La semana feliz de Yoongi y Jimin habían empezando, ambos compartían todo, estaban más unidos que nunca, por pequeños fragmentos a Jimin se le olvidaba la perdida de sus padres pero cuando volvía el recuerdo rompía en llanto, pero Yoongi siempre estaba junto a él reconfortandolo, Jimin sabía que mientras tuviera a Yoongi a su lado, su vida seria plena y satisfecha.

Ambos iban en el auto de Jimin, Yoongi manejaba con tranquilidad mientras compartía una charla animada con su novio, Jimin parecía estar más que feliz que nunca por lo que extrañó a Yoongi, este aclaró su garganta y sin quitar la mirada del frente preguntó.

- ¿Qué te tiene tan feliz Jimin? - Jimin sonrió ampliamente y lo miro -

- Encontraron las pruebas suficientes para meter a tus padres a la cárcel, hace 15 minutos el abogado me llamo para decirme que les darán cadena perpetua por asesinato en tercer grado - Yoongi paró el auto de inmediato, eso era musica para sus oídos, significaba que no tendría que volver a Daegu, que podría estar para siempre con su Jimin, que vivirían felices para siempre y nadie los iba a volver a separar - Por eso estoy tan fel... - Yoongi besó inmediatamente a Jimin antes de que siguiera hablando, estaba más feliz que el mismísimo Jimin -

- Te amo, te amo, no sabes la alegría que me da saber eso - Lo abrazo fuertemente como si no quisiera soltarlo nunca - Dios, que felicidad tan agrande.

- Tranquilo Yoongi, nada nos podrá separar, nunca - Le sonrió - Te amo demasiado ¿Vamos a un parque de diversiones?

- No veo porque no - Sonrió nuevamente y tomaron rumbo a un parque de diversiones -

Allí subieron a toda clase de juegos, pronto los cogió la noche y ellos aun seguían deseosos de divertirse, rumbo a casa encontraron un circo algo grande y alegre, ambos entraron con comida hasta en la cabeza. La función dio comienzo con malabares y payasos demasiados graciosos, los ojos de Jimin desaparecían cada vez que soltaba una carcajada, Yoongi por el contrario reía suavemente sin llamar la atención de nadie, se estaban divirtiendo y nadie lo negaba.

Después de tal suceso ambos fueron a una discoteca donde bebieron hasta perder el conocimiento, salieron de allí y pagaron estadía en un gran hotel donde cada habitación parecía una casa, el dinero de Jimin había sido derrochado en juegos y alcohol, pero eso era lo de menos.

- Yo... Te ( hip) amo - Sonrió -

- Estas muyyy ( hip ) borracho Jimin - Rió -

- Ven aquí - Lo tomó del cuello y lo besó salvajemente -

Prontamente los chasquidos y humedad del beso inundaron la sala en la que se encontraban sentados sobre el sofá. Su lengua chocaba y jugaba con la ajena, aprovechando la cavidad para probar cada parte de ella; minutos después sacó su lengua y tomó el labio inferior entre sus dientes, mordisqueándolo antes de tirar suavemente de él.

Soltó el labio y volvió a unir sus belfos, profundizando un poco más el beso que antes, volviéndolo deseoso. Esta vez sus manos entraron al ambiente, acariciando y dando apretones a los glúteos contrarios de manera sutil. Los gemidos de excitación daban ambiente al lugar, ambos ya lujuriosos por cada caricia deciden adentrase en la habitación sin separarse del beso que cada vez se vuelve más profundo.

Cada prenda desaparece en las penumbras de la habitación iluminaba por una belleza luna llena, su piel hace contacto con la de su pareja haciendo excitar sus partes bajas endureciendo cada centímetro.

- ¿Éstas listo? - Susurro con su voz algo agitada y necesitaba, Jimin asintió ya excitado por el momento esperando al mayor en su interior - Bien.

- Oh si, que rico - Se estremeció hasta el último punto de su cuerpo, no importaba cuantas veces tuviera intimidad con Yoongi, jamas se cansaría de sentirlo en lo mas profundo - Ah, ah, ah, más rápido.

Yoongi movía sus caderas en forma de circulo haciendo más profundas sus penetraciones, sentía que su mente iba a perder la cordura hasta el punto de romper a Jimin de una sola metida.

Sus labios nuevamente hacen contacto teniendo una batalla de vida o muerte con sus lenguas, sus cuerpos sudorosos, con una temperatura alta hacen un chasquido cada vez que chocan.

- Mi turno - Jimin se levanta y se sienta en el regazo de Yoongi, introduce su miembro y empieza a moverse -

- Ah, Jimin que bien lo haces.

Jimin movía sus piernas con las cuales se impulsaba de arriba abajo cabalgando con tremenda sabiduría, movía sus caderas haciendo que su ano tragara por completo el miembro de Yoongi, sus jugos hacían más fácil sus sacadas y metidas. Yoongi puso en cuatro a Jimin dejando a la vista sus glúteos refinados, volvió a meter su miembro y continuo con su vaivén.

Yoongi tomaba las caderas de Jimin para profundizar sus penetraciones, sentía su cuerpo desfallecer, su miembro empezaba a brotarse dejando ver sus venas, iba a llegar al orgasmo, uno grande y desgarrador orgasmo.

- ¡Yoongi! - Gritó Jimin al tener su desgarrador orgasmo, había sido el mejor de todos, pronto sintió el jadeo de Yoongi y un liquido tibio en su interior -

Ambos cayeron totalmente rendidos, sus respiraciones confirmaban que habían tenido una noche única y placentera, poco a poco fueron conciliando el sueño mientras se abrazaban con amor y ternura, la mejor pareja del mundo.

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Yoongi y Jimin se levantaron con un gran animo, sus vidas habían mejorado radicalmente, no tenían duda de que eran almas gemelas destinadas a estar juntas para siempre.

- Luego vamos a comprar algo para cenar - Yoongi asintió y se subió al auto -

- ¿Cocinamos juntos? - Jimin rió -

- Bien, pero hay que tener el número de los bomberos a la mano por si le prendemos fuego a la casa - Yoongi soltó una carcajada al escuchar las ocurrencias de su novio -

Ambos cantaban una canción en la radio que estaba en inglés, Yoongi miraba de reojo a Jimin admirando su belleza, tocó su bolsillo y suspiro al sentir el anillo de compromiso, creía que lo había perdido en una noche tan loca como esa.

Así es, Yoongi pensaba pedirle matrimonio a Jimin, estaba totalmente seguro que quería compartir el resto de su vida junto a él.

- ¡CUIDADO! - Un carro negro de vidrios brindados y llantas negras había chocado a propósito contra el mercedes de Jimin haciendole perder el control a Yoongi - ¡Yoongi!

El auto cayó al río haciendo un gran estruendo, Yoongi logro quitar el cinturón de seguridad que sostenía a Jimin, pero cuando trató de quitar el de él el agua ya hacia presión en sus pulmones haciéndolo torpe, su cuerpo empezaba a convulsionar tratando de sobrevivir, ya era demasiado tarde.

- ¡Yoongi! ¡Yoongiiii! - Jimin gritaba mientras pudo observar un te amo de los labios de Yoongi mientras sus ojos se cerraban y su cuerpo dejaba de luchar -

Jimin golpeaba con fuerza el vidrio del auto, pero estos no se rompían, sus manos empezaban a sangrar esparciéndose por el agua helada, un señor de una alta edad saco a Jimin quien empezaba a sufrir por falta de aire pero este sólo quería permanecer junto a su amado.

- ¡NOOO! ¡Yoongi, ayudenlo por favor! ¡Yoongi! - Sus lágrimas hacían borrosa su vista pero era inevitable no llorar - ¡No! Yoongi.

Había gente al rededor del río angustiados por la situación, Jimin sólo cerro sus ojos y cayo en un sueño profundo.

~ Fin ~