La sorpresa que nos había dejado Sebas nos dejó impactada ya que no era un regalo cualquiera, pues se trataba sobre una casa amueblada y muy cerca de la famosa playa de Tulum. Una señorita se acercó a nosotros

-¿Ustedes son los recién casados? -nosotros solo asentimos- El señor Sebastián dejó esto para ustedes -nos entrego un sobre- dentro de el sobre podrán encontrar las escrituras de la casa a Nombre de la señorita Cervantes y el joven Park

-¿Escrituras? -mire a la señorita- ¿Está segura de ello?

-claro, el joven Sebastián hizo personalmente los trámites -Sonrió- sin más que decir les dejo mi tarjeta para estar a sus órdenes y me retiro -nos entrego una tarjeta y se fue-

-no puedo creerlo -rei leve- el sabía mis planes y los hizo realidad a su manera -tome mi celular y le escribí un "no era necesario pero gracias, gracias por cumplir mi sueño"-

-muy bien señora de Park -se acercó a mi y me cargo- se que esto es tradición en México y quiero hacerlo por ti -camino hasta entrar a la casa- bienvenida a su hogar brindado por tu hermano del alma

-bienvenido a nuestro hogar señor Park -lo bese- ¿Le parece si dejamos esto un rato?, ¿Le gustaría pasear por la playa con su esposa?

-Mi esposa -Sonrió- ahora sí puedo decir que eres mi bella y hermosa esposa -me bajo y tomo de mi mano- caminemos por la playa señora Park, disfrutemos estos días -se acercó a mi oído- tenemos una cosa muy importante que hacer y no me pienso mover de aquí hasta lograr mi objetivo

Ambos corrimos hacia la playa y disfrutamos de la noche, ambos nos metimos a el agua por un rato y esperamos a que se secara nuestra ropa, fuimos a la casa para cambiarnos y comprar comida para los día que estuviéramos aquí y así mismo pasear por el lugar para conocer mejor la zona. Fue un poco difícil ya que era de noche así que decidimos comprar algo en una tienda de conveniencia para comer y mañana saldríamos a explorar mejor la zona

Una vez llegando a casa cenamos y reposamos viendo una película, luego de ello recogimos y fuimos a el cuarto. La cama estaba adornada con un corazón de pétalos y unas rosas en medio, las tome para oler y las puse en un jarrón que había en la cocina

-te está quedando muy bien el ser la señora de Park -me miro y sonrió- ese brillo en tus ojitos es mucho mejor del que solía ser -se acercó a mi cuerpo-

-Por supuesto que lo es -deje las rosas el la mesita que había en el cuarto- esperamos mucho este momento y por fin somos esposo -tome su carita y le dejé un beso en los labios- se lo que estás pensando jimin

-¿Lo sabes? -tomo de mi cintura y llevo mi mechón de cabello hacia atras- entonces, ¿Que estamos esperando?

-mas bien ¿Que estás esperando tu? -lo mire a los ojos-

-Espero a qué tú me des acceso a lo que quiero, no quiero que tengas presión alguna

-Entonces tomame jimin -lleve mis manos hacia su cuello- sabes que no necesitas acceso para hacerlo

Sus besos y caricias eran con demasiado cuidado como si tuviera miedo a que me pudiera quebrar, esa noche sería testigo de lo que pasaría en aquella habitación. A pesar de que había pasado tanto tiempo desde nuestro último encuentro jimin era bastante cuidadoso, sabía que no quería lastimarme

Poco a poco fui despertando por la luz de la ventana que se colaba a la habitación. Mire el rostro de mi amado y sonreí mientras veía cada facción de el iluminada por el sol, a simple vista parecía un hermoso ángel y así mismo parecía una persona irreal, envolví mi cuerpo en la sabana y me asegure de tapar el cuerpo de jimin, camine hacia la ventana enorme de el cuarto y la abrí un poco para apreciar la vista que tenía y a los pocos minutos unas manos envolvieron mi cintura

-buenos días corazón -aunque el no podía ver sonreí y voltee a verlo- ¿Dormiste bien?

-Dormi excelente aunque me faltó mirar tu bello rostro a mi lado -tomo mi rostro y beso mi frente- ¿Te lastime anoche? No quise ser brusco contigo

-tranquilo que estoy perfectamente bien -tome su mano- ¿Que quieres hacer hoy?

-ir a desayunar, comprar algo para la comida, recorres el lugar y estar en casa con mi bella esposa mientras miramos alguna película y en la noche repetir lo que hicimos hace algunas horas

-entonces comencemos nuestro día -fui hasta el baño para darme una ducha-

Y nuestro día transcurrió con mucha normalidad, alguna que otra persona pidiendo fotos, algún saludo o simplemente conversando con nosotros, también pedimos discreción de dar algún tipo de información que pudiese arruinar nuestro viaje

Pasaron poco más de 10 días de estancia aquí, decidimos que ya era hora de regresar a casa así que hoy por la noche viajaremos para Corea dónde ya se encontraban todos los chicos

-¿Llevas todo? -mire a jimin- yo solo deje algunas cosas afuera para ducharme antes de irnos y lo demás lo guardaré al final

-llevo todo, también hice lo mismo que tú, deje ropa afuera y lo esencial para guardarlo terminando -tomo de mi mano- podemos hacer una última cosa -Sonrió victorioso-

-llevamos días haciendo todo lo que tú pides -lo mire algo sería-

-quiero asegurarme de hacer todo bien antes de regresar con nuestro pequeño -hizo las maletas a un lado y tomo de mi cintura- además debemos de llevar un pequeño regalo para el

Solo rei por su comentario y lo bese, algo por lo que después me arrepentí un poco, nos dejamos llevar hasta tarde por el momento, luego de ello nos duchamos antes de irnos. Tomamos nuestras maletas para meterlas a el carro y nos fuimos directo a el aeropuerto

Este capítulo no es tan largo, no se me ocurrió tanto así que lo dejamos hasta aquí

Recuerden que los amo

No olviden alimentarse sanamente