Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Un día lleno de sorpresas

Llego el día, hoy es la fiesta, primero matare a Pedro y luego matare Mariana, Sam va conmigo, me ayudara con Pedro, además creo que Pedro esta con alguien y yo contra dos, no gracias, si esta con alguien, dejare que Sam lastime o mate a Pedro y yo mato a la otra persona y si no es así, dejare que Sam lo lastime hasta donde ella quiera; cogí el cuchillo que me lleve de Laura y cogí mi disfraz y lo metí en una maleta, estoy preparado. Cogí un bus y fui hacia la casa de Sam. Cuando llegue, estaba el padre de Sam y el me invito a salir.

- hola ¿Tú eres el novio de mi hija?

- sí, ese soy yo.

- voy a hablar contigo, a solas – mierda ¿Por qué a mí? No quiero hacerlo, pero tengo que hacerlo.

- claro – me cogió de la mano y me hizo entrar en su habitación y el cerro con llave la puerta, ya me arrepentí de esto.

- bueno, mucho gusto, mi nombre es Simón y sé que estas saliendo con mi hija, cuando iba saliendo, le pregunte a donde iba y ella me dijo que, con un amigo, si claro, amigo, no le creí y le dije que me digiera la verdad y me conto que iba a salir con su novio, así que te quise conocer.

- pues, mucho gusto, mi nombre es Daniel.

- un gusto ¿Dónde vas a ir con mi hija?

- una fiesta que nos invitó Isa.

- que bien, ella normalmente no sale de la casa, y por suerte es así, no quiero que la gente diga, mira es la hija monstruosa de Simón, tengo un nombre que se tiene que respetar, pero que bien que tiene gente que la saca de la casa.

- sí, ella normalmente esta aburrida aquí.

- no es porque se aburre, me importa poco lo que sienta ella, la verdad es que no la quiero en casa, no la quiero ni ver, me da asco verla, aunque se tape esa cosa, sé que está ahí, yo lo sé y no la soporto, por eso nunca estamos en casa, por suerte llegaste tú y la vas a empezar a sacar de casa para que mi amada esposa y yo tengamos tiempo sin nuestra horrible hija – querría pelear con él, pero no podía, no tengo tiempo para esto, cuando todo esto termine me llevara a Sam de aquí, para que no tenga que sufrir más con su padre y madre.

- está bien, eso hare.

- que bien, por fin soy libre de ese demonio – yo lo mire con odio – al parecer si te gusta de verdad ¿Qué le viste a ella?

- me parece bonita, es dulce conmigo, cariñosa y cuando estoy a su lado siento que nada más importa, cada momento quiero estar con ella – el señor me miro confuso.

- de seguro eres de esas personas que salir con cualquier mujer, está bien – lo mire con odio – pero no te diré nada, porque tal vez te arrepientas en estar con mi hija, así que pararemos nuestra conversación, hasta la próxima – me saco de la habitación – hija mía, ya puedes salir.

- gracias papa – me agarro de la mano y salimos de la casa - ¿Qué te dijo mi padre? ¿está de acuerdo que estemos juntos?

- la verdad – me quede callado y la mire, no quería decirle la verdad, pero me importa y las personas que me importan no les miento – me dijo que estaba feliz que estuviéramos juntos – ella sonrió – fue porque te sacare de la casa, ellos no tendrán que verte más o no quieren verte más – ella dejo de sonreír – ellos te odian, y no te quieren ni ver en la casa, por eso están felices – yo la abrace – y si quieres te llevo a mi casa y no vuelves donde están tus padres y vives un tiempo conmigo.

- está bien, por favor, llévame contigo, te lo suplico, si mis padres piensan así – hizo un breve silencio y empezó a llorar – me quedar contigo – yo empecé a secarle las lágrimas.

Luego de un tiempo ella se calmó y nos dimos un beso; ella me miró fijamente y empezamos a caminar donde vivía Pedro, ella sabía dónde vivía Pedro, además en todo el camino nadie dijo nada y creo yo que no era necesario. Cuando llegamos a la casa de Pedro, ambos nos sorprendimos, Pedro se estaba besando con Alicia, no lo podía creer, no creo que nadie sabía, jamás se mostraron un poquito de cariño en el colegio, ni se hablaban, jamás me paso por la cabeza que eran novios, nos acercamos a ellos.

- hola Pedro y Alicia – ellos se separaron rápidamente y ambos reímos.

- ¿Qué hacen aquí? – Alicia miraba hacia abajo, creo que le apenaba.

- tú me dijiste que me llevarías a la fiesta ¿no recuerdas?

- sí, se me olvido, lo siento ¿vamos ya?

- espera ¿Por qué no nos dijiste?

- ¿Decirles que?

- que tu estabas saliendo con Alicia.

- es que nos daban pena, no queríamos que nadie sepa, queríamos estar tranquilo y que no nos pregunte, ¿Cuándo fueron novios? ¿Y la cita de ayer que hicieron? Y cosas así, lo intentamos ocultar todo lo posible.

- es entendible, entonces ¿vamos ya a la fiesta? – ellos me miraron confundidos ¿Ahora que dije? - ¿Por qué me miran así? ¿La salida no era hoy?

- sí, si era hoy, pero faltan dos o tres horas para que empiecen ¿No sabias?

- seguro es porque es un idiota y no nos puso atención o porque una bruja le hizo un hechizo para que este a su lado – Sam quiso decirle algo, pero yo la mire y le dije, no lo hagas, ella me hizo caso y se aguantó las ganas de gritarle.

- no, no es por eso, lo que pasa es que nadie me dijo a qué hora era, nadie, yo sabía la dirección y el día, pero no la hora.

- listo y ¿Por qué Sam está en tu lado?

- ¿No es obvio? Trae a su novia monstruo como Isa le dijo, y no necesita disfraz, como dijo Isa – Sam se puso enfrente de Alicia, algo malo va a pasar.

- repítelo – dijo Sam muy enojada.

- amor, deberíamos tranquilizarnos, nadie quiere pelear ¿Cierto Daniel?

- sí, al final todos somos amigos.

- ¡Yo amigo tuyo! – ella se río – ni te creas y tampoco tengo miedo de repetírtelo – se acercó a Sam – eres tan fea que no necesitas disfraz para una fiesta de disfraces, porque eres horrible – Sam le jalo el pelo y le dio un puño en la cara, bien hecho.

- las pagaras – Alicia se acercaba a Sam, se iban a poner a pelear, pero por suerte Pedro se puso enfrente de Alicia.

- amor, para, por favor, no peleemos – Pedro tenía miedo, no sé si de la pelea o de Alicia; y por mi parte abracé por detrás a Sam para que no peleara con ella.

- pero – Pedro interrumpió a Alicia.

- por favor mi vida, no hay que pelear, por lo menor por hoy disfrutemos ¿Sí? Son los últimos días que tenemos del colegio – además son los últimos días que tienen en la vida – además recuerda que puede que alguien nos esté matando, y entre más seamos, menos posibilidades de morir tenemos, así que, por favor, no la molestes.

- está bien – dice Alicia frustrada, muy frustrada.

- listo, lo siento por el comportamiento de mi hermosa pero peligrosa princesa.

- no pasa nada, no fue todo culpa de Alicia, Sam también tiene un poco de culpa – la mire - ¿No volverás a lastimar a Alicia? - por ahora.

- sí, lo siento, perdí la cabeza.

- bueno ¿Entonces que hacemos mientras hay que esperar la fiesta?

- vamos a una cita doble – que gran idea Pedro.

- pero ¿Si nos ven? ¿No sospecharan?

- pues, es fácil, si alguien nos ven, ustedes solo dicen que nosotros invitamos a Pedro a comer porque nos iba a llevar, pero como soy pendejo vine unas horas tarde y en el restaurante encontramos a Alicia y ella se sentó a nuestro lado, además no creo que les presten atención a ustedes, les parecerá más raro ver a nosotros dos que a ustedes dos, así que no hay nada de qué preocuparse.

- está bien, pero solo porque tengo hambre y quiero pasar tiempo con mi dulce novio – hizo silencio y me miró fijamente – pero si alguien se entera, tú te mueres – se acercó a mí, por favor que alguien me ayúdenme.

- tranquila, nada malo pasará, todo saldrá bien – para mí.

Caminamos hasta que encontramos un taxi, nos subimos al carro y fuimos a un restaurante que Pedro conocía, era bastante grande y muy bonito, todos nos sentamos y pedimos la comida, la verdad aquí venden de todo, yo pedí una carne con papitas a la francesa y de postre un pudin, al parecer los martes el pudin está a mitad de precio, y de tomar pedí una Coca-Cola, mi amada novia pidió una sopa de lentejas con arroz y carne y pidió un jugo de mora para tomar; Pedro y Alicia no sé qué pidieron y no me importaba mucho.

- y ¿De qué se van a disfrazar? – Alicia me saco de mis pensamientos.

- Daniel se disfrazará de un payaso y yo de un zombi y ¿Ustedes?

- pues yo me vestiré de unicornio – que originalidad, nunca he visto uno de unicornio – y Pedro se lleva una máscara blanca de porcelana, tiene una boca que está sonriendo, parece llorando sangre, parece quebrada por arriba, pero no es así, es una máscara bastante buena – Pedro miro hacia abajo avergonzado.

- no es tan buena.

- claro que sí, es una máscara perfecta, como tú – ella lo beso a él, mire a Sam y reímos; luego de un rato tiempo de que ellos se besaran, Alicia me miro - ¿De qué se reían?

- de nada, solo que hacen buena pareja, es todo – Pedro se estaba muriendo de la vergüenza, era bastante chistoso, pero si me río de él, Alicia me mata.

- bueno que bien.

Luego llegaron nuestra comida y todos comimos, hablamos de varios temas que no me interesan y ni recuerdo, fue un momento bonito, agradable, una cita doble, comiendo rico, que bueno que sus últimos momentos de vida sean felices; luego de que todos comiéramos, pagamos todos y nos fuimos de ese lugar, era bastante bonito, comería varias veces aquí.

- y ¿Ahora que hacemos?

- no lo sé Sam, aún falta una hora para que la fiesta empiecé.

- yo sé, vamos a mi lugar romántico – Alicia se veía emocionada cuando dijo eso y Pedro se veía asustado – ya que fuimos a un lugar romántico para Pedro, me toca elegir mi lugar romántico.

Ella salió corriendo, la tuvimos que seguir, Pedro la siguió y Pedro nos llevara a la fiesta, además tenemos que matarlo con ella, así que no nos quedó otra que seguirla. Ella se metió a una casa abandonada bastante tétrica, Pedro dudo en entrar por un momento, pero al final entro y nosotros los seguimos, el entro en la casa y ella lo asusto, nosotros también nos asustamos.

- ¡No vuelvas a hacer esto!

- tranquilo cariño, es que te ves hermoso cuando te asustas – ella río.

- ¿Estas es tu idea de lugar romántico?

- sí y antes de que digas algo, te voy a explicar por qué, cada vez que estoy aquí con mi novio, él se asusta tanto que se queda a mi lado toda la noche y así lo tengo siempre a mi lado.

- que buena estrategia, la aplicare con mi novio – ni se te ocurra Sam.

- bueno, ahora lo que hacemos es separarnos y el grupo que salga primero de primero paga lo de la próxima cita, los equipos serán Pedro y yo y – Pedro la interrumpió.

- conmigo no te vas, estoy enojado contigo, tú te iras con Daniel y yo con Sam.

- pero ¿Por qué con ella?

- es fácil, si tú te vas con Sam se empiezan a matar y estoy enojado contigo, a mí no me gusta mucho la idea de irme con la fea esta, me puede asustar con su horrible cara – Sam lo miro con odio – no dije nada.

- está bien para mí, no es lo mejor, Alicia me da miedo y creo que me puede matar, pero estaré bien ¿Tú que dices Sam? – ella sonrío, creo que ya entendió lo que va a pasar.

- claro, está bien, aunque prefiero estar contigo, esto no esta tan mal.

- listo, equipos listos, es hora de separarnos, el ultimo equipo que salga pierde – Alicia empezó a caminar y yo la seguí - ¿Por qué siempre llevas tu maleta? – si te digo que hay ahí se arruina la sorpresa.

- mi disfraz, siempre lo tengo aquí, por eso Sam también tiene una de esta, tiene su disfraz adentro.

- que bien, yo las escondí por aquí ¿quieres ver mi mascara?

- claro – de unas tablas saco su disfraz, que parece una pijamita y la máscara está bastante bonita - ¿Me puedo probar la máscara de tu novio? – deje en el suelo la mochila y busque el cuchillo de Laura – y tú ves la mía.

- está bien – me guardé el cuchillo en un bolsillo y cogí la máscara.

- toma – me paso la máscara de Pedro y me la puse, ella hizo lo mismo - ¿Cómo me queda?

- bien, la verdad muy bien, pero a mi novio le queda mejor ¿Y cómo me queda a mí?

- bien, pero a mí se me ve mejor, pero te falta una pequeña cosa.

- ¿Enserio? ¿Qué es? – le clave el cuchillo en la panza.

- esto – yo sonreí.

Ella me empujo y me dio un golpe en la panza, yo le saque el cuchillo de su panza, ella salió corriendo; era rápida, pero yo seguía la sangre que ella había dejado, pero ella no es una tonta, por qué me empujo y me pego un cabezazo, luego me golpeo varias veces en las costillas, me intente defender, pero era imposible, no sabía cómo defenderme, yo era su saco de boxear; cogí mi cuchillo y se lo clave en el pecho, pero ella no murió, siguió pegándome, una y otra vez, hasta que se cansó y yo la patee y le pegue en la cara varias veces, luego le clave el cuchillo en el cuello, ya no se respiraba, ella ya murió. Pero no termine ahí, le clave el cuchillo una y otra vez, mi ropa se llenó de sangre, tendré que cambiarme, pero primero voy con Sam. Camine por la casa hasta que la encontré, amarro a Pedro.

- Hola hermosa – la abracé - ¿Cómo te fue?

- bien, fue fácil, cogí un tubo de metal y le pegue en la cabeza hasta desmallarlo, no pude matarlo, así que lo amarre y te espere.

- que bien, a mí me golpearon hasta no poder más, literalmente.

- maldita sea – me acaricio el cachete – pero ya la mataste ¿Cierto?

- sí, está muerta, no nos molestara más, hoy nos pasó muchas cosas, primero fui a ti para que matáramos y resulte que vivirás conmigo, dos por uno y hoy íbamos solo a matar a Pedro y matamos a Alicia, dos por uno, otra vez, hoy es un día fabuloso.

- tienes razón, hoy es un día lleno de sorpresas.

- bueno, voy a interrogarlo y a torturarlo ¿Quieres venir conmigo?

- no gracias, todo tuyo – lo cargue y lo lleve al patio, tengo una idea, cogí una pala e hice un hueco, después espere hasta que él despertó.

- hola amiguito – me acerqué a el – bonita mascara – me la puse – pero a mí me queda mejor.

- ¿Qué quieres?

- matarte, ya lo hice con todos, te toca a ti, lástima que morirás, antes de morir me haces un favor.

- y ¿Sino lo hago que harás? – le pise la mano.

- te lo pedí amablemente, eres un genio ¿No deberías saber que cuando alguien te pide un favor tú lo obedeces? – lo pisé más fuerte y el grito.

- está bien ¿Qué quieres?

- ¿Dónde compraste la máscara?

- busque mascaras con sonrisa que es completamente blanca y ya, el primero, y si no funciona, en mi celular, la contraseña es seis, siete, uno y siete.

- gracias – abrí el celular, y me mandé el link que tenía a mi celular, tengo un pequeño plan – gracias ahora – lo tire al pozo y lo empecé a enterar – sabias, Pablo lo siente por todo, lo siente demasiado y cosas así, tú eres el que más sufrirás al morir o eso pienso yo, por qué no sentí lo que ellos sintieron – seguí enterándolo cada vez más – vas a morir y no de una si no poco a poco, por suerte estarás un poco cerca de tu amada Alicia, otros mueren lejos de las personas que aman, a partir de ahora esta será la casa del amor, como esa colina esa – lo entere entero – descansa en paz Pedro, no pudiste usar ese cerebro tuyo, lastima.

Me fui de ahí y me fui donde estaba ella, estaba sentada, yo me acerqué a ella y la abracé ella me sonrió, se veía un poco triste.

- ¿Estas bien?

- sí, solo que siento que soy una inútil, no puedo matarlo ¿Cómo te seré útil?

- mira, si no los matas, está bien, yo me encargo de esto, pero tú no eres una inútil – ella me abrazo y me beso – eres demasiada útil, sin ti no podría hacer nada, tú me haces sacar lo mejor de mí.

- gracias, tú también, eres perfecto – ambos nos besamos por un buen rato.

- bueno, aún no hemos terminado, nos falta la fiesta, si te quieres ir, hazlo, pero me esperas en mi casa, porque, a partir de ahora, dormirás conmigo.

- no, iré contigo y te ayudare ¿Qué tengo que hacer?

- fácil, guarda esto en tu mochila – ella guardo la máscara y el cuchillo en su mochila – me esperaras en el bar hasta que yo llegue, me das tú mochila, me cambio, te entrego mi otra mochila y te vas ¿Sabes llegar a mi casa?

- sí, obvio que se dónde queda.

- bueno nos vemos allá y, por último, dame el beso de la buena suerte – nos besamos otra vez, esos labios suyos son tan hermosos – listo, preparémonos, por qué la noche acaba de empezar.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro