Parte/19
Cuca perdió la noción del tiempo, sumida en sus pensamientos calladas lagrimas empezaron a rodar por sus mejillas, de pronto sintió que alguien limpiaba su rostro y una voz susurro a su oído.
- ¿Todo bien?
Ella levantó el rostro para encontrarse con la mirada preocupada de un hombre, ella turbada contesto apresuradamente.
-Si todas bien gracias.
En ese momento se escuchó la voz de la doctora.
-Esto ha sido todo por este día los espero para el próximo miércoles, que tengan buen día.
Diciendo esto salió de la sala, las personas empezaron a salir, solo Cuca no hizo intentos por pararse ella seguía clavada en su asiento el hombre seguía a su lado, cuando salió la última persona el hombre le preguntó.
- ¿Te puedo ayudar en algo?
-Ayudar, creo que nadie me puede ayudar.
-Te estuve observando y no pude evitar ver que estabas perdida no te diste cuenta de lo que se habló aquí ¿Verdad?
-En realidad no, la doctora me mintió.
- ¡La doctora Gutiérrez! no lo creo, porque dices que te mintió.
-Me dijo que me iba a ayudar y en cambio, me hizo venir aquí a escuchar a gente que ni conozco ni me interesan sus problemas con el mío tengo.
-Mira la primera vez siempre es así, pero te aseguro que todos los que venimos a este lugar tenemos problemas igual que el tuyo o peores y aquí nos ayudamos mutuamente.
-Yo no puedo ayudar a nadie, si no fui capaz de ayudar a mi propio hijo...
Ya no pudo seguir hablando un caudal de lagrimas se lo impidió, el hombre la rodeo con su brazo y ella inconscientemente apoyo su cabeza en el pecho del desconocido, el la dejo llorar, ella poco a poco se empezó a tranquilizar, de pronto cayó en la cuenta de que estaba en los brazos de un extraño, rápidamente se retiró disculpándose.
-Perdón ya me tengo que ir, mi hermano me espera.
-Claro vamos te acompaño a la salida, te pido que le des una oportunidad al grupo, no dejes de venir, aunque no lo creas si te vamos a ayudar.
-Gracias lo voy a pensar.
Lino ya la esperaba en la puerta juntos se dirigieron al coche que estaba estacionado en el estacionamiento de la clínica.
El hombre se quedó parado en la entrada hasta que vio pasar el carro donde iban Cuca y Lino, en ese momento abandono la clínica.
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