Todos estaba mirándole, pero no eran miradas sobre algún chico nuevo, todos sabían quien era él, aunque tuviera ojos azules y cabellos rubios, tenía el mismo rostro y tamaño.

Estaba detestando el asunto.

Le tomó mucho el poder caminar, con la mirada como si no le importara nada, pero sus piernas habían temblado al dar el siguiente paso, cuando su suela tocó el suelo por primera vez, los abucheos y murmullos comenzaron.

"Pensé que también había muerto", "el novio del mutante", "seguro él igual es uno de ellos", "deberían hacer algo", "Jimin no era tan bueno después de todo", "que asco", "¿Por qué sigue aquí?"

Su paciencia estaba agotándose, pero no podía hacer nada como hizo durante la calle, no podía explotar los casilleros o lanzar rayos, sería tan obvio. Sus puños se apretaban en si, sus nudillos blancos, pero las puntas de sus dedos eran rojas. Joder.

Tan jodido.

Abrió su casillero, con calma tratando de ignorar a las personas, ¿por qué no tenía audífonos?,  debería. No los había ocupado antes, la música en sus oídos no le permitía escuchar a Jimin en su cabeza, cuando escuchaba música este le hablaba constantemente para molestarlo y poder hablar todo el tiempo. Jimin siempre en su cabeza. Ahora no estaba, no lo sentía.

No lo sentía. No había pensando en eso hasta ese preciso momento, desde que despertó no lo sentía en su cabeza, ni cerca de él, no estaba esa sensación de que estaba en alguna parte cerca de él. Como si la conexión se hubiese roto.

Adentró su mochila, cuidando la laptop de Jimin, sacó su libro de la primera clase y cerró, poniendo el candado y comenzando a caminar.

Ellos no se callaban.

Su paciencia se consumió al pasar cerca del casillero de su novio, escuchó risas cuando miró fijamente en esa dirección. La fotografía escolar de su chico estaba impresa y pintarrajeada, con cuernos, equis en los ojos y labios con rayas como si estuvieran cocidos, en el metal estaba tintado en rojo las palabras "freak" y "mutante", pero la que le saco de quicio fue "asesino". Caminó con ira, arrancando las hojas y escuchando risas más fuertes. Se giró hacia a ellos.

─¡Él no es un asesino!

─Mató a su abuela.

─¡Él no fue!

─¿Y tú como sabes? ─dijo aquella a quien todos odiaban. Pero ahora parecían apoyar de nuevo.

─Yo estaba ahí, él no fue.

─Entonces, tal vez fuiste tú  ─dijo uno, entre risas ─. Eso no le quita lo mutante a Jimin.

Su puño en nudillos blancos se estampó contra la mejilla del chico, Jungkook había descargado parte de su fuerza en él, haciendo que cayera hacia atrás por el desequilibrio, se sorprendió, pues la zona en la que golpeó había comenzado a sangrar, ¿tenía tanta fuerza o así es que era cuando golpeabas a alguien?, se movió hacia atrás, otro chico quería golpearlo y este esquivó a Jungkook, quien dirigió su puño a un casillero, abollandolo. Si, tiene fuerza, pero no salió victorioso, porque uno de los que estaban ahí empujó al ahora rubio y él sin perder del todo el equilibrio se lanzó contra él.

─¡Oh sí, seguramente fuiste tú!, voy a quitarte lo engreído, Jeon.

Jungkook rodó por el suelo con el tipo, subiendo su pecho mientras su puño viajaba a su rostro, fue tomado de los brazos y arrastrado hacia atrás, sostenido por dos chicos, mientras los agredidos por la furia del rubio se levantaban y caminaban hacia él. Fue un juego delicioso el turnarse para dañar al rubio, golpe tras golpe, en cara y estómago.

Hasta que Jungkook perdió la conciencia.

[...]

Se mueve incómodamente, le llegaba un olor a medicina muy intenso, su nariz cosquilleaba, le hacía sentir que tendría un ataque de asma aunque el último fue cuando la lluvia cayó y perdió de vista a su novio.

Abrió los ojos débilmente, pero dolían, la luz le lastimaba, reflejándose en todos lados por lo blanco del lugar. ¿Esto era el cielo?, no podía ser el cielo, cuando él muera y fuera al cielo -si es que iba- despertaría sobre el pasto, sentiría el agua en sus pies y miraría el extenso río, mariposas volando, Jimin a su lado. Sobre todo Jimin a su lado.

No era el cielo, era la enfermería, reconocía una fácilmente, había ido muchas veces a una debido a Eduardo y sus ataques de asma en su escuela.

Trató de sentarse, pero sus costillas dolieron, le habían pateado muy duro, ¿tenía algún hueso roto?, dolía como si así fuera.

Notó la voz alterada de su madre, la reconocería donde sea, se escuchaba fuera de ahí, estaba reclamando sobre su estado.

─¡¿Y dónde estaban los maestros?! ─gritó ella ─, ¡¿qué clase de lugar es este que se permite algo de este tipo?!, tuvimos una pérdida grandísima y ahora golpean a mi hijo casi hasta morir.

─Señora, está exagerando un poco.

─¿Exagerando? ─ese fue su papá ─, ¡¿ya vio a mi hijo?!, usted está completamente fuera de si, director. ¿Que cartas va a tomar en el asunto?, espero que implique la palabra expulsión.

─Señor, el joven Jeon le tiró tres dientes a un chico y casi le rompe la quijada.

Jungkook pudo sentarse, mirando la puerta, imaginando las expresiones de sus papás, no quería salir, no quería enfrentar la situación.

Se había acobardado totalmente.

Bajó de la camilla, que era más dura que el suelo, ¿cómo es que eso si quiera era posible?, su brazo rodeó sobre sus costillas, su ojo estaba hinchado, no podía ver bien de un ojo y apenas estaba siendo consciente de eso.

Entonces se preocupó.

¡Su sangre!

¿Le había salido sangre?

¡La sangre mutante es azul!

Caminó hasta un espejo en el lugar, miró su rostro y no habían rastros de sangre, buscó con la mirada algo filoso y al encontrar las tijeras cortó la palma de su mano. A medida que la sangre fluía fuera de la cortada, la sangre azul salía hacia afuera.

La puerta se abrió y se asustó, pero observó como rápidamente el color de su sangre cambió de azul a rojo. La sangre se adentró hacia la herida y está se cerró. En cuestión de segundos su palma no tenía nada.

─¿Jungkook? ─escuchó a su madre ─, ¿estás bien mi cielo?

El menor se giró lentamente, escondiendo su mano en su bolsillo y dejando las tijeras cuidadosamente en la mesa sin que nadie observara. Su padre, madre y el director ya estaban adentro del lugar, cerca de la puerta. Él se quedó en silencio un par de segundos, mirando el rostro de su madre lleno de preocupación, su padre era un reflejo de nervios y enojo, el director parecía preocupado.

Comenzó a escuchar: "¿Por qué no responde?", "No debí dejarlo venir" y "Que no demanden, que no demanden, por favor".

Juntó sus cejas confundido, porque ninguno de ellos había movido los labios, ¿eran sus pensamientos?

Rayos, hacia flotar objetos y encendía la luz, hacia explotar las cosas; podría resumir eso a control mental, mirada de águila, escuchaba cosas a distancia, tenía fuerza, cambiaba el color de su sangre, regeneración y control de ella, lee mentes. Hasta ahora, tenía diez poderes, si es que podía considerarlos por separado. De lo contrario serían ocho. Eran más de cinco. Cinco era el nivel máximo de un mutante común.

─¿Jungkook? ─su madre miró a su marido, asustada ─ ¿Por qué no responde? ─miró a Jungkook, parecía a punto de entrar en histeria ─¿Sabes quiénes somos, cariño? ─preguntó rápidamente ─¿sabes quién eres?

Se giró una vez más, mirándose al espejo, tocándose el rostro. Seguía igual, habían moretones, labio partido, ceja partida, algunas zonas las tenía hinchadas, su ojo morado e hinchado. Que mal se veía.

─¿Será una amnesia temporal? ─indicó su padre, alterando a su madre.

─¡¿Y si es permanente?!

La mente del director decia: Esto está mal, esto está muy mal. Van a demandar, ellos van a demandar.

─¿Jeon, puedes contestar? ─dijo el director.

Le convenía tener amnesia, si la tenía, entonces no tomarían en cuenta el hecho de que había sumido el metal duro de un casillero, los dientes con la quijada, su cambio de ojos, el color de cabello podían alaudirlo a un cambio de imagen, pero ¿quién iba a pensar en pintarse el cabello después del fallecimiento de un ser querido y que acusaron a su novio de asesinato además del hecho de que este era mutante?, se lo estaba pensando demasiado. El punto era desviar la atención hacia otro tema.

Su madre se acercó a él, no quería preocuparle, santo cielo, parecía a punto de llorar.

"Mamá, no hagas ninguna expresión, realmente no se si está funcionando el que me escuches o no. Tengo que fingir, te explicaré después, utiliza la palabra panqueque y casillero si me has escuchado". y luego quiso hacerlo con su papá en palabras más simples "Tendré que fingir, sigue la corriente de mamá"

Su madre le tomó el hombro, girandolo hacia a ella, le tomó el rostro cuidadosamente.

─Vamos a tu casillero por tus cosas, iremos a casa y te haré un panqueque, ¿sí, mi amor?

Él asintió lentamente, tomando la mano de su madre fue encaminado hacia la salida de la enfermería, la mirada severa de la madre sobre el director y una aún más fuerte de su padre el señor mayor.

─Si es algo permanente, escuchará de mis abogados ─dijo él ─, cambiando de tema, quiero la expulsión de los agresores. Sin excusas, sin pretextos. De cualquier forma, sabrá de mis abogados.

Se giró sobre sus talones, siguiendo a su hijo y esposa.

[...]

Jungkook se sentó en la mesa, señalando las sillas para que sus padres pudieran sentarse, sacó la laptop de la mochila y la encendió mientras los adultos con miradas de confusión tomaban lugar en la mesa. De repente, las cortinas de todas las ventanas se cerraron y todas las puertas igual.

El menor empujó la laptop hacia sus padres, girandola para que pudieran ver los documentos que estaban con el título "trabajo de ciencias" aunque en realidad era la recopilación de los registros de Jimin.

─La contraseña es la fecha en la que nos conocimos.

Se levantó de la mesa, corriendo a la cocina, sus padre tecleando la contraseña, ambos comenzaron a leer la información que les aparecía. Estaban impresionados. Eran meses de investigaciones, de avances y observaciones, redactados profesionalmente, como si su hijo fuera uno de los mejores investigadores del asunto y, tal vez,  así lo era.

El menor llegó, con un cuchillo en la mano, se sacó la sudadera y enrollo la manga, poniéndola en su boca, llamando la atención de sus padres. Tomó el cuchillo y lo puso al principio de su muñeca, comenzó a arrastrar el filo por su piel mientras ejercía presión, haciendo un gran corte y enterrando sus dientes en la tela mientras se quejaba.

─¡Jungkook! ─llamaron, levantándose de sus lugares, pero el menor soltó el cuchillo y mostró la palma de su mano, diciéndoles que todo estaba bien.

La sangre azul salió de su brazo, comenzando a escurrir, les mostró, señalandola mientras soltaba la tela. Ellos mostraron su confusión en la mirada una vez más.

La sangre cambió de color cuando Jungkook pensó en ser descubierto, después comenzó a escurrirse dentro de su cuerpo, cerrando la herida.

─La sangre de los mutantes es azul, siempre será azul ─tomó el cuchillo de nuevo, abriendo su palma y quejándose de nuevo, escurrió la sangre en su otra mano, cerrando el líquido azul en su puño. Comenzó a regenerar la herida de su mano, no dejando escapar el liquido de su otro mano. Cuando esta se cerró, mostró el liquido azulino a sus padres ─. Pero al parecer yo puedo cambiar su color. Tengo regeneración, tengo control mental, leo mentes y puedo hacer que me escuchen.

─Telepatia ─dijo su padre.

─Exacto. También tengo más fuerza de la que debería, puedo lanzar rayos y hacer flotar objetos. Hago volar cosas co  solo pensarlo. Papás, el nivel máximo de poder en un "mutante" es de cinco, cinco poderes y no más. Jimin era el único con más de cinco.

─¿Cuantos tenía? ─preguntó su madre.

─Muchos. La verdad es que estábamos investigando más. Íbamos en el setenta y ocho.

─Jungkook, ¿a que quieres llegar?

─Tal vez yo sea igual que él, tal vez tenga casi los mismos poderes. Habrán muchas cosas que investigar. Tan solo miren

Movió sus dedos en dirección a una planta, el rayo iría ahí, pero en su lugar chocó contra un metal y este fue directo a la lámpara en su cabeza, cayendo al suelo y asustandolo. Su camiseta se rompió cuando largas alas blancas se desplegaron detrás de él, tal como un Ángel, inmensas. Chocaron con varios muebles, tirando algunas cosas y haciéndole perder el equilibrio un poco.

─Eso es nuevo ─las señaló.

Evan: Y aquí, el final que mi amiga le dio a la historia.

entonces llegó batman y le dijo "wey si ubicas que eres un perro Dios" y el bato respondió "osea si wey pero que pedo crees que pueda ¿ir a coger con nam?" y batman dijo
"obvio si, obvio si"

y el bato cogio con Namjoon y murió feliz y desvirginado

SUPER FIN

Nada que ver con la historia, pero lo quería poner porque me reí mucho. Ella está loca.

Hoy subí video a youtube, se llama: dos maquillajes y una decepción amorosa.

Vayan a verlo y dejen comentarios lindos.

Los amo.

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Evan, fuera.