(¿Recibieron notificación?)

El salón de LuHan era de los últimos en salir, por lo que al hacerlo ya había un grupo acumulado de estudiantes a la entrada del edificio. No le tomaba mucho trabajo encontrar a YiFan entre todas aquellas cabezas inquietas, después de todo no era común ver a alguien tan alto y su reciente cabello rubio resaltaba demasiado.

Yifan no había faltado a su promesa en casi un año completo, ni un solo día. Eran raras las ocasiones en las que se atrasaba y cuando ocurría, no tardaba más de diez minutos en estar ahí. Y era por eso que aquel día martes LuHan se encontraba tan inquieto.

Eran finales de junio, LuHan salió del plantel junto a sus amigos. KyungSoo los había invitado a todos a comer en su casa pero como tenía planes de ir por helado con su novio, se vio obligado a rechazarlos y terminaron por despedirse a los pies de las escaleras. El chico tomó asiento en una orilla del último escalón, no había rastros del mayor pero aún no era tiempo de preocuparse. Así transcurrieron los minutos, el cielo se comenzaba a nublar y tuvo que rodearse con sus propios brazos puesto que solo lo cubría una camisa de tela ligera y delgada.

El lugar poco a poco se iba despejando, cada vez había menos personas y YiFan seguía sin llegar. Comenzaba a impacientarse, a cada instante revisaba la hora en su teléfono. Tenía casi treinta minutos de retraso.

Por un instante la idea de marcharse lo sacudió, pero se obligó a quedarse allí sentado y esperar un poco más.

"Quizá solo se atrasó", pesó apretando su teléfono móvil contra el pecho mientras se mordía el labio. "O tal vez lo olvidó".

Se percató de que estaba lloviendo cuando una gota impactó en su nariz. A ella le siguieron muchas más y su cabello no tardó en quedar húmedo, al comprobar la hora supo que habían pasado cuarenta minutos y no tenía caso seguir esperando. Se iba a levantar para ir a casa cuando la lluvia dejó de mojarlo y una silueta se posicionó frente a él. Pudo escuchar respiraciones aceleradas y jadeos, al levantar la cabeza vio a YiFan parado frente a él sosteniendo un paraguas sobre su cuerpo. Por sus acezos parecía que había corrido todo el camino hasta allí.

—Sigues... aquí —murmuró con la voz ronca y se inclinó hacia delante para tocar sus rodillas por un momento mientras se recuperaba de la afanosa carrera.

—¿Por qué llegas hasta ahora? —preguntó el menor intentando mantenerse calmado. Recién se daba cuenta de que estaba empapado.

—Lo siento —YiFan le mostró una sonrisa reluciente y suspiró—. Tuve examen de álgebra ¿sabes lo difícil que fue? Creí que no saldría del salón nunca.

El más alto le ofreció su mano para ayudar a que se parara. Aunque un poco dudoso LuHan lo terminó aceptando y en cuanto estuvo de pie se lanzó a los brazos del chico.

—Idiota, pensé que no llegarías —sollozó—. Si me enfermo será culpa tuya ¿me oíste?

YiFan asintió con una expresión divertida y secó sus mejillas con los pulgares antes de dar un beso en su frente.

—Si enfermas asumiré mi responsabilidad y te cuidaré todo el tiempo —dijo—. ¿Aún quieres ir a comer helado con este clima? No creo que sea muy conveniente.

—No. Vamos a la casa de KyungSoo, seguro les quedan algunas sobras de la comida que hizo.

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Kim JongDae, al contrario de lo que la gente suponía al conocer su extrovertida personalidad, era un fanático del orden. Le gustaba cada cosa en su lugar, el tapete de la entrada bien posicionado y limpio, las sillas debajo de la mesa, los cojines del sofá acomodados y sacudidos, y la cocina pulcra. Quizá por eso Kim MinSeok le pareció un candidato perfecto para compartir apartamento, sin mencionar que asistían a la misma carrera en la misma universidad.

Se llevaban bien desde que se conocieron, pero al ser compañeros de piso comenzaron a volverse cada vez más cercanos. Para ambos era bueno, pero había una tercera persona que poco estaba de acuerdo. Ese era JunMyeon.

Cada vez que visitaba a su novio en su nuevo hogar, no podía evitar fijarse en la manera informal en que se trataban. Ante los ojos de cualquiera esa podría asemejarse a una relación de hermanos, pero no a los de él.

Con el paso de las semanas dejó de visitarlo, la razón residía en el peso que se instalaba en su pecho cada vez que veía a su novio convivir de aquella forma con alguien que no fuera él. Sabía que probablemente estaba siendo irracional y sabía también que si JongDae no le había pedido a él compartir su apartamento, era tan solo porque sus universidades quedaban alejadas una de la otra.

Y un día, mientras el agua de la regadera caía sobre su cabeza y su mente divagaba, se le ocurrió una pésima idea que sin embargo en aquel momento le pareció excelente.

Fue así como comenzó a frecuentar a YiXing. Habían pasado meses desde la última vez que se vieron, pero aún conservaba su número a pesar de no utilizarlo. La primera vez que se encontraron fue en una cafetería. Charlaron un poco acerca de sus vidas pero nada más, aunque esos eran sus planes. No pretendía engañar a su novio, solamente quería hacerle sentir lo mismo que él sentía.

Mientras conversaban y consumían sus bebidas calientes en una de las mesas junto a los ventanales, su teléfono móvil sonó y se disculpó con su acompañante para contestar.

—JongDae, hola.

—Cariño, ¿quieres venir a casa? Están transmitiendo en televisión la película que tanto nos gusta —se oyó la emocionada voz del otro lado de la línea.

JunMyeon sintió su mano temblar ligeramente, parecía que algo dentro de él gritaba que estaba haciendo un acto indebido, aun así se obligó a responder.

—No puedo amor, estoy con un amigo.

—¿Un amigo?

—Sí, con YiXing —respondió dándole una mirada al chico que se hallaba sentado frente a él, quien al notarlo le sonrió.

—Oh, bueno, adiós entonces.

JongDae colgó después de recibir aquella información. Irremediablemente se sintió mal, pero de nuevo su egoísmo salió a la luz y pensó que era lo que el chico se merecía. Tan solo le estaba dando el mismo trato que según él recibía.

Escenas como esa se repitieron algunas veces más. JunMyeon intentaba pararlo, pensaba que ya había hecho lo suficiente para enseñar una lección a su pareja, sin embargo un día estuvo casi obligado a verse con YiXing puesto que este cumplía años.

Compró un pequeño obsequio en una tienda de regalos de camino a la cafetería. Al llegar al lugar se asomó por el vitral y alcanzó a divisar a su amigo sentado en una mesa para dos. Le pareció extraño porque creía que asistirían más personas. Entró al lugar y fue a su encuentro.

—Feliz cumpleaños —dijo una vez sentado delante de él y con una sonrisa colocó el obsequio sobre la mesa. YiXing sonrió.

—Gracias, lo abriré más tarde.

Poco después encargaron pastel y café para comenzar a comer. Hubo un momento en el que YiXing se manchó una mejilla de crema pastelera de chocolate y él chico lo señaló.

—Te ensuciaste ahí.

—¿Dónde?

—En la mejilla.

—¿Aquí? —preguntó YiXing deslizando su dedo sin lograr limpiarse.

—No.

—¿Me ayudas?

Un poco aturdido él asintió y acercó para retirar la crema de su rostro, pero entonces fue tomado por sorpresa y unos labios se posaron sobre los suyos. Al alejarse por completo asombrado y un poco molesto, vio en el chico una sonrisa que le hizo creer que algo no muy bueno sucedía.

Y tenía razón, ya que al girar la cabeza se encontró con su novio, quien los miraba entre enojado y decepcionado.

—Gracias por venir, JongDae —dijo YiXing con burla y todo lo que deseaba era estrangularlo.

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Este es el primer especial de la segunda temporada, lo que significa que habrá más. Recuerden que El Suchen aún vive. <3

No quiero hacer esto demasiado largo, son probablemente 10 capítulos o menos. Sobre la secuela de iridiscente (que por cierto, me alegra tanto que hayan aceptado tan bien la noticia), comenzaré a escribirla desde ahora para que cuando comience a publicarla tener ya algunos capítulos adelantados.

A la puerta azul solo le falta la última parte, por si quieren pasar a leer.

En "KaiSoo en Wattpad" queda un poema solamente, sin embargo luego de eso vienen los especiales que planeo subir en un maratón, todos el mismo día o en dos.

"Bajando una estrella del cielo" me está costando un poco porque tengo dos opciones para seguir la trama, si la están leyendo, les digo desde ahora que habrá drama. ;u;