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-El bebé está en una buena posición, su sistema está casi completo. Sus pulmones ya están casi completamente formados y sus huesos se han ido endureciendo pero todavía son muy flexibles, incluidos los de la cabeza. Su cráneo todavía no está completamente cerrado, lo cual le permitirá adaptarse con mayor facilidad al canal de parto.

Indicó el doctor Vincent, a través de la ecografía

-Sus pulmones aún están en la última etapa de desarrollo, pero fuera de ello todo está en orden.

Apagó el monitor para ajustarse las gafas y ver a su paciente

-Esta es la etapa que yo llamo "Riesgosa", ya que a partir de las 32 semanas existe el riesgo de que el embarazo no consuma las 40 semanas como tal.

Tn se sintió alarmada ante aquella advertencia repentina

-Cada semana es crucial para el desarrollo completo de tu bebé, mientras menos tiempo se acorte ese plazo, tienes más posibilidades de que nazca sano y preparado para vivir y respirar fuera de la placenta.

-¿40 semanas?

-Podría ser menos, pero depende de ti ahora estar en absoluto reposo.

"Cada día cuenta a partir de ahora..."

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[ 34 semanas de gestación ]

Al volver a casa, Tn miró los escalones de la entrada con algo de preocupación. A partir de ahora era una cuenta regresiva de seis semanas

Y corría con el riesgo de nacer antes de terminar su desarrollo vital. La primeriza abrazó su vientre, su cuerpo estaba comenzando a prepararse para ello, incluso sus pechos habían comenzado a crecer

No estaba del todo segura de cuanto tiempo le quedaba antes del gran día. Pero si era necesario, sería lo más cuidadosa posible hasta ese momento

"Solo debo aguantar 6 semanas más..."

"6 semanas y nacerá sano."

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A partir de ese día, Tn guardó reposo absoluto en cama; rodeada de un nido de almohadas y mantas que había hecho para sentirse comoda y calentita. Con el control de la tele a su completa disposición y la laptop a un lado de la cama, se entretuvo los primeros días viendo series, leyendo libros o navegando en internet. Durmiendo y comiendo la mitad de ese tiempo claro

Oliver por su parte armó la cuna junto al espacio libre en su recámara y le puso un cobertor para protegerla del polvo

Le hizo un lugar a la pequeña esterilizadora de teteros que había adquirido recientemente, en la cocina y finalmente se ocupó de armar la pequeña pañalera que les regaló Emma con todo lo necesario para el gran día

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A partir del cuarto día en cama comenzaba a odiar la idea de guardar reposo, de tanta actividad infructífera, los músculos le pesaban y en cierto punto dolían. Lidiar con el calor fué odioso y recoger su cabello se hizo una costumbre

Tomar una ducha regularmente y mantenerse depilada fué una tarea horrible. Pero últimamente había visto tantas películas de embarazo y bebés, que luego de ver Plan B; vivió con el terror de pasar vergüenzas en la sala de partos

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Oliver consigió un par de semanas libres para descanzar, por días de jubilo constitucional, además de ello tenía suficientes ahorros para respirar unos días del trabajo. Lo que le permitió tomar un descanzo y quedarse con Tn en casa

La cual había pasado las últimas noches hablando sobre sus nervios por que todo saliese bien y el bebé completase las 40 semanas

Estaba angustiada y no podía distraerla o convencerla de lo contrario. Por lo que para darle un día de descanzo, propuso la idea de ir a casa de sus padres y visitar a los ansiosos futuros abuelos

El extraño sentido de humor de Yugo había funcionado bien para animar las cosas durante las últimas semanas

-¿Estás seguro de que es buena idea?

Indagó ella, recogiendo su cabello en una coleta alta para luego ponerse algo de balsamo en los labios frente al espejo

Oliver se acercó a su espalda y la rodeó con sus brazos por la cintura, llevando sus manos a la parte baja de su vientre para sostenerlo unos segundos

-Todo estará bien.

Tn se sintió reconfortada por aquel gesto, comenzaba a gustarle la idea de que Oliver tuviese un sexto sentido paternal. Así que luego de tomar algo de valor, decidió escucharlo

Quedaban casi 5 semanas de gestación, después de todo

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Era un día soleado cuando cruzó las puertas del complejo departamental, Oliver la ayudó a bajar las escaleras y luego se adelantó del otro lado de la calle para encender el auto. Todo lo que tenía que hacer era avanzar cuando mucho once pasos

Entonces fué cuando un leve mareo-escalofrío le hizo pensar que algo estaba mal

Tn respiró, ignorandolo y pasándolo por alto como síntoma común de la baja espontánea de presión, avanzó los primeros tres pasos y esa molesta sensación no parecía haberse ido

Cuarto paso, algo definitivamente estaba mal

Quinto paso, estaba al borde de la asera cuando su mente entró en estado de alerta. Y al levantar la mirada para enfocar a Oliver sintió que su presión descendió

Escuchó voces de un par de personas cercanas y lo siguiente que pasó fue que su cuerpo perdió el equilibrio y se impulsó hacia adelante, donde un par de brazos la sugetaron en el momento que sus rodillas desnudas por el vestido, chocaron contra el pavimento de la calle, ocasionandole un agudo raspón leve acompañado de dolor

Miró hacia arriba e identificó el rostro su pareja hablandole en un idioma que no entendía, cuando sintió el líquido caliente salir a chorro desde su entrepierna, en medio de la calle. Frente a todos

Su mente volvió en si y su cuerpo entero perdió el calor, estaba pasando. Estaba a punto de dar a luz

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De pronto estaban en el auto, Oliver estaba hablando por teléfono, con una mano al volante. Severamente preocupado

Tn sentía el dolor punzante ir y venir en sus caderas, abriéndose paso sin llegar a su entrada. Apretar su vestido o el soporte de seguridad no era suficiente

En un vago estado de lucidés por la ansiedad del momento, se dio cuenta de que su acompañante ahora estaba hablandole directamente a ella, pero su cuerpo solo temblaba y se resbalaba del asiento con sumo miedo

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Las contracciones empezaron al entrar en los estacionamientos de la clínica, al principio como un dolor angustiante y luego de salir del auto y ver a la enfermera Barbara y otra residente correr con una camilla de emergencias hacia ellos

Oliver soltó su cinturón de seguridad y echó hacia atrás su asiento para poder ayudarla a salir y apoyarla sobre la camilla antes de ingresar a la clínica

Las voces a su alrededor, la enfermera fastidiosa insistiendo una y otra vez por que guardase la calma mientras su cuerpo se preparaba para dar a luz. Las luces blancas del pasillo y la camilla siendo empujada hacia la sala de partos fuéron los últimos momentos en que sintió su cadera separarse en medio de infernales contracciones

No vió esperanzas una vez que vió al doctor Vincent ponerse el uniforme de quirófano y los guantes, su cerebro conectó los hilos faltantes. Su corazón se llenó de miedo cuando sus piernas fueron levantas para apoyarla en una silla de partos y ser despojada de sus bragas

-Muy bien, Tn. Necesito de tu completa disposición ahora.

El doctor Vincent se abrió paso entre sus piernas para subir el vestido y limitar su campo de vista

-Necesito que regules tu respiración y a mi señal comiences a pujar con toda la fuerza de tu cuerpo.

La morena negó frenéticamente, por instinto

"¡Aún es muy pronto!"
"¡Faltan 5 semanas!"

Sintió un par de toques en su entrada y vientre. Las enfermeras se mantuvieron a su lado para asegurarse de que estuviese sobria en todo momento

Fué cuando el doctor dió la señal

-¡Ahora!

Cerró los ojos con fuerza y se entregó al miedo, dejando que este tomara la fuerza natural de su cuerpo, siendo invadida por un inmenso dolor que la hizo apretar los dientes y sentir que quería desplomarse y llorar durante un largo proceso que acabaría con toda su estabilidad muscular

Gritó, lloró y sufrió recibiendo ordenes y apoyo emocional en labor de parto, pero sencillamente no era suficiente para recuperar la sensibilidad en las piernas y adivinar qué estaba pasando del otro extremo de la silla

Sintió que su cuerpo ya no resistiría más e hizo un último esfuerzo hasta sentir que algo se deslizaba entre sus piernas

Las lágrimas inundaron sus ojos y de inmediato quiso ver lo que pasaba, cuando el doctor dejó de verla y de inmediato las enfermeras se situaron a sus costados para operar

Solo había algo que la torturó psicológicamente desde el momento que tanto doctor como enfermera a cargo avandonaron la habitación

Tn no escuchó un solo ruido en señal de llanto

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