Fue la decisión correcta. Tenia que ser. Ella había visto su poder y supo en ese instante que él sería el que derrotaría a Cell. Flotó sin dejar de mirar el rostro de su hijo. Se veía tan joven y tan inocente. ¿Por qué las cosas tenían que ser así? ¿Por qué ella no tenía el poder en lugar de él?

Su rostro reflejaba tanto miedo como incertidumbre, y ella tuvo que admitir que ella también estaba asustada por él. Él era su pequeño, su primogénito. "Yo sé que puedes hacerlo."

"¿Me quieres?" Gohan preguntó con voz tan insegura y temblorosa. "¿Quieres que pelee con Cell?"

"Rikku, no puedes hablar en serio." Piccolo dijo mientras aterrizaba alrededor del grupo. "Es solo un niño. ¡Piensa en lo que le estás pidiendo!"

"¿De verdad crees que haría esto a menos que supiera absolutamente que fue la decisión correcta?" Cruzó los brazos tratando de calmar su estómago. "Gohan se ha mantenido al día con todos nosotros desde que era un niño. Su poder es algo que el resto de nosotros no podríamos imaginar".

Caminó hacia su hijo y se arrodilló para mirarlo a los ojos. Ella tomó sus mejillas en sus manos, sus nudillos estaban amoratados y ensangrentados. "Mírame Gohan", susurró y le sonrió cálidamente. "Dime algo. ¿Te ha resultado difícil seguir el ritmo de nosotros? ¿Estábamos Cell y yo moviéndonos demasiado rápido para que lo vieras?"

"No, pude ver cada movimiento". Reclamó y apretó los puños a los costados. "¡Eso es solo porque ustedes dos no estaban peleando con toda su fuerza!"

"No sé sobre Cell, pero," Rikku bajó las manos para ahuecar los puños cerrados de su hijo. "Lo estaba dando todo". ¿No podía sentir la verdad? ¿No podía ver que su poder excedía el de ella? "Pensaste que me estaba conteniendo, porque estabas comparando el poder que sentías de nosotros con el tuyo. ¿Estoy en lo cierto?"

Al oír sus palabras, Piccolo se encontró ahogado por las palabras. "¿Es ... es esto cierto Gohan?" El chico no tuvo que responder por él para ver que era verdad. Vio el recuerdo y el asombro que permanecía en el rostro de Gohan.

"Si."

"En cualquier momento," Cell gritó impaciente. Rikku tomó a Gohan en sus brazos abrazándolo con fuerza.

"Gohan, ¿qué dices que ganas este para mí?" Ella le acarició la cabeza con una mano y mantuvo el rostro alejado del suyo para que no viera el miedo en sus ojos. "Gana esto para que todos podamos irnos a casa".

Gohan se estremeció en los brazos de su madre. Él vaciló antes de agarrarla con fuerza. Su madre contaba con él. Ella obviamente creía que él tenía el verdadero poder de golpear a la célula dentro de él. ¿Cómo podría decepcionarla después de todo lo que había hecho por él? "Está bien, mamá. Yo lo haré."

Su corazón se apretó y soltó a Gohan para besar su frente. "Ir a buscarlo." Con el corazón apesadumbrado, Rikku vio como su hijo se deshacía de los pesos de los hombros de su disfraz y se arrojaba al campo de batalla. Tuvo otra sensación del poder en el aire y Rikku frunció el ceño cuando sintió cuánto poder había drenado de Cell. Ahora eso no era justo. Gohan tendría la ventaja obvia y esa no era forma de aumentar su confianza. Ella quería que él ganara, pero lo haría con justicia.

"Oye Krillen, dame un frijol Sensu, ¿quieres?" Krillin vaciló un momento antes de entregarle uno. Se quedó mirándolo un buen rato y se tragó el nudo en la garganta. "¡Hey Cell! ¡Atrapa!" Ella le arrojó el frijol y sorprendió a la gente que la rodeaba.

"¡Eso es! ¡Ella oficialmente lo perdió!" Krillen decidió. A Rikku le pareció inútil tratar de explicar su razonamiento. Quizás se había vuelto loca, pero así era como se suponía que debían ser las cosas. Ella solo tenía ese sentimiento.

"¡Gracias Rikku, tomaré este frijol sin dudarlo!" tragó rápidamente, sintiendo el poder del frijol ya que no solo lo curó sino que lo llevó a su máximo poder una vez más. Qué tonto, pensó, acababa de sellar la muerte de su propio hijo. "Muy bien chico, ¿estás listo?"

Gohan respiró hondo y trató de recordar su entrenamiento. Tenía que creer en su poder, creer en su fuerza y ​​dejarlo todo. Como un trueno, ella retumbó, su voz rugió cuando un torbellino explotó a su alrededor y su poder aumentó y se elevó.

Rikku miró con absoluto orgullo y satisfacción. Al ver esto, ver a su hijo hizo que el apretón en su corazón se aliviara. "Ese es un niño, Gohan."

~ En la Casa Roshi ~

"¡No puedo creer esto!" Chichi dijo que su rostro se pegó a la pantalla ante las quejas de Bulma y Roshi. "¿Qué está pensando Rikku enviando al pobre Gohan ahí fuera?" Cogió el televisor sacudiéndolo como si intentara hacer que Gohan cayera a sus pies. Trunks y Goten se rieron y aplaudieron ante sus payasadas desde sus cunas, obviamente demasiado alerta y despiertos para dormir.

"Cálmate, Milk, estoy bastante seguro de que Rikku sabe lo que está haciendo." Roshi explicó tratando de calmar a la furiosa morena. Bulma se inclinó sobre la mesa de café con las manos en puños alrededor de su taza.

"Me pregunto si Gohan es realmente tan fuerte como dice Rikku. Es solo un niño... de nuevo." Bulma pensó en los viejos tiempos. Rikku apenas había salido de su infancia cuando se conocieron. Su fuerza había sido sobrehumana, algo que nunca antes había presenciado. Obviamente, la sangre saiyajin tenía algo que ver con eso, pero no obstante, era increíble pensar en ello. "Quién sabe, tal vez Gohan realmente pueda ganar".

"¡Por supuesto que puede ganar!" Chi-chi decidió dejar la televisión. "¡Rikku no lo ha entrenado durante los últimos tres años y un día para nada! ¡Va a sacar el alquitrán de Cell y luego volver a casa y estudiar! ¡No más peleas! ¡ME ESCUCHAS RIKKU! ¡NO MÁS!"

~ de vuelta al campo de batalla ~

"¡Puedes hacerlo Gohan!" Rikku le gritó a su hijo, animándolo. Sintió la presencia de Vegeta detrás de ella y miró hacia atrás con una pequeña sonrisa culpable.

"Lo dices en serio". Vegeta afirmó poniendo una mano en su hombro. "No estabas fanfarroneando."

"No, pero espero que no te moleste." Ella puso su mano sobre la de él sujetándola con fuerza. Vegeta podía sentir la necesidad de apoyo, la necesidad de comodidad. Vivió de sus emociones y vivió de su amor por los demás. Su hijo era importante para ella ... tal vez incluso más que él mismo. Le irritaba, pero lo aceptó ... un poco.

"¿De verdad crees que puede hacer esto?"

"Sí," miró hacia el campo de batalla y vio a Gohan y Cell medirse entre sí. "Hago."

"Bueno, entonces," Vegeta se cruzó de brazos. "Veamos qué puede hacer".

Gohan sintió la anticipación en sus huesos. Sus nervios estaban nerviosos pero no los dejó exponer en su rostro. Respiró profundo y largo manteniendo todos sus sentidos fijos en su oponente. Cell se lanzó y bloqueó. La pausa de una fracción de segundo le dio un momento para darse cuenta de eso. Una ráfaga de golpes le disparó y los bloqueó y los esquivó a todos. Lo estaba haciendo. Este pequeño calentamiento rápido sintoniza su moral y confianza.

Podía oír los vítores de su madre y eso le hizo sonreír por dentro. Su propia velocidad lo sorprendió incluso a él mientras bailaba y dejaba que Cell lo persiguiera. "Eres bastante rápido, ¿no? ¡Vamos a mejorar las cosas!" Con un rápido impulso de velocidad, Cell lo agarró, tomándolo con la guardia baja. Sintió que le golpeaban la cara y el estómago varias veces y su mente se quedó en blanco.

Los golpes picaron un poco, y lo único en lo que podía pensar era, ¿dónde estaba ese poder? ¿Dónde estaba esa fuerza que su madre dijo que permanecía dentro de él? ¿De qué había estado hablando? Pensó en su pasado, en su experiencia, y dejó que todo diera vueltas en su mente. Se empapó de los golpes y la sensación de su cuerpo golpeando el suelo con una fuerte explosión. Las rocas se derrumbaron a su alrededor y se sintió... bien.

Toda la tensión, todas las dudas se desvanecieron y se empapó de lo que solo pudo describir como una descarga de adrenalina. Con renovada confianza se puso de pie y se secó la sangre del labio. ¡Sí, fue una carrera increíble! Él sonrió y se puso en cuclillas de nuevo en posición listo para continuar.

Sí, pensó Rikku con una sonrisa en los labios. Ese es mi chico. Solo míralo. Se está divirtiendo muchísimo. No pudo contener el regocijo y su sonrisa se transformó en una amplia sonrisa. Puede que solo sea medio saiyan, pero era duro y verdadero en su corazón.

Cuando comenzó la segunda ronda, Gohan se encontró dando saltos. Explosión tras explosión fue lanzada hacia él y se sintió como un insecto evitando al matamoscas. Esquivó y tejió esperando que sucediera ese momento. Sabía lo que quería su madre y deseaba saber cómo podía liberarlo.

¿Qué le pasaba? Rikku se cruzó de brazos y frunció el ceño. Lo había estado haciendo muy bien. Ahora prácticamente estaba dejando que Cell lo derribara al suelo. "¿Qué estás haciendo Gohan?" Ella susurró. "Esto no es propio de ti."

Piccolo la escuchó susurrar y contuvo el impulso de abofetearla. ¿Qué no era propio de él? Nunca antes había tenido que pelear batallas tan grandes. El mundo nunca antes había descansado sobre sus hombros. Gohan no era Rikku. El era su hijo. Su corazón se estrelló contra su trhoat cuando la célula lanzó a Gohan a un cráter de rocas enterrándolo debajo. "¡No! ¡Gohan!" Maldita sea. ¿Estaba feliz ahora? Volvió a mirar a Rikku, quien solo podía mirar fijamente la pila de rocas. Ella lo estaba dejando morir. ¿Por qué?

"¿Estás feliz Rikku? Te dijimos que esto pasaría, pero ¿escuchaste? Bueno, tal vez escuches esto. Tu hijo está muerto Rikku. ¡Está MUERTO!"

"Te equivocas." Dijo ella con calma. ¿Por qué estaba jugando su hijo con Cell? Tenía que haber una razón. "Siento su energía. Está bien".

Los escombros cedieron y Gohan irrumpió a través de ellos con la cabeza sangrando pero su cuerpo levantado y listo. A pesar de los arañazos, parecía imperturbable. Sí, decidió Rikku, definitivamente algo estaba pasando.

Gohan se acercó con calma. Se había dejado tumbar entre los escombros y dejó que se hundiera en lo que tenía que hacer. Los pensamientos que habían estallado en su cabeza durante su pelea le habían hecho darse cuenta de lo que era capaz de hacer.

"Parece que te juzgué mal." Dijo Cell. "Eres mucho más fuerte de lo que creí".

"No tenemos que hacer esto". La voz de Gohan era sombría. No quería matar a nadie. No quería herir a nadie. "Esta pelea no tiene sentido, Cell." Cell se rió de él y le revolvió las entrañas.

"Suenas como tu madre." Cell bromeó. "¿De verdad crees que detendré mis juegos de Cell solo porque los encuentras sin sentido?"

"Sí."

"Siento decepcionarte, pero no lo haré. Si no luchas conmigo aquí y ahora, volaré la Tierra. ¿Qué sentido tiene eso?"

"No quiero pelear contigo Cell." Gohan susurró con dureza. "Puedes ser malvado, pero no tengo ningún deseo de matarte". Los ojos de Gohan mostraron la misma intensidad y determinación que había mostrado su madre. Cell tenía que admirar que para ser un niño había mostrado más descaro y poder que la mayoría de los luchadores que estaban en lo alto de la cornisa. Le dio hambre de más.

"Corrígeme si me equivoco, pero acabas de amenazar con matarme". Él rió. "Interesante, y lo que te hace pensar que puedes llevar a cabo esa tarea".

"Ahora sé lo que quiso decir mi madre. ¡Ahora sé por qué soy el único que podría derribarte!" Gohan bajó los ojos. Cuando Cell cuestionó su declaración, continuó. "Puede que no pueda derrotarte ahora, pero creo que es justo que te advierta lo que sucederá si me presionas". Sus ojos miraron a su madre. Ella permaneció tranquila y colectiva, sus ojos se llenaron de esperanza por él.

"Cuando yo era sólo un niño pequeño, había un Saiyajin llamado Radditz que vino a la Tierra. Me secuestró y me puso en su cápsula espacial. Me vi obligado a mirar y escuchar mientras Piccolo y mi madre intentaban derribarlo. Ellos no lo estábamos haciendo bien y tuve que escuchar sus gritos cuando Radditz la aplastó bajo su bota. Entonces sucedió algo, con cada grito me encontré perdiéndome en el dolor de escucharlo todo. Algo se rompió y esta poderosa fuerza no pude ' Ni siquiera comencé a explicarme coaccionado a través de mí y solo podía concentrarme en una cosa. Tenía que ayudar a mi madre ".

Cell escuchó, cada vez más intrigado por este "poder".

"Esa fue la primera vez que descubrí que tenía un poder oculto. No se detuvo allí. Lo encontré de nuevo, cuando desafié a Freezer a proteger a Krllen. Todavía no estoy seguro de lo que sucedió. Mi recuerdo de esos momentos son confusos. Todo lo que sé es que por unos momentos me convierto en una fuerza imparable ". Sí, imparable y muy peligroso. "Soy mucho más fuerte ahora, y mi madre cree que soy tan fuerte como ella. Si me rompiera esta vez, no se sabe qué tipo de poder liberaría, o qué tipo de daño causaría ese poder. . "

Rikku miró a su hijo un buen rato y ella sonrió. Él sabía. Eso estaba bien, decidió. Era bueno que ahora fuera consciente de su propio poder. Su hijo era un chico amable. No le gustaba hacer daño y no quería matar. Eso solo lo convirtió en lo que ella creía que era el verdadero héroe. Un verdadero héroe no querría herir o matar a nada ni a nadie. Sin embargo, harían lo necesario para mantener a sus seres queridos a salvo y seguros. "Gohan", las lágrimas amenazaron con caer cuando sintió el enjambre de amor y orgullo en su corazón. Además de eso, estaba la culpa subyacente por ponerlo en esta situación. "Lo siento."

Gohan sabe ahora lo que debe hacer y ha advertido a Cell de lo que está por venir. ¿Cómo reaccionará Cell ante esto y quién ganará cuando ese poder se libere? ¡Sigue leyendo para descubrirlo! "La malvada trama de Cell, el poder oculto de Gohan"