Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Cambios

—Estado del espécimen

—Densidad estructural en 56%. Energía ectoplasmática aún inestable, pero se estabiliza lentamente

Vlad Plasmius estaba en su laboratorio supervisando su experimento, era el quinto espécimen que creaba y le complació ver que este avanzó más que los anteriores. Ya llevaba varios meses trabajando en este nuevo experimento y aún le faltaba mucho para terminarlo.

—Sr. Plasmius —el halfa volteó, en la entrada estaba su mayordomo de unos treinta años—. Recuerde que tiene reunión con los directores de los Laboratorios Axion en dos horas

Vlad suspiró fastidiado, había olvidado por completo que tenía que viajar a Amity Park. Solamente había comprado ese laboratorio porque tenían equipos y elementos que podía usar en sus investigaciones inversiones espectrales y combinándolos con la tecnología que Skulker le conseguía de la Zona Fantasma sus armas eran cinco veces más poderosos que la de los Fenton y el Gobierno.

Guardó los archivos de su experimento y se transformó en Masters.

—Gracias Derek, voy alistarme —y salió del laboratorio junto al mayordomo

Solo le había tomado quince minutos para estar listo. Estaba terminando de peinarse cuando sintió su sentido fantasma activarse, reconoció la presencia por lo que no necesito mirar al recién llegado.

—¿Alguna novedad en Amity Park?

—Solamente llegó una psicóloga y su asistente a la escuela de la mocosa —respondió Skulker con desdén

—Parece que no hay nada relevante en esa ciudad, como siempre

—Bueno, sí hubo algún cambio

—¿Así? —Vlad seguía sin mirar al cazador, estaba acomodándose su corbatín

—No escuché esa conversación, pero algo le dijo esa mujer que dejó deprimida a la mocosa

Vlad no lo aparento, pero muy en el fondo le preocupo las palabras del cazador; en la adolescencia cualquier cosa que le dijeran a una persona de catorce años haría de eso una tormenta en un vaso con agua y (en opinión del halfa mayor) más si se trataba de una mujer.

Terminó de arreglarse y ahora sí miró al cazador.

—¿Algo más?

—Por ahora, no. De seguro después de tus reuniones irás a "divertirte" un rato con la mocosa. O como le dices "cariñosamente" Pequeña tejón

Vlad ignoró eso último. Skulker regreso a La Zona Fantasma y el billonario se fue a Amity Park. Durante el trayecto, siguió dándole vueltas al ausentó de Daniela y más al no comprender porque se preocupaba tanto por su némesis.

«Tal vez al estar tanto tiempo ocupado con mi proyecto ya me está alterando» es lo que pensaba y quería creer.

Llegó a los Laboratorios Axion y se reunió con el personal. La mayoría de las reuniones fueron tediosas, ya que algunas de las investigaciones e invenciones ya las conocía gracias a Skulker. A las tres de la tarde terminó con sus labores, por lo que se permitió "distraerse" un momento en el pueblo.

Podía haber usado sus poderes y de ese modo pasar desapercibido, pero le complacía más ver las expresiones de sorpresa y envidia de los habitantes de Amity Park ya que no era normal ver una limusina por la calles.

De repente sintió una presencia fantasmal acercándose poco a poco, miró por la ventana y vio que estaban pasando por la Secundaria Casper, haciendo que Daniela apareciera de repente en sus pensamientos otra vez, a lo cual Vlad sacudió la cabeza para alejarlos.

«¿Qué rayos me está pasando?» preguntó internamente para sí mismo

—¿Qué rayos te está pasando?

Vlad salió de su lucha interna y miró hacia la escuela. Vio a los mejores amigos de su némesis Tucker Foley y Samantha Manson hablando con una chica de cabello negro largo y ondulado, vestido azul sencillo de manga larga y zapatillas negras, estaba de espaldas por lo que no pudo ver su cara, pero se sorprendió al escuchar su voz.

—Sam, te lo he dicho todo el día, estoy bien

—¡No estás bien Danny!

—¿¡Daniela!? Carl, estaciónate enfrente de la escuela, pero al otro lado de la calle

—Sí señor

El chofer acomodó el vehículo y Vlad, sin bajar el vidrio para qué no lo vieran, aguzó sus sentidos para escuchar la conversación. La joven le dio la espalda a sus amigos y el halfa mayor se sorprendió mucho al comprobar que efectivamente era la joven halfa, pero... ¿Por qué ahora le había dado por lucir más... femenina?

—Sam tiene razón —concordó el moreno—. Desde la primera vez que hablaste con la hermosa... —la gótica le dio un codazo en las costillas y el técnico, sobándose el área golpeada, cambió su postura— con la Dra. Spectrum has cambiado bastante. Ya no quieres jugar videojuegos, ir a la tienda de cómics. Cambiaste las películas de acción, ciencia ficción y superhéroes por románticas...

—Y lo más notorio es que te vistes y actúas como el grupo de Paulina —agregó Manson—. Ya no eres tú misma, Danny

—No es gran cosa —se defendió la azabache—, es solo que esas cosas no son de chicas

—¿Y qué? A ti nunca te ha importado eso —dijo Foley—. Te divertías mucho con eso

—No sé qué te ha dijo esa loquera, pero está acabando contigo Danny

—Los dos están exagerando —se colgó mejor su bolso «¿desde cuándo dejó esa mochila gastada de Hogwarts?» pensó Vlad—. Nos vemos mañana —y se fue dejando a sus amigos con la palabra en la boca y más preocupados de lo que ya estaban

El billonario miró a la joven con una ceja arqueada. Así que esa debió ser la dicho conversación que Daniela tuvo con la nueva psicóloga, la Dra. Spectrum; pero al escuchar su nombre le vino a la mente otro nombre ya que se parecía mucho.

—¿Acaso será ella?

—¿Volvemos a Wisconsin, Sr. Masters?

—Déjame aquí. Tú espérame en el hotel de siempre

—¿Seguro señor?

Vlad solamente se transformó en Plasmius y salió del vehículo. Se concentró en sentir la energía de la chica y lo uso para seguirla, la vio caminando cabizbaja hacia su casa; aún no entendía porque el cambio de actitud de Daniela ¿de verdad le afectó lo que sea que esa psicóloga le dijo?

—¡Dash, te dije que me dejes!

La exclamación hizo que Vlad saliera de sus pensamientos. Miró a la calle y vio a Daniela discutiendo con un chico rubio y chaqueta deportiva; lo reconoció de inmediato debido a las cámaras de espionaje que colocó en la Secundaria y en la residencia Fenton. Vio al chico sujetar con fuerza a su némesis del brazo exigiendo hablar con ella, a lo cual Daniela se negaba y se soltó de un jalón haciendo que el rubio se molestara a un más. Vlad sospechaba que la discusión empeoraría y no se equivocó al ver que el rubio llevó a la azabache a un callejón.

====================DVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDV====================

Danny caminaba hacia su casa con la cabeza baja. Desde que había hablado con la psicóloga empezó a cambiar su imagen y su actitud; como era de esperarse, en la Secundaria Casper se notó su cambio y llamó la atención de todos, sobretodo de los chicos ya que nunca habían visto a la menor Fenton tan... femenina. Más de una vez Sam, Tucker y Jazz intentaron sonsacarle la razón por la cual el cambio, pero ella solamente alegaba que quería cambiar de imagen y que no era nada malo.

—¡No eres tú, Danny! Te portas como una más del montón —le decían sus amigos y hermana, pero más Sam

Después de clases, volvió a discutir con sus mejores amigos por lo mismo hasta que harta se despidió de ellos y se fue directo a su casa sin darse cuenta que un chico fornido y rubio la seguía de cerca y tampoco se dio cuenta de una presencia fantasmagórica.

—Fenton

La chica se detuvo y levantó la mirada sorprendida al reconocer esa voz. Volteó y vio tras ella al chico que la había estado molestando desde sexto grado.

—¿Dash? ¿Qué quieres?

—Tranquila Fen... Danny, solamente quiero hablar contigo

A la azabache le desconcertó su actitud, para empezar nunca en su vida la había llamado por su nombre de pila, provocando que desconfiara más del rubio.

—¿Que se te ofrece?

—Yo... Me preguntaba si querías ir conmigo a la Hamburguesa Apestosa o al cine

Danny tuvo que controlarse para que no apareciera en su rostro la sorpresa. Dash Baxter, la estrella del fútbol y que siempre la molestaba ¿la estaba invitando a salir?

«Solo me pongo un vestido y cambia su actitud hacia mí»

La azabache frunció el ceño y eso no pasó desapercibido para el mariscal de campo.

—A ver si entendí... Me estás pidiendo una cita después de que has estado molestándome desde sexto grado y esperas que acepte como si nada

—Bueno yo... —Danny sonrió con disimulo al comprobar que el rubio solo se fijó en ella por ser una "cara bonita"

—Tú...

—Solo... quería enmendar lo que hice

—Y para que pasara eso tenía que ser justamente cuando cambie de imagen ¿no?

Dash se quedó callado al ser descubierto. Danny lo miró con desprecio y dio media vuelta con la intención de seguir su camino, pero de pronto sintió que alguien la sujetaba del antebrazo con fuerza, volteó y vio que era el rubio.

—Dash, déjame. No voy a salir contigo

—¿Es que no sabes quién soy?

—¡Sí! ¡Un escupido jugador de fútbol americano que se cree mejor que los demás! —se soltó de un tirón y caminó rápido, pero debido a que el rubio era más alto que ella, logró alcanzarla y la tomó otra vez del brazo, pero con más fuerza.

—¡Dash, te dije que me dejes!

—¡No hasta que aceptes salir conmigo!

—¡No!

Dash se estaba volviendo más violento y eso alarmó a la chica, ni siquiera cuando la molestaba en la escuela se había mostrado tan enojado como en ese momento. Antes de que Danny pudiera hacer algo, Dash la metió a un callejón, la acorraló contra la pared sujetando sus muñecas arriba su cabeza y para horror de la halfa el rubio la besó con brusquedad.

Danny forcejeaba y pateaba para liberarse, pero era imposible. Se sentía asqueadas de que Dash la besara, no sabía si considerar este como su primer beso ya que dos veces beso tuvo que besar a Tucker para disimular la razón por la cual se encontraban cerca de donde peleaba Phantom. Incluso llegó hacerlo con Sam, pero todos fueron catalogados a «Beso en los labios de mentira».

Sintió que sus ojos se volvían verde fosforescentes, el poder de Phantom estaba despertando para defenderse del peligro, pero sí lo hacía revelaría sus identidad. No obstante, ese pensamiento no le importó al sentir que el rubio le acariciaba con descaro las piernas y empezaba a subirle la falda.

Estuvo a punto de lanzarle un rayo de plasma cuando de pronto dejó de sentir a Dash sobre ella y era liberada del agarre, lo cual hizo que se deslizara por la pared y cayera de sentón al suelo. Escucho un golpe seguido de un quejido del rubio; levantó la mirada y grande fue su sorpresa al ver a su némesis mirando al deportista con odio y con un puño salpicado de sangre. Miró a Dash y vio que el chico tenía sangre en la nariz y en el labio.

Vlad se le acercó al chico y lo levantó con una mano sujetándolo del cuello de la playera y preparaba la otra mano con la intención de volver a golpearlo.

—¿Cómo te atreves a ponerle una mano encima a Daniela?

—Lo... lo siento, pero... ¿Quién es usted?

—¡Eso no te interesa! ¡Pero si te interesa saber que si descubro que vuelves a acercarte a ella y la lastimas te la verás conmigo! ¿¡Entendido!? —arrojó a Dash y por un momento al rubio le pareció ver que los ojos azules del hombre se volvían rojos por un segundo.

—En... entendido, señor

—¡LARGO!

Dash no necesito que se lo repitieran. Con torpeza se puso de pie y salió corriendo del lugar sin mirar atrás. En cuanto el mocoso se perdió de vista, finalmente los ojos de Vlad se volvieron rojos y lanzó un ecto rayo al contenedor de basura destruyéndolo al intente; no era lo más efectivo, pero al menos pudo descargar un poco de su ira.

Danny se paró con dificultad y miraba a Vlad entre sorprendida y (por primera vez en su vida) feliz de verlo. Se quedó recargada en la pared, no quería acercarse al mayor al verlo tan alterado, pero necesitaba saber qué hacía en Amity Park y por qué la salvó.

—¿Vlad?

Fue un susurro, pero gracias a sus poderes puso escucharla bien y fue la voz de la chica lo que hizo que el mayor reaccionara. Sus ojos volvieron a ser azules y la energía fusca de sus manos desapareció. Miró sobre su hombro a la chica y vio en su rostro miedo, sorpresa y ¿alivio? Respiro con calma antes de acercarse a Danny, cuando pudo verla mejor sintió que la ira volvía a despertar al ver su ropa arrugada y marcas de beso en sus labios y cuello.

La chica se abrazaba a sí misma por el miedo y al sentir la mirada penetrante del mayor bajo la mirada avergonzada. Tenía que reconocer que no ser por el mayor Dash pudo dañarla más e incluso llegar a... sacudió su cabeza para alejar ese pensamiento. Aún no podía creer que no se atrevió a usar sus poderes para defenderse del rubio.

Sus pensamientos se cortaron al sentir que le colocaban algo sobre sus hombros, miró y se dio cuenta que Vlad la había cubierto con su saco.

—¿Qué...?

—No es conveniente que regreses a tu casa luciendo así. —La interrumpió el mayor—. Te llevaré conmigo para que descanses y te tranquilices. Y no empieces a decir que "estás bien" porque es obvio que no —dijo con fuerza al ver que Danny iba a hablar—, este tipo de circunstancias no son para tomárselo a la ligera

La joven halfa ya no encontró más argumentos para negarse, por lo que no tuvo opción más que ir con él. Vlad recogió el bolso de Danny, y abrazándola por los hombros, la sacó del lugar. El chofer de Vlad no tardó en encontrarlos y llevarlos a donde sea que el halfa mayor le dijo al oído justo cuando Danny subía al vehículo.

Estuvieron en silencio en todo el camino hasta que fue roto por una expresión de asombro de la adolescente. Habían llegado al Centro Comercial.

—¿¡Se puede saber qué hacemos aquí!? —preguntó escandalizada la chica

—Necesitas reemplazar esa ropa ya que se manchó un poco de sangre y al parecer se desgarró un poco —respondió Vlad señalando el vestido

Danny se miró y con pesar descubrió que el mayor tenía razón. La chica miró por la ventana hacia la plaza comercial algo insegura, a esas horas de la tarde cualquier alumno de la Secundaria Casper estaría por ahí y si alguien llegaba a verla de ese modo enseguida se armaría un alboroto y un chismorreo enorme.

—Tranquila, me aseguraré de que nadie de la escuela o cualquier conocido te vea —dijo Vlad, adivinando los pensamientos de Danny

—¿Y cómo, exactamente, planeas hacer eso? Ya que obviamente no podemos usar nuestros poderes

—No te preocupes, Pequeña Tejón, de eso yo me encargo

Danny rodó los ojos a la vez que en su rostro aparecía una clara expresión de fastidio. ¿Qué rayos estaba pensando? Aunque no le gustó descubrirlo...

«Esto no lo harían ni Black Widow ni James Bonds» pensó molesta la adolescente

Todavía llevaba puesto el saco del mayor, pero también llevaba unos lentes oscuros que parecían de piloto de avión y una mascada en su cabeza.

«De verdad hubiera sido más sutil usar mis poderes que este estúpido disfraz... si es que a esto se le puede decir disfraz»

—Bueno, aquí estamos —le dijo Vlad

Danny reaccionó y vio el local, lo cual provocó que soltara una exclamación de asombro llamando la atención de las personas que pasaban. Se puso roja y se cubrió más con la mascada a lo cual Vlad se rió y la chica lo miró molesta.

—Tú eras quien quería pasar desapercibida y eres la primera en llamar la atención —se burló el mayor

—¿¡Y cómo esperabas que reaccionara si me traes a una tienda a la cual no podría comprar ni una diadema por lo costoso que es!? —exclamó Danny molesta—. Además según tú quieres que disimule lo que pasó ¡y quieres comprarme ropa que nunca podría costear por mí misma!

—Ya deja de gritar, Daniela. Solo entra y escoge la ropa que te guste, no te limitaré

Vlad entró primero a la tienda. Danny miró al mayor aún con desconfianza, seguía con la idea de que el billonario tramaba algo, así que no tenía otra opción más que seguirle la corriente y de ese modo resolver todo.

La azabache tuvo que contenerse a soltar otra expresión de asombro. Vio que Vlad la miraba con una sonrisa arrogante y Danny desvió la mirada con indiferencia.

Entre más miraba la ropa más se sorprendía, nunca había visto ropa de esa calidad aunque no le sorprendía ver igual marcas muy reconocidas, era las que Paulina presumía que usaba.

Vlad todavía no podía creer el cambio en la adolescente; ya no se parecía en nada a la chica que él conocía, eso hizo que sus sospechas hacia la nueva psicóloga de la Secundaria Casper aumentaran.

—¡Te ves adorable!

El halfa mayor salió de sus pensamientos al escuchar eso, buscó el origen de la voz y vio a una dependiente del local atendiendo a Daniela, quien se estaba probando un vestido rosa de tirantes... un segundo ¿¡rosa!? La chica aborrecía ese color, la vio mirarse en el espejo en diferentes ángulos para cerciorarse de que le quedara bien, pero en su cara no se veía convencida. Esto estaba muy lejos de lo normal.

—Se puede saber ¿qué estás haciendo?

Danny miró a Vlad por el reflejo del espejo con el ceño fruncido.

—¿Tú que crees? Probándome ropa, ya que fue tu idea venir aquí

—Me refiero a qué haces vistiendo ese color. Te conozco y lo odias ¿cómo es posible que ahora lo uses?

—Eso no es asunto tuyo —Danny se alejó del espejo sin mirar a Vlad y regresó al probador

El mayor se pellizcó el puente de la nariz y respiro profundo para calmarse. Habló a la chica que estaba atendiendo a la joven y le pidió que le llevará a Daniela otro tipo de ropa, incluso él la escogió recordando los verdaderos gusto de su Pequeña Tejón.

La chica le llevó la ropa y Vlad espero a que Daniela saliera; pero grande fue su sorpresa al ver que la joven halfa salió casi enseguida de que le llevaron la ropa y al parecer molesta, agradeció a la dependiente y salió de la tienda dejando al halfa mayor atrás.

Vlad miró frunciendo el ceño a Daniela y salió detrás de ella, quien solamente caminaba cabizbaja sin fijarse por dónde iba. El billonario se metió con disimulo a un armario de intendencia y se transformó en Plasmius, no iba a ir detrás de ella llamando la atención de las personas y sabía que la chica podía usar inconscientemente sus poderes ya que se dejaba llevar por sus emociones.

Se quedó flotando e invisible pensando en dónde podría estar; a pesar de que cambió su estilo, sus gustos no podían cambiar de la noche a la mañana, así que fue a buscarla a los lugares que le gustaba ir a Daniela. Y efectivamente la encontró afuera de una tienda de historieta, miraba por la ventana el local y estaba conteniendo las ganas de entrar.

Bajó, se escondió y volvió a ser Masters. Se acercó con sigilo a Daniel y la tomó del hombro haciendo que la chica brincara del susto.

—¿Qué haces aquí?

—Obviamente buscándote. ¿Por qué no entras si tienes ganas de hacerlo?

Danny se ruborizó y un poco y desvió la mirada.

—Solo es curiosidad, no tengo intenciones de entrar

—Dices una cosa, pero tu cara dice otra —la adolescente lo miró con odio y después le dio la espalda—. Daniela, sé que no soy nadie para preguntarte esto y sé que tampoco me creerás de qué realmente me preocupo por ti ¿pero qué es lo que te pasa? Esta chica que está dándome la espalda no es la que siempre me planta cara cada vez que la molesto o insulto a su padre y que no sigue la corriente de cómo debería ser una adolescente —la tomó de los hombros y le dio la vuelta con cuidado—. Daniela ¿qué es lo que te hicieron?

La joven halfa estaba en shock; nunca esperó que Vlad, su archienemigo, se preocupara por ella; pero al venir «archienemigo» a su cabeza hizo que "reaccionara". Se soltó del agarre del mayor y se alejó de él dando varios pasos hacia atrás. Vlad ya sabía que Daniela reaccionaria así, pero no sabía porque lo entristeció. Recuperó su postura seria y apartó la mirada de la chica.

—Bueno, será mejor que sigamos con las compras para que pueda llevarte a casa

Danny miró a Vlad empezando a alejarse, le parecía extraño ese cambio de actitud por parte del mayor, pero decidió pasarlo por alto.

El resto de las compras fue incómodo, pero lograron acabarlo sin pena ni gloria. Incluso el camino a los Laboratorios Fenton estaba tan tenso que el chofer se sentía muy incómodo; se alegró en cuanto llegaron a su destino, le abrió la puerta a Vlad y el billonario salió del vehículo. Le tendió una mano a Daniela para ayudarla a salir, pero ella lo ignoró y bajó por su cuenta.

La adolescente bajó las bolsas con las compras y fue directo a la puerta sin mirar a su némesis.

—Bueno... Gracias por todo —agradeció Danny buscando las llaves de su casa en su bolso.

—No hay problema —dijo Vlad de pie junto al vehículo

Danny apenas sacó las llaves de la casa cuando de repente la puerta se abrió y por esta salió su padre.

—¡Danny! ¿Dónde estabas? Tardaste mucho en llegar, Jazz nos dijo que no saliste con Sam y Tucker y creímos que vendrías derecho a casa —dijo Jack abrazando muy fuerte a su hija

—Jack, tranquilo. Estás lastimando a Danny —dijo Maddie llegando de pronto al ver que su esposo no se movía de la puerta

—¡Oh, lo siento Danny! —se disculpó el cazador soltando a la joven

Danny jadeó recuperando aire, siempre era el problema cada vez que su padre la abrazaba, como era de complexión muy ancha cada que abrazaba a su esposa o hijas nunca medía su fuerza. Entonces levantó la vista y vio en la calle al billonario.

—¡Vladdie!

Al escucharlo, Maddie miró a la calle y también vio al hombre.

—Vlad ¿Danny estuvo contigo todo el tiempo?

—Sí, Maddie —contestó el billonario—. Tuve unos asuntos que atender en los Laboratorios Axion y al salir me encontré con Daniela, así que la invité al Centro Comercial. Creo que con esas bolsas es más que obvio

El matrimonio Fenton vio las bolsas en las manos de su hija, comprobando que era verdad.

—Vaya... pues qué lindo gesto de tu parte, Vlad —dijo Maddie sorprendida por la acción del hombre

—Es bueno ver que tú y Danny comienzan a llevarse bien —dijo Jack—. ¿Qué te parece si te quedas a cenar? Así conversas un poco más con Danny

Ambos halfas se tensaron. Danny esperaba que el mayor se negara, pero para sí desgracia Vlad aceptó. Se excusó diciendo que tenía que dejar sus cosas en su habitación, le dio un beso a sus padres en la mejilla y subió a su cuarto casi corriendo. Los tres adultos se instalaron en la sala para hablar un poco.

—Parece que Daniela ha cambiado mucho —comentó Vlad, aceptando la taza de café que le pasaba Maddie—. ¿A qué se debe ese cambio? —y tomó un sorbo a su bebida. Ya lo sabía de sobra, pero quería saber los puntos de vista del matrimonio Fenton

El matrimonio Fenton se miró y eso no pasó desapercibido para el halfa mayor.

—Bueno... Ambos creemos que es por algo que pasó en la escuela —respondió Maddie—. Jazz nos dijo que llegó una nueva psicóloga a la Secundaria Casper y habló con todos los estudiantes. Algunos sí parecieron tener un cambio después de hablar con ella, como Danny, por ejemplo, y otros no

Se escuchó un gruñido bajo y Vlad vio que lo hizo Jack.

—¡Bah! Lo único que sé es que esa "psicóloga" arruinó a mi hija. Sí, reconozco que Danny no se comporte como una "dama" ¡pero al menos era ella misma y se divertía! Ahora con esa idea de actuar "más femenina" ya no hace nada de lo que le gusta; de hecho, al comportarse así se ve triste, pero aun así lo sigue haciendo

—Bueno, es cierto que Danny ha cambiado bastante, pero no es para exagerar

—Maddie ¡acabo de ver en la basura TODO lo que tenía de la NASA!

—¿¡Qué!? Pero... ¡Pero Danny siempre nos dijo desde pequeña que quería ser astronauta! Además, hay mujeres igual en la NASA ¿por qué lo haría?

—No lo sé, pero es por eso que digo que esa mujer arruinó a mi hija

Vlad escuchó la conversación sin meterse y se sorprendió de lo que escucho. Gracias a las cámaras ocultas vio que efectivamente a Daniela le encantaba la NASA y eso era algo de lo que no era posible que cambiará de la noche a la mañana.

Después de esa conversación, Jack llevó a Vlad al laboratorio para enseñarle los prototipos de sus nuevos inventos. A pesar de que el patriarca Fenton invitó al billonario a cenar, Vlad rechazó de último momento la oferta alegando que acababa de recordar que tenía asuntos pendientes que atender. Se despidió de la familia, que ya estaban en la cocina preparando todo para cenar, y salió de la casa.

====================DVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDV====================

En cuanto llegó a su habitación, Danny soltó su bolso y las compras, se dejó caer en la cama boca abajo y enterró su cara en la almohada ¿¡qué rayos había pasado esa tarde!? Plasmius apareciendo de la nada y salvándola de Dash, luego la invita al Centro Comercial y ahora su padre invita al Cabeza de Queso a cenar.

«Ya tengo suficientes problemas en la cabeza como para que Plasmius aparezca y empeore todo» pensó Danny con rabia

Se acomodó boca arriba mirando al techo; aunque no quisiera admitirlo desde su conversación con la Dra. Spectrum, más que nada en la parte que le mencionó el no tener pareja, hizo que Plasmius se instalará tan hondo en su cabeza que pareciera que ya no quisiera salir. Se llevó las manos a la cabeza y se movió bruscamente.

—¿¡Por qué demonios no puede salir de mi mente!? ¡Se supone que lo odio, somos enemigos! ¿¡Por qué rayos pienso en él!?

—Eso es más que obvio ¿no crees, hermanita?

—¡Jazz! —exclamó Danny incorporándose de golpe en la cama

La pelirroja estaba parada en el marco de la puerta y miraba a su hermanita con una sonrisa burlona. Estaba leyendo en su habitación y alcanzó a escuchar perfectamente los gritos de la azabache; al poner atención a lo que decía sonrió y fue a su habitación para intentar ayudarle.

«Ay Danny... hay cosas que ni tus poderes fantasmas pueden ayudarte» pensó divertida Jazz

—¿Por qué me estás espiando?

—No te esperaba Danny, es solo que tus gritos se escuchan hasta mi habitación y creo que incluso se alcanzaron a escuchar hasta el laboratorio

Danny se puso totalmente roja, se dejó caer en la cama, cubriendo su cara con la almohada y gritó contra esta. Jazz negó con una sonrisa y se acercó a su hermana, sentándose en la cama.

—Ni se te ocurra hacerme terapia —dijo Danny aún con la almohada en la cara

—Para este tipo de situaciones no es necesario terapia. —dijo Jazz, moviendo la almohada lo suficiente para ver a su hermana a los ojos—. Solo una "charla de chicas", con la cual nos escuchamos y aconsejamos mutuamente

—Ahora se escuchó como terapia grupal

Jazz rodó los ojos por el comentario.

—Por favor, Danny. ¿Qué nunca has hecho eso con Sam?

—No, porque la mayoría del tiempo Tucker está con nosotras y además recuerda que no le agrado a su madre, por lo que tampoco me quedó mucho tiempo en su casa sino es con él

—Y últimamente cada vez que viene a la casa es por la cacería de fantasma

—Sí

—Ay Danny... Bueno, creo que es hora de tengamos una. Además —miró a su hermana con una sonrisa nostálgica y eso sorprendió a Danny—. Hace mucho que no hablamos

La joven halfa se quitó por completo la almohada, ahora abrazándola contra su pecho, y se sentó en la cama. Jazz tenía razón, cuando ambas entraron a la Secundaria comenzaron a distanciarse y ahora gracias a sus combates fantasmas volvieron a unirse, pero al igual que Sam, era solamente con respecto a la cacería de fantasma.

—Sí, supongo que tienes razón. Y bueno... —Danny se pasó la mano por la nuca sin idea de cómo seguir— ¿de qué quieres hablar?

—Podría ser de la persona que te trae tan confundida y con tus emociones a flor de piel

—¿¡Qué!? —Danny volvió a ponerse totalmente roja— ¿¡De-de-de qué estás hablando!? ¡Yo no estoy sufriendo por nadie! ¡Ni siquiera sé de qué estás hablando!

—Danny —dijo Jazz arqueando una ceja

La joven halfa suspiró frustrada y bajó la cabeza, ocultándola otra vez con la almohada.

—Ni yo sé que me pasa. Solamente me pongo así cuando estoy cerca de él.

—¿Él? Entonces es un chico

—¡Pues claro que sí! ¿Tú que creías?

—Por un momento creí que se trataba de Sam

—¿¡Sam!? ¿¡Por qué!? ¡Es mi mejor amiga!

—Creo que no me explique bien —al ver la expresión de confusión de su hermana prosiguió—. El modo en que te vestías antes, tu actitud "masculina" y el hecho de que siempre estés más tiempo con Sam me hizo creer por un momento que te gustaban las mujeres. No digo que esté mal, yo estoy totalmente de acuerdo de que la gente ame a quien quiera sin importar su género, por eso lo creí después de que me dijiste que no te gusta tampoco Tucker. Pero ahora me dejas con la duda de saber quién es la persona te vuelve más despistada que de costumbre. Y si digo persona es porque ya con lo que te acabo de decir, podría ser que si seas hetero u homo y de las dos maneras te apoyare y te querré, hermanita.

—Jazz... —simple creyó que su hermana era de esas personas de mente cerrada al verla todo el tiempo estudiando y alejando que solo creería en pruebas científicas, pero después de descubrir su secreto parecía que su hermana estaba más abierta a las cosas que se podrían presentar; aun así no estaba segura de querer decirle la verdad, pero necesitaba sacarlo y ver si de ese modo podía aclararse su cabeza—. Bueno... si hay alguien...

—¡Lo sabía! —Tomó las manos de Danny y la miró con mucha emoción—. ¿Quién es? ¿Conozco a la persona?

—Sí. Y bueno, aclarando primero las cosas, es hombre

—Vaya, interesante... —entonces se dio cuenta de algo—. ¿Hombre? ¿No chico?

—¿Cuál es la diferencia? ¡Es masculino! No sé porque...

—Danny, lo digo porque al decir "hombre" me estás dando a entender que es alguien mayor a ti —Danny se puso roja al darse descubierta y por darle una pista indirectamente—. ¿Es humano o fantasma?

—Uh... —su sonrojo aumentó y bajo la mirada avergonzada—. Ambos

Con esa simple revelación fue más que suficiente para que Jazz completara el rompecabezas.

—¿¡Qué!? ¡Danny! ¿¡Te gusta...!? —su respuesta se cortó al momento de que la azabache le tapó la boca con ambas manos

—¡Cállate! ¡Está abajo con mamá y papá y con sus poderes te puede oír!

Jazz se quedó quieta por esa información. Al ver a su hermana calmada, quitó sus manos con cuidado.

—Danny... ¿desde cuándo...?

—Desde que me molestaste con esa revista que encontré de camino a Wisconsin para la reunión de la universidad

Jazz se tapó la boca con las manos por la sorpresa. Ese día solo lo dijo, como bien dijo Danny, para molestarla como venganza por hacerla ir a ese viaje que no quería hacer.

—Pero Danny, tu siempre me has dicho que Vlad y tú...

—Somos enemigos, lo sé —completo Danny con tristeza—. Y sabes la razón, puesto que leíste mis archivos privados de fantasma

—Porque le gusta mamá y no perdona a papá por el accidente que le dio sus poderes

Danny abrazó sus rodillas y ocultó su rostro en estas. Por eso no quería reconocer esos sentimientos, y sí, ya no podía mentirse más: amaba a su némesis Vlad Masters alias Plasmius. Por eso cada vez que luchaba contra él lo hacía con todas sus fuerzas, porque esperaba que de ese modo sus sentimientos hacia el halfa mayor desaparecieran, pero parecía que cada vez se hacían más fuertes. Y se intensificaron gracias al acercamiento que tuvieron esa vez contra Pariah Dark, cuando la salvó del príncipe Aragón y esa misma tarde.

Jazz, por primera vez en su vida, no sabía qué hacer ni qué decir. Ni siquiera con los conocimientos de psicología que tenía sabía qué hacer, pero ese no era el mejor método para ayudar a Danny, lo que necesitaba hacer en ese mismo instante era ser la hermana mayor que escucha y aconseja a su hermanita cuando más lo necesita. Se acercó a la azabache y la abrazó atrayéndola a su pecho haciendo que su cabeza descansara en su pecho. Danny se sorprendió por el gesto de Jazz, pero se lo agradecía de corazón que comprendiera; se acomodó mejor y respondió al abrazo de su hermana, no supo porque, pero de pronto sintió las lágrimas salir y poco a poco rompió en llanto. Ese era el inconveniente cuando es adolescente: todos los problemas parecen grandes, pero cuando es mitad fantasma y tu peor enemigo es el implicado, las cosas se ven peores.

Danny estaba tan mal que no se percató de las presencias fantasmales que se encontraban en su habitación y que habían escuchado toda la conversación. Uno estaba sorprendido e incluso, si estuviera visible, se notaría en fuerte rubor en su piel verde azulada y el otro parecía un montón de ectoplasma sin forma y de ojos rojos que sonreía con malicia al descubrir esa información que le serviría mucho a él y a su jefa.

====================DVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDVDV====================

Primero que nada, quiero agradecer la paciencia que me tienen al momento de esperar la continuación de esta historia; pero es necesario aclarar algunas cosas: A pesar de que me tarde en actualizar NUNCA dejare abandonada la historia, si empiezo algo lo termino, además de que disfruto mucho escribiéndola.

Tengo otras historias con las cuales estoy trabajando, pero no las escribo a la vez, me concentro en una historia, luego en la otra y así sucesivamente hasta que las termine.

Otra vez, gracias por su paciencia y me alegra ver el apoyo que le dan.

No prometo actualizar rápidamente, pero igualmente espero no tardarme demasiado en hacerlo.

Saludos y felices vacaciones de verano.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro