Las hojas caen, el sonido ocasionado por el viento me provoca escalofríos, el eco de voces en mi mente sólo trae recuerdos. Es desconcertante  la sensación que tengo al pensar en ello.

La lluvia empieza, sus rostros se mojan, pero no de las gotas de agua provenientes del cielo, son a causa de las lágrimas que dejan salir por su dolor. Es el dolor de aquellos que realmente aman, pero no para aquellos que olvidan.

Tristeza, desesperación, agonía. Otros sufren, aún que sería reconfortante decir que mis víctimas no sufren al morir, hasta eso,tengo el cinismo de admitir. Los que aún estamos en vida, seguimos sufriendo y disfrutando, nada es fácil. Nadie se preocupara por mi, más que mi familia, pero no apoyan mi deber. ¿Que más da? La soledad aveces es mi aliada, no debo sufrir por eso siempre a sido de esa manera.

No hay que arrepentirse, sólo es vivir. No hay decisiones buenas o malas, sólo son decisiones que tomamos según nuestra conveniencia, al final ambos caminos tienen consecuencias, todos pagamos en su momento.