☁︎ 𝑈𝑛𝑎 𝑐𝑖𝑡𝑎 ☁︎
—¿Y bien? —Hoseok estaba recargado en el marco de la puerta mientras veía a Yoongi secarse el cabello con una toalla. —¿Ya me dirás algo o prefieres seguir haciendo el tonto?
—Deberías darme más respeto, soy mayor que tú —se quejó. —Escucha, hay un Chamán que me está ayudando con todo este tema, es muy extraño pero tiene poderes sobrenaturales, puede hablar con deidades e incluso creo que puede hablar con el mismo Dios.
—¿Seguro que no es un loco en lugar de un Chamán?
—Estoy seguro, resulta que pidió información para saber por qué volví a la vida y aunque no le dieron una respuesta específica, le dijeron que solo tengo 74 días para cumplir una misión y suponemos que esa misión es hacer que Yeon me recuerde.
—Esto es una locura —Hoseok suspiró. —¿Qué pasará si se te acaba el tiempo? ¿O si cumples la misión?
—Si logro hacer todo, existe la posibilidad de que pueda quedarme aquí, si no lo hago mi alma se convertirá en polvo y ni siquiera tendré derecho a la reencarnación.
—Entonces, ¿por dónde empezamos? —Yoongi lo miró sorprendido. —Estás demente si piensas que voy a dejarte solo, no quiero que te conviertas en polvo y si hay posibilidad de que puedas quedarte, quiero ayudar.
—Bueno, tengo un plan en mente —rió. —Quiero llevar a Yeon a los lugares donde tuvimos alguna cita, el bar donde nos conocimos e incluso donde le pedí matrimonio, quizá eso ayudaria.
—Solo recuerda que no hay que hacerlo muy obvio o forzoso, por lo que dijo el doctor podría afectarle.
—Sí, eso es lo que más miedo me da, temo que salga lastimada de alguna forma por mi culpa.
—Hay que tener cuidado —Hoseok miró el reloj de su muñeca. —Hoy sale del trabajo a las 6:30, ve a recogerla, yo me encargaré de Youngsu —se acercó a una cajonera y sacó unas llaves de ahí para después lanzarcelas a Yoongi. —Son las de tu auto.
—¿Y qué voy a decirle?
—Fácil, dile que quieres invitarla a cenar por ayudarte a conseguir hospedaje conmigo y la llevas al restaurante en donde siempre comían.
Yoongi estaba esperando a Yeon Seo fuera su trabajo, se encontraba impaciente y sobre todo nervioso pues aunque ya le había dicho que la cortejaría tenía miedo de ser rechazado.
Caminaba de un lado a otro frente la puerta principal del lugar, hasta que de pronto logró visualizar a una bella mujer que caminaba al lado del chico que alguna vez fue su secretario, ambos reían mientras mantenían una conversación, cosa que hizo sentir muy celoso a Min.
A paso seguro y firme se acercó a ellos, inmediatamente Yeon lo noto y dejó de lado su divertida conversación con Taehyung.
—¿Min Yoongi?¿Qué haces aquí?
—Te estaba esperando —fue directo.
—Noona —interrumpió el menor. —Tengo que irme, te veo después.
—Está bien, ve con cuidado —ambos se despidieron y luego ella se dirigió a Yoongi. —¿Para qué me esperabas?
—Quiero agradecerte por hablar con Hoseok por mí, ¿Tienes hambre? Vayamos a comer algo.
—No es necesario, además estoy un poco ocupada —en ese momento ella echó un mechón de cabello hacia atrás, Yoongi la conocía tan bien que reconoció esa acción, pues Yeon hacia eso cada vez que mentía.
—Pero supongo que tienes algunos minutos para los alimentos, no es bueno trabajar con el estómago vacío —insistió.
—¿No será más bien que esta es tu manera de cortejarme? —rió.
—Digamos que es un poco de ambas. —en ese momento el teléfono de Yeon le notificó un mensaje, el cual provenía de Hoseok diciendo que llevaría a Young y a Woosik a ver una película.
—Está bien —guardó su móvil. —Supongo que puedo dejar todos los pendientes para mañana, ¿qué quieres cenar?
—Hay un restaurante cerca de aquí y sé que te encantará.
Ambos caminaron hasta llegar al auto de Yoongi, ahí él como todo un caballero abrió la puerta del copiloto para dejar subir a la chica y después posicionarse de su lado, encendió el motor y se puso en marcha hasta llegar a su destino.
En el transcurso del viaje, hablaron muy poco, Yoongi se sentía tranquilo, pero Yeon Seo en cambio sentía un tanto de incomodidad, no sabía por qué le había dado una oportunidad a Yoongi para conquistarla si nisiquiera le interesaba salir con alguien.
Cuando entraron al restaurante un aroma muy familiar atacó sus fosas nasales, miró a su alrededor, creía tener recuerdos de ese lugar pero todo en su mente estaba borroso.
Se sentaron en una mesa y poco después de leer por completo el menú, decidieron ordenar.
—¿Vienes seguido aquí? —cuestionó Yeon evitando cualquier contacto visual con su acompañante.
—Solía hacerlo, hace algunos años siempre venía con una persona muy importante para mí —sonrió ligeramente al recordar la última vez que estuvo en ese sitio, el como le pidió matrimonio a su novia y como ella lo tomó como una broma.
—Disculpen —la camarera interrumpió. —¿Les ofrezco algo de beber?
—Una botella de soju, por favor —Yeon respondió inmediatamente, Yoongi la miró sorprendido.
—¿Vas a beber? —preguntó.
—Fue un día cansado, servirá de relajación.
—Pero ni siquiera toleras el alcohol —se calló en cuanto terminó de hablar, se había arriesgado a ser descubierto.
—¿Cómo sabes eso?
—Lo escuché por accidente de Hoseok —mintió.
—Bueno, no lo toleraba pero ahora sí, así que hay que beber juntos —ni ella misma se creía lo que acababa de decir.
El tiempo pasaba, habían terminado la comida y las bebidas, Yoongi solo veía como la chica se ponía cada vez más ebria, sabía que eso sucedería pues Yeon tenía cero tolerancia a cualquier tipo de bebida alcoholica y eso fue algo que Min nunca olvidó.
—¿Por qué?... —susurró mientras sostenía su mejilla con la palma de su mano izquierda.
—Por qué, ¿qué? —respondió Yoongi totalmente arrepentido de haberla dejado beber, interiormente se preguntaba porqué la mesera tardaba tanto con la cuenta, quería marcharse del lugar cuanto antes.
—¿Por qué el papá de Young me abandonó? ¿Por qué tuvo que dejarme con una niña sola? Youngsu necesita de su padre.
—Lo siento... —fue todo lo que Yoongi pudo decir, agachó la cabeza, se sentía mal, él no había decidido dejarla, lo que más deseaba era recuperar su vida, a su familia.
—¿Por qué te disculpas? No es tu culpa que ese idiota fuera un imbécil —suspiró. —Espero que tú no seas igual —el hipo la atacó. —He tenido muy mala suerte con los hombres, una vez salí con un tipo que siempre trataba de controlarme "Yeonie no te pongas esa blusa se ve mal" "Yeonie deja tu tarea y sal conmigo" "Yeonie no me gustan tus amigos, déjalos" —imitó la voz del chico. —Y yo como estúpida siempre le obedecía.
—¿Realmente eso pensabas de mí? —Namjoon apareció de la nada, Yoongi evitó la mirada para que no lo reconociera.
—No es lo que pensaba, es la verdad —Yeon rodó los ojos.
—Oh vamos Yeonie, no trataba de controlarte, trataba de cuidarte porque te amaba.
—Disculpen, aquí está la cuenta —sin decir palabra Yoongi la tomó y la pagó, se levantó de su asiento y le extendió su mano a Yeon Seo para ayudarla a levantar, ella aceptó su ayuda y justo antes de marcharse se giró hacia Namjoon.
—Claro que querías controlarme, eso es lo único que sabes hacer.
Ambos caminaron fuera del restaurante hasta llegar al coche de Yoongi.
El abrió la puerta de copiloto pero justo cuando Yeon iba a subir terminó cayendo en el suelo.
—¡Yeon Seo! —se puso a su altura, la levantó ligeramente y se sintió un poco aliviado al ver que no se había desmayado, sino que se había quedado dormida. —Juro por mi alma que no volveré a dejarte beber.
Con toda su fuerza la levantó, con una sola mano abrió la puerta trasera y puso a la chica recostada sobre el asiento, la acomodó para que estuviera cómoda y subió al piloto para comenzar su recorrido.
Estaban a punto de llegar a la casa de Hoseok para recoger a Youngsu, cuando de pronto unas luces rojas y azules y una sirena hicieron que Yoongi se orillara y se detuviera.
Un policía se acercó del lado de su ventanilla y le pidió que bajada el cristal, por alguna razón sus nervios aumentaron.
—Buenas noches, señor —saludó el policía.
—¿Sucede algo malo?
—Tenemos un reporte de secuestro, así que estamos revisando algunos coches con similitudes al que reportaron —encendió su linterna e inspeccionó el asiento trasero, ahí pudo ver a la chica completamente inconsciente. —¿Y ella?
—Es mi novia, salimos a cenar y bebió un poco así que cayó dormida por la ebriedad —Yoongi respondió rápidamente.
—¿Señorita? —la llamó el mayor al ver que Yeon estaba despertado. —¿Conoce a este hombre?
—¿Qué?... Yo... ¿Tú quién eres? —se dirigió a Yoongi, éste la miró con los ojos bastante abiertos. —¿Qué estoy haciendo aquí? —y volvió a caer dormida, Min estaba maldiciendo fuertemente en su interior, sabía lo que sucedería, en ese momento estaba deseando volver a ser un alma y encerrarse en su urna para no salir por mucho tiempo.
—¡Oficial Choi! —llamó a su compañero. —¡Creo que tenemos un sospechoso!
Ay Min Yoongi, en que lío te metiste?
Un par de caps más y se viene alto dramita 👀
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