Algo no anda bien
Hice lo mismo que todos los días, pero cuando llegué al salón, estaba Cristóbal, él se había queda en un hospital, se había quebrado el dedo y su papá le obligo quedarse en el hospital hasta que se recuperara y pueda mover el dedo, por eso no he hablado con él.
- hola ¿Cuánto tiempo Daniel?
- hola, mucho tiempo ¿A qué sabe la comida de hospital?
- a mierda, prefiero no comer que comer la comida del hospital – ambos reímos – y que paso de nuevo y no me cuentes nada de las clases, me refiero a afuera de eso, cuenta que ha pasado con todos y más con mi hermana, ha estado demasiado triste esto días ¿Por qué?
- lo que paso es que Laura ¿La recuerdas? Era la chica que me amaba, bueno ella – hice un silencio, tengo que hacer creer que me duele la noticia – ella tuvo un choque de auto y murió – Cristóbal no dijo nada – y no solo eso, Pablo se suicidó hace unos días, por eso tu hermana está mal.
- no sabía y ¿Te siguen tratando igual de mal?
- sí, las cosas no cambian y creo que nunca cambiaran, pero bueno, solo faltan dos años para que no nos volvamos a ver, así que no pasa nada.
- yo sigo intentando convencer a mi hermana para que te dejen de pegar, pero no he podido, cada vez que tocó el tema ella me pega y se va enojada a su cuarto y cierra la puerta con seguro y hasta ahí llega mi intento , si entro en su cuarto sin su permiso, ella me saca del cuarto a patadas.
- primero, tú la intentas persuadir, persuadir es con palabras, tú lo intentas que ella piensa como tu, es algo suave, convencer es lo mismo, pero haces lo que sea para que pienses como tú, eso es más directo y fuerte.
- ya, no me regañes, es algo que no voy a aprender, nadie lo utiliza, así que no me regañes.
- está bien, no te vuelvo a corregir, y lo otro es que no puedes, no la puedes persuadir, es imposible, tienes que usar la fuerza, no palabras, pierdes tu tiempo.
- bueno, pero es mi tiempo, yo decido como malgastarlo, espera – Cristóbal mira a los lados - ¿Dónde está la profe? ¿Qué habrá pasado? – un compañero mío vino, no sabía su nombre así que no me importa quién es.
- lo que paso es que otra vez unos policías llegaron y llamaron a la profesora para unas preguntas.
- gracias Oliver – el chico ese se fue.
- entonces ¿han venido tres veces los policías?
- no, fueron dos.
- algo malo va a pasar, porque si los policías vienen a la escuela no es por una buena razón.
- ¿Enserio? No sabía – él se río.
- no te burles, que esto es serio, puede que haya un asesino suelto.
- ya te pareces a Ana y su maldita paranoia, tal vez simplemente es para seguir con el caso de Pablo o el de Laura.
- tal vez – él iba a decir algo, pero la profesora entro y nosotros nos sentamos
Tuvimos clase, unas muy aburridas clases, lo único que me pareció relevante es que el proyecto que tengo que hacer con Oscar el para la próxima semana; cuando salimos al descanso, Oscar como siempre me iba a llevar donde Isa, pero, cuando íbamos a salir del salón, Cristóbal se puso delante de él.
- ¿Qué haces Cristóbal?
- no te dejare que te lo lleves, para llevártelo ambos vamos o tienes que pasar encima de mí.
- mira, no hagamos esto, te quisiera llevar, pero no estas invitado, Isa lo dejo muy específico no puedes ir, así que por favor muévete, no te metas en esto que saldrás lastimado.
- si no puedes llevarme, no iras a ningún lado, tendrás que pasar encima de mío.
- está bien – le pego un cabezazo y lo movió hacia un lado – te lo advertí, espero que no tengas que volver al hospital tan rápido – nos empezamos a mover, yo le grite lo siento.
Llegamos a donde estaban ellos reunidos, todos estaban, todos menos Fred, que en este momento está compartiendo una tumba.
- lo siento Isa, lo que paso es que Cristóbal se metió en mi camino y tu ve que darle su merecido.
- lo siento por cómo se composto mi hermano, en mi casa hablo con él, bueno, ¿Sabes qué pasa? Los policías volvieron, llamaron a nuestras profesoras y se fueron ¿Qué está pasando?
- algo no anda bien, Fred no está, no vino hoy, y hoy vinieron unos policías y nada sabemos nada, podemos apostar que lo mataron, algo no anda bien, tenemos que tener miedo.
- mira, no lo sabes si, pero puede que tengas razón.
- ¿Qué dijiste Isa? – yo no hubiera dicho eso, Isa le agarro de la camisa y la levanto.
- ¡Qué puede que tengas razón, puede que alguien haya matado a Fred, o tal vez no! ¡¿Lo entiendes o no?! !Por qué te puedo explicar a puños!
- no – Ana se veía asustada – si ya lo entendí no me hagas daño – Isa la bajo.
- lo siento, es que estoy estresada, un poco, tareas, las personas muriendo, no es fácil para mí, nada fácil.
- Isa, si esto es verdad todos estaremos a tu lado – Oscar, si eres un príncipe, pero no creo que a Ana le guste lo que le dijiste, de echo tiene cara de matar a Isa - ¿Estoy en lo correcto? – todos dijeron que sí, menos yo.
- gracias amigos, pero no todos dijeron que sí – todos me miraron.
- obviamente voy a estar contigo, porque ustedes me van a obligar y yo no podré hacer nada, yo estoy aquí contra mi voluntad, así que, si voy a estar a tu lado, desgraciadamente porque ninguno de los dos nos soportamos.
- tienes toda la razón, bueno gracias a todos, por estar a mi lado, cambiando de tema ¿Quién le va a pegar primero a Daniel? – y volvimos a la normalidad.
Me metieron a un baño y me golpearon, cualquiera que me viera de fuera pensaría que todos disfrutaron, no me pegaron tan duro, lo peor que me hicieron es meter mi cabeza a la tasa del baño, casi me ahogaron, luego se aburrieron de pegarme y se fueron, yo me levante y me fui a mi salón, cuando llegue Cristóbal se acercó a mí.
- ¿Cómo te fue?
- ¿Tú como crees? Pues mal y si preguntas porque estoy mojado, me pusieron mi cabeza en la taza del baño, eso paso.
- lo siento, sé que no soy útil, pero no les voy a pegar, sé que existe otra forma, una forma pacifista para arreglar todo esto.
- no cambiaras nada, no así, pero sé que nunca te convenceré, así que has lo que quieras, cuando termine el colegio o mi mama despierte, cualquiera de las dos.
- tú deberías hablar con ella o con un profesor, hacer algo.
- no puedo, no puedo, estoy de atado de pies y manos y tú lo sabes.
- bueno, pero sé que esto se puede solucionar hablando, tarde o temprano mi hermana me escuchará y entenderá que está siendo mal y se arrepentirá de todo y todo volverá a la normalidad.
- ella sabe lo que hace, de verdad, pero no quiere cambiar, ella no es tonta, no creo que eso pase.
- dejemos el tema antes de que peleemos, por cierto, una chica te estaba buscando ¿Por qué? ¿Acaso estas saliendo con ella? – el me miro con curiosidad, se nota que estaba intrigado, él sabía que Isa me gustaba, él sabe todo sobre mi, excepto que estoy matando los amigos de su hermana.
- pues, si estoy hablando con ella.
- ¿Ya son novios?
- oye, no con todas que hable quiero que sean mis novias, pero si – ambos reímos.
- ve que tu vida mejora, ¿Quién diría, tu conseguiste pareja primero que yo?
- claro, con lo guapo que estoy, como no hacerlo – él se río.
- si claro, eres guapísimo – lo dijo con sarcasmo.
- es que algunos no aprecian el arte, no todos tienen buen gusto – ambos reímos.
- te extrañe Daniel.
- yo también amigo mío, yo también, y ¿Qué le dijiste a ella?
- le dije la verdad, que Oscar te llevo donde Isa y que seguramente te estén golpeando y que no te puedas escapar de ellos.
- y es cierto, no pude escapar, ellos me dejaron libre, al final se aburrieron y me dejaron, creo que es tarde para ir.
- seguramente – Oscar entro con Ana – ya entraron los reyes de roma, entonces se acabó el descanso.
Luego de un tiempo el profesor entro y nos sentamos, otra clase muy aburrida, creo que me dormí en clase; cuando se acabó, Oscar se fue, no me obligo a ir, eso me sorprendió, tengo un descanso libre de ellos. Yo aproveché y fui donde Sam, me despedí primero de Cristóbal y salí corriendo a buscar a Sam, antes que ellos me empezaran a buscarme; luego de un rato de correr por todo el colegio la encontré.
- hola ¿Cómo vas?
- ¿Daniel? ¿Qué haces aquí?
- pues te vine a ver.
- pensé que te están pegando en este momento.
- pues no sé qué paso, no me pegaron ni me llevaron con ellos, no sé por qué.
- mejor – ella me abrazo, yo también la abrace, que mal es que tú abraces a alguien y que esa persona no te abrace también - ¿Ya empezaron a sospechar por lo de Fred? – por un momento dude en decirle la verdad, pero ella es una persona que me importa y a las personas que te importan no les mientes.
- sí, ya empiezan a sospechar que algo no anda bien, pero no encontraran el cuerpo, no tenemos que temer por la policía, ellos no tendrán ninguna pista, sabrán que algo le paso, seguramente algo malo, pero no sabrán quien fue, por eso no sospecharan de nada, estaremos bien, lo juro, no dejare que nada malo te pase – sonreí.
- gracias ¿Vamos a matar a alguien más?
- nosotros no, yo, yo lo hare, tú te quedaras en casa, tienes que hacerlo, tú eres la vecina de un muerto, la primera persona que van a sospechar eres tú, así que por favor quédate en casa.
- está bien, me quedare en casa solo por ti.
- gracias – luego de esto hablamos de varios temas, no me acuerdo de que, pero estuvo bien hablar con alguien sin sentirme obligado o sin que me lastimé, luego de un tiempo el descanso se acabó, volví a mi salón y ahí estaba Oscar, el me miro y se acercó a mí.
- te fuiste del salón ¿Con que permiso saliste?
- lo siento, no sabía que no podía salir, si me hubieras dicho yo me quedaría aquí, pero saliste tan rápido y no me dijiste nada, pensé que tenía el descanso libre, pero ya veo que me equivoque, lo siento, no volverá a pasar, la próxima vez solo voy a salir con un permiso – si claro, nunca les pediré permiso para salir, ya no.
- no te disculpes, fue mi culpa, no debí pensar que serias tan inteligente para saber quiénes son tus dueños y sin permiso de ellos no puedes hacer nada, te prometo que no volverá a pasar.
Las ganas que tengo de matarlo son demasiadas, pero él no será mi siguiente, será alguien paranoica, la tengo que eliminar, ella me va a empezar a molestar con su paranoia, la voy a hacer sufrir, tengo que avanzar rápido, pero con cuidado, el verdadero reto tan solo empieza.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro