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Capítulo 73

Me enamoré una sola vez de verdad, desde el fondo de mi alma pude sentir el amor. Cómo cuando no hay siquiera palabras para explicar todo lo que sientes, cuando miras a una persona y sonríes como estúpido, cuando el tiempo pasa demasiado rápido al estar con esa persona que piensas que nunca podrán alcanzarte los minutos, las horas, los días, las semanas, los meses, los años.
Cuando sientes que dependes física y emocionalmente de alguien y que sientes temor tan solo de pensar que podrías perderlo.

Sé que voy a estar enamorada de ese ser toda la vida porque no se ama con la misma fuerza dos veces.

Me sentía incapaz de enamorarme de alguien más, tal y como él me lo había pedido tantas veces pero no podía, no puedo amar a alguien con tanta intensidad asi como lo amo a él.

Era tan horrible tener que sufrir por amor. Siempre me pregunté el porque si el amor parece ser tan maravilloso, tan bonito y que te hace flotar en nubes suaves de algodón ¿porque después hacía que las personas anduvieran por el mundo apagadas y jodidas?

Alguna vez escuché por ahí, que todos queremos felicidad sin dolor, pero no se puede tener un arcoiris  sin un poco de lluvia.
Y él era ese punto intermedio entre el amor mas grande que había tenido por alguien y el dolor más intenso que nunca jamás alguien me había causado.

- Martin: ¿Porque tienes que ir hasta alla? Él quedó en venir por tí.- preguntó mientras caminábamos a mi carro.-

- Ya te dije que yo misma me ofrecí a ir hasta allá.- quité la alarma y me recargue sobre mi lindo carro blanco.- La familia de Carlos decidió venir desde Tlaxcala y hacer un día de campo a las afueras de la CDMX.-

- Martín: Pero ese no era el plan- seguía oponiéndose.- se supone que vendría por tí e irían a dar un paseo por la cuidad. Solos.-

- Exacto, ese era el plan... ¡sí yo hubiera salido con él ayer!- puse mis manos en sus hombros y lo sacudí.- sin embargo, ayer le cancelé para ir a un concierto en donde tú amigo me dedicó la canción más deprimente del mundo ante miles de fans y me dijo adiós.-

- Martín: Ese tampoco era el plan del concierto, salió de imprevisto.- funció los labios.-

- Bueno como sea.- acomodé su playera que quedó un poco arrugada por sacudirlo.- debo irme.-

- Martin: ¿Te doy un consejo?- caminé hacía la puerta del piloto y antes de abrirla lo miré y asentí.- antes de que Carlitos te presente con su familia, debes hablar sobre ESO.- recalcó lo último.- antes. Porque sino quedarás muy mal frente a la familia Rivera.

- Buen punto.- sonreí.- me voy.- abrí la puerta y entré pero Martín hizo lo mismo del lado del copiloto.- Ash.- puse los ojos en blanco.-

- Martin: Insisto en que debo ir contigo, tengo un presentimiento de algo no se.- rascó su cabeza.- no quiero que vayas sola.- me miró con sus tiernos ojos cafés.-

- ¿Presentimiento sobre que cambie de opinión y decida estar con Carlos  y disfrute un  bonito día con su familia?- su rostro era de espanto y reí.- Escucha, Martito lindo.- me acerqué a él.- eso no pasará porque quiero recuperar al tonto Villamil, porque quiero luchar por él. Porque siento que ayer me dejó ir  y yo no quiero que lo haga y sí él se cansa de luchar entonces yo seré quien luche por los dos.- me dió una sonrisa de boca cerrada dejando ver sus hoyelos.-

- Martin: Pero y si las cosas se salen de control y Carlos se pone...- pensó sus palabras.- no se ¿agresivo tan vez?- solté una carcajada.-

- Sabes que él no es así.- volví a reír.- voy a estar bien, todo va a estar bien ¿Si?- asintió y me abrazó fuerte.- tu más que nadie sabe cuando amor siento por Villa, desde adolescente pensaba en casarme con él, tener hijos y llegar a vieja a su lado.-

- Martín: Papo decía lo mismo- seguíamos sin soltarnos.-

- Es por eso que quiero arreglar el desastre que ocasione con Carlos para poder hablar con Villa y que volvamos a estar juntos por siempre.- lo solté.-

- Martín: Eso último fue muy cursi.- sonreí y negué bajando la mirada.-

- Lo soy pero prométeme que cuando llegue a viejita y me de Alzheimer vas a recordarme lo cursi que solía ser hablando del amor que tenía por Juan Pablo Villamil.

- Martin: Ya mejor te dejo ir porque estás comenzando a asustarme con tus cursilerías.-

Fruncí las cejas y le mostré en dedo medio.
Él una vez mas sonrió, abrió la puerta y salió pero antes de cerrar me miró.

- Martín: Lo prometo.- guiñó su ojo y cerró.-

Puse mi cinturón de seguridad, encendí el carro y arranqué.

Agradecía tanto la charla que tuve anoche con Sharon. Ella me había ayudado bastante.

Flashback

- Sharon: ¿Y bien?- preguntó con los brazos cruzados.-

Estábamos en el departamento de Dylan, decidí venirme para acá después de salir como una cobarde del concierto.
Sharon no había podido ir al concierto al final pero cuando la llamé vino corriendo a verme.

- Lo amo, pero no se... Creo que con ese beso y esa canción...- sobri mi nariz.- creo que fue su forma de despedirse y alejarse de mí.- la miré haciendo un puchero.-

- Sharon: Te diré esto rápido y sin pelos en la lengua.- respiró.- Minette, si ese hombre te hace feliz, entonces no seas pendeja y arregla las cosas de una maldita vez. No pienses en como terminará, chinga solo disfrutalo.- tomó mis manos.- te prometo que si ese imbécil vuelve a romperte el corazón, entonces voy y le pongo unos buenos trancazos y después vamos a comprar unos tequilitas y nos ponemos hasta la madre.- ambas reímos.- Vivir con miedo no sirve de nada, corazón. Tu vive y manda a la verga a los demás.- limpió mis lágrimas.-

Fin del flashback.

50 minutos mas tarde llegué al lugar que Carlos me había mandado por GPS.
Decidí llamarlo para hablar con él a solas y antes de que me presentará a su familia. Al final el consejo de Martin había sido una excelente idea.

- Nett ¿Ya estas aquí?- pregunto feliz.-

- Amm... sí, ya estoy afuera.- respondí nerviosa.-

- Muy bien, ahora mismo salgo por tí. Mi familia estará encantada de conocerte.- cerré los ojos sintiéndome culpable.-

- Aquí te espero.- fue lo único que pude decir y colgué.-

Quité el cinturón de seguridad de mi cuerpo y respiré hondo antes de salir del carro. Levanté la vista y Carlos se aproximaba a paso veloz.

- Carlos: Por fin llegaste bonita.- dijo al estar frente a mí.-

Me saludo con un beso en la comisura de mis labios y le sonreí.

- Carlos... yo...- inhale.- quiero que hablemos sobre...ya sabes...- quite mi mirada de la suya.-

- Carlos: Ya lo haremos pero primero quiero que conozcas a mi familia.

Hablaba tan entusiasmado.

- Quiero que hablemos ahora porque necesito contarte algo.- hablé desesperada.-

Asistió con una sonrisa de boca cerrada. Recargué mi espalda sobre el frente del carro y Carlos hizo lo mismo junto a mi.

- No se como empezar a...a decirte eso.- tartamudee.-

- Carlos: ¿Que te parece con un primer beso para nosotros?- sentí sus ojos sobre mi.-

- Esto es serio, Carlos. De verdad que lo es.- crucé los brazos.-

- Carlos: Lo siento. Entonces dime que es lo que pasa.

- ¿Recuerdas que hace dos días me llamaste para decir que no querías presionarme y eso...?- gire mi cabeza para mirarlo y éste asintió.-

- Pues ese día estaba borracha.- tome aire para decirle lo demás.- te dije que sí pero lo hice sin pensarlo. Tenia gran cantidad de alcohol en mi cuerpo que ni siquiera sabía lo hablaba o hacía.- me separé del carro y me puse frente a él.- quiero disculparme por haberte ilusionado, te juro que no quería hacerlo.-

Su ceño se frunció. Creo que estaba molesto.

Pero claro que está molesto, tonta ¿Que esperabas?

Ahora fue el quien cruzó los brazos.

- Carlos: ¿Porque estabas ebria?- me miró frío.-

- Justo ese día decidí dejar a un lado la tristeza que tenía y salí de la cama para volver a ser yo pero horas mas tarde mis amigos aparecieron frente a mi puerta y con ellos Juan Pablo.- rasqué mi cuello.-

- Carlos: ¿Y porque no me dijiste que lo estabas justo cuando te llamé?

- En primera, creí que te habías dado cuenta al escucharme hablar.- reí nerviosa pero el semblante de él era serio.- Ufff, no lo sé, Carlos.- tomé su brazo.- de verdad lo siento mucho, perdóname.-

Él se apartó de mi lado y se alejó unos cuantos pasos.
Sabía que estaba enojado, por la postura de cuerpo pero él solo trataba de relajar su rostro.

- Carlos: ¿Lo sigues queriendo, cierto?- alcé las cejas sorprendida.-

Esperaba cualquier insulto o reproche a mí pero me sorprendió tanto lo que preguntó.
Así que como respuesta sólo asentí.

- Carlos: ¿Sabes? siempre supe que si alguna vez tu y yo llegábamos a estar juntos.- dio una media sonrisa.- tú no ibas a estar del todo conmigo.- tomó aire.- jamás ibas ser mía y se que eso tal vez suene machista.- río.- pero es verdad, y... Y desde la primera vez que te vi  junto a Villa, noté como ambos se miraban y como él te miraba como si fueras su vela en la obscuridad, o tal vez la última estrella en cielo.- sus ojos se habían puesto rojos.-

Me estaba rompiendo todo lo que estaba diciendo, me sentía la peor del mundo por herirlo.

- Carlos... Perdóname.- suspiré cabiz baja.-

Volvió a acercarse a mí y y tomó mi mentón.

- Carlos: No tengo nada que perdonarte. Gracias por ser sincera conmigo, Minette.- acarició mi mejilla.- Haría cualquier cosa por tí, incluso dejarte ir para que estés con quien es el amor de tu vida.- sonrió con tristeza.- no debes sentirte culpable de nada ¿si?

Asentí con pesar.

- Carlos: Ahora ve por ese colombiano que usa pupilentes para mentirle a todos sobre que tiene ojos verdes.- ambos reímos.-

- Te quiero Carlos.- lo abracé.-

- Carlos: Y yo a tí, Nett.- susurró.- anda no pierdas más el tiempo.- se separó.-

- Pero tu familia...

- Carlos: Les diré que mi amiga tuvo una emergencia y tuvo que irse, no te preocupes. Otro día los conocerás.- sonrió.-

Volví a abrazarlo y besé su mejilla.

- Te mereces mucho más de lo que yo podía ofrecerte, Carlos, cualquier mujer que esté a tu lado será una afortunada.- susurré en su oído.-

Me separé de él y me metí al carro.
Arranqué y tomé rumbo de regreso a la cuidad.
Carlos sin duda era un hombre increíble y pedía a la vida que le pusiera una buena persona en su camino. Él lo merecía.

Ahora sentía un peso menos sobre mí, y estaba tranquila porque las cosas terminaron mejor de que yo esperaba.
Todo estaba saliendo demasiado bien pero bien dicen que es malo cantar victoria porque todos sabemos que la vida puede dar un giro de 360 grados.

Por andar con la cabeza en otro lado, no me fije que se aproximaba una curva, intenté rápidamente girar el volante pero lo gire de mas. Todo pasó tan rápido, intenté frenar pero era demasiado tarde. Solo escuché el rechinar de las llantas y como el cobre del carro chocaba, fui a estamparme contra un árbol grande que se encontraba cerca.
Senti un horrible golpe en la frente, me había golpeado con el volante.
Las bolsas de aire no se habían activado sino hasta después.
Sentí como los vidrios del parabrisas caian sobre mi rostro y pasaban cortandolo.
A lo lejos escuchaba mi celular sonar, intenté moverme para buscarlo pero me dolia el cuerpo y de apoco fui cerrando los ojos, luchaba por seguir despierta y gritar pero ya no resistí, no pude mantenerme despierta y dejé que mis ojos descansarán un poco.


Buenaaaaas!
¿Que tal, como van?
Aquí les dejo otro capítulo más. Gracias por el apoyo que le están dando a esta historia <3
Quería contarles que ya estamos en los capítulos finales de esta bella historia llena de dramas de Minette y Villamil.
Besos 💋😽

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