Bueno mi gente, lamento mucho la tardanza en sacar este capítulo. Pero, en esta ocasión mi excusa es más valida. Recientemente me regalaron una Laptop, y he estado acostumbrándome a usarla para los fics. Especialmente para mis videos en Youtube, bueno. Eso sería todo, espero poder tardar menos en traer el siguiente capítulo.

Pd: A cómo va la cosa todo terminara en el capítulo 20 a más tardar, aproximadamente. 

- Kurumi, tenemos que hablar. -

Pidió Zero mientras le daba otra orden de ataque a su persona de forma mental. Si quería una oportunidad de hablar con Kurumi tenía que mantener a Kotori ocupada.

Sin embargo, Kurumi no estaba en condiciones para detenerse. Ella dudaba y si bien quería hablar, también estaba desconfiada ya de Zero. No sabía que haría una vez hablarán, tampoco sabía qué relación tenía con Ratatoskr, ni siquiera si todo había sido un plan para sellar sus poderes.

Demasiada variables y posibilidades, así que, si hablaban, deseaba por lo menos estar en ventaja, por lo que siguió intentando restringir a Zero. Caso que era igual para este mismo, si bien, estaba luchando contra Kurumi cada movimiento u ataque que lanzaba estaba planeado solo para incapacitar o debilitar. Lo cual era evidente con lo lento y metódico que era el combate. Ninguno quería tirar a matar.

Mientras que Zero mantenía en alto sus escudos de magia, mayormente siendo de muros de biblias, también se vio en la necesidad de usar una gruesa capa de energía del Kitsune para retener el ataque tanto de Kotori como de Kurumi. Si bien, la pelirroja más pequeña estaba ocupada lidiando con el persona, que mostraba un fuerte ataque físico y mágico, ella era superior en su velocidad. Pero desgraciadamente su velocidad solo le facilitaba esquivar los ataques del Persona. Por más que lo ataco con sus llamaradas, este no mostro algún signo de daño, al contrario, cada ataque que este recibía parecía rebotar en él.

Por lo que termino decantándose de intentar atacar al persona, pero tampoco es que tuviera muchas opciones, intentar atacar de forma directa a Zero o Kurumi significaría tener que lidiar con los 2 a la vez. Así que solo podía darse el lujo de atacar a uno o el otro cuando estos estaban demasiado concentrados en un ataque masivo contra el otro.

Mas sin embargo, el combate de los 3 comenzó a alargarse más de lo que se debía, la cordura de Kotori era apenas existente, el tiempo de Kurumi había disminuido de forma alarmante, y Zero. Pese a ser el que se encontraba en mejor estado, había forzado mucho su cuerpo al usar cantidades tan altas de energía y mana casi sin descanso. Si bien, su familia era conocida por una etamina alta, el aún no estaba acostumbrado a usar tanto tiempo sus poderes.

- Kurumi, por favor detengamos esto ahora. –

Pidió el castaño, pero antes de recibir una respuesta, tuvo que tanquear una llamarada de Kotori. La cual estaba tan frustrada que combinado con la desaparición de su cordura, lanzara una llamarada con una fuerza tal, que empujo a Zero y su persona fuera del tejado, provocando que este gritara del susto al ver la caída inminente, pero mientras caía, utilizo su Persona para que enterrara su arma en el concreto del edificio, todo mientras el castaño usaba el otro brazo de su Persona como ancla para evitar caer.

- Maldición, no esperaba que pudiera generar tanto viento de un disparo. Pero soy el único que puede detenerla. –

Pensó Zero mientras comenzaba a escalar la pared de la academia, era claro que ante tales llamaradas Kurumi tendría problemas, lo cual solo empeoraba con el dato desconocido para el castaño, y era que el tiempo de Kurumi ya era peligrosamente bajo. No obstante, mientras Zero escalaba sintió como la academia se estremecía ante más llamaradas de la pelirroja.

Mientras Zero se concentraba en escalar, en la azotea de la academia la situación había cambiado. Kurumi al escuchar el grito de Zero y no ver más que cenizas en el sitio donde estaba, supuso lo peor.

En ese instante, ella no pudo evitar romperse emocionalmente, el chico que se había robado su corazón ya no estaba, y lo peor, es que por como lo vio luchar, pudo fácilmente haberlas acabado por separado, pero, si no hubiera desconfiado de él. Lo más seguro es que seguiría ahí con ella.

Todo estaba dando vuelta en la mente de Kurumi mientras comenzaba a llorar ante este hecho, pero, su tristeza seria cortada al escuchar una risa maniática proveniente de la pelirroja, la cual reía como una total enferma mental, a la par que despreciaba las habilidades de Kurumi.

- Ese chico definitivamente era un hueso duro de roer, pero el finalmente cayó ante mis llamas. Así que, que esperanzas tienes tú estúpida ojo de reloj. –

Kurumi no respondió, ella seguía arrepintiéndose de no haber confiado en él.

- Oh, así que la pequeña niña perdió a su perro faldero. Bien, si tanto lo extrañas te enviare con el de la misma manera. –

Kurumi nuevamente no hizo nada, el tiempo que le quedaba era poco como para mantener una pelea, solo si pudiera matarla de un solo ataque sería posible ganar. Pero, no tenía esperanzas de que eso sucediera. Además, aún tenía la esperanza de ver a Zero en el más haya, no sabía que había más allá de la muerte, pero, Zero murió por desconfiar de él. Ella sabía de sobra que por separado ninguna de ellas podría haberle ganado, nunca lucho a muerte contra ellas y aun así estaba ganando. Pero, por ella el ya no estaba vivo, ella era la responsable de su muerte. Así que, tal vez si también moría, podía pedirle disculpas en el más haya.

Mas sin embargo, cuando Kotori cargo por completo su mejor ataque, y procedió a lanzarlo, ambas chicas miraron una figura correr para interponerse entre el fuego y Kurumi. La figura abrazo a Kurumi de forma tal, que recibiría todo el fuego en su espalda, aun así, la pelinegra fue capaz de sentir el calor de las llamas. Quien fuera que estaba abrazándola, seria calcinado por el fuego, especialmente porque debido al enojo de la intervención, Kotori aumento aún más la duración de la llamarada, al punto que quedo casi inconsciente debido al drenado de energía.

- ¿Estás bien? –

Fue la voz de la figura que defendió a Kurumi, ella comenzó a llorar al reconocer la voz. Era Zero, había sobrevivido, por lo que no contuvo su felicidad y simplemente lo abrazo mientras lloraba. Pero la alegría no le duro mucho, ya que sintió como Zero la apartaba mientras le daba la espalda.

- ¿Realmente creíste que esas flamas me eliminarían? –

- Hmp, pues le hubieras hecho un favor al mundo de hacerlo. –

- Tendrás que hacerlo mejor si siquiera buscas tener una oportunidad. –

Comento Zero mientras suspiraba y concentraba más mana en su sello, el cual comenzó a destellas llamando la atención de las chicas.

- Bien Zero, sigue concentrando más energía. –

- ¿Y luego?. -

- Lanzas toda la energía de golpe, pero en ningún momento te desconcentres de la forma del sello. Si lo haces bien, harás una cúpula de sellado que cubrirá la academia y los poderes de ambas quedaran sellados. –

Eran los consejos de Akihiko, el cual le había dado la idea a Zero de no intentar sellar de manera individual a las chicas, pues sería muy complicado sella a la otra al ver como una de ellas perdía sus poderes. Si bien, pudo aprovechar para sellar a Kurumi mientras la defendía, el castaño prefería que ella siguiera con estos por si las cosas se le salían de control y así ella escapara.

- Entonces, que te parece, un último ataque. Todo o nada. –

Reto el castaño haciendo sonreír a la pelirroja, la cual sin dudar apunto una vez más su cañón.

- Finalmente hablas mi idioma, incluso tú debes tener un límite al fuego que puedes resistir. Así que espero disfrutes tú ultima barbacoa. –

Reto Kotori a lo cual Zero sonrió ante eso, recordaba que su abuelo Akihiko le dijo que los Persona no tenían límite alguno en su resistencia a su elemento afín, así que cualquier ataque de fuego de ella sería inútil, no importaba cuan fuerte fuera. Solamente debía preocuparse por el viento que generara, no volvería a caer por eso.

Ambos se miraron y alzaron su respectivo ataque. Kotori con su cañón en su máximo, y Zero sus manos juntas, aprovecharía el ataque de Kotori para absorber su energía y cargar aún más rápido su sello. En un instante, la pelirroja libero todo el fuego que podía, deseaba terminar esta batalla ahora mismo, ya estaba cansada de que sus ataques fueran inútiles contra él. Pero, mientras las llamas cubrían completamente a Zero.

Este comenzó a concentrar más energía en su sello, el cual comenzó a absorber parte del mana que aquel ataque de la espíritu cargaba consigo. Kurumi por su lado, seguía siendo defendida por el castaño, admirando con sorpresa como este no era afectado por las llamas, además claro, de cómo el brillo del sello de su mano se intensificaba.

Y en ese momento, Zero sintió como el sello era completado, en ningún momento dejo de pensar solo en eso, por más preocupado que estuviera por Kurumi o a donde fuera a golpear el fuego después de salir de la academia, simplemente se mantuvo concentrado en sellar a las espíritus.

Por su lado, Kotori estaba cansada, sus niveles de mana habían disminuido tanto, que a duras penas lograba mantenerse de pie, aun así, ella se forzaba a seguir el ataque. Llegando al punto de estar de rodillas mientras seguía con el ataque activo. Pero, finalmente cedió, ya no podía mas. Por lo que ella simplemente se dedicó a observar los resultados de su ataque con una sonrisa, sonrisa que se borró rápidamente al observar como Zero seguía de pie como si nada.

- Sello Sacro Onuma. –

Susurro este mientras sus ojos brillaban de color blanco, a la vez que toda la academia era cubierta por una cúpula azul, a la par que eso sucedía, ambas chicas sintieron como sus poderes se desvanecían. Y a la par que esto sucedía, Shido junto a Thoka y Origami llegaban. La razón, era que cuando el castaño cuando miro que el enfrentamiento era inevitable, había colocado una barrera mágica que evitaba que cualquiera pudiera acceder a la azotea. Queriendo evitar así cualquier muerte. Aunque, algo que el castaño no esperaba, es que tras ser sellados los poderes de ambas chicas. Sus vestidos comenzarían a desaparecer.

- Oh por amor a.... –

Susurro tapándose los ojos a la vez que le daba la espalda a Kotori. Quitándose su chaleco escolar para dárselo a Kurumi, y dado a que no noto a Shido llegar, estaba por quitarse su playera para entregársela a Kotori, hasta que escuchó la voz del peliazul. El cual se estaba encargando ya de su hermana.

- (Eso me quita un peso de encima). –

Pensó este mientras ahora miraba a Kurumi, todo mientras se frotaba la nuca con vergüenza debido a como estaba por su culpa.

- Kurumi, sé que tienes muchas preguntas. Yo también, pero, este no es el momento para hacerlas. Ven, vamos a mi casa, te daré algo de ropa. Y ya ahí, podemos discutirlo todo con un café. ¿Qué dices, me permites explicarte todo?. –

Cuestiono mientras le acariciaba la mejilla a la chica, el seguía sintiendo algo por ella, por lo que no quería causarle daño alguno, además, ella tenía tanto derecho como obligación de saber lo que sucedió al igual que él.

Kurumi simplemente se quedó mirando a Zero, el, había sellado sus poderes y los de la pelirroja como si nada. Ella quiso tener la ventaja para hablar, pero al parecer él era quien termino con la última palabra. Incluso de conservar sus poderes, ella no tenía mucho tiempo. Así que simplemente asintió. Zero al ver eso, se alegró y la abrazo nuevamente.

- Lo siento mucho si te lastime, pero prometo, decirte todo. Solo, vamos a casa. –

Le dijo a la par que la alzaba en sus brazos, para seguidamente desaparecer de ahí, usando un leve manto de energía del Kitsune para irse lo más rápido que podía de ahí. Mientras iban en el camino, Kurumi no pudo evitar ver el rostro de Zero, el, lucia preocupado.

- (Agradezco haberte conocido). –

Pensó esta mientras abrazaba con fuerza al castaño, el cual simplemente le sonrió con cariño, el solo esperaba que de ahora en adelante, no surgieran más inconvenientes que los pusieran a prueba. Sin embargo, aún había algo que ambos olvidaban, y esto estaba relacionado a su pasado.