25 de julio del 2012.

Lo organizamos todo en un mes. Cuando me hablaste de testamento me enervé, pero debía ser fuerte, por mamá, por Harry y por ti, lo que no le dije a nadie es que ese peso que llevaba en los hombros me estaba matando y solo quería volver a ser esa niña de ocho años que su papi tranquilizó cuando se fracturó un hueso. Quería ser esa niñita que llamaba a mamá y papá cuando los monstruos de su clóset querían salir, pero esa no era una opción.

Apoyar a una persona que está mal cuando tú te sientes peor es una mierda, pero, ¿sabes que me animó? Esos ojos brillantes y esa sonrisa que siempre me decía que todo iba a estar bien.

Todo está bien, papá.

-3 días y contando.

Natalie.