Obsesión
Ahí estaba de nuevo, Vante sobre un techo, bajo este una habitación con una cama donde quedaban los restos de su último alimento.
El rostro de Vante denotaba aburrimiento, incluso cansancio, parecía estar harto de todo aquello, había dejado de divertirse, alimentarse era algo que ahora solo hacía por necesidad, ya no sentía el mismo placer de antes.
Parecía que la humanidad estaba haciendo estragos en él, y es que al consumir la sangre del cuerpo que usaría se ligaba a este volviéndose parte de él, ahora estaba experimentando emociones y sensaciones que antes no conocía.
Lo peor de todo es que la causa de su malestar tenía nombre y le sonría lindo, muchas veces solía llamarlo amor y eso hacía que su interior se llenará de vida, pero era vida humana y eso no era bueno.
No dejaba de pensar en ella, tenía necesidad de ella y era inevitable, se desesperaba por eso, el temor de acabar con ella le impedía proceder pues lo que menos quería era lastimarla.
Bajo de aquel lugar y decidió caminar, necesitaba sentir de nuevo que era libre, pensó en ese momento buscar a su padre y volvió a buscarlo.
─Padre... ─hizo una reverencia como respeto frente al mayor.
─Esperaba que vinieras... Te he notado distinto ─expresó el mayor.
─ ¿Que me pasa?... Nada me divierte y tampoco me llena, todo me parece tan insípido... ─se quejó Vante.
─Vante... Hijo... El cambio de vida y la convivencia con los humanos ha empezado a afectarte, temía que pasaras por eso... ─Arlener habló decaído.
─No me gusta estar cerca de ellos, pensé que me divertiría... ─Vante se interrumpió al recordarla a ella.
─Cuando decidí engendrar un híbrido, como pensé que sería, lo hice porque sentía un enorme vacío, sentía que algo me faltaba y un día mientras caminaba me di cuenta, vi en un parque a un hombre y su pequeño hijo, lo abrazaba y besaba, lo protegía y lo supe, necesitaba alguien a quien proteger... Pero entonces vinieron ustedes dos y lejos de ser híbridos salieron completos, uno humano y el otro incubo. Saber que Taehyung era mortal me dolió porque ellos son frágiles, pero me consoló la idea de saberte conmigo, evité salir mucho al mundo humano porque no quería convivir, solo iba por alimento y por Taehyung. Me costaba creer que ambos siendo gemelos habían nacido con diferencias tan marcadas pero luego entendí que Taehyung te cedió toda su inmortalidad, no tuviste nada de humanidad que no fuera por alimento y ahora es el mismo Taehyung quien te envió a conocer su mundo... Sin duda alguna, tu hermano te puso a prueba y hasta hoy lo has hecho bien, solo debes adaptarte y manejarlo ─explicó el mayor.
─El problema es ella papá... Lo sabes... El problema es que quiero alimentarme de ella pero no quiero que muera... ─dijo desesperado.
─Ella... Vante, te has enamorado... eso te hará vulnerable, hasta hoy tus enemigos no han encontrado debilidades pero si saben de ella, la buscarán y la dañaran... ahora debes entender que ella corre peligro y que tu amor por ella la vuelve esa persona única que no puedes tocar... es un amor condenado... ─explicó Arlener.
─La traeré aquí, vendrá conmigo, nadie sabra que es humana... o me la llevaré lejos donde nadie quiera hacerle daño, la protegeré siempre... aunque no pueda tocarla ─Vante en aquellas palabras estaba soltando una emoción nueva para él, impotencia, desesperación, tristeza quizá ni el mismo lo sabía.
─Hijo... comprende que el que está enamorado eres tú nada más... no puedes llevarla a ninguna parte porque ella no te ama... ─Arlener sabía que aquellas palabras le dolerían a su hijo pero debía volverlo a la realidad.
─Ella lo hace padre, me lo demuestra y lo dice siempre que estamos juntos... ─la desesperación empezó a ser evidente en aquel ser.
─Ella está enamorada de tu hermano, ella ama perdidamente a Taehyung, ama la imagen de él que ahora tu usurpas, pero ella te temerá cuando sepa lo que eres, ella sentirá miedo hacia ti y más aún cuando sepa cada crimen que has cometido ─Arlener en ese momento fue cruel con sus palabras pero también le dolió la reacción de su hijo.
Vante en ese momento supo que la humanidad había empezado a manifestarse en el pues sintió como cada palabra que su padre le había dicho había quemado algo en su interior, sintió su garganta cerrarse, algo que sólo experimentó cuando su hermano murió, pero esta vez aquel nudo en su garganta dolía y sus ojos estaban irritados, se estaban humedeciendo era acaso que ¿iba a llorar?
No pudo articular respuesta alguna, su pena era grande, esta vez supo que ya no era el mismo, que después de la muerte de su hermano todo cambió y que él mismo ya no era igual y lo peor de todo era que todo lo que su padre acaba de decir era verdad.
Vante se apartó de lado de su padre, pues no quería que él lo viera así, Arlener no pudo hacer nada más que sentir pena por su hijo, le dolía por que el sintió algo similar hace tiempo, sabía lo que Vante estaba sintiendo.
Después de un rato y luego de asimilar las palabras de su padre, Vante había tomado una decisión que aún que le dolería, al final le sería de beneficio a ella, también al final le ayudaría a él.
Volvió al palacio con el corazón roto y un nudo en la garganta, no tenía ganas de hablar con nadie, ni de ver a nadie, fue directo a su habitación, necesitaba una ducha para luego bajar a desayunar con sus padres.
─Padres... he decidido poner fin a mi compromiso con Garin... quería que lo supieran ─dijo el príncipe.
─Pero ayer pasaron un día juntos y parecían felices ¿Que te a hecho cambiar de opinión? ─preguntó su madre.
─Creo que no es amor, solo costumbre, no la veo como alguien que esté en mi futuro, estuve pensando eso durante su ausencia y ahora que volvió lo he confirmado, la aprecio pero no la amo ─terminó el príncipe.
─No estoy de acuerdo con eso hijo, pero respetaré tu decisión, solo se amable cuando hables con ella... ─expresó Nam.
─Lo haré padre, yo la aprecio mucho, no quiero hacerle daño, pero sé que es lo mejor ─dijo Vante.
Vante terminó su desayuno como siempre rodeado de los traidores que aún quedaban, Baekhyun, quien ocupaba el puesto de Xiumin, se acercó a Vante cuando esté se dispuso a salir, lo miraba con odio y parecía que deseaba matarlo ahí mismo, algo que Vante ignoró por completo, para el solo eran humanos insignificantes, pero este le habló cuando él rey no veía.
─Mi príncipe, si la señorita Garin no le es placentera, quizá quiera tomar una de nuestras mujeres o una moza... ─dijo en voz baja Baekhyun.
─Ninguna de tus perras podrá igualar a Garin, es más, las mozas son mucho más placenteras que tus malditas mujerzuelas, pero ya que las ofreces... ─Vante dibujó una sonrisa cínica y maligna al terminar, no había mirado a Baekhyun durante su conversación hasta que dejó de hablar.
Baekhyun se dio cuenta entonces que no debía haber abierto la boca, los ojos de Vante pasaron de ámbar a gris y de un momento a otro a un tono rojo encendido, eran los ojos de un demonio y estaba fúrico.
Todo pasó en un par de segundos pero Baekhyun sintió que fue una eternidad, cuando volvió a la realidad, Vante se había ido, sintió miedo, pero supo disimularlo, volvió a su lugar hasta que el rey se puso en pie y tuvo que acompañarlo.
Vante salió a su vehículo, estaría en casa de Garin, Vante estaba decidido, su padre tenía razón, sus enemigos la buscarían y la dañarían, se enamoró de ella, ¿en qué momento había llegado ahí? Solo debía vengar a su hermano, pero se enamoró y se enamoró solo, lo hacía sentir vacío todo lo que estaba pasándole.
Llegó a la casa de ella, lo hicieron esperar la sala, Garin bajo un rato después y llegó junto a él para darle un beso por saludo y luego se sentó a su lado.
─ ¿Que te trae por aquí amor mío? ─dijo ella viendo el semblante serio de Taehyung.
─Amor.. yo... creo que debemos darnos un tiempo ─dijo en un tono serio.
─ ¿De qué hablas, Taehyung? ─preguntó ella empezando a asustarse.
─Amor... no me he sentido bien estos días y lo has notado, sabes que hay algo en mí diferente... ─Explico viendo Como los ojos de Garin se cristalizaron.
─Es porque estás pasando días difíciles, pero eso lo entiendo, jamás te culpare por pasar malos días... Por qué tus eres... ─estaba a punto de terminar la frase cuando fue interrumpida por él.
─ ¿Quién soy Garin? ─la tomó por los hombros, habló con firmeza y la vio directo a los ojos, fijamente.
─Eres... ─ella miró sus ojos y empezó a sentir miedo de él, no sabía que había en aquellos ojos, pero su cuerpo empezó a temblar ─eres... tu eres... ─
Vante al ver cómo le temía a su verdadera presencia desistió y volvió a reprimirse y sintió como poco a poco ella se calmó, eso de nuevo partió su corazón pues confirmó que ella ama a su hermano y no a él.
─Eres Taehyung... ─dijo ella con una sonrisa y lo abrazo.
─Si continuamos ahora pueden intentar lastimarte... por eso debemos estar separados por este tiempo... pero te prometo que cuando todo acabe... tu príncipe volverá a ti... ─expresó en aquel abrazo que lo estaba quemando.
Garin lo escuchaba pero su corazón dolía y las lágrimas comenzaron a recorrer sus mejillas, no dijo nada pero lo entendía, gracias al poder de Vante obedeció sin insistir, Vante sentía como su interior se partía y sus ojos se humedecían, solo pudo poner ambas manos en sus mejillas para ver su bonito rostro y darle un último beso.
Vante salió de Aquella Mansión siendo víctima del sentimiento más humano que existe, jamás imaginó que los hombres pudieran sentir y soportar una sensación tan fuerte y dolorosa, pronto se preguntó si su hermano en algún momento vivió algo así, porque era demasiado, no quería que nadie de su familia pasara por algo como aquello.
Así llegó al palacio, sabía que ahí no podía mostrar debilidades y así lo hizo, al primero que encontró fue a Chanyeol, quién lo veía con rabia y desprecio, algo a lo que Vante solo río por lo bajo viéndolo a la cara en silencio, esto sólo hizo que su lado sádico despertará y pensará en lo que haría en lo que restaba del día...
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