--Narra Lincoln--

Cuando Luna hizo esa pregunta, la chispa de la duda se esparció hacia las demás como fuego en hierba seca.

-Cierto, ya es tarde y aún no regresan.- Dijo Luan, que a diferencia de Luna no pensó que nuestra salida repentina tuviera relación alguna con nuestros padres.

En vista de que Lori estaba en shock, y apenas podía pensar, tome la palabra para controlar la situación.

-Leni, quédate aquí con las menores, y que no salga ninguna, Luna, Luan y Lynn, acompañenme.

Tome con suavidad la mano de Lori y, junto con las chicas fuimos a su habitación, dónde se sentó en su cama, y con una voz ronca y entrecortada intento explicar lo que estaba pasando.

-Mamá, y... Papá,  tu, tuvieron un ac, accidente...

La expresión de las tres cambio de inmediato, antes era de preocupación, ahora no podía describirse.
Vi que a Lori le costaba mucho hablar, así que la interrumpí y le pedí que se recostara, yo continuaría con la explicación.

-Hoy a las 4:43, ocurrió una fuga de gas debajo de una carretera, está ocasiono una explosión que dejó a más de 80 personas heridas y, 20, no, 22 muertes confirmadas.

Poco a poco las chicas armaron el rompecabezas en sus mentes, y entendieron lo que estaba pasando.

El carro en el qué estaban nuestros padres, estaba en esa carretera...

Otra vez silencio, que horrible silencio.
Rápidamente con los ojos llorosos Lynn pregunto.

-¿Ellos están bien cierto?

Quise responderle, pero no tenía palabras para hacerlo que no la hicieran llorar a ella y al resto.

-¡Lincoln dinos que están bien!- Dijo Luna

Luan solo estaba negando con la cabeza mientras se cubría la boca con las manos, es algo que hace cuando está nerviosa. La diferencia es que ahora lloraba mientras lo hacía.

Use todo el esfuerzo del mundo para decirlo, sentí como agujas penetraban mi garganta en el momento en que dije:

-No.

-¿Están heridos entonces cierto?, ¿se van a recuperar, cierto? -Lynn cada vez estaba más desesperada por respuestas.

Luna y Luan empezaron a llorar más fuerte.

-No- Dije de nuevo, pero esta vez continúe.

-Ambos fallecieron en el accidente.

Lynn me miró con rabia y lágrimas en los ojos.

-No, esto no es cierto, es, es mentira, estás haciendo una broma, ¿Crees que es gracioso esto?, ¡ESTO ES UNA MALDITA BROMA!

-Desearía que así fuera- Es lo que único que pude contestarle antes de tomar lo más rápido que pude su cabeza y abrazarla, lo mismo hice con las demás.

Lori, Luna, Luan y Lynn, las 4 estaban llorando a mares, mientras yo me sumergía en mil preguntas.

¿Que haremos ahora?
¿Cómo le decimos a las menores que sus padres nunca pasarían ese pórtico de nuevo?
¿Cómo conseguiríamos dinero?

Esas y muchas otras preguntas rondaban mi mente mientras cada vez estaba más húmedo por las lágrimas de las chicas.

Para mí buena suerte, cosa que creí inexistente en este momento, Lori volvió en sí.

-Reunan a las menores... Y a Leni.
Hay que decirles lo que está pasando.

Cómo si nos estuvieran escuchando, en ese momento subieron Leni, y las demás.

-Chicas, Lincoln, ¿Que está pasando?- Dijo Leni.

-¿Donde están mamá y papa? -Dijeron las gemelas al unísono.

-Ya es muy tarde y no han vuelto -continuo Lucy.

Sientense- Dijo Lori entre lágrimas.

Durante la siguiente hora fue más de lo mismo, a medida que Lori y yo les explicabamos lo que pasó, todas empezaron a llorar.

Lily, a pesar de no comprender lo que estaba pasando, lloraba tanto como el resto.

Lisa, que en todo momento se muestra indiferente, lloraba tal y como lo haría una niña de 5 años.

Lola y Lana se abrazaban entre lágrimas y negaban con la cabeza, ellas también eran muy pequeñas, no comprendían bien el concepto de la muerte, pero sabían perfectamente que sus padres no volverían.

Lucy, de manera imposible para el ojo humano común, se veía más pálida que nunca, mientras sus lágrimas caían al suelo escurriendo por sus mejillas.

Lynn no me soltó en ningún momento  mostraba la cara, solo lloraba sobre mi hombro mientras temblaba, ella solo tiembla cuando tiene miedo.

Luan y Luna no estaban mejor, se abrazaban una a la otra mientras Luna intentaba contener las lágrimas y Luan gritaba internamente.

Leni fue de lejos la peor de todas, tuve que explicarle de manera que comprendiera, que mamá y papa no iban a volver, y a medida que lo hacía sentí como le estaba arrebatando la inocencia a una niña. Su llanto fue desgarrador.

Lori ya no lloraba, lo había hecho con tanta fuerza que ya no podía llorar, no había tocado el teléfono en horas, pero no le importaba. Solo podía lamentarse e intentar seguir llorando.

Yo, no llore, no podía por más que quisiera, tenía que mantenerme fuerte y estar ahí para todas ellas.

Llevé algunos colchones al cuarto de nuestros padres, y llevé a todas ahí.

Dormimos todos juntos, abrazándonos mientras intentabamos darnos calor.

Pero el frío gélido que estaba haciendo nos estaba torturando.

Una vez llegue a preguntarme cómo se sintió Jesucristo la noche antes de su crucifixión.
Se dice que el frío que sintió aquella noche, fue la muerte misma sobre sus hombros, buscandolo.
Y que fue tal, que solo el hijo de Dios podría soportarla.

En este momento, ellos se sentían de la misma forma.

Sentían que el frío de la muerte y la desdicha los rodeaba mientras relamia sus labios, esperando poder consumirlos y arrebatarles toda esperanza, si es que aún le quedaba alguna.

No era invierno, pero sentían la nieve sobre sus hombros congelando todo a su paso.

Esa era sin duda alguna, la noche más fría que los Loud, o al menos los que quedaban, sintieron es su vida.

Fin del capítulo 3.

A partir del siguiente capítulo, los diálogos entre personajes se volverán mucho más largos.