*el siguiente día los niños se bajaron en formación para tomar sus cepillos de dientes aunque el rubio todavía estaba dormido.*

Dohko: neeh, ¿Shion? Es momento de despertar.

*pero no recibió respuesta ni cuando le movió un poco, estaba tan dormido como un tronco.*

Dohko: ¿shion?

*nada, supuso que estaba demasiado cansado así que no hizo más que dejarlo descansar y bajar con los demás hasta después de cepillarse.*

Wang: oye Dohko ¿qué crees que estaban conversando anoche?

Dohko: no lo sé, pero seguro debió ser algo largo, aun está dormido.

Wang: quiero creer que es algo bueno...

Maestra: bien clase, ¿estan listos para el día de hoy?

Todos: si maestra.

Maestra: de acuerdo, vayan preparándose que en media hora tendremos que salir, ninguno va a quedarse adentro ¿entendido?

Todos: si maestra.

*el castaño se adelanto en subir a la habitación y encontrar al rubio nuevamente dormido en su cama lo que le hizo preocupar un poco hasta moverlo con mas constancia.*

Dohko: ¡hey Shion! Despierta! Es momento de irnos y tienes media hora.

*el rubio poco a poco fue abriendo los ojos.*

Dohko: por fin. Es momento de irnos.

*el rubio tras bostezar varias veces se fue levantando a paso lento mientras que el castaño ya estaba a casi terminar su bolso junto al resto.*

Maestra: el director ya sabe a donde iremos, así que no tenemos problema alguno si nos tardamos un poco.

*uno por uno fue saliendo del orfanato aunque la mujer los contaba uno por uno desde el marco de la puerta hasta ver como bajaban los dos últimos niños.*

Maestra: ¿todo en orden?

Dohko: por supuesto.

Maestra: que bien, vamos no tenemos tiempo que perder.

*una vez que todos estaban afuera la mujer cerro con seguro la puerta y seguirlos por detrás hasta que con el paso fueron perdiendo de vista al orfanato, algunos estaban charlando entre ellos mismos mientras que el castaño solos estaba mirando por encima de su hombro al rubio que no decía nada como era habitual aunque se mostraba muy cansado.*

Dohko: ¿no pudiste dormir bien?

*el mencionado elevo la mirada antes de desviarla un poco.*

Dohko: lo suponía ¿hablaron mucho anoche verdad?

*despacio le regreso la mirada.*

Dohko: sea lo que haya sido... Perdona.

*ahora al hubo reacción, elevo la cabeza para ladearla.*

Dohko: fui yo quien insistió en que jugaras aun sabiendo que no conoces las reglas... Esta vez no sucederá!

*le mostró una sonrisa ampliada mientras que se puso a su lado.*

Dohko: aunque siendo sincero, todavía tengo preguntas que hacerte... Pero creo que es mejor que poco a poco te vaya preguntando, por ahora solo te diré los limites ¿vale? Aunque ya sabes uno... Jeje.

*palmeo la espalda ajena mientras caminaban, casualmente pasaron por los cerezos en el cual estaban en su época de que sus pétalos iban cayendo, curiosamente cuando el castaño seguía un par de pétalos danzando en el aire puro ver al rubio detenido bajo uno de ellos mirando hacia cada pétalo que caía... Los ojos del castaño se fueron abriendo por sorpresa... Una imagen con el mismo fondo de aquel día.*

Maestra: niños, no se queden atrás, ya casi llegamos!

*los dos miraron hacia la mujer y sin perder algún titubeo comenzaron a seguir el camino de los otros mientras que el castaño de reojo observaba al rubio.*

Dohko: n-nee Shion.

*respiro hondo.*

Dohko: puedo... Hacerte una pregunta? Esta vez no tiene que ver con lo que hablaron tu y la maestra.

*recibió una mirada común y corriente ajena.*

Dohko: de... De casualidad habías venido a este lugar?

*un silencio se hizo presente en el momento, puede que solo se haya estado creando cosas o no haya visto bien en aquel momento... Pero si estaba seguro de que estaba claro en lo que vio era la misma imagen, bueno casi la misma pero tenía la misma esencia.*

Dohko: o-olvidalo, creo que me confun-...
Shion: si.

Dohko: ¿eh?

*no se espero para nada esa respuesta, para colmo es que lo dice tan calmado...*

Dohko: ¡¿lo... Lo dices enserio?!

*nuevamente recibió algo afirmativo, el rubio asintió con la cabeza mientras miraba hacia adelante para no perder el rumbo de los demás, en cuanto al castaño el solo podía estar mas que sorprendido.*

Dohko: aaaah! Entonces ya estabas aquí desde antes ehh? Jajaja!

*por esa vez puso una mano en la cabeza ajena para acariciar un poco ésta.*

Dohko: hombre, y yo ya estaba pensando que me había vuelto loco!

*dijo riéndose un poco.*

??: ¿que tanto gritas Dohko?

Dohko: nada importante, solo el hecho de que puede que Shion ya haya estado aquí antes de inscribirse con nosotros.

??: ¿enserio?

??: oye ¿que tiene en el cabello?

Dohko: ¿ah? ¿donde?

*se detuvieron para esperar a que los autos dejasen de pasar para que pudieran cruzar y en ese momento fue cuando dio nuevamente con la mirada ajena más cercana encontrándose con que el cabello del rubio estaba adornado con los pétalos de cerezo que de alguna forma se quedaron pegados en el.*

Dohko: ¡waaaaaah! Shion mirate!

*le mencionado algo irritado le miro un poco.*

Dohko: ¡tienes pétalos de cerezo en tu cabello!

??: hey es cierto! Que lindos se ven!

?: jaja pareces niña así!

*y así los demás mientras que el rubio solo podía tener un tic al ojo escuchando las palabras ajenas.*

Maestra: niños basta, no tiene de malo que le hayan caído pétalos de cerezo en el cabello, es mas dicen que es buen a condicionante.

*dijo mirando de un lado a otro antes de suspirar.*

Maestra: habrá que esperar un rato niños...