-No esperes que confíe tan ciegamente en ti -Yusei lo miró sin gracia.

-Pagaré con creces -Le prometió.

-Eso espero.

Sintiendo la fuerte mirada de Riku en su perfil lentamente dio vuelta su rostro para encontrarse con los brillantes y expectantes ojos de su contrario sobre él. Quería algo, pero Yusei no sabía lo que era.

-¿Qué quieres?

-Besarte -Respondió sin más.

Con sus mejillas teñidas asintió levemente y esperó paciente a que Riku se acercara a él. Los suaves labios del castaño cubrieron los suyos con delicadeza y sin ningún apuro.

Lentamente Riku lo recostó sobre el sofá y descendió sus besos por su cuello, hasta sus clavículas.

-Lo hicimos hace unas horas -Se quejó, o al menos quiso creer que lo dijo como una queja.

-Estaré fuera durante varias semanas, quiero tener tu sabor y disfrutarte por todo lo que queda.

-¿Tienes algún morbo con hacerlo en el sofá? -Yusei gimió al sentir cómo Riku succionaba la sensible piel de su cuello.

-No, pero podría desarrollarlo estando contigo.

No quiero que My Beautiful Man acabe 🥀💔

¿Por qué tienen que ser tan pocos episodios? )':