La noche había sido explosiva. Apenas había una parte del cuerpo de Rikku que no estuviera caliente u hormiguea. Su anterior encuentro con el sexo, si podía llamarlo así, estaba lejos de su mente. Anoche fue perfecta.

Su cuerpo había cantado a tono con el de él. Ella se inclinó y se inclinó ante los golpes y tirones de Vegeta. Sus labios se fundieron en besos calientes y humeantes que la dejaron pegajosa como mantequilla de maní en pan recién horneado.

Deseó que no tuviera que terminar. Incluso ahora, mientras los brazos de Vegeta se ataban protectoramente contra ella, lo añoraba. El olor de su sudor y sexo flotaba en el aire y suspiró. "¿Puedo preguntarte algo Vegeta?"

" ¿Qué es Karat?" Se inclinó mordiendo su cuello. Si no les hubieran quitado la cola, la suya se habría enrollado perezosamente alrededor de la de ella.

" ¿Por qué tuviste sexo con Bulma?" Ella lo sintió tensarse ante sus palabras. La pausa de dibujo la dejó incómoda y echó la cabeza hacia atrás. Sus cuerpos estaban desnudos en la hierba, no afectados por la brisa de la mañana de mayo.

" ¿Por qué preguntar sobre el pasado?" Finalmente habló, su voz ronca y distante.

" Quiero saber. Tengo derecho a saber. ¿Por qué hiciste eso si estabas tan interesado en mí?"

¿Por qué no lo soltaría? No quería introducir su descuidada aventura en la discusión. ¿No era suficientemente malo tener que aguantar las quejas y las quejas de la arpía de cabello azul todos los días? ¿No era bastante malo que él mismo tuviera un hijo mestizo con una mujer que había sido conveniente para liberar el calor que había acumulado durante años?

" No veo por qué tengo que explicarlo".

" Quiero que lo hagas. Respondería a las preguntas que han estado en mi mente", y en mi corazón, agregó en silencio.

" Bien", entró en detalles, no tanto como el contenido explícito, sino el escenario de la noche. "¡Me dejaste durante más de un año pensando, esperando y sintiéndome miserable! Has invadido todos mis pensamientos, todos mis momentos de vigilia y, sin embargo, todavía no has aceptado realmente lo que te he ofrecido. Incluso ahora que estamos acostados aquí, no digas nada, pero pregunta sobre algo que se suponía que era un castigo para ti y un alivio para mí ".

"¿ Te acostaste con Bulma para castigarme?"

" Así es. Podría haberme apartado fácilmente de la mujer sin siquiera mover mi muñeca, pero no lo hice. Tú, con tu fuerza de Super Saiyajin y tus heroicos esfuerzos te alejabas lentamente de mí una vez más. En el momento en que regresaste al suelo de la Tierra, abrazaste a tu hijo y apenas me miraste. "

" Estás siendo ridículo." Molesto, y de alguna manera horrorizado, Rikku agarró su ropa, pero su mano agarró su muñeca y la empujó hacia abajo sobre la hierba.

" No, escucha." Puso todo su peso encima de ella y vio como sus ojos se agrandaron por el miedo. "Me dolía, anhelaba y sufría, todo el tiempo mientras estabas deambulando por algún planeta aprendiendo nuevos trucos y riendo tu tiempo. Fui al espacio y te busqué. Volví con la cabeza colgando en el fracaso". Lo cual no era del todo cierto... había fallado, pero había estado enfadado como el infierno y había estado buscando pelea. "Quería que sufrieras como yo. ¡Quería que me quisieras a mí y a nadie más! Cuando vi a esa mujer dándome esos grandes ojos azules y ofreciéndome lo que tú tenías miedo de darme ..." La ira hirvió dentro de él y gritó su cuerpo volviéndose super y su aura parpadeando como una llama en el viento. "¡Un humano, maldita sea, un estúpido terrícola abandonado, Karat!"

Se apartó de un empujón, el sol asomaba por el horizonte iluminando su figura desnuda. Ella tembló a sus pies sin poder moverse. "Vegeta ... yo ..."

"¡ Si me vas a juzgar por sentirme así, entonces maldita sea, juzga a ti mismo también! ¡No asumiré toda la culpa por esto! ¡Podrías haberlo detenido! ¡Podrías haber venido a mí en cualquier momento y yo no lo haría! ¡He mirado dos veces a esta mujer! No habría podido evitar tenerte. Es a ti a quien quería y en su lugar tomé un humano ".

Oh Dios. Quería llorar de nuevo, pero sabía que a Vegeta no le importaría. Se puso de pie enderezando los hombros y mirando el amanecer. Vegeta tenía razón. Cuántas veces había estado tentada a verlo y no lo hizo porque estaba asustada... y porque quería cumplir una promesa a un chico del futuro. "Lo siento, Vegeta."

"Las disculpas no valen nada para mí en este momento".

" ¿Qué quieres que diga entonces?" Ella esperó un segundo y lo miró. Todavía estaba de espaldas a ella y respiraba con dificultad por la nariz.

" Nada", tomó su propia ropa. "Se acabó".

" ¿A dónde vamos desde aquí?" Se vistió esperando a ponerse su gi hasta que Vegeta hubiera hecho lo mismo. "Quieres que seamos compañeros".

" Somos compañeros".

" Dices que soy la única mujer para ti".

" Lo eres."

" ¿Y tu hijo?" Envolvió sus brazos con fuerza alrededor de su cuerpo. "Él es tuyo Vegeta. Así como Gohan es mío."

" No puedo cambiar el pasado de Karat. Fue un error, pero está hecho y viviré con las consecuencias. Sin embargo, me niego", volvió la mirada hacia ella. "Perderte por su culpa".

Una sonrisa jugó en sus labios y se apartó el cabello que le caía sobre la cara. "Será mejor que me vaya. Necesito preparar a Gohan para hoy." Ella mira hacia arriba y camina abrazándolo. No había terminado. Ella lo sabía. Había un retorcimiento enfermo en su estómago que le decía que la batalla entre ella, Vegeta y Bulma, estaba lejos de terminar.

Él no le devolvió el abrazo. Le tocó la cabeza y le dio un beso en la frente antes de apartarla de su pecho. "Nos vemos en el campo de batalla, Karat." Le dio la espalda y se lanzó hacia el cielo sin dejar nada más que un rayo de luz a su paso.

" Sí", susurró cerrando los ojos. "Nos vemos."

La mañana del 12 de mayo a las 9:00 am en punto, Rikku, Gohan y Piccolo volaron por el aire hacia la isla a 9 millas al suroeste de la ciudad al sur. El día finalmente había llegado, y a pesar de su cerebro agotado por la discusión con Vegeta, Rikku se mantuvo bien contra el estrés de la próxima batalla.

" Ve más despacio, Gohan", le gritó a su hijo mientras él comenzaba a alejarse. "Guarda tu energía para la batalla".

" Oh, cierto mamá", desaceleró su progreso, pero captó un movimiento delante de él y sonrió. "¡Oye mamá! ¡Es Krillen!"

Rikku sonrió, alcanzando a su viejo amigo y saludando. "¿Cómo te va Krillen? ¿Crees que estás listo para enfrentarte a un par de Androides?"

" Bueno," Rikku reconoció la expresión de duda en su rostro. "Supongo que estoy más preparado que nunca. Solo desearía que no tuviera que ser así".

" ¡Hola chicos! Miren, puedo ver la isla". Gohan anunció. La isla era pequeña en comparación con lugares como West City, pero la metrópolis de abajo estaba llena de gente y rodeada de pesadas montañas rocosas y océanos. En lo alto de una cornisa con vista a toda la ciudad, Rikku vio varias figuras familiares.

Bulma apretó a su bebé contra su pecho, y al escuchar su acercamiento saludó sonriendo. Teniendo su compañía estaban Tien Shinhan y Yamcha. Rikku bajó al suelo y escondió la sonrisa que quería extenderse en sus labios al ver al bebé Trunks.

" Hola Rikku," saludó Yamcha. "Llegan tarde. ¿Por qué les tomó tanto tiempo?"

" Wow, ustedes han estado haciendo ejercicio". Bulma felicitó al admirar la estructura más activa de Rikku y Gohan. El niño se había vuelto más alto y se parecía cada vez más a su madre cada vez que lo veía.

" Bulma, ¿qué estás haciendo aquí? Es peligroso."

" He venido a verte pelear tontamente." Ella sonrió haciendo rebotar al bebé ligeramente cuando él se quejó. "Oh, no te preocupes. Me quedaré un rato y luego me iré a casa."

La curiosidad hormigueó a Krillen y se asomó a través de Rikku mirando al bebé. "Esta puede ser una pregunta extraña, pero ¿cuál es el problema con el bebé?"

" ¿Es tu hijo Yamcha? Apuesto a que lo es." Gohan dijo bastante seguro de sí mismo. La cara de Rikku se retorció en una mueca cuando Yamcha anunció con dolor que el niño no era suyo.

" Si crees que es un shock, espera hasta que te diga quién es el verdadero padre".

Rikku no pudo contenerlo. Ella se rió y se arrodilló golpeando a Trunks en la mejilla. "Supongo que Vegeta no está en la buena lista de la gente en este momento. ¿No es así Trunks?"

" Ahora, ¿por qué dijiste que Rikku quería que fuera una sorpresa?" Rikku se mordió la lengua y se echó a reír.

" Lo siento, supongo que se me escapó".

" ¿Conocías a Rikku?" Krillin preguntó luciendo un poco traicionada.

" Bueno, sí, pero puedo explicar ..."

" ¿Quién te dijo su nombre? ¿Mamá te llamó o algo así?" Bulma preguntó y Rikku se rió nerviosamente.

" Bueno, no, fue solo una suposición. Quiero decir que es un apellido, ¿no? Bulma Briefs, Trunks Briefs, tiene sentido, ¿verdad?" Ella se rió incontrolablemente y se pateó mentalmente por abrir su gran boca.

Mientras Rikku esquivaba las preguntas, Tien miró a Yamcha. "Estoy sorprendido. Pensé que Rikku estaría un poco más molesto por el asunto. Quiero decir, se suponía que ella y Vegeta eran compañeros, ¿verdad?"

Resoplando, Yamcha miró a Bulma y Rikku mientras miraban al niño con los ojos. "Vegeta, te juro que si no fuera el doble de fuerte que yo, le daría un poco de sentido común". El hombre tenía dos mujeres hermosas a su disposición y le ponía enfermo pensar cómo el hombre había hecho a un lado a Bulma y al bebé sin siquiera una palabra amable. Debería haberse casado con Bulma cuando tuvo la oportunidad.

" ¿Quieres decir que no lo has visto?" Rikku preguntó cuando Bulma dijo que Vegeta no había regresado a casa en absoluto. Supuso que Vegeta habría ido a buscar comida o un par de horas de sueño antes de la pelea. En cambio, él estaba perdido y la culpa se deshizo de sus entrañas.

" Realmente no he querido seguirle la pista para ser completamente honesto. Ha sido un niño con toda esta terrible experiencia". Ella arrulló a Trunks sonriendo. "Uno pensaría que lo detuvieron a punta de pistola".

" ¿Te molesta? Que Vegeta no sea cariñoso contigo ni con Trunks."

" En realidad no " , dijo Bulma de forma puramente honesta. "Puedo aceptar que fue un impulso del momento. Lo que me molesta es que de vez en cuando lo pillo mirándome. Tiene esa tristeza en sus ojos que esconde con ese ceño fruncido y casi me da lástima".

Rikku asintió recordando esa mirada. No pudo ocultar la mueca de dolor que tuvo que compartir con Bulma. Nunca había sido egoísta en nada, y apestaba. "Bueno, él aparecerá. Tarde o temprano. No se perdería una pelea".

Vegeta se sentó en una isla cercana esperando el clímax de la batalla. Ya eran más de las diez y su paciencia se estaba agotando. ¿Qué había estado pensando la mujer? ¿Qué había estado pensando? Él le había dado exactamente lo que ella quería y, sin embargo, continuó alejándolo. ¿Cuánto tiempo tuvo que esperar antes de que ella lo aceptara por completo?

" Debe ser algún tipo de prueba. Sí", asintió con la cabeza apoyada contra una roca. "Una especie de broma cruel para poner a prueba mi resolución. Bueno, no me dejaré influir. Se lo mostraré ... ¡se los mostraré a todos!" Pisoteó con el pie por si acaso y apretó los puños. ¿Dónde estaban esos androides? Necesitaba desesperadamente algo que golpear.

Miró al sol, deseando tener uno de esos relojes o relojes para decirle la hora. El sonido lejano de una explosión llamó su atención y volvió los ojos hacia el cielo. Su estómago se retorció y sus venas se hincharon de ira cuando vio a las dos figuras flotando en el aire. ¡Los androides!

Observó cómo descendían a la ciudad. Ni siquiera había sentido su nivel de poder. ¿Cómo podría ser esto? Más explosiones se dispararon dentro de la ciudad forzando su mano. Dio un salto disparándose hacia la ciudad. Se tensó y se detuvo en seco cuando el hijo de Karat voló sobre su cabeza y pasó junto a él para buscar una forma en pánico en el agua.

Si el hijo de Karat estaba aquí, eso significaba que ella también. Miró hacia la ciudad y sintió los niveles de los kis más altos. Sintió el aura brillante de Karat brillando como un faro, y cerca estaba el ki del Namek, el resto de los poderes anormales debían ser sus amigos humanos.

Genial, toda la pandilla está aquí.

Whoosh, avanzando a la derecha. Espero que las secuencias sean más comprensibles ahora. Si no, tendré que empezar a poner palabras de nuevo. De todos modos han aparecido los androides y ya están provocando el caos. Sin firmas Ki para seguir, los luchadores Z se ven obligados a encontrarlos ciegos. ¿Qué pasará cuando se encuentren con ellos cara a cara? Descúbrelo en el próximo capítulo ... "Cambiando la historia ... ¡No mueras Rikku!"