Mi fin de semana se puede resumir en una palabra: recuperación. Durante esos dos días Luna estuvo detrás de mí obligándome a beber de esa asquerosa poción mientras que yo centraba mi atención en cuidar a Seth, ya que prácticamente su estado actual fue por mi culpa.

En ese lapso de tiempo nunca estuve sola, en el día tenía a Luna y a Jacob cuidando de mi, donde Luna se dio cuenta que la cercanía de mi destinado era de gran ayuda para mejorar mi estado de salud, cosa que a Jake le agrado, pero esa felicidad se acababa en la noche, con la llegada de Rosalie y Alice exigiendo su turno para cuidarme.

[...]

El lunes llegó y yo me encontraba en perfecto estado, gracias al cielo la poción que Luna preparó fue la correcta y los efectos de la flor de fuego fueron curados casi en su totalidad, pequeñas marcas rojizas seguían en mi brazos pero nada que un suéter y la poción milagrosa —y asquerosa— no puedan curar.

Me encontraba en mi última clase del día, y yo solo deseaba irme a mi casa. Cuando la campana sonó, Jessica, Angela y yo salimos disparas del salón para caminar hacia nuestros casilleros.

—Pensé que esa clase nunca iba a terminar— se quejo Jessica

—No fue para tanto Jess— intentó animarla Angela

—Si, claro porque es super interesante escuchar como antes las cosas las resolvían con guerra y no con un simple piedra, papel o tijera— debatió Jess

—El piedra, papel o tijera pudo salvar vidas. Pienso que deberías ser presidenta, Jess— la apoye

—¿Verdad?

Angela simplemente negó divertida y las tres soltamos una pequeña carcajada por nuestros comentarios.

—Envidio a Alice— confesó Jessica

—¿Por qué ella no vino?— me preguntó Angela una vez que cerro su casillero

—Pidió permiso para faltar, hoy iba a hablar con alguien sobre los preparativos de la fiesta— conteste mientras las tres tomábamos camino al estacionamiento

—Confío en que si Alice prepara la fiesta será una noche increíble— dijo con entusiasmo Jessica

—Lo sé, estoy emocionada— la apoyo Angela

—Si, increíble— dije con menos ánimos de los esperados

—¿Algo va mal?— preguntó preocupada Angela

—No, es solo que en la mañana Alice me dejó en la escuela, y no traje mi carro, así que tendré que regresa a mi casa con Edward— dije con pesar

—O tal vez no— dijo con emoción Jessica

Yo sin entender su repentina emoción la mire, y ella solo me señaló un lugar en el estacionamiento, así que dirigí mi mirada al lugar que me indicaba y me encontré con una llamativa moto negra y un atractivo muchacho recargado en ella mientras me miraba a mi con una sonrisa.

—Retiro lo dicho, te envidio a ti— dijo en broma Jessica

—Nos vemos luego chicas— dije con rapidez

Feliz camine a paso apresurado hacia mi Jacob.

—Hola preciosa— me saludó él dándome un fuerte abrazo

—Hola guapo, ¿qué haces aquí?— pregunté entusiasmada

—Quería verte— confesó— además de decirte una noticia

—¿Qué pasó?— pregunté preocupada

—Sam ya tomó una decisión

La expresión de Jacob se tornó seria, y mi mente pensó en el peor escenario, donde los Quileute comenzaban una guerra con los Cullen por romper el tratado, pero esa paranoia se esfumó cuando Jake liberó una pequeña risa.

—Debiste ver tu cara— se burlo

—¡Ya me estaba mentalizando para la guerra!— me queje y eso generó más diversión en Jacob

—Lo siento— dijo después de reírse— Sam aceptó seguir con el tratado, solo con la condición de que si una situación similar se repite, los Cullen expliquen al principio lo que pasó y de preferencia pidan permiso para pasar.

—¡Hecho!— acepte

Aún más feliz abracé a Jacob, y él giró en su lugar aun sosteniéndome sacándome un pequeño grito de sorpresa, que luego fue opacado por la risa de ambos, pero nuestra burbuja se rompió cuando escuché unos pasos acercarse a nosotros.

—Hola— saludo tímidamente Bella

—Hola— respondió Jacob— Creí que estabas de viaje

—Si, visite a mi mamá ¿por qué?

—Tal vez vino a ver si sigues siendo humana— comentó sarcásticamente Edward

—Edward— lo regañe pero él me ignoró

—Te equivocas Cullen— dijo tajantemente Jacob— Solo vine a decirle a Alex que el tratado sigue en pie

—Espera —dijo sorprendida Bella— ¿Qué?

Jacob y yo miramos confundidos a el desconocimiento de Bella acerca del conflicto que hubo

—¿No le dijiste?— preguntó Jacob a Edward

—Olvídalo, Jacob

—Decime ¿qué?— preguntó pasmada Bella

—Mi familia tuvo un malentendido con los lobos, nada de qué preocuparse— respondió evasivo Edward

—¡Wow! ¿También le mentiste para sacarla de la ciudad?— preguntó molesto Jake

—Mejor vete, ahora— ordeno Edward pero Jacob lo ignoro

—Tiene derecho a saberlo, la pelirroja también la busca a ella si no lo haz olvidado

—¡¿Victoria?!— preguntó asustada Bella— La visión de Alice— recordó

—Trataba de protegerte— se excuso Edward

—¿Mintiéndome?

Jacob y yo nos alejamos sigilosamente de la pareja ya que empezaron a discutir

—¿Quieres huir de aquí?— me pregunto Jacob— Emily está haciendo hamburguesas

Jake me ofreció un casco y antes de poder responder una voz atrajo nuestra atención

—Lo siento Black, la brujita está reservada para esta tarde

Ambos giramos la cabeza y a unos 6 metros de nosotros estaban Jasper y Emmett recargados en un Jeep, observándonos fijamente

—¿Ahora me manejo por reservación?— pregunte con gracias a ese par

—Pues viendo que te eclipsaron todo el fin de semana, nos vimos en la necesidad de tomar estas medidas — dijo con dramatismo Jasper

—¿Saben que para hacer una reservación tiene que avisar con tiempo?— pregunte con obviedad

—Checa tus mensajes— comento con superioridad Emmett

Sin creerlo miré mi celular donde ciertamente tenía un mensaje de ese par diciendo. "No hagas planes, pasaremos por ti". Suspire y le mostré el mensaje a Jacob el cual solo se limitó a bufar.

—Vampiros: 1, Cachorros: 0— agrego divertido Emmett

Estuve a punto de comenzar a discutir pero Jacob tomó mi mano y me atrajo hacia él dándome un fuerte abrazo y un beso en la frente.

—No te preocupes, ve con ellos pero el viernes te reservo— comentó Jake riendo un poco— Los chicos y yo terminamos el semestre y ellos quieren hacer una fiesta en la cual obviamente estas invitada

—Bien, acepto— agregue con una gran sonrisa de tonta enamorada

—De acuerdo, te veo luego

Jacob subió a su motocicleta y sin más se fue de mi escuela. Embobada me quedé viendo el camino por donde se fue hasta que la voz de Jasper me atrajo nuevamente a la realidad.

—¿Qué fue eso?— dijo Jasper mientras tomaba una servilleta y comenzaba a limpiar mi frente

—Échale cloro— comentó Emmett observando lo que Jasper hacia

—¿Qué les pasa a ustedes dos?— pregunte confundida a ese par

—Te salvamos la vida — respondió con obviedad Jasper

—¿Sabes cuantas bacterias tiene la saliva de perro? — dijo Emmett "lógicamente"

Empuje a ambos lejos de mi y eso solo provocó que la carcajada que ese par contenía se desatara, ganándonos la mirada de las personas que quedaban en el estacionamiento pero no parecía importarles.

—Que divertida es la escuela, porque esto no paso cuando seguía estudiando aquí— dijo Emmett

—Con razón nunca te aburres— agregó Jasper

—Tienes de todo: romance, chisme, pelea de parejas— comentó Emmett mientras señalaban a Edward y a Bella quienes seguían discutiendo.

—Bueno, manos a la obras

Sin entender muy bien que quería hacer ese par me subí al auto con ellos, donde Emmett lo encendió para comenzar a manejar.

—Me pueden decir ¿qué haremos?— investigue

—Te daremos un tour por tu próxima universidad— respondió Jasper

—O esa es la versión que le dimos a Alice y Rosalie— comentó con gracias Emmett— en realidad haremos algo más divertido

—Los escucho— acepte curiosa

—Ayer pasaron por las noticias otro asesinato en Seattle— explico Jasper

—Y decidimos ir a investigar de una vez por todas— continuó Emmett— a que nos enfrentamos, si a vampiros o..

—A brujas— a complete entendiendo el objetivo de ese par

—Y pensamos que te gustaría acompañarnos— agregó con una sonrisa Jasper

—Que bien me conocen— reconocí

—¡Por fin! ¡Equipo dinamita en acción!— dijo con entusiasmo Drácula

Animado Emmett subió el volumen de la canción que estaba sonando en la radio, la cual fue The Nights de Avicii. Los tres emocionados por tener una aventura juntos cantamos a todo pulmón volviendo esa melodía en nuestra canción a partir de ahora.

[...]

Gracias a que Emmett manejaba llegamos bastante rápido a Seattle. Drácula manejo por unas calles hasta que Jasper le indico donde fue el ultimo asesinato, y encontrar el lugar no fue demasiado difícil, ya que era imposible no verlo.

Nuestro destino estaba rodeado por cinta amarilla que marcaba "prohibido el paso" además de que había un joven policía vigilando el área.

—Llegamos— informó Emmett

—¿Cuál es el plan?— pregunté

—Yo entraré y captare el aroma que encuentre en el lugar, sabré distinguir si el olor impregnado es de vampiro o de bruja— explicó Jasper

—Mientras tanto, Tu y yo, brujita nos encargaremos de distraer al policía

—De acuerdo, ¿cómo haremos eso?— pregunte

—Haremos lo unico que puede distraer a un hombre— dijo Emmett en un tono reflexivo— le coquetearas

—¿Qué?— dije pasmada

—¡Equipo dinamita en acción!

Sin darme oportunidad de protestar ambos vampiros bajaron del coche. Vi como Jasper sacaba de su chaqueta un pequeño frasco con un líquido transparente.

—¿De dónde sacaste eso?— pregunté a Jasper, a lo que él solo me respondió con un sonrisa— Tendré que ponerle un hechizo a la gaveta de pociones que deje en su casa

—Si, ni eso nos detendrá— alegó Emmett— que para todo eso ¿escogimos bien?

—Si buscaban la poción para ser invisibles, si, escogieron bien.

Emmett y Jasper chocaron palmas tan orgullosos como si hubiera encontrado la clave para terminar con el hambre mundial.

—¿Cuánto tiempo hará efecto?— pregunto Jasper

—Por la cantidad tiene unos 5-7 minutos

—Es lo único que necesito

Sin pensarlo demasiado, Jasper bebió de golpe la poción y esta no tardó en hacer efecto, haciéndolo completamente invisible. Emmett y yo caminamos hasta el policía tratando de poner en marcha nuestra parte del plan.

—Te recuerdo que tengo novio, no puedo coquetear con otras personas— le recordé a Emmett

—No te preocupes, no le diremos nada— se burló él— Todo sea por la misión

Quería huir de la escena pero Drácula, que me conoce bastante bien, tomó mi brazo y me llevó con él hasta quedar enfrente del policía.

—Buenas tardes— saludó Emmett— Disculpa la molestia pero mi hermana es un poco tímida, y ella se pregunta si le podrías dar tu numero de teléfono

Decir que me sonroje es poco, la cara me estaba hirviendo por la vergüenza que sentía, y esta aumentó cuando el policía posó su mirada en mí

—Lo siento mucho, pero...

—¿Es muy pequeña? Te aseguro que esta enana está llena de amor para dar— dijo Emmett como si fuera todo un cupido

—No es eso, es que ella no es mi tipo— comentó apenado el oficial

Drácula al verme tan callada, me dio un pequeño codazo en el brazo para que hablara

—¿Y como es tu tipo?— pregunte "interesada"

—Los tipos como tu hermano— respondió un poco sonrojado el oficial—Mucho gusto, me llamo Jackson— dijo extendiendo su mano a Emmett

Esa simple frase eliminó cualquier partícula de nervios que existía en mi ser, y lo sustituyó por alivio y un poco de gracias por el giro inesperado que hubo en nuestros planes. Pero a quien realmente tomó por sorpresa fue a Emmett quien se quedó completamente congelado ante la confesión.

—No te preocupes, no le diremos nada a Rosalie— le dije telepáticamente para molestarlo— Todo sea por la misión

Emmett me lanzó una mirada de reproche para luego aceptar el saludo de Jackson.

—Mucho gusto, mi nombre es Emiliano.

Justo cuando Emmett iba a seguir hablando, ambos sentimos como si una personas nos acariciara la espalda, de inmediato supimos que era la señal de Jasper para irnos de ahí.

—Lo siento mucho pero no le puedo romper el corazón a mi hermana de esa manera— se excusó él

Entendiendo su plan, fingí llorar un poco y Emmett me abrazó para "consolarme".

—Ya, ya, hay más chicos en el mundo— me "consoló" Emmett— pero ¿Qué se le puede hacer?, que culpa tiene Jackson de tener tan buenos gustos. Lo siento, que tengas un buen día.

Sin más Emmett me cargo mientras yo seguía "llorando" hasta salir de la vista de Jackson y encontrarnos con Jasper quien contenía sus ganas de reír al igual que yo.

—Ni una palabra de esto— amenazó Emmett

—Como digas Emiliano— respondió Jasper desatando una enorme carcajada entre él y yo.

—Los odio

[...]

Después de volver a nuestra casa —y recibir el regaño de Luna, Alice y Rosalie por ir a Seattle— Jasper le informo a todos que en realidad lo que hay en Seattle son neófitos.

Eso nos dio mucho que pensar, nos quitó preocupación y agregó nuevas. Todos debatimos cual iba a ser nuestro siguiente paso, y mientras eso pasaba yo fui a la cocina por un poco de agua, y antes de regresar con el resto Edward entró para hablar conmigo.

—Tienes una idea del problema que generó tu perro— preguntó con enfado

—Número 1: no es un perro, Número 2: es mi novio, Número 3: él no fue quien le mintió a Bella, y estoy 90% segura que él problema fue por la mentira— defendí con cansancio

—Bella no tenía porque saber eso— se justificó

—Sabes que estás equivocado, Bella merecía saber que Victoria estuvo por aquí.

—No, no tenía porque saber, ella tiene que tener una vida tranquila y normal como humana

—¡Basta, Edward!— dije harta—Su papá está saliendo con una bruja, su amigo de la infancia es un hombre lobo y su novio es un vampiro dramático. Claramente su vida dejó de ser normal hace rato

—Trato de que sea lo más normal posible, y que un lobo descontrolado este cerca de ella no es de mucha ayuda

—¿Te puedes oír por un segundo, Edward?— pregunte molesta— Nadie sabe cómo controlarse en su inicios, todos estamos perdidos. ¿Tienes una idea de cuántos accidentes provoque cuando recién comencé a usar la magia? Muchos, pero mis papás no me dejaron a mi suerte, ellos me enseñaron y justo eso estoy haciendo con los Quileute.

—Pero-

—Y te agradecería que no menospreciaras todo mi esfuerzo por ser la guía de los lobos. Si te detuvieras un poco a pensar, ellos no son muy diferentes a nosotros.

—Eso es imposible— respondió él

—¿En verdad? o solo son tus prejuicios que no te dejan ver con claridad las cosas.

Edward se quedó en silencio analizando lo que decía.

—No es mi culpa que tus prejuicios sean mayores que tu raciocinio