Llegue a la casa de Sandra y yo amablemente llame a la puerta, al parecer ella no estaba, se fue a jugar en el arcade, dijeron que si quería la esperaba acá, que ella volvería y yo obviamente acepte, y entre a su casa; luego de una hora ella volvió, me miro confundido y le pregunto a su madre que paso, su madre sonrió y le pregunto por qué no le dijo que ya tenía novio, yo reí, Sandra le explico que solo éramos amigos, nada más, creo que su madre no se lo creyó, seguramente pensó que era una mentira y que estamos saliendo. La madre de Sandra nos llevó al cuarto de su hija, y nos dejó solo, para que hagamos lo que venimos hacer, y que por favor no hagan mucho ruido, me aguante las ganas de reírme; luego ella cerró la puerta y nos dejó solos, pero que igual iba a estar en su cuarto o iba a trabajar. El cuarto de Sandra estaba lleno de posters de videojuegos y tenía muñecos de personajes de videojuegos, tiene una Play 4 y ni hablemos de los juegos, porque creo que tiene todos los juegos de la Play, además tiene guardada su switch y varias consolas viejas que ella tenía, también me dijo que estaba ahorrando para la Play 5.

- y eso es todo, ya viste toda mi habitación, ahora sal de aquí – me vio seriamente.

- ¿Por qué? Yo te quería visitar, y ahora me tratas así, por lo menos serias algo amable - yo sonreí, quería molestarla un poco.

- hasta que no me digas que pasa, o por qué estás aquí, te tratare como un enemigo hostil.

- está bien, es que me retaron, me dijeron que te retara a un duelo de pelea en cualquier juego que tuvieras, si yo gano, significa que soy mejor que tú y si tu ganas, significa que eres mejor que yo - obviamente voy a perder.

- eso es lo que significa ganar, pero está bien, vamos a jugar – se recogió el pelo – sé que no eres un rival digno, pero da igual, me voy a divertir – ella puso un juego de pelea – a pelear.

Ni les describo como me fue, porque me fue horrible, no estuve no cerca de ganarle, apenas si la podía tocar, era demasiado buena, jugamos diez partidas, y las diez me gano, lo máximo que le baje fue un cuarto de vida, no vuelvo a jugar con ella.

- Ya me rindo, ya no más, jamás te ganare y eso se nota.

- yo sé – ella se río – no sé por qué lo intentaste, ya sabíamos el resultado de esto, pero bueno.

- tal vez mi fuerte no sea los juegos de pelea, que tal si jugamos uno de carreras, para ver si tengo más suerte en este.

- está bien, pero igual te ganare, así que, no lo intentes, pero no cambiaras de parecer, así que por lo menos intentémoslo.

Jugamos un juego de carreras para el Play 4 y obviamente me gano, era bastante buena, demasiado buena, incluso creo que puede ganarme con los ojos cerrados, me gano en todas las carreras, todas y me restriega su victoria en la cara una y otra vez, con razón nadie juega video juegos con ella.

- Te gané, yo te lo dije, pero no me escuchaste, debiste hacerme caso - voy a disfrutar matarte lentamente.

- si, como digas, que tal si cambiamos de juego.

- ¿Otra vez? Está bien, la tercera es la vencida ¿Qué quieres jugar?

- me dijeron que tenías pistolas de Paintball ¿Es verdad?

- sí, si tengo,¿Quieres jugar?

- claro, pero ¿Dónde vamos? No me digas que tienes tu propio campo de tiro – ella río.

- quien necesita un campo de tiro cuando tienes uno naturalmente.

- ¿A qué te refieres?

- pues, cerca de mi casa hay un bosque y yo le puse unas cosas para que parezca un campo de batalla, entonces ¿Vamos? - es perfecto.

- claro – ella sonrió.

Sacamos las armas y las balas en el garaje, nos pusimos unas máscaras especiales para la ocasión, yo obviamente me lleve mi mochila con mis cosas y nos dirigimos al bosque que ella dijo; cuando llegamos pusimos ciertas reglas, el primero que reciba tres disparos, pierde y no se puede pasar de ciertos lugares, ella puso una cinta amarrilla para saber cuándo nos pasaremos, me dijo que el lugar no era tan grande, ella me dejo en una punta y ella salió corriendo, me dijo que cuando escuche un silbato, es que empezó la batalla. Luego de un tiempo escuche un silbato, es hora del juego; cogí mi arma y me empecé a mover por el bosque, me ocultaba detrás de los troncos y miraba a mi alrededor para ver si estaba. Luego de un rato ella me vio y me empezó a disparar, no tenía buena puntería, así que no me dio, yo me escondí detrás de un tronco, cogí mi arma y saque mis brazos y le empecé a disparar, yo le di, tengo un punto; ella salió corriendo y yo la seguí, pero me tropecé con un tronco y me caí y la perdí, rayos. Me levante rápidamente y fui lentamente, de repente ella se apareció adelante mío, ella se ocultaba detrás de un árbol y me disparo, pero yo también le dispare, ambos nos dimos, ella me dio en el hombro y yo no sé dónde le di, pero le di, el golpe me dolió mucho, incluso me dejo un morado, me arrepiento de jugar esto; luego yo corrí por todo el lugar, escondiéndome y luego miraba si estaba alguien, luego de un tiempo la vi, me escondí y me le aparecí por detrás y yo le dispare sin piedad, creo que le di más de una vez, ella no era tan buena como en los videojuegos.

- gane, te gane – yo le sonreí – te gane.

- sí, ya te escuché – ella río – aunque como ves, no soy buena en esto, pero bueno, me divertí un poco.

- cierto ¿Quiere jugar otro juego?

- si claro ¿A qué?

- primero, respóndeme algo ¿Tú tienes un arma de verdad? Es que en el colegio se dice que tú tienes un arma de verdad y quería saber si es un rumor o es de verdad.

- pues, es verdad, mira te la muestro – ella saco su arma, era un revolver de seis balas, era sorprendente, yo se la devolví – gracias, la tengo ahora porque como sabes nos están matando, siempre ando con el arma y con tres cajas de treinta balas.

- ya entendí, bueno, vamos a jugar.

- y ¿Qué jugaremos?

- algo muy divertido, no te puedo decir que es, porque es una sorpresa, pero te doy una pequeña pista – yo sonreí y saque la máscara y el cuchillo sin que me viera, luego la mire fijamente.

- ¿Qué es? No soy muy paciente así que dime rápido - que empiece el juego.

- tranquila, te lo diré – le clave el cuchillo en el hombro – es una cacería – me puse mi máscara – a jugar – le saqué el cuchillo y me escondí.

Ella saco la pistola, yo estaba detrás de un árbol, ella disparo donde yo estaba escondido, le quedan ya cinco balas, luego de eso ella salió corriendo, yo la seguí por detrás y seguía el rastro de sangre que ella dejaba, era muy poco, pero era un poco notable, la vi, estaba mirando para todos los lados asustada, nerviosa; yo sonreí, cogí una piedra y la lance a un árbol, esto hizo ruido y ella disparo donde la piedra impacto, después de esto ella salió corriendo, era divertido, ver como tu presa corría por su vida ¿Esto siente un león cuando caza una cebra? Puede que sí. Yo la seguí, corriendo sin hacer ruido, al final ella se cansó y paro y volvió a mirar a todos, yo le vine por detrás sin hacer ruido, ella giro y me vio, pero ya era tarde, yo ya estaba cerca de ella, le cogí la mano que tenía la pistola y la levante, ella disparo al cielo, yo la mire y sonreí, ella se veía muy asustada, yo cogí el cuchillo y le clave en la panza y se lo saque, luego la empuje de mí, ella cogió su arma y me disparo, pero no me dio. Yo me escondí detrás de un árbol y ella salió corriendo, ahora corría más lento, así que no hay necesidad de correr, ella se cayó, sí que es mi bruta, me le fui acercando, cubriéndome por los árboles, ella disparo una vez, pero no me dio, luego me escondí, por si acaso, tengo que ser más precavido. Cuando mire ella ya no se movía, al parecer murió, que decepción, yo quería hacerla sufrir, me acerque a ella, pero ella en realidad no estaba muerta, se hizo la muerta para que yo me acercara a ella, un muy buen truco, me lo guardare para después; la bala no me dio, paso cerca de mí, seguí caminando hasta llegar donde ella, le cogí una mano y le clave el cuchillo, luego le quite el arma y le pegue con ella, varias veces; cuando ella escupió sangré, yo pare, y sonreí.

- se acabó el juego, y tu perdiste, te volví a ganar, pero qué tal si jugamos otro juego – le saque el paquete de las balas y le metí una y gire el cargador – sabes cómo jugar a la ruleta rusa, si no sabes te explico, esta arma tiene seis espacios para las balas y uno de esa tiene una bala, te disparare hasta que mueras, pero no sabrás cuando morirás, será un misterio, empecemos – le apunte a la cara y le dispare, pero ahí no estaba la bala – bueno esto sigue, esto sigue, ¿Morirás en este intento? No lo sabremos hasta intentarlo, eso es lo mejor del juego – le apunte – no mueras desangrada, por favor, tienes que morir de un disparo, un lindo disparo, por cierto – de dispare, no estaba la bala – Pablo lo siente y más cosas así – le apunte en la cara de nuevo, quien sabe, tal vez muera esta vez – a nadie le gusta jugar contigo, porque cada vez que ganas, restriegas la victoria a los otros jugadores y por eso siempre juegas sola, nadie te acompaña para jugar y lo otro es que las referencias que haces cuando hablas es bastante molesto, por eso algunas personas te odian – le dispare, pero tampoco estaba la bala - ¿Acaso no te mueres? Eres la segunda persona que me he demorado en matar, la primera es Javier, que estuve cerca, pero se me escapo de las manos – le apunte otra vez, esta vez se va a morir – por cierto, Javier supo que yo era el asesino y me dejo libre, porque le era útil, mato a todos menos a ellos y a Isa, además él me dijo que te matara, por qué como decías tantas referencias a videojuegos, él estaba harto de esto, demasiado, él quiere que mueras, solo te lo digo para que pienses quien son de verdad tus amigos – le dispare y por fin la mate – fin del juego.

Me levante de ahí y me lleve el arma de ella con sus balas y empecé a caminar sin ningún rumbo, hasta salir del bosque, y camine para mi casa; cuando entre, estaba Sam, ella me abrazo y me dijo que se preocupó, que por que me demore tanto, yo le conté toda la verdad, le dije que no se preocupara, que tengo un plan, que todos van a morir sí o sí.