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prólogo

Hola lectores bienvenidos sean  a conocer esta historia de un poco de todo y especialmente de comedia..como dije antes es mi primer libro y no mucho de esto hací que sin mas que decir les dejó de aburrir.

Pdt: ¡Feliz año nuevo! :v

Me dolía la cabeza demasiado fuerte, me talle los ojos y lo primero que vi fue mi habitación toda desordenada, kimbert estaba de lado opuesto de mi cama durmiendo y sebastian estaba dormido en el piso y rayado de la cara "Propiedad de Mufasa no tocar" decía en su cachete derecho. Sentí que kimbert se levantaba, se tallo los ojos mientras bostezaba.

-¿pero que paso aquí?- dijo impresionada.

Miró para abajo y vio a Sebastian durmiendo e hizo una mueca.

-ohh que lindo- junto sus manos para después poner una cara de malicia- lastimablemente tendrá que levantarse la bella durmiente. Tomó una almohada y se la arrojo bruscamente.

-¡ahí!-se quejó- 5 minutos más mamá.

-yo creo que no-sonreí.

Le jale los pies con malicia, kinbert le quitó la sabana pero en ese momento la abrazó.

-Mami te quiero-dijo adormilado aun con los ojos cerrados.

-¡Quitate pedazo de basura!- exclamó kinbert sonrojada mientras le metía un codazo.

Abrió sus ojos rápidamente y se alejó de ella con horror.

-¡¡QUE ASCO, QUE ALGUIEN ME PASE EL CLORO!!- gritó desesperado.

-¡Callaté Elsa!- contestó enfadada.

-¡Callaté Ricky!- sonrió victorioso al ver a kimbert sin decir nada- por cierto...¿Que pasó ayer y que hago aquí?.

-Hmmmm- intente recordar.

*Flashback*
-oh vamos Harpert sera divertido- dijo Kimbert jalandome el brazo.

-Por favor Harpert..¿si?-preguntó sebastian con cara de perrito.

*bufé*

-bueno- dije al fin rendida.

Ambos sonrieron victoriosos, me escoltaron y nos dirigimos a una sala de videojuegos que aparte era una pizzería ( no, no es five nigth at fredy's), el lugar era espaciosos lleno de todo tipo de videojuegos el piso estaba totalmente sucio y de pizza botada, kimbert grito en la entrada con la mirada hacia arriba " ¡¿Mufasa donde estás?¡" todas las miradas de adolescentes y niños fueron hacia nosotros con cara de "¿y esta qué?" de inmediato le tape la boca y sebastian río levemente en ese mismo instante sentí su lengua.

- que asco Kimbert ¿me lamiste la mano?- quite mi mano de su boca.

-No sé..a lo mejor, tal vez si o no- sonrió y se encogió de hombros.

-Madura.

-NE-VER- dijo pausada con una sonrisa, se escondió de tras de sebastian.

-sabastian dile algo- dije indignada.

-Kimbert- la tomó por los hombros haciendo que le mirara la cara- Yo....soy tu padre.

-Nooooooooo- se arrodilló y alzó sus brazos.

*bufé*

-¿Dios por que?¿Que hice para que me dieras unos amigos tan inmaduros?-Murmuré.

-¡oye te escuchamos!- Dijeron al mismo tiempo.

No pude evitar reírme, después nos fuimos a sentar en una mesa cerca de la tienda de regalos, una mesera se nos acercó y tomo la orden.

-Bien sebastian te toca pagar la cuenta- dijo kinbert.

-¡¿Queeeeeee...pe-pero si la pague ayer?! Te toca a ti- la señaló.

-¿oh en serio?- dijo mientras se veía las uñas- lo dice un chico que tuvo que pedirme dinero para pagar por que se le olvido la billetera- sonrió victoriosa.

-Te odio.

-Yo también te amo.

En eso vino la mesera dejando 3 refrescos y una pizza grande y se retiró.

-valla el servicio es rápido- comenté.

-Quiero ir a walmart- dijo kimbert.

-¿Queeeeeeé pero si querías ir aquí?.

-Tu misma lo dijistes, quería- sonrió.

-ahhh tu ganas.

Amabas tomamos nuestros refrescos y repartimos la pizza no tardamos mucho en comer, salimos kimbert y yo felices de la vida mientras al pobre de Sebastian estaba en bancarrota, subimos al auto de Sebastian yo en copiloto y kimbert en la parte trasera en el trascurso del camino a walmart nadie hablo mas que la radio, estaba aburrida sin saber que decir.

-Llegamos- mencionó Sebastian mientras se estacionaba y quitaba la llave.
Ambas salimos disparadas mientras Sebastian se quedaba hasta atrás en la entrada vimos un carrito de Compras nos miramos y dijimos al mismo tiempo "¿Estás pensando lo mismo que yo"  al fin de cuenta ella se subió y yo la empujaba  nos páramos en el pasillo de dulces y ella destapó una bolsa de chocolates yo le seguí la corriente y empezamos a comer, Sebastian nos miro impresionado.

-¿No deberíamos de pagar primero par de caníbales?- preguntó.

-Con tal la pagaremos- Afirmamos sonrientes.

Sebastian se encogió de hombros y tomó un par de sabritas grandes los metió aun lado de kimbert, seguimos explorando el lugar pasamos por el pasillo de yogurth y kimbert empezó a gritar como loca.

-¡Uh, uh! ¡Probadores!- señaló.

-Ni su quiera lo pienses Miller, tanta azúcar te hace mal- dijo Sebastian.

-¿Y aquien le importa mi salud?- dijo divertida- ¡Por Marnia y por Esparta!.

Fui corriendo hacia los probadores, ambas tomamos uno y empezamos a comer casualmente pasó seguridad por hay y vio a kimbert comiendo yogurth mientras con la otra mano sostenía la bolsa de chocolates. De inmediato salí corriendo y los de seguridad venían detrás de mi.

-Por amor a totoro ¡corre!- gritó desesperada.

Nos dirigimos por donde estaba Sebastian y gritamos "¡Sebas corre!"
Este no hizo nada hasta que vio a los de seguridad tras de nosotros, pasamos de lado de él  nos detuvimos kimbert se bajó y ambas nos escondimos detrás de el.

-¿son sus hermanas?- preguntó uno de ellos con voz seria.

-S-si- contestó Sebastian.

-¿Mayor o menor?- preguntó el mismo sujeto.

-¿Perdon?.

-Usted- lo señaló.

-Mayor- afirmó Sebastian.

Uno de los de seguridad extendió su mano dando a entender que pagara, Sebastian bufo y le dio el dinero haciendo que se retiraran.

-Me deben una- dijo molesto.

Eso es todo mis querid@s lectores y perdonen mis faltas de ortografía.

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