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ʚ🌼ɞ Capitulo 2.






Como era de costumbre para él, escuchó la puerta de su casa siendo tocada a las 7:20 PM. Suspirando tomó el pomo de la misma para descubrir la imagen de su esposo sonriendo tranquilamente, mientras sostenía una pequeña pero elegante bolsa de regalo.

-Feliz cumpleaños, Yus

"Yus". Aquel apodo tan infantil había surgido debido a que en una de las tantas reuniones de etiqueta a las que había tenido que asistir -para mantener la farsa de matrimonio que tenían- una pequeña, hija de un acaudalado CEO había intentado decir su nombre sin resultados gratos a su oído, por lo que él simplemente decidió en simplificarlo. Prontamente, la mayoría de los invitados comenzaron a llamarlo de esa manera, su esposo no fue la excepción.

-No era necesario un regalo, Riku. -Yusei sonrió mientras le daba paso al hombre que aún estaba en el umbral de su casa.

-Te lo mereces, Yus. ¿No lo abrirás?

-¿Debo hacerlo ahora? - A él normalmente no le gustaba abrir los regalos que recibía porque no sabía qué expresión poner si estos no eran de su agrado.

-Me gustaría que lo llevaras para cenar.

Con cuidado abrió la bolsa donde venía el regalo y del interior sacó una elegante caja dorada. Su respiración quedó a medio camino al ver el interior de la misma, allí reposaba un elegante y hermoso reloj de oro blanco con pequeñas incrustaciones de piedras preciosas.

-No puedo recibir esto. -Dijo apenas su voz salió -Debes haber gastado un dineral.

-Tonterías. Déjame que te lo ponga - Riku extrajo cuidadosamente el reloj de sus manos para luego tomarlo suavemente de la muñeca y colocarle el llamativo objeto -Te queda precioso.

Con la punta de sus orejas sonrojadas Yusei le regaló una tímida sonrisa al hombre frente a él y sin despegar su mirada de sus zapatos buscó el abrigo que lo acompañaría esa noche. Algo cohibido debido al reciente comentario lanzado al aire como si no tuviera peso en él, levantó su mirada para encontrarse unos centelleantes ojos.

-¿Nos vamos? -Preguntó.

En pocos minutos Yusei se encontraba cómodamente sentado al lado de Riku en su despampanante auto de gama alta. Las veces en las que Riku lo visitaba se encargaba de llevar específicamente ese auto, porque era el preferido de él, no era tan lujoso, por lo que no llamaban tanto la atención -cosa que Yusei todavía no estaba acostumbrado- y era extremadamente confortable.

-Pensé que iríamos al mismo restaurante de siempre -Yusei habló apenas se percató que el camino no era el habitual.

-Reservé en otro esta noche. Espero que no te moleste -Riku lo observó fugazmente para luego mirar el camino.

-Oh, no, por mí está bien.

Alrededor de veinte minutos después se encontraban a las afueras de la ciudad, Riku aparcó el coche y lo guió a la entrada del restaurante. Fueron recibidos por un empleado del lugar, quien los llevó a la mesa donde cenarían.

Se sorprendió notablemente al no notar más personas alrededor de ellos, él estaba seguro de que cuando entraron sí habían más clientes, incluso notó a algunos conocidos por ser de una alta alcurnia.

-¿Reservaste esta parte del restaurante sólo para nosotros dos? -Yusei se atrevió después de haber ordenado lo que comerían.

-¿Acaso está mal querer algo de privacidad con mi esposo?

Yisei sintió una punzada de incomodidad al escuchar salir de los labios de Riku aquella palabra.

Hizo una pequeña mueca que inevitablemente fue notada por su contrario.

-¿Qué está mal?-Riku interrogó.

-Iba a esperar a terminar de comer para hablar contigo, pero no le veo sentido el seguir aparentando.

-¿De qué estás hablando?

-Hablo de nuestro matrimonio. -Yusei reunió todo el valor que acumuló durante todo este tiempo para pronunciar aquello. Pensó lo que lo estaba motivando a llevar esa conversación a cabo, él quería formar una familia sana y con amor, no quería que su pequeño o pequeña naciera en un ambiente que no fuera grato -Voy a solicitar el divorcio.

-¿Qué cosas dices tan repentinamente? -Riku lucía desconcertado.

-Créeme que no es repentinamente- Yusei se rió amargamente -Llevamos seis años de un matrimonio completamente falso, ni siquiera vivimos bajo el mismo techo y tus... y tus múltiples amantes son un cargo extra a este vínculo.

-Yusei...

-Déjame hablar, Riku -El lo interrumpió -Sabes qué es lo mejor para ambos, tú podrás llevar la vida que tanto quieres y yo podré... no importa, a lo que me refiero, es que el divorcio nos beneficiará a los dos. Tu familia ya está fuera de cualquier deuda con mi padre y estás llevando un gran manejo de la empresa familiar. Lo que una vez nos unió, ya no es válido. Puedes ser libre.

-Deja de decir tantas tonterías, Yusei- Riku pareció explotar. El tono de su voz fue áspero y duro, jamás se había dirigido de esa manera a él

-No son...

-Permiteme hablar -Esta vez Riku lo interrumpió -Eres mi esposo y lo seguirás siendo hasta el fin de nuestros días. No te daré el divorcio porque te prometí la eternidad y cumpliré mi palabra.

-Oh, vamos -Yusei rió -También me prometiste fidelidad y sin embargo tienes un amante en cada país que pisas. Simplemente no puedes decir eso y esperar que me sienta conmovido por tus palabras.

-No te daré el divorcio- Su contrario fue rotundo

-¿Por qué te estás comportando como un niño caprichoso? -Yusei era consciente que sonaba desesperado. -Todavía eres joven, estoy seguro de que podrás conseguir otra pareja rápidamente o simplemente vivir como un soltero codiciado por media población.

-Dime por qué quieres el divorcio. -Los ojos de Riku se encontraban pegados a su rostro.

-Prefiero reservarlo para mí mismo.

-¿Es acaso que estás con otra persona? ¿Por eso estás tan desesperado por divorciarte de mí?

-Eso no es de tu incumbencia.

Antes de que el mesero tuviera la oportunidad de dejar sus platos sobre la mesa, Riku lo tomó por el brazo y lo sacó del restaurante lo más rápido posible. El hombre con el que estaba casado hacía oídos sordos a sus reclamos en voz baja, después de todo ellos se encontraban en un lugar público y era completamente sabido que si armaba un escándalo allí mismo, las revistas y noticias de entretenimiento estarían plasmadas de ellos dos.

Una vez que llegaron a su casa, Riku tomó su teléfono e hizo una llamada rápida, dando la dirección de donde se encontraba.

-Puedes decirme qué pasó afuera para que me hayas sacado de esa manera. - Yusei reclamó, notablemente irritado por el comportamiento de Riku

-¿Qué pasó? -El castaño rió ásperamente- Oh, bueno, mi esposo acaba de pedirme el divorcio y aparentemente hay alguien más.

Yusei no daba crédito a lo que
escuchaba.

-Debes estar malditamente bromeando.

-¡¿Crees que bromearía con algo como esto?! -Riku se exaltó.

-Sino es una broma entonces eres un maldito sinvergüenza. ¡¿Cómo te atreves a sacarme en cara que estoy con alguien más cuando es de público conocimiento que me eres infiel con cada persona que se pone delante tuyo?!

La temperatura de la casa se había hecho sofocante en unos pocos minutos, la rabia consumía el cuerpo de Yusei como nunca antes lo había hecho.

Antes de que ninguno pudiera siquiera levantar la voz, el timbre de su hogar resonó por todo el lugar. Aturdido, iba a abrir la puerta cuando Riku se interpuso y fue él a abrir, escuchó brevemente que hablaba con un chófer y le indicaba a dónde debía dejar su auto.

-¿Acaso no te irás?

-Esta noche me quedaré aquí. No pienses que esto simplemente se acaba acá.

-¿Disculpa? No te invité a quedarte. - Yusei cruzó los brazos por su pecho.

-No necesito invitación para pasar la noche con mi esposo.

-¡Deja de decirme de esa manera! Ni siquiera lo somos, solo por un maldito papel, por lo demás, ni siquiera te asomas.

El rostro de Riku se había endurecido más y más a medida que pasaba el tiempo. Ellos nunca tuvieron una pelea, siempre se llevaron bien y pudieron convertirse en algo así como amigos. Para Yusei siempre fue algo platónico, pese a que estaban casados.

Dispuesto a terminar con el ambiente pesado debido a las peleas, decidió tomar un respiro e intentar hablar pacíficamente con Riku.

-No quiero pelear contigo, Riku. Somos dos adultos y podemos arreglar las cosas hablando.


















En fin, la hipocresía!! 🤌🏻













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