Ha pasado ya una semana, no lo puedo creer, es imposible asimilar lo que me ha pasado en estos últimos días.

Mis heridas siguen curándose, debo tomar unas pastillas que saben asquerosas, para poder contrarrestar los efectos de la droga que me dieron esos tipos, lo peor es que si no me las tomo a la hora que me dijo el doctor comienza a faltarme el aire, se me sube la presión y siento como si estuviera recibiendo millones de puñaladas. Según Minos dentro de un mes estaré completamente sano y no deberé tomar esas pastillas.

Minos me tiene encerrado en su mansión, que por cierto es inmensa, tienen un millón de sirvientes y otros tantos que se encargan de vigilar las afueras. Hoy me di un paseo por todo, bueno, casi todo el lugar porque él salió a hacer algo de "suma importancia" así que aproveche para caminar un poco y salir de esa habitación en la que pase estos días.

— Realmente tiene dinero —llego a una sala en la que hay un montón de cuadros acomodados en las paredes, hay un escritorio, un sillón que se ve bastante cómodo, atrás de este hay un montón de libros y a un lado una enorme ventana que deja ver el enorme jardín que tiene esta mansión—...me imagino que todo esto lo consiguió dejando atrás un montón de cadáveres.

— En realidad...—La voz de Minos me hace girar de inmediato mi vista a donde él se encuentra— ...todo esto lo consiguió mi padre.

Me sonríe desde la puerta.

Me queda viendo y yo no bajo la mirada, luego me doy cuenta que estaba esperando que me levanté de aquel asiento.

— Perdón señor Minos, estaba cansado así que...

— No, no tienes porque darme explicaciones —hace un gesto con su mano como diciendo que no le preste importancia y se acerca a mi— Milo, ¿por qué no estás en tu habitación?

— Es aburrido pasar acostado todo el día, además, tenía que estirarme un poco.

— Oh ya veo.... Por cierto Milo, ¡¡te tengo noticias!! ¡¡Una mala y una buena!! ¡¡¿Cual quieres escuchar primero?!!

Sonríe como psicópata.

Esta totalmente emocionado por contarme las noticias. Por mi parte prefiero no saber nada del mundo en estos momentos.

— Y bien Milo...¿por donde quieres qué empiece?

— Da igual, de todas maneras logrará darme un disgusto.

— Entonces, te diré primero la buena...—va al sillón que está detrás del escrito y toma asiento, mientras me invita a sentarme al frente de el en otro sillón— Recibí noticias de la persona que infiltre con el jefe, ¿Recuerdas? —asiento—... Camus se encuentra bien el jefe no lo... bueno, me entiendes, ¿cierto?

Saber que Camus técnicamente se encuentra en la boca del lobo, por así decirlo, me causa una irá tremenda y miedo de que llegue a salir lastimado.

— Ahora la mala: Al parecer el jefe ha investigado a tu familia y ya tiene localizado a tu hermano, que está aquí, en Francia y tu padre el... —siento como mi corazón se acelera a mil— el...Milo, podrías..no

— Solo dilo.

— Tu padre...el se encuentra en el hospital en Grecia, al parecer ayer en la noche, unos contactos del jefe fueron a tu casa y lo apuñalaron. Según lo que pude investigar es que tuvo un desgarro cerebral, los doctores lograron estabilizarlo pero su estado es crítico...

Minos sigue hablando pero ya no le presto atención. Una parte de mi sabía que esto sucedería, sabía perfectamente que pasaría al involucrarme con aquel tipo, también que no podía hacer nada.

Y eso, es lo que más me llena de impotencia. No poder hacer nada, ver cómo pierdes de apoco lo que más amas y no haber hecho absolutamente nada es tan...

¡¡¡Maldición!!!

No creí volver a sentir esto. Y aquí estoy de nuevo lleno de cólera conmigo mismo y viendo desaparecer a lo que más amo.

Me levanto del sillón, sin decir una sola palabra, caminando directo a la puerta, escuchando las quejas del señor Minos al fondo y los latidos de mi corazón.

Quiero matar a alguien.

Abro las inmensas puertas de la habitación y me encuentro con...

— Wow Milo, ¿sigues vivo?

Y le doy un puñetazo en toda la cara, ¿Quién le manda a estar ahí?

— ¡¡Milo!! ¡¡¡Detente!!! Idiota, ¡¡¡¡no te eh hecho nada!!!! ¡¡¡¡Kanon ven y ayudame a quitarme a este animal!!!!

Le sigo golpeando, estoy tan molesto que ya encontré la forma de desahogarme. Ni siquiera estoy pensando coherentemente.

— ¡¡Saga!! —Minos intenta separarme de Saga— olvide decirle que ustedes estaban aquí. ¡¡¡¡¡¡¡Milo ya deja de pegarle!!!!!!

— Este...—aparece Kanon y separa a Saga de mi— ¡¿Saga?! ¿No te dije que te comportaras? Señor Minos mis disculpas, aveces es como un niño pequeño.

— Mira quién habla...

Kanon le golpea en la cabeza a Saga.

— No, Kanon fue mi culpa—le responde Minos y me sigue jalando o de otra forma...le termino destrozando la cara a Saga— iré por algo de hielo y alcohol para eso —señala la cara de Saga por qué le dejé moretones, le sangra la nariz y le partir el labio— y tu, Milito...

La voz de Minos cambia drásticamente y me lleva jalando a otro cuarto.

— Tendremos una plática sobre como no comportarse con los invitados.

Sonríe, pero esa sonrisa...me causa escalofríos.

(...)

— Lo que tenemos—habla Sorrento emocionado— hasta ahora es impresionante señor Kardia.

— Si...— dejo salir humo del cigarro que estoy fumando— ¿qué opina Coronel Aspros?

— Es basura, de que nos sirve saber que la cucaracha está en otro lado y nosotros dando vueltas en el mismo sitio.

— No es necesario que reaccione de esa manera —hablo de nuevo y tiro el humo en la cara del general, no me importa que se moleste. Ahora todo me da igual y no me ayuda en nada su actitud— lo que conseguimos no solo es su ubicación, también sabemos que Camus está bien y llegamos al lugar donde es posible que mi hermano "falleciera"  —miro a Degel que también está en la habitación del hotel que usamos como base para la información recolectada—...además de eso tenemos en cuenta que ese imbécil a mandado gente a ver nuestros pasos.

Señaló a dos hombres que se encuentran desmayados, gracias a mi queridísimo Coronel. Mi humor en estos momentos..es una mierda. Ganas de matarme no me faltan. ¿Pero eso me serviría de algo?

No, eso me haría ver cómo un cobarde que huye de sus problemas.

Hace dos días llegamos a un lugar en el que supuestamente se llevaba a cabo peleas clandestinas y encontré el resto del uniforme de mi hermano, unas fotos de el...en un segundo sentí a mi corazón derrumbarse en mil pedazos. Lo único que no encontramos fue a Milo y lo dieron por muerto, realmente quiero creer que sigue con vida pero lo que vi aquel día...

En fin, el general Aspros y yo tuvimos una plática ese mismo día.

Nunca lo había visto tan...¿cómo decirlo? ¿Nostálgico? ¿Amable? ¿Compasivo?

No tengo idea de que es lo que pasaba por su cabeza al intentar calmarme:

"No quiero darte falsas esperanzas pero lo mejor que puedes hacer es no dejarte dominar por esa impotencia que debes sentir. Se lo que está pasando por tu cabeza, Capitán, también lo pasé y ahora que ya ah pasado un tiempo puedo decirte que lo mejor que puedes hacer es seguir adelante..."

Me dieron ganas de abrazarlo....

Estoy mintiendo, jamás abrazaría a ese imbécil. Aunque...no!!

¡¡Jamás lo haría!!

Luego de eso quería estar solo para evitar posibles disputas pero, si, hay un pero, yo comparto habitación con Degel y lo que menos quería hacer era preocuparlo por su estado. Total, conseguí justo lo que no quería.

Hasta me hizo llorar. Ahora que lo pienso me da vergüenza que me viera llorar de esa manera, lo único satisfactorio de aquel instante es que no dormí en el mueble de nuestra habitación sino que dormí con Degel.

Debo dejar de pensar en eso.

Y la gota que derramó el vaso, para lograr que yo sintiera un odió tremendo fue enterarme que mi padre sufrió un atentado y ahora está en el hospital y con la edad que se trae....

— No puedes morir viejo...

— ¿Kardia?

Alzó a ver y todos yo se han ido solo estamos Degel y yo.

— El Coronel dijo que descanses —sonrie— mañana por la mañana vamos a viajar. Yo hago las maletas —me da la espalda y camina a donde está nuestra ropa— si no descansas será difícil que le des una golpiza a esos sujetos o ya no quieres...

Lo abrazo desde atrás.

Si él no me hubiera escuchado ayer, talvez hoy ya no pudiera seguir con todo esto. Degel puede parecer frágil y serio a simple vista, pero es más fuerte que cualquier otra persona, aún teniendo en cuenta su situación el siempre está ahí para apoyar y aunque el mundo se le venga enzima el sigue luchando por lo que más quiere. Talvez sea por la forma en que ha vivido o que a vivido más que yo, que su comportamiento es de ese modo y esa forma de ser de el...

Es lo que más admiro.

— Podrías...—le digo al oído— quedarte conmigo...No me dejes Degel

Regresa a verme y me abraza de nuevo.

— No, no lo haré Kardia—se aferra más a mi y dejó caer unas desgraciadas lágrimas— me quedaré a tu lado...pase lo que pasé.

(...)

—Asmista ¿Qué parte de "no me vengas a verme" no entendiste?

No, no puede ser...ese hombre, que está..está alfrente del loco que me secuestro, no, no puede ser ¿Asmista?

— Y ¿qué se suponía que haga? ¿Esperar a qué te diera la gana de avisarme que regresarías? Sabés que hicimos un trato.

Ese..de ahí...no pude ser Asmista, el jamás se comportaría de esa manera y estaría en esta clase de negocios. ¿Cierto?

— ¿Trato? Oh, te refieres a que me entregarías a Camus —El sujeto se para del mueble y va alfrente de Asmista—... y que me darías la cabeza de ese sujeto que se digno en adoptarlo, además de darme los papeles del banco para así ser su dueño del mismo. Y ¿sólo cumpliste con la mitad sabías?

Asmista...¿Porqué haces esto?

Estoy en una especie de mansión gigante llegamos hace tres días, esos tres días pase en ese barco y no volví a ver a ese sujeto luego de que me diera unas fotos de Milo...

Lloré tres días, me rehúse a comer y todo por que odió pensar el hecho de que Milo muriera. Albafica me dijo que no me preocupara por eso pero no me dijo más, eso por qué ahora lo tienen vigilado y no podemos hablar nada.

En este momento me escape de la habitación en la que me dejaron, fue difícil, no solo por qué me vigilan más de veinte personas. El loco me puso unas cadenas pesadas en las piernas para que no pueda caminar pero aún así logré salir y llegar a una gran sala, solo para darme cuenta que la persona en la que más confiaba me estaba traicionado, no solo a mi, también a Degel.

— Esto lastima demasiado.

Una vez que llegue a la sala me escondi dentro de una especie de baúl viejo, por qué escuché la voz del sujeto y sorpresivamente de Asmista.

Y aquí estoy metido en un baúl que apesta a calcetín usado y madera vieja, escuchando como todo lo que había pensado de una persona se desvanece.

—... Aparte de que Seraphina y tú hicieron todo menos cuidar de el mientras preparaba mi regreso... estoy tan decepcionado de ustedes dos, ¡¡par de inútiles!!

— Por cierto, ¿Dónde esta Seraphina? Dijo que también vendría.

Están hablando de..de mi madrastra, no es que la quiera o me sorprenda mucho pero, enserio, ¿también está involucrada en esto?

— Verás Asmista —sonrie de lado- ¿sabés la razón por la que estoy encargado de todo este imperio?

— ¿Porqué tu padre dijo que eras el único digno?

Deja salir una risa roca y enseguida regresa a una seriedad intensa.

— No estás tan equivocado, sin embargo, fue por qué comprendí que se llega más lejos con una palabra amable..—saca una pistola y le dispara a Asmista en el estómago, tuve que taparme la boca o de otra forma sería descubierto—..y una pistola, ¿Que opinas? Saludame a Seraphina en el infierno.

El sujeto sale pisando el cuerpo de Asmista mientras entra el señor Julián y se lleva el cuerpo.

Jamás puedo bajar la guardia con este sujeto, todos aquellos que lo hagan acaban de este modo. Ya no tengo lágrimas para seguir llorando, me duele en demasía todo esto.

¿Alguna vez podré dejar de tener miedo?

No lo creó..

Salgo como puedo de ese baúl y ni muy bien terminó de ponerme de pie afuera. Soy interceptado por ese tipo.

— Camus~ —me mira como si me comiera con la mirada— Que yo recuerde te deje en nuestra habitación —hace una pausa y me carga en seguida, no tengo fuerzas para forcejear — Has estado muy rebelde Camus~ Yo no te enseñe eso

— No me importa lo que me enseñarás. Todo lo que haces es matar inocentes

— Así que crees que mato inocentes. No sabía que ahora decías bromas de mal gusto.

— No era broma

— Camus, hubiera sido mejor que te quedarás callado, no sabes lo que me eh estado conteniendo contigo.

Luchar, ¿servirá de algo para escapar ahora?

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Holiwis!!!

Todos van a morir 😨

Nah, tampoco hay que ser extremistas 😅

¿Les gusto el capítulo? 😌

No se en que momento llegamos a esto pero bueno, supuestamente solo escribiría 10 capítulos...

Pero aquí estamos casi 20 capítulos 😓

Okey, eso es todo lo que tengo que decir

Manzanita Fuera 🍎😘