Harry seguía haciendo su maleta cuando el resto de la orden entró en la casa.

Deborah se apresuró a apagar su cigarro, pues no le apetecía escuchar las quejas de Lupin.

Se limitó a asentir con la cabeza a modo de saludo al resto de la orden mientras que Moody se acercaba a ella.

-¿Todo en orden Potter?

La morena asintió.

-Los Dursley están en el hospital con su hijo y Harry haciéndose la maleta.

Tonks aplaudió emocionada.

-Voy a subir a conocerle. ¡Remus ven conmigo!

El hombre asintió y siguió a la de cabello rosa escaleras arriba.

Moody la miró enfadado.

-No deberías haberte ido sin conoces antes el plan, ahora no tienes escoba con la que volver.

Debroah se encogió de hombros desinteresada.

Con lo mal que se le daba volar en escoba hubiera dado igual.

Moody procedió a explicarle el plan en lo que Harry, Tonks y Lupin bajaban.

Una vez todos estuvieron fuera de la casa. Tonks se hubo enfadado con Lupin por llamarla Nymphadora, causando que Debroah reprimiera una risa burlona.

Agitó la mano en señal de despedida al ver cómo se acomodaban en las escobas y Harry la miró confuso.

-¿No vienes con nosotros?

Moody se apresuró a contestar interrumpiendo la explicación que iba a dar la chica.

-Volverá apareciéndose, puesto que salió muy rápido de la base y ni siquiera escuchó el plan.

Harry sonrió divertido al ver cómo Ojo loco regañaba a su hermana, quien se limitaba a asentir desinteresada.

De un momento a otro Deborah ya no se encontraba allí.

***

Nuestra protagonista entró por la puerta de la mansión Black, siendo recibida por Lucy, quien esperaba en la entrada.

La morena suspiró al verla allí.

-¿No se supone que tú deberías estar arriba? Ahora mismo hay una reunión de la orden.

La Hufflepuff se encogió de hombros.

-Quiero recibir a Harry cuando llegue y pedirle perdón, seguro que está enfadado por no haberle escrito.

Deborah asintió molesta al recordar las estúpidas órdenes que Dumbledore les dio.

Sin más que añadir entró a la cocina, donde varios miembros de la orden charlaban.

Regulus asintió con la cabeza en su dirección cuando entró.

-Acaban de salir, no deberían tardar mucho en llegar.

Tras informar del estado actual de la misión se sentó junto a Regulus y prestó atención a la conversación.

Unos minutos más tarde, Lupin y Moody entraron a la habitación, siendo seguidos por Tonks, quien había tropezado con el paragüero, despertando así a Walburga Black.

Sirius se levantó a acallar a la mujer y a recibir a su sobrino, el cual daba palmaditas a Lucy en la espalda mientras ella se disculpaba.

Harry se rió mirando a su amiga.

-Está bien Lu, no estoy enfadado contigo.

La castaña asintió con una sonrisa y se separó de su amigo, dejando que él y su padrino se reencontraran.

Deborah observó la escena silenciosamente.

En todo el tiempo que llevaba conviviendo con Sirius no habían mantenido una conversación. Si bien ella no era muy buena con esas cosas, el hombre tampoco ayudaba.

Siempre se quedaba mirándola de manera extraña, como si hubiese visto un fantasma y más tarde se iba.

La chica observó como abrazaba a Harry y supuso que lo que tenía en su contra era personal.

Cuando Molly llevó a Harry arriba la reunión pudo continuar.

***

Tras decidirse que Hagrid iría a intentar negociar con los gigantes y que Tonks y Deborah irían a una última misión antes de que la menor comenzara el curso, la reunión acabó.

Una vez vio como Deborah y Tonks subieron a la planta de arriba, Regulus se levantó, dispuesto ir con Krecher.

-Regulus espera, ¿puedo hablar un momento contigo? En privado.

El hombre suspiró girándose hacia Lupin.

Había sentido la intensa mirada de el hombre en él desde que Deborah entró en la orden, por lo que suponía que aquel momento llegaría.

-Por supuesto Lupin, ven conmigo.

Dylan y Sirius se percataron del breve intercambio de palabras.

Pevensie se levantó y caminó hasta Regulus colocándole una mano en el hombro.

Ambos intercambiaron miradas.

Lo cierto era que los dos habían desarrollado una extraña amistad a lo largo de los años. Cosa que Regulus agradecía.

Dylan era su único amigo.

Regulus sólo asintió, indicando a Dylan que todo estaba bien y se fue de allí con Lupin detrás.

Ambos entraron a la sala de el árbol genealógico de los Black.

-Bueno, tú dirás Lupin.

El nombrado miró sus pies incómodo, antes de reunir valor y comenzar.

-Creo que es peligroso que Deborah haya entrado en la orden. No deberías haberla dejado.

Regulus miró a otro lado, algo irritado ante el comentario del licantropo, pero no dejó que se notara.

-Ella ya es mayor de edad y lo suficientemente responsable para decidir lo que hace con su vida.

Remus negó con la cabeza molesto.

-Tú eres su tutor legal y ella aún está en Hogwarts, podrías haberlo impedido y....

-Es que no quise impedirlo.

Interrumpió mordaz Black.

-¿¡No ves que la estás poniendo en peligro!?

Regulus rodó los ojos y extendió sus brazos a los lados para acentuar sus palabras.

-¡El hombre que intentó asesinar a toda su familia ha vuelto! ¡Ella está en peligro de todos modos!

Remus gruñió furioso.

-¡No lo entiendes Regulus! ¡No comprendes lo que es estar a este lado de la guerra! ¡Tú eras un mortífago!

Unos segundos de silencio le siguieron a ese comentario, el los que Remus se arrepintió de lo que acababa de decir.

-Si tienes razón Lupin fui un mortífago.

Dijo en un tono de voz bajo, pero igual de amenazante que antes.

-Fui un mortífago y no soy idiota. Sé lo que piensas, sé lo que muchos de la orden piensan. Dicen que soy un peligro para Deborah, que podría traicionaros y entregarla a Voldemort, que yo la influencié para entrar en Slytherin....

Lupin bajó la cabeza avergonzado.

-Pero te diré una cosa, yo tenía 19 años cuando adopté a Deborah. No tenía ni idea de lo que era ser padre y cometí muchos errores. Pero la crié mejor de lo que nadie habría podido, ¿Sabes por qué? Porque fui el único que no huyó.

Remus alzó la mirada dolido, recordado aquel día en el ministerio.

-No podía hacer nada, nunca hubieran dejado que ella se quedara con un hombre lobo.

Regulus negó con la cabeza.

-No me refiero a eso Lupin. Después de adoptarla tú venías a verla todos los jueves salvo en los de luna llena. Pero un día te fuiste para no volver.

Remus volvió a negar.

-Yo no.... No quería hacerle daño.

Regulus soltó una risa irónica.

-Pues se lo hiciste. ¿Y sabes quién estuvo allí para consolarla? Yo, no tú, ni Sirius ni el resto de idiotas que cree que hice un mal trabajo. Si quieres cuestionar mi forma de cuidarla, háblame cuando hayas pasado 14 años con ella sin huir como el cobarde que eres.

Lupin bajó la cabeza avergonzado.

-Deborah es un miembro de la orden y una de las mejores. Aprende a vivir con ello.

Y tras eso Regulus salió de la sala, cruzándose con Sirius en el camino, quien había escuchado todo.

-Ve a consolar a tu amigo, es el bando que siempre escoges.

El mayor de los Black frunció el ceño, dolido por las palabras de su hermano.

Pero a este no podía importarle menos.

Cuando llegó al salón observó como los Weasley, Pevensie, Potter y Hermione se sentaban en la mesa.

Miró a en dirección a Deborah, quien le susurró algo al oído a un decaído Edmund.

El chico al escuchar las palabras de su amiga, sonrío levemente para luego asentir.

Regulus imitó el gesto del chico.

No importaba lo que el resto opinara. Él había hecho un gran trabajo.

¡Hola!

Este capítulo ha sido una pelea de gatas jajajajj.

¿Con quién estáis de acuerdo?

¿Entendéis el punto de vista de ambos?

¿Cuál ha sido vuestra parte favorita?

Os leo!