La ambulancia llegó en menos de 2 minutos aunque para Taehyung y el alma de Yoongi pareció una eternidad, rápidamente atendieron a Yeon, los paramédicos notaron que había recibido un golpe en la cabeza ya que estaba sangrando.

Con cuidado la subieron a la camilla, Tae recogió sus cosas con velocidad y subió a la ambulancia para acompañarlos, no la iba a dejar sola ni un solo segundo.
Yoongi aprovechó que nadie podía verlo para también ir en el vehículo, se colocó justo a lado de su esposa, no podía parar su llanto y aunque ella no podía escucharlo, le hablaba una y otra vez.

—《Yeon, tienes que ser fuerte mi amor, por favor, por nuestra pequeña》

En cuanto llegaron al hospital, fueron recibidos por un par de doctores, uno de los paramédicos iba informándoles lo que había sucedido, ya estaban muy bien informados.
La ingresaron a un área donde solo personal autorizado podía pasar.

Yoongi se quedó con Tae en la sala de espera, no toleraría ver más allá de lo que había, simplemente esperaría por noticias.

Kim se encargó de llamar a Min Jeong y en menos de lo que cantaba un gallo, ella junto a su pareja aparecieron en el lugar, minutos más tarde llegó la señora Lee.

—¿Qué fue lo que le pasó a mi hija? —preguntó desesperada.

—Un auto la golpeo fuera del tribunal —habló Tae. —No se preocupen, yo sé que estará bien.

Todos estaban desesperados por tener alguna noticia sobre la salud de las pacientes, pero tuvieron que esperar al rededor de 2 horas para ver al médico encargado aparecer.

—Familia de Min Yeon Seo —habló, todos se acercaron a él llenándolo de preguntas.

—¿Cómo están? —preguntó la madre.

—Bueno... —suspiró. —Tengo buenas y malas noticias.

—Diganos las buenas primero, no mejor las malas, no las buenas —Jeong estaba indecisa.

—Min Jeong tranquilízate y deja que hable el doctor —Hoseok tomó la palabra. —Las buenas doctor, por favor.

—La buena noticia es que tuvimos que adelantar el parto y la bebé nació en un muy buen estado, es saludable y muy bonita.

—Si esa es la buena noticia, entonces quiere decir que mi hija está... —no pudo retener el llanto imaginando la peor situación.

—《No, no puede ser... Yeon Seo no puedes morir》

—La señora Min está bien dentro de lo que cabe, sin embargo cayó en estado de coma —trató de utilizar las palabras adecuadas para suavizar la noticia. —Aún no sabemos cuánto tardará en despertar, pero tienen que saber que pueden ser días, semanas, meses e incluso años, estaremos al pendiente de ella.

—Gracias doctor —Hoseok agradeció y su esposa inmediatamente lo abrazó, comenzó a llorar, no podía creer lo que estaba sucediendo.

Taehyung no podía quedarse más tiempo en el hospital, después de todo su familia ya estaba ahí y sentía que él era solo un tercero, aún así volvería para visitar a Yeon siempre que pudiera; antes de irse habló con Jeong y le dijo que él se haría cargo del trabajo de la chica, hablaría con su jefe y haría hasta lo imposible para que eso no le afectara.

Los días pasaban y Yeon no mostraba ninguna mejoría.
Durante ese tiempo Yoongi no volvió al columbario, se quedó día y noche en el cuarto de su esposa; el chamán Seokjin lo estaba buscando por mar y tierra, sin éxito, no imaginaba que podía estar metido en un hospital.

La bebé, cuyo nombre era Min Youngsu y este mismo había sido puesto por sus padres en una conversación años atrás que habían tenido con sus amigos, diciendo que si llegaban a tener una niña la llamarían así.

Youngsu quedó bajo la custodia de Min Jeong y Hoseok, debido a que sus abuelos o mejor dicho su abuelo, no quiso hacerse cargo de ella mientras Yeon Seo estuviera hospitalizada.

Meses después, Min Jeong quedó embarazada, no era ningún problema, les iba muy bien económicamente con el restaurante que habían abierto.
La vida de todos comenzaba a ser normal, sin embargo, Yeon seguía dormida y Yoongi a su lado sin volver ni un solo segundo a su urna.

4 años después

—Había una vez una hermosa princesa que cayo en el hechizo de una malvada bruja. La princesa se pinchó el dedo con un aguja y se quedó dormida por mucho tiempo, todos en el reino estaban tristes, pues su princesa no despertaba, hasta que un día un apuesto príncipe azul llegó al castillo buscando a la que sería el amor de su vida y futura esposa, al enterarse de la noticia del embrujo, él le dio un beso de amor verdadero, el hechizo se rompió y la bella princesa despertó de su profundo sueño, ambos se casaron, tuvieron una bebé y vivieron felices para siempre —la pequeña niña que leía el cuento cerró el libro y se acercó a su madre. —Mamá, tú eres como la princesa del cuento y un príncipe vendrá y te despertará, lo sé.

—Youngsu, ¿ya terminaste de leerle a tu mamá? —preguntó Min Jeong entrando a la habitación.

—Sí, tía —subió a un banco que estaba cerca de la cama y se puso a la altura de Yeon —Vendremos mañana a verte, te quiero mami. —le dio un beso en la mejilla.

Jeong tomó a Youngsu de la mano pero antes de salir del cuarto se giró y se despidió con su mano hacia dos lugares distintos, uno al de su madre y el otro a una silla vacía.

—《Adiós, mi pequeña Youngsu, te veo mañana》 —Yoongi sonrió y sacudió la mano despidiéndose de su niña a pesar de que creía que ella no lo veía. —《Yeon Seo, ¿cuándo vas a despertar? Tienes que hacerlo para que veas lo preciosa que es nuestra hija, ella es muy inteligente y cariñosa, definitivamente es todo lo que deseamos en algún momento》

—¡Yoongi! —una chica fantasma que se había hecho amiga de Yoongi años atrás apareció de la nada.

—¿Qué pasa Sun? —preguntó despreocupado.

—Jin está furioso, dice que si no apareces hoy mismo, el inspector vendrá y te hará subir a la fuerza.

—Mierda... no quiero separarme de Yeon...

—Solo será por hoy, si no lo haces no podrás volver a verla.

—Carajo, está bien, vamos —se levantó de la silla y acarició ligeramente el cabello de Yeon. —Mi preciosa Yeon Seo, volveré mañana, si puedes, despierta antes, ¿sí?

Yoongi y Sun salieron a toda velocidad del hospital, para que el mayor esperara su regaño por no haber vuelto ni un solo día a su urna, las reglas cambiarían aunque no por mucho.