Pov's narrador.

¿Cómo te sentirías si estuvieras en el lugar de un joven de 16 años que se ha dado cuenta de tantas mentiras en un pequeño margen de tiempo? No digo que su historia sea la más trágica que existe, hay historias peores, como también las hay mejores, pero no todos reaccionamos de la misma manera a nuestros problemas, esa es otra de las tantas diferencias de las personas y una de las características personales más significativas: la forma en la que responden los problemas. Deican todavía no ha vivido ni la mitad de la supuesta "vida" que tiene por delante. Es muy joven aún para reaccionar de forma más madura al asunto. Todavía es considerado un adolescente, todos sabemos lo que trae consigo esa etapa de cambios, y representa una de las etapas más importantes de la vida, junto con la niñez, son las dos etapas que marcan el resto de tu vida. Solo debes saber que pasos vas a dar, que tan buenos pueden ser y las consecuencias que traen, pero nadie tiene un manual sobre como debe tomar las decisiones. A veces tus decisiones no son las mejores y no puedes ver todas las consecuencias que eso trae hasta pasado un tiempo; y simplemente te preguntas porque lo hiciste, algunas de esas decisiones fueron tomadas por una estupidez o un impulso egoísta. Por eso Deican debe pensar, debe ser prudente para pasar por esta pista de obstáculos que es la vida, y quizás, solo quizás llegar vivo a la meta.

Pov's Deican.

¿Por qué? A veces solo me pregunto eso, una explicación. Saber por qué pasan todas estas cosas que me han ocurrido. ¿Por qué mis padres me abandonaron? ¿Por qué los adoptivos no me trataron bien? ¿Por qué todos me mienten? ¿Por qué de a poco he perdido personas importantes en mi vida? Son respuestas que no voy a tener ahora mismo, o si las tengo puede que no sean las que esperaba. ¿Qué hago? ¿Cómo debo reaccionar a esto? Prometí no volver a pensar en esto pero mi mejor amigo está muerto, mis mejores recuerdos fueron con él y prácticamente yo lo llevé directamente a su muerte. Ahora me viene Kyra con esto de que también es un demonio, solo se acercó por una misión, yo que pensé que había encontrado alguien en quien confiar. No puedo dejar de pensar en lo que viene después

   <<Deja de distraerte.>>

   —Claro, para ti todo lo que tiene que ver con sentimientos no es más que una distracción porque eres un demonio y no tienes corazón — espeto molesto. En momentos como este lo que menos necesito es alguien en mi mente hablando mierda. En respuesta a lo que digo una fuerte carcajada resuena para mis adentros.

   <<Que estúpidos son ustedes los humanos ¿qué les hace creer que los demonios no tenemos corazón? Eso no es más que otra ilusión de la mente humana.>>

   —Si como no — ahora soy yo quien río — Claro que tienen sentimientos: la maldad, la envidia, la lujuria.

   <<Si desde que naces te inculcan eso, lo primero que tienes que hacer es supuestamente castigar a un pecador, te inculcan la maldad y te tratan como un monstruo, tarde o temprano te conviertes en uno.>>

No respondo. En eso tiene razón, si tratas a las personas como monstruos desde que nacen se creerán que lo son, lo que en este caso son demonios.

   —¿Cómo nacen los demonios? — es una duda que siempre había tenido.

   <<Hay muchas formas de que nazca un demonio, los demonios originales, los que solo existen para castigar nacen cuando tienen un pecador al que castigar, algunos son creados por los sentimientos oscuros de los humano, otros son ángeles caídos, otros nacen de relaciones entre demonios, ángeles y.... humanos.>>

   —¿Humanos?

   <<Si humanos, a veces hay mujeres que pueden soportar un embarazo demoníaco.>>

   —¿Por que nunca he escuchado de posesiones reales y no estupideces?

   <<Ocurren, muy a seguido, causan grandes desastres, pero existe una organización. Los cazadores de demonios, se encargar de acabar con las amenazas y de mantener al margen a los demonios expulsados del infierno. También borran la memoria a los humanos.>>

   —¿Debo considerarlo un problema? —si son cazadores y ahora tengo un demonio dentro y planeo una venganza sangrienta puede que vayan a por mí.

   <<Por ahora no, mientras no causes grandes estragos no, tienes que matar a mucha gente o intentar algo así como para que estés en su lista. Pero dejemos la clase de lado y empieza a centrarte en lo que es importante.>>

   —¿Mi venganza?

    <<¿Qué más iba a ser?>>

Ruedo los ojos. Ezequiel tiene razón, estoy muy distraído de mi objetivo principal, vengarme de Giovanni, su muerte será lenta y dolorosa.

Una semana después.

Las nubes oscuras cubren el cielo con su espeso manto, privandonos de la luz del sol. Hemos decidido seguir con el plan inicial. Seguir cada uno de los pasos del enemigo. Lugares a los que va, personas a las que visita, dobles vidas.

   —¿Qué curioso no? ¿Cómo una persona tan buena pudo terminar de amante de una persona como él? — sus lágrimas salían sin control.

   —Deja de ser tan idiota — regaña Kyra a lo que respondo con una sonrisa de suficiencia.

   —Yo soy como yo quiera tu concéntrate en tu misión. Guardiana — le respondo mientras paso la punta del cuchillo por la cara de la joven, sin cortarla, suficiente para ver como el miedo la controla por completo — ¿Me pregunto si esto es lo que sintió Dean? — hago como que estoy pensado  — Pues no, a mi mejor amigo lo torturaron hasta la muerte ¿reconoces el nombre? Debería hacerte lo mismo que le hicieron a él, parte por parte — miro a mi "guardiana" y pone los ojos en blanco.

   —Ya casi es hora — me avisa sin dejar de mirar por la ventana en espera del mafioso.

   —Te voy a dar un hermoso regalo, pero no le puedes decir nada a nadie ¿claro? — asiente una y otra vez sin dejar de llorar — Mira. Si quieres vivir tienes que recibir a tu amante como si nada pasara. Si haces exactamente lo que digo vivirás y no te preocupes que él tampoco morirá, no ahora ¿vale? — le quito la cinta de la boca — shhh. Seca esas lágrimas.

   —Ya llegó — apuntó el arma a su cabeza mientras Kyra se esconde a un lado de la puerta y yo a otro.

   —Vamos — hago una seña con la cabeza para que camine. Tocan la puerta. Giovani ya está aquí.

   —Hola bebé. Pasa, te tengo una sorpresa — el viejo barriga verde ese entra y le da un beso. Kyra me hace la señal. Escondido detrás de la cortina, donde permanezco, busco entre mi ropa la cervatana, apunto al cuello de la joven y disparo el pequeño dardo envenenado. La joven hace una mueca de dolor y saca el dardo de su cuello.

   —¿¡Quién está aquí!? — Giovani grita, y es el momento en el que Kyra sale y apunta con el arma en la cabeza del viejo.

   —Hola Giovani ¿Cómo estás? Hace mucho que no te veía — saludo mientras miro el reloj, dentro de poco la toxina comenzará a hacer efecto y morirá.

   —Ya veo —sonríe — esto es un ajuste de cuentas.

   —Descubriste el agua tibia — se mofa la demonio. El dardo está infectado con la batracotoxina, esta impide la transmisión del impulso nervioso hacia los músculos, lo que produce una hiperexcitabilidad de los tejidos nervioso, muscular y cardíaco, seguido de convulsiones, parálisis y muerte. No tiene antídoto y todo eso ocurre antes de los 10 minutos. La joven se lanza al suelo. Ya comenzaron las convulsiones. Giovani se lanza al suelo y la agarra mientras me dirige una mirada asesina.

   —¿Qué le haz puesto? —pregunta desesperado.

   —Si de algo sirve yo no quería hacer estos, tu involucrarte a personas inocentes y yo solo seguí tu camino. Tu amante tiene batracotoxina en su sangre, después de las convulsiones llegará la parálisis y después la muerte — explico. Es muy simple. Ojo por ojo, diente por diente.

   —Voy a matarte — carcajeo.

   —¡Qué curioso! Es exactamente lo mismo que voy a hacer — sigo riendo, la joven ya está dejando de convulsionar ahora viene la parte final, la parálisis. Es una muerte rápida y dolorosa, distinta a la que le tengo preparada a él — Esto solo acaba de comenzar, tu muerte será lenta y dolorosa, suplicarás por tu muerte.

   —¿Sabes cuantas personas han dicho lo mismo? — suelta a su amante que ya ha muerto — todos están muertos y tu serás uno más — algo muy extraño comienza que ocurrir, la cara de Giovani se distorsiona. Y siento un disparo. La sangre del viejo empapa mi rostro.

   —¿Por qué lo haz hecho? Ese no era el plan — la regaño molesto. Lo ha matado, no es justo, yo quería matarlo.

   —Algo anda mal, cállate y observa — nuevamente de mis brazos sale esa nube oscura que salió antes, nos cubre por completo y luego nos mueve hasta ¿la pared? O algo así. Estamos como en otra dimensión  dentro de las sombras, lo vemos todo pero al parecer no nos ven. Es extraño. No sabía que Ezequiel podía hacer eso.

   <<Ya te enseñaré a controlar mis poderes a tu antojo.>>

La herida que había dejado la bala al atravesar el cráneo del mafioso comenzaba a curarse lentamente. Mi boca estaba abierta, en una perfecta "O" reflejando mi sorpresa.

   —¿También es uno? — susurro a mi amiga.

   —Es lo que imaginé. No es un demonio pero si tiene un trato con uno, con razón ha durado tantos años a cargo. Es inmortal. Hay que matarlo de otras maneras, una simple bala no te hará ningún daño — con que esas tenemos.

   —Pero yo tengo un demonio y tu eres uno, será fácil matarlo — trato de salir de las sombras, sin embargo mi guardiana me lo impide.

   —No, mira su cuello — hay un signo marcado en rojo sangre que no había visto antes — el demonio con el que hizo un trato tiene más años que yo. Es extremadamente poderoso. No podemos vencerlo, no ahora, vamos.

   —No quiero, no es justo, tengo que matarlo — siento como mis ojos cambian, es diferente ahora veo las cosas diferentes y en mi crece una necesidad de matar que jamás había experimentado.

   —Detente. Detenlo — contra mi voluntad las sombras me mueven hacia algún lugar. Como si estuviera flotando llegamos a mi casa. ¿Teletransportación?

   <<Puedo hacer prácticamente todo.>>

Las ganas de matar no han disminuido. Cass está en la sala, y solo siento su corazón latir y en mi mente solo vienen imágenes de su cuerpo mutilado. ¿Qué me pasa? De mis manos salen garras, mi corazón se acelera y mis sentidos se agudizan. Puedo sentir como la sangre se mueve através de sus arterias y venas. ¡No¡

   —Para Deican, relájate o la matarás, respira — no puedo, ni siquiera puedo hablar, es como un instinto, no me deja pensar en nada más no me deja hacer nada más. Matar, matar, matar. Siento como algo me pincha los labios, paso mi lengua y siento unos grandes y afilados colmillos. Detenme ,Ezequiel, detenme. Y me lanzo a correr como una bestia tras su presa. Kyra me envuelve en llamas ¿controla el fuego? Por un momento la luz me ciega y retrocedo unos pasos. Aún así no me detuve paso por el fuego como si nada. Al otro lado me espera un perro grande, negro, con los ojos brillantes y su boca mostrando sin grandes dientes. Hellhound. Ella se lanza sobre mi tirándome al suelo. Acerca su gran cabeza a mi cara. Abre la boca mostrando sus colmillos, un poco de su baba asquerosa resbala hasta mi cara. Clavo una de mis garras en su estómago y siento como su sangre caliente como el fuego quema mi mano. Ella emite un gruñido de dolor y me da el suficiente tiempo para levantarme. Yo no quiero hacer esto, no soy yo, no puedo controlarme. Matar, matar, matar. Me vuelvo a lanzar sobre ella, esta vez soy yo quien logra presionarla con fuerza contra el suelo. Con mis manos y mis pies sujeto sus patas, con tanta fuerza que escucho como sus huesos se rompen bajo su piel. Abro mi boca y la muerdo. Su sangre quema mis labios y mi boca, pero no me detengo, la muerdo una y otra vez sacando su sangre. Acabando con ella.

   <<BASTA YA>>

Solo veo, oscuridad...