Me desperté y hice lo mismo de siempre, nada cambio, hasta que llego el descanso; cuando iba caminando por el colegio para encontrar a mi hermosa princesa Sam, Javier y su equipo se acercó a mí y me detuvieron el paso, espero que después de hoy no tenga que volver a verlos

- miren quien tenemos aquí, nuestro sicario.

- cállate – ¿Cómo se le ocurre decir eso aquí? Aguien lo puede escuchar, estoy seguro que lo dejaron caer de chiquito.

- lo siento, no volveré a decirlo, solo te informo que nos veremos en el mismo lugar, para recoger tu premio y te daré una última oportunidad de unirte a nosotros.

- te diré que no, pero quiero el premio, espero que sean un gran premio.

- lo será, yo sé que sí, seguramente te gustará.

- y ¿Cuándo voy?

- a cualquier hora, hoy por supuesto, estaremos todo el día ahí, hasta las nueve de la noche, te veremos cuando quieras.

- entonces ¿A partir de hoy me dejaran en paz?

- si no quieres unirte a nosotros y no te metes en nuestro camino, si, te dejaremos en paz, no sabrás nada de nosotros.

- nos vemos allá.

Después de eso, tuve lo mismo de siempre, la misma aburridora rutina, las mimas clases aburridas, no quería estar ahí, pero tengo que graduarme para ver algo que me interesa. Salí de mi miseria, el maldito colegio, iba ir con mi novia, pero su amiga la invito a su casa, como hace tiempo no se ven, hoy van a pasar una noche de chicas, así que me devolví solo a mi casa. Cuando entre a mi casa, vi que no había nadie, así que rápidamente me puse mi máscara, mi arma y mi cuchillo, me puse la mejor ropa que tenía y camine al lugar secreto donde ellos estaban, al parecer es como un cuartel general para ellos, al parecer Javier llevaba a sus amigos ahí para jugar, pero sus amigos se fueron, solo se quedó con Lucas, y con el callado del salon. Llegue al lugar y los vi a los tres.

- ya llegué.

- y aquí esta nuestro amigo.

- no soy tu amigo.

- bueno, nuestro compañero, compañero que nos ayudó a subir al poder, sin Isa, habrá un hueco de poder y alguien tiene que llenarlo.

- no creo que eso pase, si ni siquiera hay poder ahí, no va a pasar nada malo, no es como si necesitáramos a alguien en el poder.

- puede ser, pero a lo que me refiero es que es mí oportunidad, sin Isa, nadie me podrá detener, si yo no subo a la cima, alguien más lo hará y terminará controlando todo.

- estás loco, sabes que te van a castigar los profesores, lo que pasaba con Isa es que su padre paga el colegio, sin su padre el colegio no existe, pero como no tienes un padre rico, no podrás controlar a los profesores.

- no, pero es que no me descubrirán, será un secreto, nadie sabrá, nadie dirá nada, le obligare a quedarse callados.

- eso no va a funcionar, pero está bien, has lo que quieres, mientras no me involucres en eso, puedes hacer todo lo que quieras.

- claro.

- y recuerda, si tocas a Sam, te mato, así que no la puedes tocar, ella es de mi propiedad y se que, si la vas a tocar, no será nada bueno, así que no la molestará.

- está bien – él solo sonrío – fue un gusto hacer un trato contigo, aquí tienes un premio – me lanzo una bolsa, yo me le acerqué a la bolsa y la abrí, estaba llena de billetes.

- ¿Qué es esto?

- tu pago, tu hiciste un favor y yo te lo devuelvo, había que pagarte de alguna manera, ya sabes, como muestra de un buen trabajo, ahora vete de aquí, ya sé que no te unirás a nuestro equipo, así que vete.

- lo siento, pero no me iré – me puse mi máscara y saque mi arma y le dispare en la pierna a Javier y cayó al suelo

- demonios, duele ¡¿Por qué hiciste esto?! ¡Teníamos un trato!

- ¿Y tú me creíste? – yo me reí - ¿Ustedes me creyeron? Yo les dije que los mataría y eso hare.

- Maldito, Mario, nos vamos, Lucas, tú lo entretienes y lo matas – el chasqueó los dedos y se lo llevaron, intente ir con él, pero Lucas se puso en mi camino y me cogió el arma y me la quito.

- tu no pasaras, vas a morir aquí – me lanzo el arma para algún lado.

- tantas personas me han dicho esto, pero ninguno lo logra hacerlo ¿Tú serás diferente?

- yo creo que sí – me manda un puño, pero yo le esquive y le pegue en la cara, pero no veo que le haya afecto – buen golpee amigo mío.

Volvió a intentar golpearme, pero yo lo esquivaba, no podía dejarme pegar, me rompería la cara, él era rápido, pero no tanto; yo corrí en donde él tiro mí arma, yo la cogí y me di vuelta, pero cuando me di vuelta el me dio un golpe en la máscara, rompiéndola, otra vez, yo me quite la máscara y la deje a un lado y le apunte con mi arma y le sonreí.

- bueno, no te disparare si me cuentas ¿Por qué estás en todo esto? ¿Por qué sigues a Javier?

- fácil – se acercó a mí y yo me aleje de el – él es mi amigo y yo lo ayudo en todo, por qué eso hacen los amigos – él se volvió a acercar y yo dispare al suelo cerca de su pierna y me aleje de el – además, si la gente te tiene miedo, no te van a juzgar, no te lo dirán en la cara que no te quieren cerca, porque tendrán miedo y no podrán decirlo, ya que es un problema ser gay, ser blanco, ser negro, ser moreno, ser rubio, ser heterosexual, de todo, ya es un problema ser persona, porque todos se alejan de las personan que son diferentes, pero si te tienen miedo, no te van a decir nada malo, al contrario te dirán cosas muy buenas, además le podre pegar a la gente cuando este molesto, como el saco de boxeo que grita, sin gritos, no me da la satisfacción que yo busco.

- puede que tengas razón, pero yo nunca haría eso, pero también disfruto hacerles daño a las personas, a ustedes, así que no soy muy diferente a todos ustedes – guarde mi arma – vamos a ver qué tan bueno eres.

- ¿Quieres una pelea?

- no, quiero hacer un picnic contigo aquí adentro ¡Obvio que quiero pelear contigo!

Él se acercó a mí y me intento patear, pero yo lo esquive y le pegue en la panza, él solo sonrió y me pego con el codo, me cogió de la camisa y me lanzó contra una pared, me intento golpear, pero yo lo esquive y él le pego a la pared, yo lo agarré de la cabeza y le di un cabezazo, parece como si no le doliera. Él me cogió del cuello y me pego contra la pared varias veces, luego me lanzo a cualquier lado, me intentó pegar mientras yo estaba en el suelo, pero yo lo esquive y le pego al suelo, yo le pegué una pata en la panza y salí corriendo de ahí. Él se acercó y yo le saque mi pistola y le apunte, pero no sé como pero me lanzo un barril de metal, no sé de donde lo saco, no lo sé; el barril me pego, él aprovecho esos segundos de distracción y me agarro la mano y la levanto para que no pudiera dispararle, me pego en el pecho, me dejo sin aire, pero no solté el arma, así que yo le pegue en la entrepierna y él me soltó. Yo me gire e iba a correr, pero el me cogió de la camisa y me detuvo, me cogió otra vez del cuello, me levanto, me pego en el estómago y me tiro al piso, me empezó a doler todo, creo que me rompió un hueso, o varios huesos. Él se puso arriba mío, creo que me iba a ahorcar o a pegarme en la cara, no me acuerdo, por qué antes que me pudiera hacer algo, yo lo bese, él acepto mi beso y nos empezamos a besar, hasta que sonó un disparo de un arma, de mi arma. Él cayó sobre mi y yo  lo aparte de mí, me levanté y le dispare varias veces, para confirmar si estaba muerto. No puedo creer que lo bese, sus labios sabían a coco, yo odio el coco, ni sabía que unos labios podían saber a coco. Después de casi vomitar por el sabor a coco, seguí el rastro de sangre, que seguramente era de Javier, eso me llevo a unas escaleras, aun lado de ella había unas barandillas, para que las personas no caigan al otro piso de abajo, las iba a empezar a subir, pero Mario me agarro de atrás y me hizo caer por las escaleras.

- adivino que ya acabaste con Lucas, pero yo soy diferente que él – le apunte con el arma, no es la primera vez que alguien me dice eso, pero todos terminan igual.

- no cometeré el mismo error que cometí con Lucas, te matare a la primera – el saco un cuchillo y me lo lanzo en la pierna ¿Qué mierdas? ¿Cómo lo hizo? Yo me distraje, por obvias razones, y él aprovecho para tirarme por las barandillas que estbaan a mi izquierda, pero yo le cogí del brazo, para no caerme, pero a él se le ocurrió la brillante idea de lanzarse conmigo, saltó hacia adelante y cayó conmigo, no creo que fue la idea más brillante, pero funciono, evito que yo pudiera subir.

La caída no me mato, pero si me dolió un poco, caímos como un piso y aun podía ver el lugar en donde caímos, todo estaba muy oscuro; me levante con un poco de dificultad, el lugar era muy oscuro y yo no podía verlo, mire por todos los lados, no lo veía, luego sentí que me golpearan en la cabeza, yo voltee a verlo, pero no estaba, se había ido, luego me intentó pegar, pero yo lo escuhcé y me gire, pude ver como él se acercaba a mí, y yome pude defender, él me lanzaba varios golpes y yo solo pude defenderme, protegerme la cara y esperar mi oportunidad. Él se cansó de pegarme, así que yo lo cogí de la mano y lo tire contra una pared y le pegue varias veces en la cara, hasta que me empezó a doler la mano, lo tire al suelo y le empecé a ahorcar, pero él me saco el cuchillo de mi pierna, yo lo solté un pequeño grito y me aleje de él, si lo seguía ahorcando me mataría con el cuchillo. Él se levantó y sonrió y grito esto es muy divertido, se veía demasiado feliz, quería quitarle esa sonrisa de su cara, pero no podía, tenía miedo, lo mejor era esperar a que él ataque primero, me intento clavar el cuchillo en el estómago, yo le cogí el brazo y detuve en ataque, él intento con todas su fuerzas llegar a mi estomago, pero no lo logro, así que me pego un cabezazo y luego un puño en la cara, yo lo solté, pero estaba muy lejos para que me clavara el cuchillo. Él camino hacia atrás y desapareció en la oscuridad, lo intente seguir, pero me preocupaba más mi vida que perderlo, porque si me acerco mucho me clavaria el cuchillo o eso pensaba; yo me acerqué a una pared, así el no me puede atacar por la espalda, luego lo vi, estaba corriendo hacia mí, me intento atacar con el cuchillo, pero lo esquive y solo me hizo un pequeño rasguño el el brazo. Yo le cogí la mano donde tenía el cuchillo, él intentó cortarme el cuello, pero yo no se lo iba a dejar tan fácil, con una mano detuve su ataque, sentía su cuchillo rozando mi cuello, yo le pegue un puño en la cara para alejar el cuchillo un poco de mí, cuando tenía el cuchillo algo lejos de mí, intente sacar mí cuchillo, pero el soltó su cuchillo y la cogió con la otra mano, maniobra que yo intente pero no me salió; así que rápidamente saque mi mano de mi bolsillo y cogí su otra mano, ahora yo sostenía ambas manos, mire su cara y vi que sonreía, tengo que hacer algo rápido. Tuve una loca idea, solté la mano de arriba y cogí su otra mano y solté mi otra mano, el aprovecho para pegarme en el pecho para intentar soltarse, pero no lo solté, no puedo, saque mí cuchillo, pero su cuchillo era más grande que el mío, así que no alcanzare a hacerle algún daño con el cuchillo, yo baje su cuchillo lo más abajo e hice que me clavara el cuchillo en la pierna, después de eso yo cogí fuerte el brazo y evite que pueda soltar, yo aproveche los pocos metros que teníamos y le clave el cuchillo en el cuello, pero él no murió al instante, con sus últimas fuerzas subió el cuchillo, haciéndome una gran herida en la pierna, yo grite del dolor y lo solté, el saco el cuchillo y se alejó un poco de mí, él tambaleaba un poco, yo no le pude sacar el cuchillo, así que aún tenía el cuchillo en el cuello, aunque no creo que viva mucho. Él se tiro encima de mí y ambos caímos, el levanto la mano con su cuchillo y la bajo rápidamente hacia mi cara, pero yo puse mi mano en su camino y su cuchillo me atravesó la mano, eso dolió demasiado, pero no tenía tiempo de gritar, así que me aguante mi grito y con la otra mano cogí mi cuchillo y lo saque de su garganta y se lo volví a meter en el cuello, luego yo lo aparte de mí y espere a que se muriera, tenía que asegurarme si murió y ver que ningú milagro lo dejara con vida. Luego de unos minutos dejo de respirar, yo saque mí cuchillo de su garganta y lo limpie y me le robe su cuchillo, era más grande y más bonito que el que me robe, camine hasta volver a las escaleras de la otra vez. Vi que la pistola estaba en el suelo, cerca de las escaleras, la cogí y subí las escaleras. Al subir las escaleras, no te que estábamos en un bosque, ni idea donde es, por suerte aun había un rastro de sangre que seguir, así que lo seguí, él estaba sentado en un árbol, yo me acerqué a él.

- no llegaste lejos.

- me duele caminar, así que pare para descansar, pero llegaste tu y adivino que me mataras.

- sí, tienes toda la razón, ya llego tu hora, ya maté a Luca y a Mario, ahora faltas tú, me sentiría muy mal si tu sobrevives y ellos no.

- ¿Puedo hacer algo por ti? Hare lo que sea, incluso te conseguiré una mejor novia que Sam, te puedo conseguir lo que quieres.

- primero no hables mal de Sam – le puse el cuchillo en el cuello – segundo ¿Puedes hacer que Isa este sola? Para hacer más fácil el trabajo.

- sí, creo que sí, ella ya salió del hospital, creo que puedo sacar a sus padres de ahí y tu haz el resto ¿Te parece? – le sonreí

- claro, hazlo, pero ya, que se está anocheciendo y puede que camino para allá me salga un loco, así que apúrate – el llamo por el teléfono y yo saque mi arma y se la puse en la cabeza.

- hola, como estas, si soy yo, ese mismo – él río, se veía muy nervioso, por obvias razones – bueno, lo que digo es que mis padres los invito a comer algo – se quedó en silencio – donde siempre y no se preocupe por su hija, estará bien, tranquila todo estará bien, si quieres un amigo se queda con ella – se quedó otra vez en silencio – entonces Cristóbal se va a quedar con ella, está bien, no yo no voy, tengo muchas tareas que hacer y si no las hago mi madre no me deja salir todo el año – el río – exacto, bueno les aviso a mis padres, adiós – colgó.

- listo, gracias, pero aún falta algo.

- sí, mis padres tienen que ir, si no van, los padres de Isa van a llamar a mis padres y si mis padres no saben de eso, pensaran que algo raro pasara y se devolverán a su casa y pueden que te vean en el acto con Isa.

- entonces llama a tus padres y no te hagas el listo – le apunto con el arma en sus partes íntimas.

- claro, no hare nada que te ponga en peligro – el volvió a llamar – hola, soy yo su hijo ¿Quién más? – él río nervioso – bueno lo que le iba a decir es que Nicole y Juan los invito a salir, son lo padres de Isa mi amiga, esos mismos, donde siempre comen, a las 7 de la noche, no yo no quiero ir tengo mucha tarea, además solo los invitaron a ustedes, a mí no, estaré bien mama, nada malo me pasara, si estaré junto a mis amigos, te quiero chao – le da un beso al celular y cuelga – listo hemos acabado, ya hice lo que te pedí, ahora te puedes ir, tienes unas horas antes de que salgan, así que apúrate, yo estaré bien aquí, no me tienes que ayudar.

- tranquilo, te voy a llevar con tus amigos – le dispare en el pecho - ¿Enserio creíste que te iba a dejar vivir? ¿Por qué me creen? ¿No ven que los voy a matar si o si? Además no es la primera vez que te miento – le dispare otra vez en el pecho – no sé porque me ayudaste era obvio que te iba a matar ¿Acaso creíste qué, si eras amable, yo te dejaba vivir? – yo me reí – que buen chiste, pero igual gracias por tu ayuda, tu amiga morirá, un poco por tu culpa, tú la dejaste sola, yo solo tengo que entrar y matarla es la última de todas – le volví a disparar en el pecho, creo que murió cuando le di el primer disparo – y nadie me va a quitar la satisfacción de matarla – le dispare en la cabeza – fue un gusto hacer negocios contigo.

Lo cargue y lo lleve adentro y lo deje junto a Mario, luego fui donde estaba Lucas y lo lleve con dificultad a donde estaba Mario y Javier, los deje ahí y me fui de ahí, espero que alguien los encuentre amigos míos y tengan un funeral digno, pero por ahora estarán ahí escondidos.