Pasé una mano por mi cabello me sentía enojado, no es conveniente hablar conmigo cuando estoy enojado, todos saben eso. No Dénis te equivocas, no todos lo saben, Kim no lo sabe. Me recuerdo a mí mismo para controlarme y no decir nada de lo que tenga que arrepentirme después.

—Denis deja que te expliqué, yo no estaba besándolo —pronuncia desesperada por que le creyera.

Pero me queda claro que miente, no solo yo vi como Joshua estaba casi tirándosela en mi cara en un rincón de la escuela, Louis y Charlie también lo hicieron.

¿Y todavía se atreve a decirme que no es lo que parece? ¿Entonces que era en realidad quería ayudarle a recuperar la respiración? Porque a lo que pude ver la estaba dejando sin ella. Si supiera cuanto odio las mentiras.

—Kim lo que hagas, o dejes de hacer no es problema mío, eres libre de hacer lo que quieras y con quien quieras —puede que sonara demasiado duro pero prefiero decir la verdad, siempre la he preferido.

Dicho esto doy media vuelta para irme escuchando los pasos de Kim detrás de mí y enseguida su mano sujeta mi brazo.

—No te vayas, no lo besé, te lo prometo —asegura suplicante, me giro para enfrentarla y la miro antes de hablar. Me sorprende la capacidad que tiene para creer que soy tan tonto como para creerle, tal vez si estuviese enamorado sería más fácil persuadirme pero nunca me ha pasado, trato de evitar ese sentimiento con mis conquistas.

Por suerte lo han tomado muy bien no he tenido ningún problema y ninguna se ha quejado.

A excepción de Kim, claro está. —Escucha no tienes nada que explicar, ambos queríamos esto —nos señaló a ella y mí con la mano — Diversión, sexo sin compromiso ¿recuerdas? —le explicó, libera mi brazo sin quitar sus ojos llenos de odio repentino de los míos.

—Estúpido —escupe y se marcha ofuscada.

Es la primera ofensa que recibo de parte de una mujer sin contar a Cara, ella es la única chica que se ha atrevido a insultarme, pero no cuenta como una chica a veces se me olvida que lo es. El sensible de Louis me lo recuerda cuando nuestras peleas suben de nivel diciéndome:

"Dénis es una chica por favor respétala".

De todas las demás solo he recibido halagos, cartas anónimas e incluso invitaciones para salir,  era divertido  tener miles de chicas muriéndose por mí, solo al principio.
Ahora es una verdadera molestia el que no tengan respeto por nada, y lo único importante sea que sepa de su existencia para  que las volteé a ver.

◘◘◘

La cena en mi casa es sagrada, toda la familia está ahí a esa hora no importa lo que estén haciendo, este corto tiempo lo usamos para ponernos al día de lo que nos haya pasado en el día, dicen que la familia perfecta no existe.

La mía podría llegar a serlo si no fuera porque mi mamá odia a la familia de mi mejor amiga como si mi madre fuera quien manejará los negocios y no mi padre, él en cambio hace lo que está en sus manos para acabar con esta pelea absurda.

— ¿Cómo estuvo tu día hoy cariño? —Preguntó mi madre que estaba sirviendo una ración más de comida para mis hermanos.

—Fue un día agotador. —comienzo a decir con tono cansino.

—Mañana podrás quedarte en casa a descansar —propone mientras le entrega a René y Matías la cena, me mira y se sienta junto a papá para comer todos juntos.

—No lo sé, tal vez Charlie y Louis vengan mañana, no habrá mucho tiempo para descansar.

— ¿Cara vendrá con ellos? —Allen el más pequeño de mis hermanos me pregunta emocionado con los ojos muy abiertos.

Es igual a mi madre piel clara, cabello corto ondulado y castaño, sus ojos grandes y aceitunados, muestran curiosidad. —No Allen, ella no vendrá ella no entrará a esta casa, termina tus verduras ahora —sentencio mi madre antes de que pudiera contestarle al pequeño.

Allen baja la mirada a su plato decepcionado jugueteando con su comida, con el ánimo por los suelos. —No tenías por qué hablarle de esa forma —le recrimino  a mi madre apretando mi tenedor con más fuerza de la necesaria.

Me molesta de sobremanera que lleve su odio a este extremo.

—No la quiero cerca de ti, ni dentro de esta casa —gruñe ella ante mi reclamo.

—Tú no decides con quien debo hacer amistad mamá, Cara es mi amiga y así va a ser aunque a ti no te guste. — le deje claro elevando la voz, y levantándome de mi sitio, abandonó la mesa caminando directo  a mi habitación.

— ¡Dénis vuelve aquí! —exige mi madre intentando alcanzarme, la ignoro subiendo las escaleras para encerrarme en mi recamara y olvidarme de esta estúpida  discusión.

Cierro la puerta detrás de mí callando asi los reclamos que la mujer al pie de las escaleras sigue haciendo, y caminó alrededor de la recamara como león enjaulado, voy hacia mi ventana abriéndola para dejar entrar un poco de aire fresco dentro de este infierno.
No sé si es por el calor o por el enfado que siento en este momento, una vez abierta la ventana la música de siempre en  la habitación que queda frente a la mía comienza a escucharse.
La reconozco porque la he escuchado miles de veces obligado por la única persona a la cual le fascina complicarme la vida, y lo peor es que me hace saber que disfruta destrozar mis oídos con su pésimo gusto musical.

One direction.

Girl almighty es la canción que suena a todo volumen, lo que me hace reír es la silueta que se mueve al ritmo de la música atreves de las cortinas trasparentes, sin darse cuenta que la están observando. La contemplo bailar por un momento, moviendo las caderas al compás de la música, abriendo un poco las piernas tocando una guitarra invisible mientras agita su cabello y dando pequeños saltitos en su lugar, con el peine para cabello fungiendo como micrófono.

Meneo la cabeza aun disfrutando del show desde aquí, el mal humor que me embargaba hace poco acabo desapareciendo. Y una pequeña sonrisa logro colarse en mis labios, mientras tanto, luego de unos minutos tomó mi teléfono y comienzo a escribir un texto para ella.

Yo: Cara Williams, necesitas con urgencia unas clases de baile, tengo ganas de llorar con solo verte. PD: Deja de torturar a mis oídos con tu horrenda musica, ¡por favor!

Lo envió, no han pasado ni dos minutos cuando mi teléfono recibe su mensaje de vuelta.

Cara: Deja de espiarme Prestón 😠

De pronto ya no hay más música, la silueta se acerca y Cara aparece del otro lado de la ventana, me mira con el ceño fruncido sus ojos caramelo contrastan con su pálida piel blanca, su cabello negro enmarca sus facciones finas del rostro, y sus labios pareciera que nunca deja de humectarlos con lápiz labial.

Lleva puesta su pijama de estrellas azules, no luce mal sin maquillaje, de hecho creo que luce mejor que las chicas que lo utilizan a diario. Lo natural le queda bien. — ¿No te enseñaron a no espiar a las personas Dénis? —inquiere reprendiéndome, a lo que yo me encojo de hombros.

—No tengo nada mejor que hacer, así que  decidí espiar tus horribles pasos de baile ¿quieres que te enseñe como se hace? —me ofrezco causando que rodara los ojos.

—Deja de presumir que sabes bailar, yo estoy bien con lo que sé. —demanda defendiéndose.

—Quiero compartir mis talentos contigo — me excuso y me sonríe.

Me quedo quieto mirándola hacer eso, hasta que ella misma rompe con el silencio.

— Mejor cuéntame ¿qué fue lo que tenía que explicarte Kim? Se veía desesperada por decírtelo —Cara investiga haciéndome recordar la dramática escena de esta tarde

—Nada importante, mentirme y nada más que eso —digo desinteresado, la muchacha ladea un poco la cabeza con la duda ocupando su mirada.

— ¿En qué te mintió?

—Quería hacerme creer que lo que vi no era cierto, se besó con Joshua en mi cara, Charlie y Louis también lo vieron. — le hago saber.

Me estudia a detalle un segundo en silencio desde su ventana.

—Y... ¿te dolió que lo hiciera? —pregunta, eso me hizo  reflexionar sobre lo que me hizo sentir realmente y para ser honesto.

No, no me dolió que lo hubiera hecho.

Al contrario me sentí  liberado.

—No —conteste sincero.

—Qué bueno —expresa con alivio— Estaba empezando a detestarla. —confeso.

—Yo sé que te pone celosa, que otra chica se me acerque pero tienes que compartirme —bromeó con ella haciéndola reír.

— Claro, tengo que cuidar de mi hermanito. No puedo dejar que cualquiera se le acerqué — me explica con una sonrisa decorándole el rostro.

Si eso fue una jugada para acabar con mi buen humor funcionó, no obstante, no permito que noté que su comentario me molesta, le preguntó lo primero que se me viene a la mente para cambiar de tema rápido.

— ¿Qué hay de Taylor? ¿Porque aceptaste que te llevara a casa? Pudiste haber caminado —su sonrisa se ensancha  al escuchar su nombre, una punzada desagradable  me pega en el estómago.

Que extraño.

—Me invitó a la fiesta del próximo viernes —sus ojos brillan con gran intensidad— Me gusta Dénis, me gusta mucho, no quería decirte nada porque odiaba su forma tan pesada de ser. Pero, dios, hoy me demostró que estaba equivocada al juzgarlo tan duro. —me comparte entusiasmada.

Se supone que debo sentirme feliz por ella, pero no es así, tal vez es porque temó que me robe su amistad sé lo tonto que suena esa justificación, pero es la que tiene más lógica.

—Me alegro por ti —le miento, de pronto su móvil suena distrayéndola de la conversación de nuevo esa sonrisa ilusionada  aparece en sus labios, lo que me hace adivinar qué quien está llamándole ahora es Taylor.

—Tengo que atender, buenas noches te quiero —cierra la ventana, sin siquiera despedirse desvaneciéndose entre las cortinas volviendo a ser una silueta moviéndose de un lado a otro.

Otra vez esa punzada desagradable arremete contra mis entrañas, al verme solo en el ventanal. Regreso al interior de mi cuarto preguntándome el porqué de mi incomodidad, al enterarme de que Taylor la llevaría a la fiesta como su cita.

Quizás me acostumbre a que ningún chico se fijara en ella, no es que no merezca que un chico se enamoré, se lo merece, sí.

Pero creo que no estoy preparado para que alguien más cuide de ella.

Me enfundo en mi pijama para después meterme  a la cama dispuesto a dormir, más aun lo evitan cuando alguien toca a la puerta.
—Dénis... ¿estas dormido? —Pregunta Allen en voz baja.

—Aun no. —le dije

—No puedo dormir. —me informa.

—Ven metete a la cama —lo exhorto, Allen corre a la cama y la escala con agilidad, veo que le han servido los campamentos a los que mamá lo inscribe cada año. Su agilidad a sus seis años es excelente.

Se acurruca en las sabanas acomodándose de modo que quedamos frente a frente. —Dénis... —pronuncia mi nombre en un susurro.

Mierda, este niño tiene más energía que cien atletas juntos.

Incluyéndome.

— ¿Mmm? — balbuceo adormilado.

— ¿Porque mamá no quiere a Cara? —Su pregunta me hace abrir los ojos de golpe, esa es la pregunta que yo mismo me he hecho muchas veces y no he encontrado una respuesta.

—No lo sé. —le respondo con la verdad.

—Yo si la quiero —dijo antes de quedarse dormido, suelto suspiro profundo mirando al techo oscuro, y luego a él durmiendo.

—Yo también la quiero Allen, también la quiero —le digo aun sabiendo que no me escucha.

Y ahí es cuando el sueño termina por vencerme.

Nota de la autora: ¡Hola¡ Ya estoy aquí cumpliendo mi palabra de doble capitulo , si ya es muy noche pero hoy me fui a ver la bella y la bestia y se me hizo muy tarde, hablando de esa peli ¿ustedes ya la vieron? Si es así ¿ que les pareció, les gusto? A mi en lo personal no me gusto nada me decepciono mucho. Casi lloro de la tristeza.

Pero bueno ya dejare de hablar para ir directo a las dedicatorias¡eh!

Este capitulo es dedicado para mi amigo Adrien_Steven que siempre esta presente en los comentarios y votos, dice que ama la amistad entre Denis y Cara <3 ¿quien mas esta de acuerdo con el? GRACIAS por leerme Adrian eres un chico increíble.

Bueno ya es hora de irme no olviden votar y comentar si les gusta el capitulo nos vemos el próximo fin LOS AMO