Los niños caminaban sin darse cuenta siendo guiados por un ser sobrenatural que ahora nadie podía ver, ellos ni siquiera se habían dado cuenta de la amenaza que los estaba rodeando, creían que estaban solos en aquel bosque que a cada paso se iba volviendo cada vez más frío.

一Nunca hubiera imaginado que el pueblo vecino fuera tan frío, siento que con cada paso que avanzamos la temperatura es más baja 一dijo Sunoo sin saber que estaba hablando con una inteligencia más avanzada a la de su edad, cosas que un niño cualquiera no sabría definir, pero era Hijo del Rey Taehyung.

一Me gustaba mucho jugar con papá en la nieve, mamá decía que él era un ángel de nieve que nos cuidaba pero ahora ya no está 一decía el pequeño Häel de solo seis años que caminaba limpiando su pequeño rostro por las lágrimas que de vez en vez se le escapaban.

一No puedo evitar sentirme culpable por todo lo que pasó con nuestros padres, pero tienes que pensar que ahora no podemos rendirnos, llorar no va ayudarnos en nada y solo vas a gastar energías necesarias 一aconsejó Sunoo de nuevo haciendo gala de la gran inteligencia que poseía.

Haël asintió comprendiendo las palabras de su primo y siguió caminando por aquella vereda que realmente no tenía un rumbo que ellos conocieran, solo sentían que podían seguir por ahí, estaban subiendo una colina alta y sintiendo como la temperatura estaba bajando cada vez más, no tenían abrigos para protegerse, pese a que Haël era un demonio hechicero gracias a sus progenitores, Vante siempre le prohibió usar sus poderes, incluso al principio lo castigaba y siempre le decía que era para protegerlo, ahora el pequeño no quería seguir desobedeciendo a su papá pese a que no estaba más.

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Mientras tanto, Vante y Taehyung que montaban a caballo por aquellas montañas que rodeaban el reino habían encontrado algunas huellas y pistas que les indicaba que los niños realmente estaban vivos y que estaban caminando sin rumbo en aquel lugar, mismo que tenía un aura extraña, no terminaba de sentirse maligna pero nunca antes algo que viniera desde fuera había sido bueno y menos para su familia que era la que ahora estaba en problemas. Taehyung suspiró al comprobar que su hijo en realidad estaba vivo, puso la mano sobre una de las huellitas para ver lo que había ocurrido.

一Es de Häel, está bien pero tiene miedo y mucha tristeza, están juntos ahora y eso es un consuelo no solo para ellos si no que para mi también, de ese modo podrá defender a mi hijo si algo los ataca 一dijo Taehyung soltando un suspiro de tranquilidad mientras meditaba sobre lo que ahora estaba ocurriendo y pensando en la seguridad de los niños.

Vante escuchó a su hermano y guardó silencio por un rato, estaba pensativo viendo las mismas huellas pero algo le impedía que dijera lo que ahora estaba pensando hasta que segundos más tarde lo decidió.

一Häel no usa su don, se prohibí, lo sabes, si piensa que hemos muerto lo más seguro es que no los use, para no desobedecerme respetando mi memoria y quizá de alguna manera es lo mejor que puede hacer porque su poder es incontrolable para un niño...一expresó el príncipe sin levantar la mirada, sabía que Taehyung iba reaccionar de alguna manera pero no podía saber como porque su hijo estaba ahora involucrado.

一Pero tendrá que hacerlo si sus vidas corren peligro 一aquello preocupó mucho su corazón 一 ¡Vante, nuestros hijos no son humanos comunes! ¡Tenías que enseñarle a Häel a ser él! ¡No a limitarlo! 一espetó ahora Taehyung que estaba más preocupado que molesto pero su carácter era fuerte y levantar la voz a veces era su modo de sacar la frustración aunque en el fondo sintiera que estuviera mal.

一Tenía miedo, no quería que él lo descubriera, no quiero que sepa que es uno de los suyos, no quiero que me separen de mi hijo como lo hicieron con mi padre, no espero que lo entiendas, no quiero que lo entiendas porque no quiero que sientas lo mismo que yo... 一respondió Vante manteniendo la misma posición, de alguna manera sentía pena por lo que estaba sintiendo su hermano, Sunoo era un niño bastante inteligente, de modo sobrenatural pero no tenía poderes, no contaba con un don para protegerse, eso era lo que hasta hoy los gemelos padres sabían.

一No digas eso, nuestro padre te ama y es feliz sabiendo que estás bien, feliz y con una familia, con lo que siempre soñaste, yo he podido permanecer junto a ti porque siempre he sido rebelde a las órdenes de él, además, solo si me vence podrá dominarme y creo que no se atreve a tanto, perdóname por gritarte, pero estoy ahora muy asustado, quizá más que los niños... 一 insistió Taehyung, siempre que se alteraba por alguna decisión de su hermano solía recordar que su vida una vez fue sacrificada y lo tuvo que ver morir en sus brazos, entonces recapacitaba y se daba cuenta que lo amaba demasiado y que tenía que ponerse en su lugar muchas veces para entenderlo.

一 El Dios padre me ha cedido una gloria que jamás imagine conocer, a pesar de no ser del todo un ángel puro y casto como los demás, eso muchas veces me ayuda a soportar la distancia entre mi padre y yo pero no evita que lo extrañe, mi hijo se había vuelto una fortaleza y estar con él y Yunne en casa son mis razones para estar bien, papá sabe que lo amo.. 一 finalizó Vante esta vez dirigiendo su mirada al cielo, sus ojos grises se volvían más claros con la luz del sol y su cabello ahora perfectamente peinado le daba un toque de elegancia.

Taehyung suspiró con sus emociones revueltas, preocupado por su hijo, entendiendo a su hermano y comprendiendo la ausencia de su padre, pero sin importar lo que sus corazones sintieran o los temores de ambos, estaba claro que encontrar a los niños era la prioridad.