Narra Juan Pablo Villamil

Hoy tenia que aprovechar el tiempo que tendría a solas con ella para poder decirle absolutamente todo. Sabía que era muy necia y orgullosa pero ambos necesitábamos cerrar para siempre este ciclo que quedó inconcluso hace tiempo.
Era el momento para decidir soltarnos y seguir con nuestras vidas o darle un punto y aparte a esta historia y continuar escribiendo en este libro que los dos habíamos comenzado a escribir desde adolescentes.

- Isaza: ¡Vargas!- gritó desde el living.-

- Martín: ¿Que pasa perro?- respondió el menor saliendo de la cocina.-

- Isaza: Tú no, la otra Vargas.

- Martín: Ah. ¿Ya es hora?- se dirigió a mí.-

- Eso creo.- dije comenzando a jugar con mis manos.-

- Minette: ¿Hablabas?- salió de su habitación y caminó hacia Isaza.-

- Isaza: Iremos a una tienda de música.-

- Minette: ¿A que?- habló seria.-

- Martín: Necesitamos comprar unas cosas...- se puso nervioso ante la mirada seria de su amiga.-

- Minette: ¿No las pueden comprar en Miami?

- Isaza: No... Bueno si pero no creo que nos de tiempo porque llegando tenemos algunas entrevistas...

- Minette: ¿Y sus maletas? ¿Ya las hicieron?- Ambos se miraron y asintieron ante las preguntas de Minette.-

- Minette: Bien pero no tarden.

- Martín: Bueno nos vemos al rato.- Los dos se dirigeron a la puerta donde al abrirla se encontraban Dylan y Simón.-

- Dylan: ¿A donde con tanta prisa?

- Martín: A buscar una tienda de música.-

- Dylan: Vale, compermiso.- se abrió paso para entrar al departamento.-

- Isaza: Usted.- lo detuvo.- y usted.- puso su mirada en Simón.- vienen con nosotros, queremos que nos ayuden.-

- Simón: Pero apenas voy llegando perro, yo paso.- se negó.-

- Martín: Vamos.- hablo fuerte a su hermano mayor y lo tomo del hombro asiendo una leve presión.-

- Simón: Ya va, ya va, Martín.-

- Dylan: Adios Netti.- gritó desde la puerta que después se cerró.-

- Minette: ¿Que tu no irás?- preguntó fría.-

- No, me quedaré hablando contigo, te dije aun no terminabamos.-

- Minette:Y yo te dije que ya habíamos terminado esa conversación.- tomó las llaves de su carro y su chaqueta color negra que estaba en el sofá.- me voy, si quieres hablar puedes hacerlo con las paredes y los muebles.- comenzó a buscar las llaves de su departamento.- ¿Las llaves?-

- Aquí las tengo.- se las mostré.- y no te dejaré salir hasta que hablemos.- caminé rápido a la puerta y cerré con llave.- Bien, ¿en que estábamos?- me acerqué peligrosamente a ella.-

- Minette: No Villamil, ahora dame las jodidas llaves que tengo que ir a ver a mis padres.-

- Nunca te olvidé.- la miré y ella frunció el ceño.- te fuiste físicamente pero jamas te fuiste mi mente. Te fuiste de mi lado y jamas puede hacerlo.-

- Minette: Yo no me fuí, tú me dejaste ir.- caminó hacia la puerta.- ahora abre la puerta.-   negué.-

- Ya te dije la regla.-

- Minette: ¿Eso quieres? Está bien.- caminó hacia mí.- Tú me dejaste ir, tu no hiciste nada para impedirlo, fuiste un estúpido. Era tan fácil hacerme feliz pero todo lo hiciste complicado, le dimos muchas vueltas a ese asunto. Nunca exigí grandes cosas.- se dió la vuelta y se sentó en uno de los sofás.- solo quería que me amarás y que te quedarás conmigo por muy difíciles que fueran las cosas.-

- Estaba confundido, vamos entiende era un estúpido adolescente.

- Minette: ¿Confundido de que? ¿De saber sí aun me "amabas" a mí?.- hizo comillas con sus dedos.-¿o porque comenzabas a salir con alguien más? creo que éramos muy ingenuos para saber el significado de esa palabra.-

- Yo si te amé, te amé como no tienes idea, solo que no se que pasó, sentía que esa magia, esa conexión que tenía nuestra relación se iba esfumando no se.- me agarre el cabello con desesperación.- nunca se lo dije a nadie, solo a Laura mi hermana. Cada que salía con alguien, siempre te buscaba en cada una de ellas.-

- Minette: ¿Qu-que?

- Buscaba en ellas algún rastro tuyo pero nadie era igual a tí, tú eres única Minette. Y desgraciadamente me di cuenta demasiado tarde.

- Minette: No me hagas esto Villa, por favor.- sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas.- no me digas estas cosas, porque me costó tanto tiempo poder enterrarlas.- se levantó del sofá y comenzó a dar vueltas por el living.- si tan solo supieras cuanto esfuerzo, ansiedad y lágrimas me costó volver a reconstruirme, entenderías tantas cosas.- se paró y me dio la espalda.- una de las principales razones por las que me fuí, fuiste tú.- abrí los ojos con asombro.- me fuí porque me cansé de verte feliz con una y con otra y no me mal entiendas, yo siempre quise y desee tanto la felicidad para tí, que pudieras encontrarla a lado de quien te mereciera. Solo que yo me preguntaba cada noche ¿Porque tu si pudiste continuar con tu vida y yo no? ¿Porque tan rápido decidiste borrarme de tu corazón y yo no podría hacerlo contigo? ¿Que tenían ellas y que yo no? Ahí fue cuando descubrí que la frase "Si tú eres feliz, yo soy feliz" no es verdad. ¿Porque? Porque mientras tú lo eras yo estaba hecha mierda y por mas que traté de hacerme la fuerte y fingir que no me importaba mas me hacía daño a mi misma.- se dió la vuelta y me miró.- A veces desearía no a ver tardado tanto en darme cuenta en que la única persona a quien tenia que convencer era a mí.- y las primeras lágrimas salieron de sus ojos.-

- Nett...- me acerqué mas a ella.-

- Minette: NO ahora calla tu y déjame terminar.- hablo firme.- no miento al decirte que has estado en mis pensamientos desde que regresaste, que de alguna u otra forma siempre vuelves y te cruzas en mi mente. Juan quiero que sepas también que tu fuiste mi primer amor y que pasaron muchos años para que yo volviera a creer en el amor y decidí intentarlo y arriesgarme de nuevo con Julián.- sus manos temblaban, ahora entendia porque le afectaba que él fuera a casarse, porque tenía tantos nervios el día que fuimos a la revista, ahora todo tenia sentido.- y bueno después él volvio a romperme el corazón revolcándose con la que ahora es su esposa.- rio amargamente.-

- Perdóname.- tomé sus manos.- perdóname por favor, no sabía que hasta ese grado llegué a lastimarte.- llevé su mano izquierda a mis labios y la besé.-

- Minette: Ya no hay nada que perdonar Villa, de verdad, nos perdone a ambos desde hace mucho.- sonrió y me miró.- te quiero demasiado Juan Pablo.-

Sus manos fueron hasta mis mejillas y las acarició dulcemente y después sus dedos comenzaron a delinear mis cejas, mi nariz y finamente mis labios. Nuestras miradas se cruzaron y nuestros rostros poco a poco iban acercándose. Sentí su cálida respiración mezclándose con la mía y fue ahí donde finalmente pude sentir el roce de sus suaves labios sobre los míos.
La tomé de la cintura con ambas manos para acercarla más a mí, quería sentirla tan cerca mío y ella subió sus manos a mi nuca.
El beso era lento, era un beso que los dos necesitábamos tanto. Nuestos labios se reconocieron al instante de pegarse. Mi lengua pidió permiso a su boca para poder encontrar a la suya y al momento en que se encontraron, comenzaron a danzar juntas. Luego de un largo tiempo ambos comenzamos a quedarnos sin aire y ella se separó de mi lentamente. No abrí mis ojos, porque tenia miedo de que al abrirlos me diera cuenta que todo habia sido un sueño. Pegué mi frente con la suya y acaricié sus mejillas.

- Yo también quiero demasiado Minette.- hablé y volvió a pegar sus labios con los míos.-

Esta vez el beso fue subiendo de intensidad y a pasos torpes llegamos a uno de los sillones y sin despegarnos me senté y Minette se colocó a horcajadas de mí. Mordió mi labio y ambos reímos en medio del beso.

- Sigues teniendo esa costumbre verdad?- Dije separandome de ella.-

- Minette: Shh.- pegó uno de sus dedos en mis labios.- cállate y bésame.- susurró.-

Y fue cuando nuestro tercer beso se hizo presente. Mis manos apretaron mas su cintura y de poco fui metiendolas debajo de su blusa y comencé a acariciar su tibia piel, cuando lo hice sentí como se erizaba. Ella comenzó a jugar con mi cabello con una mano y su otra mano fue al final de mi playera para comenzar a acariciar mi abdomen.

Todo iba bien hasta tocaron la puerta y eso hizo que ella gruñera con enojo.

- Minette: No abriré.- dijo pero volvieron a tocar mas fuerte causando que Charlie corriera a la ladrarle a la puerta.- Maldita sea.- se levantó.- dame las llaves.- sonreí y se las di.-

- ¿Y quién era?- dije a ver que regresaba molesta a la sala.-

- Minette: Se equivocaron de puerta...¡Uy! creo que alguien despertó.- rio y bajo su mirada a mi pantalón.-

- Mierda, no me di cuenta.- me sonroje y busqué algo con que taparme.-

- Minette: Ten.- me aventó su chaqueta que era lo mas cerca que tenía.- ve al baño mientras voy a casa de mis padres a dejar a Charlie.- soltó una risa.-

- Oye no te burles que esto es culpa tuya.- ella negó divertida.- esperame quiero ir contigo, claro si me lo permites.-

- Minette: Anda te espero, no tardes campeón.- se fue para la cocina riendo.

Esta mujer me tenía mas loco de lo que yo pensaba.