Rikku voló en cámara lenta su nuevo cuerpo tembloroso y débil no solo por la herida, sino por el nuevo peso. La forma de Ginyu era tan voluminosa y pesada en comparación con su otro cuerpo y se sentía lenta al tratar de manejarla. "Tengo que orientarme correctamente". Miró a su alrededor tratando de sentir a su alrededor, pero no pudo. Cerró los ojos y su mente se enfocó tratando de conectarse con esta celda desproporcionada en la que estaba encerrada y relajada. Si no se conectaba con él y no se acostumbraba, nunca recuperaría el anterior. "¡Maldita sea! ¿Por qué es tan difícil?"

Ginyu se rió mientras atravesaba el aire rápido y seguro. El nuevo cuerpo era una bendición en el cielo y, a pesar de que era femenino, disfrutaba de la oleada de poder que corría por sus venas. Volando sobre el agua se acercó admirando todo su esplendor. "Tengo que decir que este cuerpo no es tan malo".

"Se ve bien Capitán," Jeice elogió para nada asustado por su transformación de Capitán. Había visto a su capitán cambiar de forma muchas veces y su poder ganaba más y más con cada transformación de poder. Este superaría cualquier límite que tuviera antes.

Krillin y Gohan miraron desconcertados a las siete bolas. No les tomó mucho tiempo encontrarlos a todos con el radar. Sin embargo, después de varios intentos de invocarlo, no hubo dados. Rikku tenía razón, tenía que haber algún tipo de contraseña o ritual detrás de ellos.

"¿Y ahora qué? ¿Cómo se supone que deseamos volver a nuestros amigos sin el Dragón?"

"No lo sé, pero no podemos dejar las Dragon Balls aquí. Deberíamos trasladarlas a una nueva ubicación".

Vegeta, que acechaba en la oscuridad, vio como Krillen y Gohan conversaban entre ellos. Una ducha rápida y un cambio de uniforme le habían hecho bien a su cuerpo, sin mencionar las pocas decenas de hombres que había matado en busca de las esferas del dragón. Se había sentido profundamente decepcionado cuando los chicos encontraron las bolas y no pudieron convocar al dragón. Si hubiera sabido que esos idiotas no sabían la contraseña, se habría quedado con Karat. ¡Malditos sean los dos!

"Oye, ¿sientes eso Krillen?"

La atención de Vegeta volvió a la realidad y sintió a su alrededor. Sintió la llegada de dos poderes. Explosión, debe ser la Fuerza Ginyu. Sabía que no debería haber confiado en Karat con una misión tan difícil. ¿Por qué demonios había creído que ella, de todas las personas, podría ser un Super Saiyan?

"¡Vamos Gohan, escondámonos! No me gusta la sensación que estoy sintiendo". Krillin, temiendo lo mismo que Vegeta, tiró de Gohan hacia un lado detrás de unas rocas enormes. Bajando su chi, se asomó por un lado para mirar a los visitantes.

Ginyu y Jeice aterrizan con delicadeza. Ginyu pudo sentir que algo andaba mal cuando encontró a todos sus hombres acechando en otra parte.

"Oye, mira Capitán. Alguien desenterró todas las bolas de dragón".

"Qué conveniente, pero ¿quién los desenterró?"

Una oleada de carcajadas llamó la atención de Ginyu y Jeice. Krillen salió de detrás de la roca detrás de él y Gohan se habían escondido. Al ver el cuerpo de Rikku, Krillen se sintió completamente a gusto y más prometedor para el futuro.

"¡Mira lo que trajo el gato! Chica astuta, le diste una paliza a ese matón de Ginyu y bien, ¿no?"

Jeice intentó, con absoluto fracaso, contener la risa. Ginyu siguió el juego y se encogió de hombros. "Fue una batalla admirable. Luchó bien". Buscando jactarse de su propio orgullo, echó hacia atrás el pecho femenino que colgaba frente a él empujando hacia afuera. Podría acostumbrarse a esto. "No fue fácil déjame decirte. El Capitán Ginyu fue un valioso consejo."

Aunque sabía que Rikku diría algo similar después de cada batalla, algo no sonaba bien en la declaración. "¿Le pasa algo a tu voz, Rikku? Suenas bastante grosero."

"Sí, bueno, eso es lo que le pasa a una chica cuando se ahoga".

"¡Trató de estrangularte! ¡Qué sucio tramposo!"

El juego casi había llegado a su fin. Cansado de hablar de sí mismo como si hubiera sido duramente derrotado, Ginyu dio un paso hacia las esferas del dragón. Krillen entonces notó a Jeice.

"Oye, Rikku, ¿por qué Jeice está contigo? ¿Se unió a nuestro lado o algo así?"

"Buena pregunta." Ginyu se rió entre dientes, apretando los puños listo para atacar.

"¡Krillen, cuidado! ¡Esa mujer no es mi madre!" Gohan asomó la cabeza por los ojos ferozmente en Ginyu, pero fue todo menos engañado. Esa mujer no era Rikku. Con su tapadera descubierta, Ginyu tomó su siguiente iniciativa y golpe. Golpeó con el puño la cara de Krillen.

Vegeta se había mantenido oculto durante toda la prueba. Él también había sentido que algo andaba mal. Sin embargo, si esa no era Karat, ¿dónde estaba ella?

"Eres muy perceptivo, chico". Ginyu se rió y miró a los dos humanos. El calvo, Krillen, parecía más que confundido y Ginyu podía ver el miedo en sus ojos. Sin embargo, el pequeño estaba más que furioso. Bien, más para jugar. "Digamos que voy a llevar el cuerpo de tu madre para una prueba".

"¡Qué dijiste!" El shock reemplazó al miedo y la ira. ¿Cambiar de cuerpo? ¿Cómo fue eso posible?

"Sorpresa," Ginyu retrocedió esperando su señal. Jeice giró la cabeza y aulló al cielo como un lobo. Su pose, actúa duro, pero piensa en gracia.

"¡Es hora de enfrentar la furia de la Fuerza Ginyu! Soy Jeice".

Ginyu encontró el cuerpo de Rikku perfecto para sus movimientos de Ginyu. Su cuerpo era largo, elegante y lleno de poder. Esto encajaba perfectamente con el baile, lo que él llama una introducción. "¡Ahora presentamos al nuevo y mejorado Capitán Ginyu!"

"¡Diles qué hora es bebé!"

"Es hora de que mueras".

Mientras tanto, Rikku se estaba divirtiendo mucho tratando de controlar la monstruosa forma de Ginyu. Incluso mientras volaba hacia la dirección en la que pensaba que se dirigían, trató de obligarse a concentrarse en los poderes de su hijo y Krillen. Su mente, y el cuerpo que le habían dado, todavía estaban separados. Ella se preguntó. ¿Era este el mismo sentimiento que tenía el Capitán Ginyu cada vez que reclamaba un nuevo cuerpo?

"Me pregunto..." Rikku hizo una pausa y aterrizó temblorosamente. Flexionó cada músculo desde las puntas de los dedos afilados de color púrpura hasta los dedos abiertos dentro de sus botas. Giró el hombro hacia atrás y trató de relajarse. "Mente y cuerpo, debo ser uno con este si alguna vez voy a conseguir el anterior".

Su hijo, Rikku sabía que estaba en peligro. Gohan, ¿sabría que era Ginyu en su cuerpo? Su hijo era brillante, pero ¿era perceptivo? "Gohan ..." Ella sintió su conexión, el bebé que había tenido al nacer, el niño que ella y Milk habían criado, y el luchador en el que Piccolo había despertado dentro de él. Su espíritu, su mente ... sintió su conexión y jadeó cuando sintió su espíritu. "¡Ahí están! Oh no, tengo que darme prisa. Ya están peleando. No te preocupes Gohan. ¡Ya voy!"

Empujando más allá de los límites de los cuerpos, Rikku corrió hacia la energía de su hijo y la energía del Capitán Ginyu. "Todavía no ha descubierto cómo fijar mis poderes. Bien. Esto nos dará la ventaja.

Ahora podía verlos. Krillen, Gohan y Ginyu todos encerrados en puños voladores. Jeice había detectado su nivel de poder. Bien, quería que supieran que estaba allí.

"Así que todavía estás vivo". Dijo Ginyu. La batalla había estallado después de que Jeice anunciara su llegada. Krillin y Gohan parecían desconcertados. Gohan particularmente echó un vistazo preocupado a la forma masiva púrpura del viejo cuerpo de Ginyu. Había algo mal. Los ojos parecían gentiles.

"¡De ninguna manera! ¡Mamá!" Sus ojos se llenan de lágrimas y piensa en su madre. Volar en la nube nimbus, comer en la mesa de Chichi, jugar en el bosque, nada de eso parecía estar bien en la forma en que estaba ahora.

"¡Gohan, sé valiente! ¡Debes vencerlo! ¡Créeme, sé que ustedes dos pueden hacerlo!"

"¿Has perdido todas tus canicas Rikku?"

"Voy a tener que estar de acuerdo con Baldy aquí. Calculé mi nuevo cuerpo en 180.000, ¡no hay forma de que estos pipsqueaks puedan coincidir!"

"¡Quizás, pero apuesto a que conozco ese cuerpo mucho más que tú en este momento! ¡No estás atrapado en su cuerpo, mente y espíritu! Sin un conocimiento completo no hay forma de que alcances el nivel máximo".

"¡Decir ah!" a la altura del desafío, Ginyu miró a Jeice. "Ya veremos sobre eso." Tomando nota, Jeice encendió su scouter cuando Ginyu comenzó a encenderse. Rikku se mantuvo confiado, el poder aumentó y su viejo cuerpo comenzó a brillar. La subida fue una subida lenta y cuando llegó a su meseta, Rikku sintió ganas de bailar por la victoria.

"¡Jeice! ¡Lee esto!"

"Uh, estás en 23.000". Jeice, desconcertado, murmuró las palabras. El capitán no iba a estar muy feliz.

"¿Qué fue eso? ¡Habla Jeice!"

"¡Oh, sí, es un capitán de 23.000!"

"¡Ja, sí! Espera..." La burbuja de orgullo de Ginyu estalló mientras miraba hacia abajo confundido.

"¡Se está debilitando!"

"¡Eso es imposible!"

"¡Aún no lo entiendes! ¡Necesitas unirte cuerpo y espíritu! ¡Krillen! ¡Gohan! ¡Muéstrale a este Ginyu Goon lo que quiero decir!"

Vegeta estaba más que perplejo. Toda la escena había sido un baile dramático tras otro. Cuando escuchó la voz de Karat desde la forma enfermiza de Ginyu, sintió ganas de golpear algo. Quería unirse a la pelea. Sus ojos bailaron antes de fijarse en Jeice. Perfecto. Ahora él podría divertirse un poco.

"¡Hey, mop top! ¿Por qué no escoges a alguien de tu tamaño?"

Jeice saltó y se giró para enfrentar a Vegeta. "¿Tú? ¿Qué estás haciendo aquí atrás? Pensé que te habías escapado como un perro con la cola entre las piernas."

"No asumas nada. Solo quería un buen asiento para verte a ti ya tu precioso Ginyu caer. Ahora que lo pienso, creo que preferiría tener el honor de hacerlo yo mismo."

"¡Ja! Sí claro. ¿Qué te hace pensar que puedes vencerme?"

"Mi compañero no es el único con fuerza." Para demostrarlo, Vegeta se lanzó hacia adelante. Ahora se llevaron a cabo dos batallas en la nave espacial de Frieza. Gohan, Krillen y Rikku se enfrentaron al falso Ginyu mientras Vegeta manejaba al aspirante a rompecorazones de cara naranja Jeice. Las cosas se veían bien, el poder de Ginyu luchó por mantenerse en un constante 23,000 y Vegeta tenía la ventaja total contra Jeice.

Sin embargo, Ginyu y Jeice no estaban listos para rendirse. El poder de Ginyu comenzó a aumentar cuando tomó las palabras de Rikku y se concentró en unir su mente y cuerpo. A pesar de la herida que Ginyu le dejó en el pecho, Rikku luchó junto a su hijo y mejor amigo. Tuvieron que derribarlo antes de que fuera demasiado tarde. Cayó al suelo después de un fuerte golpe y luchó por ponerse de rodillas. Volvió la cabeza hacia el cielo y estaba a punto de unirse de nuevo, pero una repentina explosión de luz hizo que su corazón saltara y volvió su mirada hacia el humo marrón sangriento en el aire que una vez fue Jeice.

"¡Vegeta! ¿Qué has hecho? ¡Esa violencia no tiene sentido!"

"¡Cállate Karat!" Realmente se disgustó al escuchar su voz de algo tan asqueroso. Ginyu pagaría por esto. "¿Te importaría no entrometerte? ¡Los Super Saiyajin tienden a ser violentos!"

"¿Qué?" Esto de Ginyu, quien sostenía a Gohan lloriqueando en sus puños. "¡No eres un super Saiyan!"

"¿Quieres interrogarme ladrón de cuerpos?" Lo mira de arriba abajo. "¿Ese tipo de comentario de alguien que tiene que tomar el cuerpo de una mujer para ser más poderoso? ¿Has tenido antojos últimamente? ¿PMS? ¿Necesitas un hombro para llorar?"

Krillin se rió a su pesar. "¡Jajajaja! ¡Sí, no te burles de él, Vegeta, él puede volverse loco por ti! ¡JAJAJAJAJAJA!"

Rikku se llevó una mano a la frente. "No estás ayudando a Krillen". Ella miró hacia arriba. Ginyu se veía bien furioso.

"¡Creo que será mejor que te ponga en tu lugar Ginyu!" Vegeta se lanzó hacia adelante golpeando a Ginyu con facilidad. A diferencia de Gohan y Krillen, que habían sido gentiles al no querer romper el cuerpo en el que Ginyu estaba, Vegeta no mostró piedad. Tenía al ladrón de cadáveres acostado boca arriba gimiendo de dolor. Vegeta se levantó listo para acabar con él. Lo sacaría a golpes del cuerpo de Karat.

A Ginyu no le quedaba otra opción tirado en el suelo. Este cuerpo se estaba volviendo más problemático de lo que valía. Abriendo un ojo, vio la salida. Vegeta tenía poder, y yo sería su poder que haría que el resto se desmoronara. "Ja ... ya veo. ¡Ven a buscarme Vegeta!"

Rikku jadeó al reconocer el tono en la voz de Ginyu. "No, si se apodera del cuerpo de Vegeta, ¡todos terminaremos! ¡Tengo que detenerlo!"

"¡CAMBIA AHORA!"

Rikku no perdió el tiempo. Ella se lanzó arrojándose frente a Vegeta haciéndolo congelar en el aire. La explosión dorada los rodeó y el mundo de Rikku se volvió negro.