Intercambiaron miradas que provocaban más incomodidad en ambos. — ¿ Qué tal tu trabajo ? — No era la pregunta apropiada. ¿ Qué esperaba que contestará ? Las personas muertas son más agradables por que no hablan o quizás… " Me va de maravilla. Mañana tengo que asesinar a un empresario ¿ Quicieras acompañarme ? ". Esa serían algunas respuestas.

— Todo bien —. Sus palabras eran mejor que lo pensado. Pero no del modo en que contestó. ¿ Siempre sería lo mismo al encontrarse ?. Esperaba mantener una relación distante con él, pero no funcionaría y no era que su padre insisstiera, parte de él le pedía darse una oportunidad y hacer cualquier pregunta para seguir la platica.

— ¿ Deseas caminar ? —. Otra pregunta que tendría una respuesta corta.

— Claro —. Aprobó y sus manos las metió dentro de sus bolsillos. Dio dos pasos al frente para detenerse. — ¿ Qué no querías dar un paseo ? —. Voltear atrás sería significante y si no lo hacía conservaría su distancia si es que lo lograba.

— ¿ Qué hice mal ? —. Su mirada se encontraba fija a la nada del suelo. — Pensé que sería tu héroe y podrías seguir con mi deber.

— Yo fui ingenuo —. Eso destruiría la barrera que los separaba y lograría hacer que un corazón de piedra abandonará esa capa que cubre la superficie blanda y emocional. La sangre se podía congelar con cada suspiro de desesperación al no saber que decir. Su cuerpo reaccionaria en contra de su voluntad o quizás sería lo que realmente deseaba. Un abrazo significaría el fin de una guerra contra él mismo, una mirada sería suficiente para mostrar su debilidad. ¿ Aún había forma de reprimir esas palabras para borrar su error ? ¿ El salto en el tiempo sería de ayuda ?. — Se hace tarde —. Siguió con su camino y en ningún momento por temor miro atrás.

— Ser fuerte no significa que no puedas sentir —. Aún seguía inmóvil esperando mirar a los ojos a su hijo.

— El tiempo no espera a nadie.

— ¿ Qué te preocupa ?, no estaría mal usar esa técnica tan particular y dejar ser feliz a tu mente atormentada —. El abrazar y sentir el calor de otros le ayudarían a dejar caer parte de su peso que cargaba a diario. — Usa la.

— Es mejor guardar energía —. ¿ Quién dijo que no lo haría ? , pero no era el momento, aún no. No estaba preparado y tampoco se sentía digno de hacerlo.

— Siempre fuiste de pocas palabras —. Se formó una sonrisa en su rostro mientras recordaba el pasado. — Al tenerte por primera vez sabía que serias grande, no pude imaginar en que sentido. Un padre es ciego a la maldad de sus hijos.

— Deberías abrir lo ojos —. Su tono era una burla.

— Tú eres grande —. Era inevitable ver a alguien nuevamente que lo miraba con decepción. — Aún no lo puedo asimilar.

— Quieres que te diga una cosa: si, fue tonto huir y sin sentido. Pensar que podía conquistar al mundo y que tu no dejarias de pensar en mi por mis logros —. Sus miradas se cruzaron. — Lo logre y no como esperabas.

— Pensaría que un asesino es la peor de todo. Tú, salvaste al universo y nunca te agradecí —. La reverencia símbolo de respeto lo hizo sentir humillado. No por quien lo hacía o por que fuera una burla. Era por sus acciones.