Desperté por la mañana, hoy si fui al colegio, me levante, me bañe, me vestí y cocine los desayunos para los dos, comí mi desayuno, luego mí hermosa princesa se levantó y bajo donde estaba yo y empezó a comer, ella se alisto para ir al colegio y nos fuimos caminando como siempre. Cuando llegamos al colegio, nadie nos esperaba, ambos sabemos por qué, pero aún me falta cuatro personas e Isa, pero por hoy vamos a descansar, vamos a dejar de molestar por un rato el gallinero, hoy solo vere a mi padre, un día tranquilo, de descanso. Cada uno nos fuimos a nuestros respectivas clase, yo tuve una muy aburridora clase, como siempre, luego fuimos al descanso, así iba caminando para donde estaba Sam, pero Javier se puso adelante mío.

- aquí estas, te estábamos esperando.

- ¿Qué es lo que quieres?

- nada, solo hablar contigo, ya sabes, no nos hemos visto, además tenemos un trato ¿No recuerdas? Veo que lo has hecho muy bien.

- sí, recuerdo todo, pero si lo he hecho muy bien ¿Por qué estás aquí?

- ¿Será porque un joven en mascarado la ataco y la dejó inconsciente y su padre la dejo unos días en el hospital? - lo suponía.

- no me dejo otra opción, ella estaba ahí y no quería irse, pero para mí defensa, Sam fue quien la golpeo, así que yo no fui quien le hice daño, así que, yo no hice nada.

- bien, bien, me gusta que sigas con tu trato, por cierto, no has sabido lo que ha pasado aquí, pero aquí se ha vuelto una guerra, en la salida Manuel se pelea con la gente, lo hace para que nosotros salgamos sanos y salvos, es un buen soldado.

- ¿Por qué no lo hace aquí?

- porque si lo ven aquí, los expulsan, así que, si salen del colegio, los profesores no podrán hacer nada, están fuera del colegio.

- bueno, ya que arreglamos todo ¿Me puedo ir? O ¿Me vas a seguir interrogando?

- tranquilo, solo es una charla de amigos.

- nunca fuimos amigos y nunca seremos amigos, siempre te odiare, pero tranquilo, no le hare nada, solo hablaremos.

- mira, baja ese muro de odio, no te llevara a nada, en cambio si somos amigos, necesito hombres fuertes como tú, que no le importe matar a las personas.

- solo no me importan las personas que odio y como solo odio a todos ustedes, no matare a tus amigos, pero no hare nada de lo que tu digas.

- bueno, es tu vida, escoge tu camino, pero recuerda, escoge bien, porque te puedes arrepentir – tranquilo, no me voy a arrepentir, te lo prometo.

Luego de eso, me fui de ahí y pase tiempo con mi novia, hablamos de mi padre, me pregunto cómo era el, esa pregunta me hizo pensar, él era amable, no es de muchas palabras y normalmente no habla, es muy trabajador y desde que mí mama cayo en coma no ha hecho más que trabajar, a veces no está en casa, normalmente me quedo solo y no puedo hablar de nada con él, su trabajo lo consume todo el tiempo, apenas si puede dormir, como mí madre también trabajaba y pagaba algunos gastos, mí papa tuvo que trabajar el doble para gastar esos gasto, porque la generosidad del padre de Isa no es tanta como para ayudarnos económicamente.

- es como cualquier papa, pero con mucho más trabajo.

- eso ya lo sabía ¿Algo más?

- tranquila, pronto lo conocerás, nada malo te pasara, él ya me dijo que te aceptaba, así que no te preocupes, él no es especial, es igual que todos.

- no te preguntare más, se ve que me contestaras lo mismo, me vas a dejar con la duda.

- sí, porque soy malo – le empecé a hacer cosquillas.

Luego sonó la campana y me tuve que despedir de mi hermosa novia, tuve una muy aburrida clase, quería pegarme un tiro, mejor dicho varios tiros; cuando se acabó la clase y fuimos al descanso, ese descanso hable con Cristóbal, así le daba espacio a Sam y pasaba tiempo con mi mejor amigo, hable con el de tonterías sin importancia, como cuantas paletas Drácula uno necesita comer para poder empujar a una roca que pesa cinco kilos y varios temas así, nada sin importancia y cosas que se dicen simplemente para reirnos como dos focas retrasadas. Cuando yo estoy triste, Cristóbal siempre me saca una risa con sus estupideces, no lo cambiaria por nada, espero que cuando mate a su hermana no se moleste y que no me deje de hablar, por qué no sé cómo sobrevivir sin él, él siempre ha estado en los momentos malos y en los momentos buenos, más en los buenos que en los malos, porque él siempre me hace reír. Se acabo el descanso, otra puta aburrida clase que no me interesa y que no me servirán en mi vida o en lo que yo quiero trabajar; luego de morir del aburrimiento en las clases, era hora de salir del colegio, espere a Sam en la salida y cuando la vi me acerque a ella y la bese, nos cogimos de las manos y caminamos hacia mi casa, en el camino hablamos de varios temas, ella me pregunto si quiera hijos, esa pregunta me asusto, no quiero tener hijos, pero si ella quiere ¿Qué hago yo? Yo le respondí, no sé, no lo he pensado, que en un futuro vemos, por suerte ella me respondió que ella no quería tener hijos, que suerte tengo, Sam es la persona que está destinada para mí. Cuando abrí la puerta vi a mi padre, yo corrí donde él y lo abracé fuerte, no pude creer que este aquí.

- Hola hijo ¿Cuánto tiempo? - él me abrazo.

- mucho.

- te extrañe – miro a Sam - ¿Esa es la afortunada?

- sí, papa ella es Sam.

- hola señor, soy la novia de su hijo, mi nombre es Sam – le dio la mano a mi papa.

- ya lo sé, mi hijo me conto cosas de ti.

- espero que sean cosas buenas – ambos rieron.

- claro que sí, me dijo cosas muy buenas de ti, aunque no mucho, la verdad es que, mientras hagas a mi hijo feliz, todo está bien, no me opondré a su relación, mi hijo ya no es el niño pequeño que dormía con un osito de peluche – Sam se río, que pena, porque mi papa se acordó de eso – ahora ya es todo un hombre y tiene que empezar a formar a su vida, yo solo lo puedo apoyar.

- gracias señor.

- llámame Luis.

- Luis, es un honor ser novia de su adorable y hermoso hijo.

- y para mí es un honor que mi hijo tenga una novia tan linda, yo pensé que mi hijo iba a durar soltero todo el colegio, que nunca daría un beso hasta los dieciocho – Sam se río.

- eso mismo pensaba mi papa.

- creo que todos los padres piensan lo mismo – él se ríe – me alegra ver que mi hijo ya está formando su propia vida, cuando uno menos piensa ya son unos adultos con su propia familia – se quedó callado unos segundos – bueno, me alegro conocerte Sam, espero que nos volvamos a ver, yo me voy con unos amigos, les dejo la casa para que hagan lo que quieran, pero por favor no destiendan la cama mucho – yo mire hacia debajo de la vergüenza, como se le ocurre decir eso en frente de mi novia, trágame tierra – los veo después – él se fue de la casa, seguro fue a donde su amigo de la infancia, iba a visitar a Héctor.

- me cayó bien tu padre, es un hombre agradable – ella me miro y me sonrío - ¿Qué hacemos?

- descansar, hoy no haremos nada, yo quiero descansar y pasar tiempo contigo, nada más, hoy soy todo tuyo.

- ¿Puedo hacer lo que quiera? – me abraza – quiero ver una película.

- pues veámosla, hagamos lo mismo, tu escoges la película y yo hago mis ricas palomitas.

- listo – ella se fue a mi cuarto, mientras yo hice mis ricas palomitas, luego de unos diez minutos ya estaban listas, la puse en un plato y las llevé a mi cuarto.

Nos vimos una película de super héroes, ella se puso en mi hombro y se quedó dormida en la mitad de la película, se veía tan adorable. Cuando se acabó la película, yo apague el televisor, pero ella se despertó y me pregunto porque apague el televisor, yo me reí y le dije porque se acabó la película, ella se quedó callada y yo me reí, ella se paró de la cama.

- ¿Qué haces?

- vamos a salir, quiero estirar la pierna ¿Vamos al parque?

- bien – agarré mis cosas y cogí mis llaves y salimos de mi casa.

Salimos al parque, caminamos cogidos de las manos, era un bonito día, algo muy divertido, todo pronto acabara y podremos hacer esto todos los días; luego de caminar por un rato, vimos a Javier, lucas y el callado del salón rodeando a alguien, lucas sostenía a samuel de los brazos, al parecer lo querían convencer a pasarse a su equipo, que necesitaba gente como el, porque pronto las cosas cambiaran, para resumir, le dijo lo mismo que a mí, pero saltando la parte de nuestro trato. Samuel se negó, dijo que no quería estar con una rata como el, que cambian de equipo cuando todo va mal, como Isa perdió todo el poder, se quiere aliar con él; Javier le pego varias veces en el estómago para callarlo, luego ordeno a Lucas que lo soltara, obviamente Lucas hizo caso y lo soltó, cuando Samuel estaba en el suelo, Javier le empezó a patear varias veces y luego puso un pie encima de él y lo empezó a pisar, hasta que al parecer se cansó y se fue, yo me acerqué un poco y escuché algo como, te vas a repentir de no aceptar nuestra invitación, luego de que ellos se fueran, Sam y yo lo ayudamos, lo cargamos hasta mi casa y lo dejamos en mi cama para que descansara. Luego de un tiempo, él se levantó y nos agradeció y nos hizo la propuesta de unirnos a su grupo, nosotros amablemente lo rechazamos, le dijimos que estábamos ocupados en este momento, pero si necesita algo, nosotros con mucho gusto le ayudamos, él se fue de mi casa y luego no me acuerdo que fue lo que hice con Sam, seguramente cosas sin importancias, al final nos pusimos la pijama y nos acostamos juntos en la cama.