Holaaaaa mis hermosos lectores ¿Cómo han estado?
Recuerden que se tienen que cuidar mucho en ésta cuarentena.

Mis amores estoy feliz porque Polos Opuestos a crecido mucho, gracias a todos por leer, votar, comentar y recomendar mi historia.

Los quieroooo muchoooo 💜💜💕💕

Ahora sí, a leer.

En las cámaras se podía notar una conversación entre Jimin y Jungkook, después de un momento, Jungkook empezó a acercarse a Jimin, lo tenía acorralado contra la pared, Yoongi miraba todo con atención, su ceño estaba fruncido hasta que sus ojos se abrieron grandemente, gota por gota bajaban por sus mejillas humedecido todo a su paso.

Yoongi nunca fue sentimental, incluso me atrevería a decir que era frío y distante con las personas, pero Jimin había logrado despertar la parte emocional y sensible de su corazón y a causa de eso, ahora se encontraba llorando en silencio.

La cámara mostraba el momento en el que Jimin empezaba a quitarse la ropa con ayuda de Jungkook, mientras unían sus labios en un beso apasionado y necesitado. Yoongi golpeó fuertemente la mesa al ver como su prometido era penetrado por alguien que no era él. Las luces empezaron a tornarse rojas y un sonido agudo se escuchó.

- ¡Mierda Yoongi! ¡¿Qué hiciste?! - Namjoon lo tomó de los hombros y empezó a moverlo, pero éste sólo miraba hacia la nada sin ninguna expresión - ¡Yoongi debemos irnos!

- ¡Ya vámonos! - Gritó J-hope.

- ¡Callense! - Yoongi salió hecho un mar de lágrimas, sus manos empuñadas hasta el punto de volver sus nudillos blancos.

Yoongi salió del hospital dejando a sus amigos a la suerte, su corazón estaba roto y destrozado, quería estar solo y beber hasta perder el conocimiento dejar sus sentimientos al viento ¿Cómo fue tan estúpido de creer en Jimin? ¿Cómo pudo creer qué él lo tomaría en serio? Sólo fue un tonto, un tonto que dejó que un riquillo se burlara de él.

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Namjoon y J-hope salieron sin ningún problema del hospital, después de todo, sus días como ladrones había servido de algo. Ambos decidieron ir al apartamento de Jimin y contarle lo que Yoongi había visto, de algo estaban seguros, Jimin había perdido a Yoongi para siempre. Eso jamás se lo iba a perdonar, fuera como fuera, una traición era una traición y más aún siendo él, un hombre comprometido.

Los dos chicos se encontraban tras la puerta del apartamento, no sabrían cómo contarle eso a Jimin sin que sonará tan catastrófico, después de todo, Jimin quería a Yoongi, pero tenía que dejar de cometer errores.

- Toca - Susurró Namjoon.

- No, yo no se lo diré - Se cruzó de brazos - Tocaré pero tú le dices.

- Bien, como quieras.

J-hope tocó la puerta, pasaron unos minutos y fue abierta, Jimin tenía sólo una toalla en su cintura, su cabello húmedo y un cepillo de dientes en su boca.

- Chicos ¿Ah qué debo su visita? - Sonrió para luego dejarlos pasar - ¿Yoongi no estaba con ustedes?

- Verás - Jimin terminó de cepillarse y comenzó a prestar atención - De él queríamos hablarte.

- ¡¿Le pasó algo a Yoongi?! - J-hope y Namjoon se miraron, esto era la peor parte de todo.

- Yoongi... - Continuó Namjoon - Yoongi vió cuando te acostaste con Jungkook.

- ¿Qué? - Jimin no entendía nada, Namjoon no se explicaba correctamente.