30.- Cuando te sientas listo
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Dicen que las palabras son poderosas usándose correctamente... Así como cuando dicen que las palabras hieren más que los golpes físicos. Comenzaba a creer que sí.
Y también que, no a cualquier persona se le puede decir "te amo", eso, solo es para la persona verdaderamente destinada.
También comenzaba a creer que así es.
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30.- Cuando te sientas listo.
¿Por qué no te enamoras de alguien que sepa quererte?
De alguien que lo cambie todo nada más por verte.
De quien se sienta fuerte si camina de tu mano.
De un hombre que te llene aunque no te esté tocando.
Por qué no te enamoras de alguien como yo.
Para que no me duela tanto.
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A la mañana siguiente, las cosas iban saliendo bien entre ellos, de manera que el sanar ciertas heridas estaba dándose correctamente.
Ronaldo se había terminado de bañar. Estaba en perfecta salud aunque, a veces fingía un poco para recibir los mimos de Javier, quién no era nada tonto respecto a darse cuenta del engaño, pero también le gustaba consentirlo.
Con los cuidados de Javier se había sentido mejor realmente. Pero había cosas que arreglar en especial tras la noticia del embarazo y su posible paternidad.
Esa era una de las razones por las que había cancelado muchos de sus planes. Quería saber cómo estaba Lionel. Pero conociéndolo perfectamente sabía que por eso momento el Argentino iba a evitar a la prensa y seguramente a varios más también. Quizás a él incluso. Y esa era la realidad. Messi se había resguardado en el hogar de sus padres y no quería dar explicaciones de su embarazo, con el hecho de saber que se retiraba del fútbol para dedicarse a su bebé era suficiente para la prensa.
Por eso, prefería por al menos esos días no hostigarlo, tampoco quería que se sintiera estresado, presionado o algo mucho peor y eso vaya a afectarle al bebé.
Además también quería Ronaldo sentirse bien. Para tener las fuerzas suficientes y sobretodo el valor de no caer a sus brazos otra vez. Por él y sobretodo por Javier. Quién ya le había aguantado bastante y no se merecía sufrir más por sus estupideces.
El Portugués tenía la toalla alrededor de la cadera y se iba a cambiar cuando noto entrar a Javier... El Chicharito solo desvió un poco la mirada... aunque le gustaba lo que veía obviamente.
— Cris...
— ¿Dime, lindo?
Se acercó a tomarle la mano y se sentaron sobre la cama.
— Te amo.— Fue Javier quién lo dijo. Sorprendiendo a Ronaldo.
— Lindo yo tam-...
Aunque enseguida Javier lo silencio con los dedos de su mano.
— Quiero que me lo digas... cuando de verdad lo sientas...
"Ahora con la noticia de que pueda ser tu hijo, tú no sabes bien que sientes".
"Así que dime qué me amas cuando de verdad lo sientas de corazón".
"Quiero que salgamos de dudas respecto a quién es el padre del bebé primero y después poder estar juntos".
"Cómo debe ser".
— Si Javi...— Ronaldo sonrió.— Gracias de verdad por ser paciente conmigo...— Le beso las manos.
Aunque Javier sonrió, la realidad era que ya estaba también cansado de esperar, sufrir en silencio y recibir el dolor de ese llanto que no le dejaba tranquilo. Amaba a Ronaldo pero ya no podía soportar demasiado ese tipo de situaciones. Y con un bebé, no podría competir y menos si aún había sentimientos allí escondidos por Lionel que puedan salir nuevamente y dañar todo lo bonito que estaban formando.
— Ronaldo...
— ¿Qué?
— Se quién puede ser el padre del bebé también.
Así como también ya no podía callarse la verdad respecto a saber quién había sido el amante de Leo. Debía también ser sincero con eso. Pues lo había ocultado no solo para cuidar a Ronaldo en ese momento en que su salud se vio afectada, sino también proteger un poco la integridad de Guillermo quién no había tenido culpa en ese momento.
Pero antes de hablar, Ronaldo hizo lo mismo que él, y lo silencio con su mano.
— Dime después...— Sonrió ligeramente.— Por ahora, no es algo que quiera saber.
— ¿Estás seguro?.— Dudo Javier.
Aunque Ronaldo no sabía exactamente... no era algo que su corazón quisiera saber en ese momento... El recuerdo de escuchar a Leo gemir por los toques de alguien más le había dolido como ese instante en que lo vivió...
No estaba seguro de querer saber eso de ciertos detalles.
— Nosotros estamos bien ahora, ¿no?.— Ronaldo le beso las manos.
— Así es...— Javier le tocó la cara.
— Quiero seguir de ese modo Javi, estar contigo y que todo esté bien.
— Lo va a estar, ya verás...
— Y quiero ser fuerte especialmente por ti, por todo lo que has hecho por mi.— Ronaldo sonrió.
— Cris...
— Yo se que a veces tengo un carácter un poco digamos especial...
— Mamón.— Corrigió Javier.
— Si, eso.— Se burló Ronaldo.— Pero tú... has hecho cosas que no imaginé que haría...
— Como comer una quesadilla en la plaza.— Se acordó de eso Javier y le rodeo el cuello con los brazos.
— Eso también...— Sonrió el Portugués y enseguida lo jalo para sentarlo en sus piernas.— Haces que por ti haga cosas, que no imaginé y que me gusta experimentar.
— Me gusta eso de ti...— Javier le tocó el pecho desnudo.— Que aún siendo así como eres... te prestas a hacer las cosas.
"Y demostrar que no eres como dicen los demás".
Al decir ello, Javier se inclinó a darle un beso que Ronaldo correspondió. Aunque El Chicharito mantenía las manos en el pecho de su novio, este si se tomó la libertad de recorrer la espalda de Javier hasta detenerse a tocar parte de su piel.
— Y ya le paramos.— Se burló Javier.— Tapate que te vas a enfermar.— Se levantó y sujetó la playera para dársela.
— Pero te gusta lo que vez.— Se burló Ronaldo mientras se vestía.
— No voy a negar eso.— Comento juguetón dándole la espalda.
— A mi también me gusta lo que veo.— Siguió Ronaldo viéndolo caminar deleitándose con ello.
Tras vestirse, nuevamente lo mantuvo entre sus brazos.
— El día que te haga totalmente mío.— Siguió Ronaldo besando su frente.— Será un momento muy especial.
— Así será.— Javier lo besó nuevamente.
Sentía en su corazón, que las cosas iban a salir bien aún con cierta incertidumbre del futuro, pero estaban seguros, de que juntos, todo saldría bien.
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