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El crimen tiene que ser castigado

Me levante, me puse mi ropa e hice lo mismo que el día anterior, siempre he tenido la idea que mi vida era una repetición del día anterior, algo tan repetitivo que era predecible, sin contar lo que paso con Isa, eso cambio mi vida, pero después de un tiempo note que todo se repetía una y otra vez, todo era una muy mala rutina, hasta que decidí cambiarlo, así que no le veo necesidad de decirles lo que hice en el colegio; salí del colegio con mi hermosa novia, íbamos caminado para mi casa, hasta que Manuel se puso delante de nosotros.

- ¿Qué quieres?

- devolverte esto – saco mi billetera de su saco.

- ¿Qué? ¿Cuándo me sacaste mi billetera?

- cuando estabas saliendo con tu horrorosa novia, aproveche y te la robe, pero luego vi que no tienes mucho dinero y me sentí mal por ti y te la devuelvo.

- gracias – cogí mi billetera – ahora muévete.

- y si no lo hago ¿Qué me harás? sabes que si peleamos, vas a perder – él se río y yo aproveche para darle un golpe en la cara.

- nunca te burles de mí.

- que buen golpe, tienes una mano muy fuerte, pero no tanto como la mía, pero no está nada mal, aunque te falta para ser como yo.

- ¿Ser como tú? – yo me reí – jamás seré como tú, ni quiero ser como tú.

- no mientas, todos quieren ser como yo, es obvio – el me agarro del cuello y me empezó a ahogar, pero por suerte Sam le pego en la cabeza y él me soltó – otra que tiene buen puño, pero te falta mucha fuerza para noquearme, soy una cabeza dura – él sonrió y se acercaba a ella, no podía dejar que la lastimaran, me le acerque por la espalda y le mordí el hombro, el rápidamente me golpeo en la cara y yo lo deje de morder, luego me pateó – no te han dicho que es malo interrumpir la conversación de las demás personas – me cogió de la camisa y me levanto, pero antes de que me pudieran hacer algo, llego Samuel y su equipo.

- creo que llegamos justo a tiempo.

- no te metas, el no hace parte de tu grupo, además yo les puedo ganar.

- ¿Enserio? Somos cinco contra uno, yo no creo que seas tan talentoso como para ganarnos, acepta que perdiste y deja a Daniel en paz, te vas para la casa y todos olvidamos todo – él se río.

- está bien, pero únicamente porque me encontrare con Javier y a él no le gusta que llegue tarde, sé que me van a ganar, es más que obvio, pero no significa que va a hacer fácil, hasta el mejor peleador pierde contra un monton de debiluchos que mandan golpes al aíre, buena suerte Daniel – el me soltó – espero que la próxima vez sean más hombre y enfréntenme uno a la vez.

- si lo hacemos, vamos a perder, nosotros queremos es ganarte.

- gracias, ya sabía que soy mejor que ustedes, pero gracias por confirmarlo, besitos – después el simplemente se fue de ahí, Sam se acercó a mí y me ayudo a levantarme.

- gracias por la ayuda Samuel.

- no me lo agradezcas, es lo mínimo que puedo hacer, tenemos que parar a Manuel como sea, sé que tarde o temprano el enmascarado lo matara, ya no está Emiliana en el colegio, eso solo significa una cosa, que ha pasado a mejor vida, además hay un rumor que dice que Isa se enfrentó con el enmascarado y que en estos momentos está en el hospital.

- bueno, no los molesto más, nos vamos – nos fuimos caminando hasta mi casa.

Cuando llegamos a mi casa, me llego un mensaje de Javier, me dijo que había dejado todo listo, que Manuel estaba solo, donde peleamos, está todo listo, ahora el trabajo era mío; gracias Javier, ahora podre matar a Manuel sin preocuparme que alguien me vea. Le avise a Sam lo que pasa y le pregunte si quería ir, ella dijo que si, yo la necesito en estos momentos, por qué Manuel me gana fácilmente, pero si somos dos, tengo más posibilidad de ganarle. Caminamos y fuimos al lugar donde estaba Manuel, yo tenía el cuchillo y ella no llevaba nada, no puedo llevar el arma, él me quita la pistola y será nuestro fin, es mejor no llevarla. Llegamos al lugar de nuestro encuentro, lo vi, estaba sentado, esperando a Javier, le vamos a dar una pequeña sorpresa, nosotros estábamos un piso más arriba que él, así que salte donde estaba yo y caí en el piso de él.

- miren quien tenemos aquí, tu debes ser el famoso enmascarado, adivino que vienes a matarme.

- adivinaste muy bien, ya es tu hora.

- vamos a ver qué tan bueno eres, yo no soy como mis amigos, no, yo soy mejor que todos ellos.

- ya lo veremos – él se acercó a mí y yo lo esquive, pero luego me empujo contra una pared y me pego en el estómago y se alejó – veo que eres rápido, veamos qué tan bueno eres.

Me acerque a él y le intente pegar, pero el solo me esquivaba, parecía como si se contuviera a pelear, me canse rápido y él me manda un puño, pero con mi cabeza le pegue en la mano, y luego le pegue una patada que lo mando contra la pared, yo le intente pegar, pero el me lo esquivo y le resulte pegando a la pared, el cogió mi mano y me hizo una llave, e intento romperme el brazo, pero por suerte saque el cuchillo y le pegue en la pierna, eso hizo que lo soltara. Yo me pare, sostenía mi cuchillo en la mano derecha y lo intente atacar, pero el me esquivaba cada golpe, en un momento cogió mi brazo derecho, el que tenía el cuchillo, no me soltó el brazo y me lo dejo inmovil, él aprovecho para quitarme la máscara y él se sorprendió, yo sonreí y le pegue un cabezazo, él no me soltó, el me seguía sosteniendo la mano, así que tuve una idea maravillosa que probablemente iba a fallar, pero tenía que intentalo. Solté el cuchillo y lo intente agarrar en el aire, pero no lo pude agarrar, se me cayó al piso, se veía más fácil en las películas o series; yo rápidamente patee el cuchillo lejos de nosotros, no quería que el la agarrara. Le pegue un cabezazo, pero en no hizo nada, el sonrío y me lanzo hacia a un lado, yo me caí, me intente levantar pero el me pego un codazo que me mando al suelo, luego me piso la espalada para que yo no me pueda levantar, me pego una patada en las costillas y luego me levanto de la camisa, y me pego un puño en la cabeza, yo sonreí, él me miro confundido. Yo aproveché esos segundos y le mordí la mano y el me soltó, yo lo empuje y le pegue otro cabezazo, ya me empieza a doler la cabeza; él me pego en la cara con su puño, justo en la nariz y creo que me la rompió, por qué me empezó a salir sangre. Luego me volvió a hacer otra llave, llave que no podía salir.

- Creo que perdiste, yo soy mejor que tú, no sé cómo pensaste que me ganarías – yo me reí.

- ¿Por qué todos se olvidan de eso? – el me miro confundido, él intento hablar, pero Sam llego y le clavo el cuchillo en el hombro, algo que le causo mucho dolor y que aproveche para soltarme y patearlo – todos olvidan que no estoy solo – le saque el cuchillo y se lo clave en el pecho – ahora es tu final, es hora de pagar, tú eres un criminal y el crimen hay que pagarlo – le intente sacar el cuchillo del pecho, pero él se alejó – eres muy inteligente, pero igual no duraras mucho.

Lo intente golpear, pero el esquivo mí puño, es sorprendente lo que puede resistir; él me cogió de mi brazo y me lanzo contra la pared, corrió hacia mí, pero Sam lo tacleo, él la golpeo en la cara y la pateo, logrando apartarla de él, ahora va a morir. Fui donde él y le pegue en la cara, luego le jale del cabello, pero el me mordió la pierna y yo lo solté, él se paró con dificultad y sonrío, le intente agarrar él cuchillo, pero él me agarro la mano y la volteó, al punto de estar cerca de rompérmela, pero con mi otra mano le pegue en la cabeza, el me soltó, pero no se rindió y me agarro de la cabeza, me bajo la cabeza y me pego un rodillazo y luego un puño en la cara, ya me empezaba a sentir un poco mareado, eso no era una buena señal. Yo caí al suelo, algo adolorido, pero tenía que seguir adelante, no me puede ganar. Yo me levanté y el me golpeo en el pecho y se tiro encima de mío, se sacó su cuchillo en el pecho y me intento acuchillar, pero yo le cogí la mano he intente parar el cuchillo, pero veía como poco a poco el cuchillo bajaba a mi ojo, pero por mi suerte Sam pateo la mano de Manuel y eso hizo que soltara el cuchillo, yo pateé a Manuel en la entrepierna y lo lancé lejos, se veía cansado, esto no va a durar mucho. Él corrió hacia mí y me intento pegar, pero yo lo esquive y le pegue en el estómago, le intente pegar en la cara, pero el me pego un cabezazo a mí puño, algo que ya había hecho antes, y me pateó; Sam intento pegarle, pero él fácilmente esquivo su golpee y le hice una llave, pero como yo estaba cerca de él, simplemente la soltó, pero le pego con la rodilla en la panza, y luego le pego una patada para alejarla de él. Yo me le acerqué y le pegue un puño en la cara, le cogí la mano y se la mordí, pero él rápidamente me pego en la panza y yo lo solté, me cogió de la camisa y me pego un cabezazo, ese golpe fue tan duro que ambos nos caímos, me costaba un poco respirar y puedo saborear la sangre en mi boca, tengo terminar esta pelea lo más rápido, pero no podía levantarme, me dolía el cuerpo. Por suerte no estoy solo, Sam se acercó a él y lo empezó a ahorcar, el intento soltarse, sabía que se soltaría, así que reuní todas mis fuerzas y me levanté, Manuel se pudo soltar y pudo alejar a Sam de él, se levantó e iba hacerle algo a Sam, pero yo lo golpee en la cabeza, el golpee lo dejo tambaleando, yo me acerque a él y lo intento golpear, pero él me esquivo y me empezó a ahorcar con su brazo, intente soltarme, pero no pude. Cuando estaba perdiendo la conciencia, él me soltó, cuando volteé para verlo, vi que Sam le había clavado el cuchillo por la espalda, Manuel cayó al suelo, yo me acerque, y le saque el cuchillo, lo agarre del cabello y lo puse contra la pared.

- buena pelea – acerque mí cuchillo en su cuello – pero yo he ganado, no eres tan bueno como dices – yo sonreí – tu sabías que esto pasaría, eres un ladrón, robaste muchas cosa y el crimen tiene que ser castigado – le hice un corte en el pecho – tu eres el que el peor de todos, miento, pero tú has hecho algo ilegal, así que tienes que ser castigado, por que si no hay castigo, esto se incrementara a peor, quizás ya no le robes a la gente, quizás le empiezas a atacar, a matar o te consigas una pareja y ambos empiezan a robar, pronto van a hacer peores cosas, como matar, si esto no se detiene, las cosas escalaran a peor – le corte el cuello – y por eso el crimen tiene que ser castigado, sé que la policía no te hará nada porque eres menor de edad, así que yo te castigare – me aleje de ahí – espero que encuentre tu cuerpo.

Luego de eso me intenté levantar, pero no podía, me dolía todo, me costaba hasta respirar, con ayuda de Sam me pude levantar y caminar hasta la salida, después de un rato pude caminar solo, Sam pidió un taxi y me llevo hacia mi casa. Cuando llegamos, la casa estaba sola, seguramente mi papa se quedó trabajando hasta tarde como siempre, así que no me vera así y podré evitar las mil preguntas del por qué estoy así, y demás, no quiero preocuparlo. Sam me dejo en la cama y creo que me dormí, cuando desperté, Sam estaba acostado a mi lado, abrazándome, yo lentamente me levante y baje sin despertarla, abajo estaba mi papa cocinando, o intentando cocinar.

- ¿Qué haces?

- intente cocinar algo, pero no soy bueno en eso – yo reí.

- eso veo, ven déjamelo a mí.

- gracias – fui a la cocina y empecé a cocinar – y ¿Cómo te siente?

- bien ¿Por qué preguntas?

- pues te vi en la cama, algo mal y Sam me dijo que te peleaste con alguien por defender a un amigo.

- sí, eso paso.

- ¿Ganaste?

- claro, no estaba solo, por eso gane.

- que bien, me parece bien que defiendas a los otros, pero recuerda una cosa, es tú vida, toma tus decisiones, lo que tú quieras, a mí no me importara, si tú escoges algo, no me interpondré, solo me preocupare cuando esa decisión te cause mucho daño.

- lo sé, sé que siempre me apoyaras en lo que yo haga, me lo has dicho muchas veces.

- es que quiero que lo recuerdes, te estoy dando algo que a mí no me dieron, que es el poder escoger libremente, por ejemplo, el trabajo que yo tengo no lo quería, mi padre me obligo en hacerlo, con el tiempo le cogí cariño y ahora me gusta mi trabajo.

- gracias papa – luego me empezó a hablar de su pasado, como le toco trabajar y como odia esa época, por eso me repite eso, tiene un trauma con su padre por obligarlo a hacer cosas que no quería, por eso me lo mantiene repitiendo varias veces.

Termine de cocinar, no recuerdo bien que cocine, pero recuerdo que me quedo bien rico; puse la mesa para los dos, pero cuando estaba sirviendo la comida, Sam bajo, así que tuve que poner la mesa para ella también, serví la comida, el jugo y lo puse en la mesa, luego comimos y hablamos de temas variados. Después de comer, mi padre cogió todos los platos y lo lavo, mientras yo y Sam nos acostamos y nos dormimos.

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