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Prólogo
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Vampiros. Criaturas que se alimentan de la esencia vital de los seres vivos. Humanos. Sangre. Existen tres tipos: Los que se alimentan solo de sangre humana, los que se alimentan solo de animales, o también llamados vegetarianos, y los híbridos, los conocerás más adelante.

Vulturis. El equivalente de la realeza en el mundo de los vampiros. Fundamento de la paz y la civilización. Su propósito es mantener en secreto la existencia de estos seres, por lo tanto, deben hacer valer sus leyes, en especial la de no exponerse ante los humanos.

Hombres lobo. También conocidos como licántropos, personas que se transforman en lobos, ya sea a propósito o involuntariamente. Enemigo natural de los vampiros. Los más conocidos: "Los Quileutes"

Neófitos. Vampiros creados recientemente, suelen ser inestables y difíciles de controlar, tienen fuerza superior a un vampiro normal y pueden llegar a ocasionar caos.

Mucho caos.

Y adivinen qué.

Están cerca.

Una banda de neófitos se acercaba al pequeño pueblo de Forks en Washington, en donde estas criaturas habitaban.

Por un lado estaban los licántropos, hombres lobo pertenecientes a una tribu nativa de más de cien años, los Quileutes. Destinados a proteger la reserva y a todo ser humano de su mayor enemigo.

Por el otro, tenemos a "Los Cullen" una familia de vampiros vegetarianos que llegaron a Forks en el año 1936 en donde se encontraron con el Jefe de la tribu en ese momento: Ephraim Black.

Ambos llegaron a realizar un tratado acordando una tregua.

╔═════ 𝕿𝖗𝖆𝖙𝖆𝖉𝖔 𝕼𝖚𝖎𝖑𝖊𝖚𝖙𝖊-𝕮𝖚𝖑𝖑𝖊𝖓 ════╗

•𝑁𝑖𝑛𝑔𝑢́𝑛 𝑚𝑖𝑒𝑚𝑏𝑟𝑜 𝑑𝑒 𝑙𝑜𝑠 𝐶𝑢𝑙𝑙𝑒𝑛 𝑝𝑢𝑒𝑑𝑒 𝑎𝑙𝑖𝑚𝑒𝑛𝑡𝑎𝑟𝑠𝑒 𝑑𝑒 𝑠𝑎𝑛𝑔𝑟𝑒 ℎ𝑢𝑚𝑎𝑛𝑎 𝑚𝑖𝑒𝑛𝑡𝑟𝑎𝑠 𝑟𝑒𝑠𝑖𝑑𝑎𝑛 𝑒𝑛 𝐹𝑜𝑟𝑘𝑠.

• 𝑁𝑖𝑛𝑔𝑢́𝑛 𝑚𝑖𝑒𝑚𝑏𝑟𝑜 𝑑𝑒 𝑙𝑜𝑠 𝐶𝑢𝑙𝑙𝑒𝑛 𝑝𝑢𝑒𝑑𝑒 𝑚𝑜𝑟𝑑𝑒𝑟 𝑎 𝑢𝑛 ℎ𝑢𝑚𝑎𝑛𝑜 𝑑𝑒𝑙𝑖𝑏𝑒𝑟𝑎𝑑𝑎𝑚𝑒𝑛𝑡𝑒, 𝑦𝑎 𝑠𝑒𝑎 𝑝𝑎𝑟𝑎 𝑡𝑟𝑎𝑛𝑠𝑓𝑜𝑟𝑚𝑎𝑟𝑙𝑜 𝑜 𝑎𝑙𝑖𝑚𝑒𝑛𝑡𝑎𝑟𝑠𝑒.

• 𝑁𝑖𝑛𝑔𝑢́𝑛 𝑙𝑖𝑐𝑎́𝑛𝑡𝑟𝑜𝑝𝑜 𝑝𝑢𝑒𝑑𝑒 𝑎𝑡𝑎𝑐𝑎𝑟 𝑎 𝑎𝑙𝑔𝑢́𝑛 𝑣𝑎𝑚𝑝𝑖𝑟𝑜 𝑑𝑒𝑙 𝑐𝑙𝑎𝑛 𝐶𝑢𝑙𝑙𝑒𝑛 𝑛𝑖 𝑎 𝑠𝑢𝑠 𝑎𝑙𝑖𝑎𝑑𝑜𝑠 𝑜 𝑖𝑛𝑣𝑖𝑡𝑎𝑑𝑜𝑠, 𝑑𝑒𝑙 𝑚𝑖𝑠𝑚𝑜 𝑚𝑜𝑑𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑙𝑜𝑠 𝐶𝑢𝑙𝑙𝑒𝑛 𝑛𝑜 𝑝𝑢𝑒𝑑𝑒𝑛 𝑎𝑡𝑎𝑐𝑎𝑟 𝑎 𝑛𝑖𝑛𝑔𝑢́𝑛 𝑙𝑖𝑐𝑎́𝑛𝑡𝑟𝑜𝑝𝑜 𝑑𝑒 𝑙𝑎 𝑃𝑢𝑠ℎ, 𝑛𝑖 𝑎 𝑠𝑢𝑠 𝑎𝑙𝑖𝑎𝑑𝑜𝑠 𝑜 𝑖𝑛𝑣𝑖𝑡𝑎𝑑𝑜𝑠.

• 𝐿𝑜𝑠 𝑙𝑖𝑐𝑎́𝑛𝑡𝑟𝑜𝑝𝑜𝑠 𝑑𝑒 𝑙𝑎 𝑃𝑢𝑠ℎ 𝑛𝑜 𝑝𝑢𝑒𝑑𝑒𝑛 𝑎𝑡𝑎𝑐𝑎𝑟 𝑎 𝑛𝑖𝑛𝑔𝑢́𝑛 𝑣𝑎𝑚𝑝𝑖𝑟𝑜, 𝑎𝑢𝑛𝑞𝑢𝑒 𝑠𝑒𝑎 𝑎𝑗𝑒𝑛𝑜 𝑎 𝑙𝑜𝑠 𝐶𝑢𝑙𝑙𝑒𝑛 𝑠𝑖 𝑒𝑠𝑡𝑎́𝑛 𝑓𝑢𝑒𝑟𝑎 𝑑𝑒 𝑠𝑢 𝑡𝑒𝑟𝑟𝑖𝑡𝑜𝑟𝑖𝑜. 𝐸𝑙 𝑡𝑒𝑟𝑟𝑖𝑡𝑜𝑟𝑖𝑜 𝑄𝑢𝑖𝑙𝑒𝑢𝑡𝑒 𝑎𝑏𝑎𝑟𝑐𝑎 𝑡𝑜𝑑𝑎 𝑙𝑎 𝑟𝑒𝑠𝑒𝑟𝑣𝑎 𝑦 𝑠𝑢𝑠 𝑏𝑜𝑠𝑞𝑢𝑒𝑠 𝑐𝑜𝑙𝑖𝑛𝑑𝑎𝑛𝑡𝑒𝑠.

• 𝑁𝑖𝑛𝑔𝑢́𝑛 𝑚𝑖𝑒𝑚𝑏𝑟𝑜 𝑑𝑒 𝑙𝑜𝑠 𝐶𝑢𝑙𝑙𝑒𝑛 𝑝𝑢𝑒𝑑𝑒 𝑒𝑛𝑡𝑟𝑎𝑟 𝑎𝑙 𝑡𝑒𝑟𝑟𝑖𝑡𝑜𝑟𝑖𝑜 𝑑𝑒 𝑙𝑜𝑠 𝑄𝑢𝑖𝑙𝑒𝑢𝑡𝑒, 𝑏𝑎𝑗𝑜 𝑛𝑖𝑛𝑔𝑢𝑛𝑎 𝑐𝑖𝑟𝑐𝑢𝑛𝑠𝑡𝑎𝑛𝑐𝑖𝑎, 𝑦𝑎 𝑠𝑒𝑎 𝑑𝑒 𝑓𝑜𝑟𝑚𝑎 ℎ𝑜𝑠𝑡𝑖𝑙 𝑜 𝑐𝑜𝑟𝑑𝑖𝑎𝑙, 𝑒𝑠𝑡𝑎́ 𝑡𝑒𝑟𝑚𝑖𝑛𝑎𝑛𝑡𝑒𝑚𝑒𝑛𝑡𝑒 𝑝𝑟𝑜ℎ𝑖𝑏𝑖𝑑𝑜. 𝑆𝑒 𝑝𝑢𝑒𝑑𝑒𝑛 ℎ𝑎𝑐𝑒𝑟 𝑒𝑥𝑐𝑒𝑝𝑐𝑖𝑜𝑛𝑒𝑠 𝑠𝑖 𝑎𝑙𝑔𝑢́𝑛 𝑎𝑛𝑐𝑖𝑎𝑛𝑜 𝑙𝑜 𝑝𝑒𝑟𝑚𝑖𝑡𝑒.

• 𝐸𝑙 𝑡𝑒𝑟𝑟𝑖𝑡𝑜𝑟𝑖𝑜 𝑑𝑒 𝑙𝑜𝑠 𝐶𝑢𝑙𝑙𝑒𝑛 𝑎𝑏𝑎𝑟𝑐𝑎 𝑡𝑜𝑑𝑜 𝐹𝑜𝑟𝑘𝑠 𝑦 𝑠𝑢𝑠 𝑏𝑜𝑠𝑞𝑢𝑒𝑠 𝑐𝑜𝑙𝑖𝑛𝑑𝑎𝑛𝑡𝑒𝑠, 𝑑𝑜𝑛𝑑𝑒 𝑙𝑜𝑠 𝑄𝑢𝑖𝑙𝑒𝑢𝑡𝑒𝑠 𝑑𝑒 𝑙𝑎 𝑃𝑢𝑠ℎ 𝑠𝑜𝑙𝑜 𝑝𝑢𝑒𝑑𝑒𝑛 𝑎𝑐𝑐𝑒𝑑𝑒𝑟 𝑒𝑛 𝑠𝑢 𝑓𝑜𝑟𝑚𝑎 ℎ𝑢𝑚𝑎𝑛𝑎, 𝑛𝑜 𝑝𝑢𝑒𝑑𝑒𝑛 𝑒𝑛𝑡𝑟𝑎𝑟 𝑒𝑛 𝑓𝑎𝑠𝑒 𝑎𝑙𝑙𝑖.

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De esta manera, conviven "pacíficamente" en el mismo lugar.

Pero con la llegada de estos nuevos vampiros solo tienen un objetivo en común y también una sola opción.

Aliarse.

Se pueden preguntar ¿Por qué los neófitos quieren atacar a los habitantes de un pueblucho? ¿Qué es lo que quieren?

Pues vayamos un poco más atrás.

¡Pero no tanto, detente!

Déjame darte contexto linda personita.

Hace unos años llegó una persona a dar vuelta este hermoso pueblo, su nombre era Isabella Swan. Bella, para los amigos.

Si es que tenía.

Esta chica ¿qué? ¿acaso era una vampira malvada que quería comerse el pueblo? No, solo era una humana con grandes problemas de identidad.

Bella sentía que no encajaba en este mundo tan "ordinario".

Y adivinen quien llegó para hacerlo "extraordinario"

Edward Cullen.

Si, ¿Ya se acuerdan a quién pertenece ese apellido?

Déjame decirte, este dúo causó muchos problemas. Y es que Bella conoció su mas grande secreto. Y ahora quería ser parte de él.

Quería transformarse en Vampiro.

¿Qué problema puede haber entre una humana relacionada románticamente con uno de estos seres?

El nombre del problema es Victoria.

Esta hermosa pelirroja de cabello salvaje pertenencia a un clan junto a su novio, James, y otro chico llamado Laurent.

Por desgracia de la vida, el clan conoció a los Cullen y por lo tanto, también a Bella.

James quiso a toda costa la sangre de la humana, pero terminó muerto junto a su causa.

Victoria culpa a Bella y busca venganza. Por lo tanto, ha creado un ejército de neófitos con el fin de destruir al clan Cullen.

Y volvimos al principio ¿Qué tal eso?

Ambos grupos enemigos deciden hacer una reunión, con el fin de llegar a un acuerdo que asegure la protección tanto del pueblo, como de Bella.

—Vamos, solo son unos cuantos chupasangres, no tienen experiencia —soltó Paul, uno de los integrantes de la manada restándole importancia—. Solo les daremos unos mordiscos y volverá todo a la normalidad.

Carlisle, el líder del clan Cullen, negó cerrando sus ojos.

Sam Uley, el jefe de la manada les había otorgado el permiso para encontrarse en el límite, un lugar en donde se trazaba la zona de la tribu y de los vampiros.

—Los neófitos de por sí al ser iniciados son más fuertes. Además, son mucho más hambrientos, tienen sed, no dudarán de hacer lo que sea por sangre. Sam —suspiró—, su deber es proteger a Forks, el nuestro es proteger a Bella, necesitamos de su ayuda tanto como ustedes la nuestra.

El moreno veía a sus aprendices y dudaba, las palabras de Carlisle no sonaban a broma, quizás podían trabajar juntos, pero no significaba nada, No aún.

— Bien —respondió resignado—. Entrenaremos en el claro, necesitamos saber más sobre esa chupasangre y su maldito ejército de sanguijuelas. Mañana, a primera hora.

Alice, parte del clan de los vampiros, una chica de baja estatura y facciones acentuadas que se encontraba ahí, miró detenidamente a los licántropos, observaba sus caras maduras y molestas, olía el asqueroso olor a perro mojado, que aún en su forma humana podían emanar.

Su vista se enfocó en alguien menor, un cachorro, moreno, de cabello negro y expresión asustadiza. Rápidamente una visión vino a ella dejándola estática tal pedrusco.

Ese era su don, una especie de dádiva a cambio de su mortalidad. Espejismos futuristas impedían su día a día interrumpiendo su mente con situaciones que podrían o no pasar.

— ¿Estás bien? —preguntó Jasper, su compañero, tomando su mano. La chica lo ignoró posando su mirada en Edward, su hermano, en parte, causante de tal alboroto, quien era capaz de leer mentes. Este sonrió de lado viendo con picardía al cachorro.

Los neófitos se estaban acercando para destruir y hacer desaparecer todo rastro de Forks.

Pero lo que había visto aquella mujer en su visión era mucho más grande que eso.

Algo que cambiaría la vida de los vampiros y los lobos, para siempre.

¿O alguien?