────────────── ∘°❉°∘ ──────────────

Siempre me daba cuenta de como te sentías, lo que pasaba o esa sensación extraña cuando sabes que la persona que quieres no está bien.

Mi sexto sentido, intuición, instinto o como sea que se llame siempre me alertó...

Aún a la distancia.

Y esa distancia me hacía sentir mal.

Darme cuenta de que estabas tan lejos y yo sin poder hacer nada para ayudarte o hacerte sentir mejor.

* .:｡✧*ﾟ ﾟ･ ✧.｡. * * .:｡✧*ﾟ ﾟ･ ✧.｡. * . *.:｡✧ *ﾟ ﾟ･ ✧.｡. *.

┊┊┊┊                        °

┊┊┊☆                  •

┊┊🌙　　　 *

┊┊

┊☆　　°

🌙

12.- Corazón Roto.

Cuando Ronaldo llegó a aquel aparador de autobuses muy cerca del hotel de Lionel, el Argentino no contó con que, esperándolo sentado recargando sobre la puerta, Guillermo estaba ahí. Este al verlo se levantó un poco somnoliento pero le dedicó una sonrisa al sorprendido muchacho.

— ¿Que estás haciendo aquí?

— Quería verte...— Seguía sonriendo.

— Memo...

— S-se que... cuando tú y yo nos besa-...

— Espera...

Enseguida el Argentino lo interrumpió, y se acercó a abrir la puerta para que pudieran entrar, no quería hablar estando en el pasillo y para rematar que alguien los viera.

Cuando entró, el aroma dulce de Messi le atrajo más a Memo, seguramente era intensa la fragancia pues era la habitación del muchacho, o probablemente sea más que nada el hecho de tener sus sentidos aún más agudos en ese momento. También entrando, el Portero noto ese pequeño ramo que Lionel acomodo en un botecito para ponerle agua y dejarlo sobre el mueble.

— Son unas flores lindas.— Fue lo único que dijo, no indagó más.— ¿Esas te gustan?

— Se ven bonitas, creo que son una especie nativa de Qatar.— Había respondido pensando en la persona que se las había regalado.

— Tienes razón, nunca la había visto antes.

Aunque el joven sonrió, había algo entre ellos que no era fácil de explicar.

— Perdón por el beso...— Comenzó a hablar Memo.— Si quieres, podemos fingir que aquí nada paso.

— ¿Eso quieres?

— La verdad no...— Desvió ligeramente la mirada.— Leo... tu a mí, me gustas...

— ¿Qué?.— Eso lo sorprendió.

— Pero, si no sientes lo mismo, y ese beso no significa nada para ti... podemos ser amigos...

No era algo bueno para Memo, pues la amistad luego deriva a algo más intenso... Ser amigo de la persona que te gusta puede ser bueno maduramente hablando, pero llegará un momento en el que... Ser amigos y saber que esa persona se enamora de otra persona, puede llegar a doler.

Pero no importaba, Leo era alguien especial que en ese tiempo de convivencia había cautivado a Memo. Si no podía llegar a un noviazgo y el Argentino prefería una amistad con él... eso estaría bien. Aunque deseará otra cosa, se conformaba.

Pero no quería perderlo.

Se había acercado un poco más hacia Leo de manera que había poco de separación entre ellos, pero la mirada que se habían dado.

Afuera, todavía pensando en que hacer, Ronaldo no se había movido de su sitió, sentía el cuerpo extraño... era la tristeza de saber que probable pueda perder a la persona que tanto ama.

"Te daré el tiempo que necesites".

Siguió pensando en eso, pese a todo quería recuperarlo.

No quería perderlo.

En ese momento sintió el celular vibrar y tomo este viendo la pantalla...

— ¿Bueno?.— Trato de escucharse feliz, en vano.

— Perdón Cris, no quería molestarte...

En México era medianamente buena hora, o algo así... Javier estaba pensando en Ronaldo y sintió algo que le preocupaba, imaginando algo así decidió llamarle.

No había fallado.

— Tú nunca serás molestia para mí.

El Omega Mexicano sonrió ante ello, pero se puso serio, tras un suspiro que salió de la boca de su compañero.

— ¿Pasó algo malo?

No necesitaba explicaciones exageradas... Cristiano fue al grano, quizás platicar con alguien le ayudaría a sentirse mejor.

"Me pidió un tiempo y yo se lo di".

"Pese a eso, le dije que iba a reconquistarlo si era necesario".

"Pero entonces..."

"¿Por qué me siento tan mal?"

— Lo siento mucho amigo...— Javier en parte sabía cómo se sentía... ya lo había vivido anteriormente.

— No importa... estoy bien.

— Pero ustedes... ¿Terminaron?

Javier preguntó con curiosidad... En México la frase "darnos un tiempo" tiene un significado bastante importante...  Técnicamente es terminar "amablemente".

— Nunca me dijo que terminamos...— Suspiró Cristiano.

— Es que wey... acá en México es más o menos eso, por eso pregunté.

— Me dijo que le diera un tiempo, no que terminamos, también por eso me anime a decirle que lo iba a conquistar nuevamente...

— Si pero...— Javier se sintió un poco mal por ello.— ¿Qué más te dijo? Cuando le dijiste lo de reconquistarlo...

— No me dijo nada, creo que está bien si empezamos de nuevo... Si he de ganarme su corazón nuevamente... quiero hacerlo.

— ¿De verdad?

— De hecho, estoy cerca de su hotel... ¿Crees que sea buena idea si lo voy a ver?

— No lo sé...

Pero Ronaldo se había levantado de su asiento un poco más animado.

— Quizás, pueda salir con él ahora sí... si hablamos un poco...

— No es mala idea... has lo que creas correcto.

Javier no quería animarlo pues sentía una punzada en el pecho... era como si "algo no estuviera bien". Pero no quería decirle eso a Ronaldo pues la voz de su amigo se escuchó más animada ante ir a ver a su novio...

Tras despedirse, Ronaldo se animó un poco más, quizás todavía puedan cenar y hablar un poco. Ignorando el tema de que Lionel había conocido a alguien...

Nadie lo conocía mejor que él.

Tenía toda una vida de ventaja a su lado y probablemente si le recordaba a Messi los días felices, las promesas y todo lo enamorados que habían estado. Quizás todo ello le haga olvidar el hecho de conocer a alguien más.

Pero las cosas así no siempre funcionan. Y no era el caso.

Pues si llegar hotel, yendo directo a la habitación de Leo. No llegó a unos cuantos metros a la puerta de la habitación. Pues el aroma que tan bien conocía a Arroz con leche de su Omega lo embriagó de golpe.

El corazón le dolió...

Al sentir también otro aroma dulce que no supo reconocer...

Llegó hasta la puerta y tocó el picaporte... pero no hizo ningún movimiento más.

Pues pudo reconocer perfectamente los gemidos de Lionel detrás de la puerta.

El corazón le dolió... y eso acabó por romper en pedazos todos esos deseos que tenía por volver a recuperarlo.

────────────── ∘°❉°∘ ──────────────