Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Prank #4 -S.H


Solos en una habitación
*Broma*
——————————————

Sekaiichi Hatsukoi -Pareja Nostálgica/
Trifecta/ Mistake.

Mi nombre el Takano Masamune. Tengo 25 años y soy el editor en jefe de el sector manga shougo. Estoy en planes de salir oficialmente con un señorito llamado, Onodera Ritsu, alias el "no es amor".

Estoy seguro que hablo por todos cuando se trata de Onodera, ya esta bueno ¿no? Nos conocemos desde la secundaria y prácticamente llevamos más de 10 años enamorados, y él se niega a sus sentimientos.

Pero tengo una solución. He visto que últimamente se han hecho famosas las bromas entre pareja. Ya sean para revelar celos, nostalgia, preocupación y otras cosas. Buena forma, aunque un poco arriesgada, pero vale la pena con tal de saber que haría su pareja cuando se vea afectada por ciertas situaciones.

A estas alturas, Onodera es prácticamente mi esposo, así que está bien.

Cuento con la ayuda de él oso gruñón de ventas, Yokozawa. Me costo un poco convencerlo, pero al final lo logré. En esto también está Isaka-san. Nos escucho hablando por el pasillo y no dudo en levantar la mano y decir; "¡Yo también quiero!". En realidad no me molesta tanto, ya que él es el presidente de la compañía y gracias a él esto puede verse muy realista.

Vamos a aprovechar hacerlo en la reunión para dialogar sobre un mangaka, el cual Yokozawa y yo vamos a supervisar, ahí es donde Isaka-san también nos va a dar una mano.

Yokozawa y yo vamos a tener que ir de viaje a ver a un importante mangaka, y pues ahí haremos el plan,- eso fue idea de Isaka -. El convencerá a su secretario para que convenza a los demás  que por los momentos hay falta de presupuesto, y que tendremos que dormir en una sola habitación juntos, de solo una cama. Pero si esto sale bien, en vez de Yokozawa, será Onodera quien irá conmigo.

Ritsu dirá que me ama, Ritsu dirá que me ama~


Prank Time!

Onodera— llamó el azabache al menor.

—¿Que quieres, Takano?— respondió malhumorado, pues estaba atareado de trabajo.

—No me respondas así que soy tu jefe— le devolvió de la misma manera.

El castaño resopló de fastidio.—Esta bien. ¿Que necesita, Takano-san?— fingió amabilidad.

—Mejor— sonrió —Me vas a acompañar a una reunión hoy, así aprenderás mejor cómo se hacen las cosas aquí. ¿De acuerdo?

—Si— asintió —<<Como si me queda de otra>>— pensó molesto, ya que el azabache estaba más que consciente de todo el trabajo que Ritsu tenía, pues era el mismo quien se lo había puesto.

Ya todos los editores en jefes necesarios estaban en la sala de juntas. Mientras que Isaka se encontraba fuera junto a su secretario.

—Ya debemos entrar, Ryuuchiru-sama— sugirió el secretario —Ya todos están dentro.

—Si, si— dijo despreocupado —Ven aquí.

—¿Que sucede?— se puso a su altura.

—Has lo que te diga..— susurro en su oído —Vas a decir qué hay falta de presupuesto y que solo hay una habitación y solo pueden ir dos. ¿Entiendes?

—No puedo hacer eso— dijo firme —Es irresponsable.

—Hazlo, por mi~— trato de persuadirlo, enrollando sus manos alrededor del cuello de su amante.

—N-No...

—Si lo haces, puede que esta noche sea muy divertida...— dijo coqueto en el oído del más alto. Después le dio un leve beso y camino muy sensualmente hacia la puerta. —¿Lo harías?— cambio su tono de voz a uno mas sensual.

—C-Cómo ordene— lo logró.

Ambos entraron en la sala de juntas, ya todos estaban en sus lugares. Onodera al lado de Takano, Kirishima del otro lado viendo embobado a Yokozawa. Y otros jefes de sección.

—Buenas tardes— saludo Asahina —Lamento nuestro retraso. Empecemos la reunión.

—Ahora— habló Takano —La mangaka esta teniendo mucha fama últimamente, vendiendo muchos tomos, hasta hicimos una reimpresión. Pero esta teniendo muchos problemas en el manuscrito y lo más adecuado es ir a verificar personalmente.

—¿Por que?— habló una encargada —Si no tiene un nuevo tomo listo para la fecha límite, podemos reemplazarla con otros autores.

—Sería una gran pérdida en ventas— defendió Yokozawa —Ella está en los ranking en ventas. Genera muchos ingresos, no podemos desaprovechar su reciente fama.

—Oh~— hablo la mujer —¿Takano y tu de acuerdo?— dijo burlona —¿Que se traen?

—¡¿AH?!— se ofendió él oso gruñón —Solo miro lo que es mejor para incrementar las ventas, así que nos saques conclusiones.

—Aún pienso que es una pérdida de tiempo— siguió la dama.

—¡Ella va a ser y punto!— exigió Yokozawa.

—Está bien, está bien~— Isaka canto —Asahina— hizo una seña.

—Si— entendió —La mangaka vive en una ciudad lejana de Tokio, haciendo muy difícil nuestra visita. Por órdenes de Ryuuchiru-sama, el editor en jefe de la sección shoujo, Takano Masamune, y el jefe en ventas, Yokozawa Takafumi, irán a ver a ese importante mangaka.

Tanto como Onodera y Kirishima estaban atentos a todo lo que pasaba. No pasaba nada que ellos dos fueran, era trabajo nada más.

—Wuuu~— interrumpió Isaka —Hay un problema. ¿No, Asahina?

—Oh, si— hablo —Por los momentos, la empresa está tratando con un pequeño problema económico, teniendo que recortar algunos gastos. Además que porque este problema se dio de improvisto, no tenemos otra opción que solo ofrecerles que una habitación para ambos.

Kirishima no dudó en hablar —¿Pueden decirnos cómo es la habitación?

—Como ha sido de improvisto, solo hemos podido conseguir una de una sola cama. Lo lamentamos.

—¿QUE?— exclamaron ambos castaños.

—<<Bingo>>— pensó Isaka. Pues al parecer Onodera no era el único "inconforme" con la noticia. —Los demás pueden retirarse, los encargados de este problema se quedan— ordenó. Así las personas extras salieron de la sala.

—¿Esto es realmente necesario?— preguntó Zen —¿No habían otras habitaciones?— preguntó enojado —Digo, para su comodidad— mintió.

—Exactamente— se inclinó hacia enfrente y cruzó sus dedos —Dormirán en una sola habitación. Queremos recuperar fondos, además, esto será como un ejercicio para la socialización entre compañeros de trabajo, ¿no creen?— sonrió —Además, Yokozawa-san y Takano-san parecen de acuerdo, ¿verdad?

—No hay problema— dijo Takano —Hemos compartido otras cosas.

—Si. No me molesta— siguió Yokozawa, si que eran buenos actores.

—Bueno, bueno— le levanto Isaka de su lugar —Yo ya hice lo mío. Vamos, Asahina, hora de cumplir mi parte para ti~— le coqueteo haciéndolo sonrojar y seguirlo ansiosamente, pues estaba en abstinencia desde hace tres semanas.

El presidente y los otros jefes de sección dejaron la sala, dejando solo a las parejas. Había mucha tensión. Zen miraba fijamente al azabache, como si quisiera retarlo. El castaño menor solo tenía la cabeza baja, pues en su mente divagaban muchas situaciones.

—¿Que diablos acaba de pasar?— murmuró Zen fastidiado —¿Como que irás a solas con él por un fin de semana entero? ¿Sabias de esto? ¿Desde cuando concuerdas con el? ¿Lo han planeado?— interrogó a su pareja en una esquina de la sala.

—¿Yo? Trabajo es trabajo, y si tengo que dormir con Masamune, pues lo haré— dijo enojado. Sonó muy mal pero eso no era a lo que él se refería.

Zen estaba furioso, no podía creer lo que su querido oso le estaba diciendo. Aunque él lo estaba malinterpretando, sus celos cegaron esa pequeña parte del cerebro que le hacía usar la lógica.

En la gran mesa, aun se encontraban el castaño junto al azabache arreglando unos papeles para irse. Ritsu quería preguntarle tantas cosas, solo para saber un porqué de la situación. Miraba al mayor ansiosamente, mientras que el otro solo reía en su interior, pues ya había sentido la mirada de su enamorado en el.

—Onodera— lo sacó de su transe —¿Alguna pregunta que quieras hacerme?

—¡¿Eh?!— exclamó —N-No, nada— dijo bajito.

—¿Seguro?

—Si, Takano-san.

—Bien. Vamos a casa— dijo cerrando su portafolio.

—Vamos— accedió sin rechistar, sorprendiendo al mayor.

—Nosotros también— dijo Zen tomando la cadera de su pareja, a lo que él forzando y se separó.

—¿Nosotros?— dijo —Tu te vas a casa y ves cómo está Hiyori. Yo aún tengo trabajo que hacer.

—Osito...— trato de convencerlo.

—Ve. A. Casa.— ordenó, y salió de la sala rápidamente siendo seguido por su amante. —Con permiso— apartó a la otra pareja que iba saliendo.

—¡Yokozawa!— salió corriendo detrás de el —¡Espera! ¿A donde crees que vas?

—¿Pero que está pasando?— dijo Ritsu sin entender la escena anterior. Masamune rió de triunfo y burla.

—De seguro trabajo. Vamos— indicó.

Ambos caminaron por la fría madrugada. La calle estaba bastante oscura a pesar de haber luz en los postes. Ritsu hundía su rostro en su bufanda, su rostro un poco ruborizado indicaba el frío que sentía. Pero esa no era la única razón, ya que no dejaba de pensar en ese viaje que realizarían Takano con Yokozawa.

—Onodera— la grave voz del azabache lo distrajo —¿Que tanto piensas?

—N-Nada que te importe.

Masamune frunció el ceño ante la respuesta de su empleado y decidió hacerle sufrir un poco —Ya veo...sabes— llamo la atención del castaño —Me emociona este viaje con Yokozawa— dijo sin más, sorprendiendo al menor.

—...¿Que?— dijo bajito.

—Estar solos, aunque es por trabajo, podremos estar más unidos, ¿sabes? Cómo antes— dijo obviamente para tentar a su compañero.

—Solos...— murmuró. Apretó su puño, sosteniendo con bastante fuerza su bolso.

—Solitos— siguió el azabache. Miro hacia enfrente y ya estaban a punto de llegar a su edificio. Llegaron al ascensor, y seguían en silencio. —¿Que día es mañana?— rompió el silencio.

—Viernes— respondió Ritsu sin mirarlo.

—Entonces me voy mañana en la tarde...— dijo —Con Yokozawa— añadió, llamando aún más la atención de su acompañante.

—Con Yokozawa- san...

Las puertas del ascensor se abrieron. Ambos se dirigieron a sus departamentos, y antes de abrir la puerta, el castaño le habló a su jefe y vecino —Takano...

—Dime— respondió de inmediato.

—N-Nada— negó y entró de golpe a su apartamento.

Takano sonrió —Casi— rió, y entró de saltitos a su apartamento.

Al día siguiente, la jornada de trabajo iba normal, la mayoría de las personas estaba a punto de un colapso. Estresados y corriendo de un lado para otro. Ritsu estaba más que concentrado en su trabajo, y Takano estaba recostado hacia atrás. De pronto, el oso gruñón entró a su sección y se dirigió directamente al azabache. La atención de Ritsu ya no era en su trabajo, ahora era a la pareja de amigos.

—Rit-chan...— habló Shota —¿Como vas?— dijo ronco.

—B-Bien— contestó —¿Pero usted está bien?

—Si... solo necesito morir y volver a nacer— contestó, dejando caer de cabeza en su escritorio para dormir un rato.

—<<Al rato les traeré café>>— pensó Ritsu, después volvió a ver a su jefes.

—¿Te ha dicho algo?— le preguntó Yokozawa a su amigo.

—Aún no— contestó Takano.

—Mierda. Si no te dice nada, dile tú. Ya no soporto a Kirishima— dijo fastidiado, sobándose para cadera inconscientemente.

—No dormiste muy bien anoche, ¿eh?— dijo burlón.

—¡Cállate!— alzó la voz —Más vale que esto funcione, o si no me las pagarás.

En ese momento entró Zen, encontrando a Yokozawa hablando con Takano. —Hola.

—¿Hola?— respondió Takano.

—¿De que hablaban? ¿Trabajo, cierto?

—Del viaje que realizaremos hoy— contestó Masamune —Estábamos hablando que si nos da algún tiempo libre...

—Regresarán a Tokio.— completo.

—No. Haremos algo de turismo, jun-tos— bromeó. Encabronando al mayor aún más.

—Isaka-san dijo que había bajo presupuesto— dijo fingiendo sonreír y apretando los dientes.

—Tenemos dinero— respondió de inmediato.

Mientras se hacía un "duelo" en la sección, los demás empleados estaban concentrados en la discusión de sus jefes. Ya que ellos no habían salido del lugar para hablar en privado, y al parecer no se estaban preocupando si los demás los escuchaban.

—Takano-san, aquí está el trabajo— interrumpió Ritsu con otras intenciones.

—Déjalo ahí. Yokozawa y yo tenemos que ir a hablar de nuestro viaje— se levantó de su asiento y tomó al oso de los hombros y lo empujó.

—¡Alto, ustedes dos!— dijo Zen. Ritsu quedó parado mientras sus compañeros miraban la salida un poco consternados. Al final, el castaño no pensó más y salió corriendo detrás de aquel trío de jefes.

—¡Suéltame! ¡Suéltame!— ordenaba Takafumi.

—¿Atrás viene Ritsu?— preguntó.

El otro volteo, y si, ahí venía Ritsu detrás junto a Zen con no muy buen aura.

—Ahí viene tu estupido enamorado junto a Kirishima no con muy buena cara— respondió —¿Que planeas hacer cuando nos alcancen?

—Llevarme a Ritsu y dejarte con Kirishima para que te viole.

—¡¿Serás estupido?!— se quejó el oso —Solo por eso voy a dejar que te patee el trasero.

—Si, si— pasaron un pasillo y se encontraron con Isaka.

—¿Donde van tan apurados?— preguntó —¿Funcionó el plan? ¿Ya son novios? ¿Eh? ¿Eh?

—Aún no— respondió Masamune —Pero después de hoy, si— dijo seguro.

—¡Yokozawa!— se escuchó un llamado a lo lejos.

—¿Y eso?— preguntó el presidente.

—¿Y ahora hacia donde vamos, genio?— preguntó Yokozawa fastidiado.

—Ahí— lo empujó hacia una de las salas de conferencia —No les digas donde estamos...— le guiño el ojo a su jefe, a lo que él entendió de inmediato lo que debía hacer.

A los segundo llegaron ambos castaños chocando con su jefe. —Hey, hey~ ¿cual es la prisa?

—Isaka-san— dijo Ritsu tomando aire.

—¿Por casualidad sabe donde se encuentra Yokozawa-san y Takano-san?— preguntó Zen.

—Ahí— señaló de inmediato la sala donde se encontraban. Antes de que los castaños entraran, Isaka los detuvo. —No hagan mucho ruido, no queremos mas espectadores— sonrió —Ahora si— los dejo pasar —Suerte~

Abrieron precipitosamente la puerta. Zen furioso y Ritsu detrás de él.

—Hola de nuevo— saludo Takano.

Zen se acercó rápidamente hacia ellos y tomó a su pareja del brazo, jalándolo hacia el —Dámelo.

—¡Hey!— se quejó el oso.

—Todo tuyo— dijo Takano. La pareja se fue de la sala, Yokozawa se dejó manejar, ya que habían quedado en un acuerdo con Takano, que ahí se arreglaría todo y él pudiera arreglarse con su pareja.

Ahora, la pareja nostálgica quedó sola en la sala. En completo silencio, dándose miradas fugaces sin saber que decir. Takano suspiró y miró con pesar al castaño. Después comenzó a caminar dirigiéndose a la salida.

—<<Espera...>>— pensó Ritsu al verlo pasar frente a él —Espera...— murmuró bajo, sin que Masamune lo pudiera escuchar —¡Espera, Takano-san!— dijo más alto, que por impulso, tomó la manga de la camiseta de su jefe. Este sonrió.

—¿Que pasa?— volvió a su expresión seria.

—¡Ah!... Amm.. y-yo... este...— se puso nervioso, pues no había pensado que decir después de haberlo detenido, solo se había dejado guiar por sus impulsos.

—Nos vemos— se hizo de rogar, aunque su plan no era abandonar la sala, en absoluto.

—No, Takano-san...— habló —Yo... s-solo quería preguntarle si en verdad irá a ese viaje con Yokozawa-san.

—Si— respondió de inmediato —Solo el y yo, como jefes de sección.

—Y-Ya veo— esta vez si que estaba nervioso.

—<<Dios, que lindo>>— pensó con ternura —<<Tal y cómo en la secundaria, tan tímido y adorable>>. —¿Onodera?

—Y-Yo...— se le quebró la voz —<<¡Díselo! ¡Díselo, imbecil!>>— pensaba —Y-Yo...

¡Oye, niño!— escuchó una voz.

¿Quien es?

¡Pues yo! ¡Tu conciencia, razón, y todas las malditas cosas que te hacen pensar, hombre!

¿Entonces hablo solo?

Prácticamente. Ahora mismo estás pensando en una velocidad increíble. Y solo te venimos a aconsejar.

¿En..?

Tu vida amorosa. Ya dile de una vez.

No se de que hablas.

¡Ya no te hagas! Literalmente, hemos estado pensando como loco en él por más de 10 años. Haz que valga la pena, por Dios.

¿P-Pero y si me rechaza?

Oye... ¿como te va a rechazar después de haber aguantado por tanto tiempo tu carácter de mierda? ¿Eh?

Es cierto...

Ahora respira.... así, así. Piensa bonito. Imagínate a ti y a este hombre juntos, sentados tomados de la mano, en una silla cada uno, con sus nietos jugando en el patio y ustedes tomado jugo y café, mirando cómo cae el atardecer.

Si....

¿Te gusta, no?

Suena increíble.

¡Pues dile lo que sientes! Solo así tendrás lo que en verdad quieres.

¿Y ustedes como saben que es lo que yo quiero?

Por qué somos tu, idiota.

¿Onodera?— lo llamó Takano.

¡Vamos, es tu momento!

Tengo miedo...

Si no lo haces ahora, no lo harás nunca. Él se irá con ese oso gruñón. ¿Eso es lo que quieres?

No...

¿Que dijiste?

No.

¡No te escucho!

¡No!— habló fuerte.

—¡¿Onodera?!— se preocupó el mayor —¿Que te pasa?— trato de acercarse.

—¡Takano Masamune!

—¿Que pasa? ¿Estás bien?

—¡No permitiré que vayas a ese viaje solo con Yokozawa-san! ¡No me importa si tengo que utilizar por primera vez los contactos de mi padre! ¡No irás!— se desahogo.

—¿Que está pasando?— murmuró Masamune sin entender.

—¡Desde que te vi la primera vez en la secundaria no he dejado de pensar en ti! He sufrido tanto por tu culpa, a pesar de que todo había terminado por un malentendido. Que por cierto, fue tu culpa. Pero ahora, a pesar de todo, ¡mis sentimientos por ti no han cambiado!— cerró sus ojos con fuerza e inclinado su cabeza por la pena —¡He pensado en usted por más de 10 malditos años!— las lágrimas amenazaron por salir —¡Y a pesar de que había salido con varias personas, nunca deje de pensar en usted!

—Onodera...— dijo Masamune incrédulo. 

—Así que solo te lo dirá una vez...

—¿Que cosa?— preguntó con desespero, a punto de abalanzarse al pequeño cuerpo frente a él.

—Te amo, Masamune.— confesó, mirando finalmente al mayor —Te he amado desde la primera vez que te vi, y no te he dejado de amar ni un minuto.

Cuando finalizó su confesión, Masamune lo abrazó fuertemente. Siendo torpemente correspondido.

—Al fin...— murmuró cerca del oído de su enamorado —Al fin, al fin...— decía con voz quebrada.

—¿T-Takano?

—Ritsu...— dijo bajo, mostrando su nostálgico rostro so punto de llorar. —No sabes cuanto he esperado por esto... Te amo.

—Y-Y-Yo.... también— murmuró. Poco a poco iban acercando sus rostros, para al final unir sus labios en un amoroso beso. A cada momento que medio se separaban para tomar aire, reían. Estaban emocionados.

Pero es ese momento, Takano recordó la broma, tenia que decirle a Ritsu. —Ritsu, sobre lo del viaje...

—¡HEY!— entró Isaka contento —¿Que estaban haciendo?— preguntó con picardía.

—¡¿Isaka-san?!— se sorprendió Ritsu.

—Oh~ con que al fin están juntos. Lindo, lindo.

—¿Por que nos interrumpió?— preguntó el azabache fastidiado.

—Oh, si. Hay un pequeño problemita con el editor en jefe de Japun y nuestro osito gruñón de ventas— dijo tranquilo.

Takano salió corriendo hacia el pasillo, mientras que Ritsu iba detrás sin entender nada, y Isaka silbando.

—¡Que me escuches!— dijo Yokozawa.

—¡¿Escuchar que?! ¡Que aún lo amas, ¿cierto?!

—¡Que no!— negó.

—Y él a ti...— dijo furioso.

— Exactamente— se escuchó detrás. Cuando voltearon Takano estaba sonriendo.

—¿QUE?— volteó furioso.

—¿T-Takano?— dijo Ritsu sin entender —¿Que estas diciendo?

—Espera, espera— le susurró —Como dije...— aclaró su garganta —Esto fue porque nos queremos.

—¡¡ERES UN...!!— estaba a punto de ir y darle dos que tres puñetazos en el rostro de su compañero, si no fuera por Yokozawa que se le puso enfrente.

—¡Cállate! ¡No estas ayudando!— le reclamo a su amigo.

—Lo se— carcajeó.

—¡¿Por que lo defiendes?!— reclamó Zen. No era nada normal que haya perdido su control, y en especial en una zona de trabajo.

—Esto fue más grande de lo esperado, ¿eh?— hablo Isaka que se había mantenido callado, pues estaba bastante entretenido con la situación.

—¿De que habla?— preguntó el castaño menor.

—Esto fue planeado, mi amigo heredero— dijo tranquilo —Todo esto fue una broma, bueno parte.

—¿A que se refiere?— preguntó Kirishima.

—Estos dos estaban hablando sobre cómo hacer que Onodera-kun al fin se le confesara a Takano. Entonces yo me metí y les ayude. En realidad no hay falta de presupuesto, obviamente, solo les dijimos una pequeña mentira para hacer esto más realista. Aunque se salió un poco de control, fue divertido— confeso todo el plan.

—¿Y la habitación?— preguntó Zen.

—Si nuestro Ritsu se confesaba, el iría en vez de Yokozawa. Pero si no, pues las cosas se quedaban como estaban.

—Pero te confesaste, ¿no, Onodera?— preguntó Kirishima directamente al castaño.

—Así lo hizo— dijo orgulloso el azabache, abrazando al menor de la cadera.

—¡T-Takano-san!— reclamo ruborizado, pero después algo en el cambio, recordó lo que había dicho su jefe —<<¿broma?>>— pensó.

—Takano...— dijo con un aura oscura a su alrededor —¿Que diablos quiso decir con broma, eh?

—Mierda... lo olvide— se aterrorizó.

—Será mejor que me vaya, por cierto, Onodera-kun, tu irás con Takano al viaje— dijo Isaka y después salió de la sala.

—Si, Isaka-san— asintió sin despegar su entrecerrada y amenazadora mirada hacia el azabache.

—Nosotros también. Tengo asuntos que arreglar con una personita— dijo Zen llevándose a su pareja fuera de ahí, no antes que Yokozawa hiciera un además de ahorcamiento hacia su amigo, indicando que se las iba a pagar.

—No me dejen solo...— murmuro aterrado. Pero ya era muy tarde, porque ya se habían ido.

—T-A-K-A-N-O— dijo amenazante.

—Ritsu, amor, yo te amo. Esto fue para poder estar juntos, ¿sabes? Como ahora.

—Esa no era la forma, imbecil.

—Pero, si los resultados son favorables, no importa el proceso, ¿cierto? ¿cierto?— dijo nervioso.

El castaño se iba acercando de forma amenazadora hacia el otro.

—Eso no importa, te pasaste.

—Amor~

—¡Ven aquí!— exigió.

—¡Espera! ¿No vas a matar a tu atractivo novio, o si?

—No planeaba quedar viudo tan joven, pero eso no importa ya. Ven aquí.

—Alguien ayúdeme...— murmuro.








La hora de partir llego, y Onodera estaba saliendo dejando apartamento. En ese mismo momento, Takano hacía lo mismo.

—¿Te encuentras bien?— preguntó Ritsu a su novio.

—Un poco adolorido, pero todo bien— sonrió sobándose la mejilla,  y le dio un beso fugaz en los labios.

—Y-Ya, basta. Vámonos— dijo avergonzado y camino a paso rápido al ascensor.

El mayor se quedó viendo a su pareja por la parte de atrás, viendo cómo su cadera y trasero se movía de una forma muy seductora. Sonrió de satisfacción y dulzura.

—Todo valió la maldita pena— dijo con orgullo y felicidad.



_______________________________________________

Poquito largo pero eran tres parejas, muy divertido de escribir.

Esta broma fue pedida por @AnaSan0380

¡Espero que te haya gustado!

Voten y comenten que les pareció. Y gracias por su apoyo.

Si tienen alguna broma que quiere que escriba para ustedes, no duden en decirme en los comentarios.




Bye~

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro