6. Dudas
Pueblo Vaniville, Kalos.
En dicho pueblo, en el patio trasero de la casa de la entrenadora aérea pelimiel, donde empezaron a cuidar de Pilo y curaron las heridas de la oji-zafiro que llegó a la región. El pelinegro se la pasó serio analizando a la chica, hasta que finalmente decidió hablarle.
-¿Quién eres y porque sobrevolabas la ciudad en este Tropius?- le preguntó seriamente esperando su respuesta.
-¿Yo? ¡Soy Sapphire Birch! ¡Tropius es mi amigo y vine a buscar unos chicos!- respondió alegre.
-¿Birch? ¿Como el profesor Birch de Hoenn?- preguntó la pelimiel.
-Ese mismo es mi papá.
-Entonces es una buena persona, ¿Vez X? No tenías porque desconfiar de ella después de traerla hasta aquí.
-Mmmm...- pensó seriamente mientras miraba a su compañera y finalmente suspiró asintiendo.
-¿X? ¿Ese es tu nombre?- preguntó la oji-zafiro.
-Sí, ¿por qué?
-¡Entonces tú eres Y!
-¿Cómo lo sabes?- preguntó sorpendida.
La salvaje se levantó del suelo donde estaba.
-¡A ustedes dos yo estaba buscando!- respondió alegre.
-¿Nosotros?- preguntaron ambos al unísono.
-¡Gold y Green senpai no me lo van a creer!- se emocionó buscando entre los cielos.
-¡¿El señor Green?!- preguntaron al unísono.
-¡¿Conoces al señor Green?!- preguntó X sobreexaltado.
-Por supuesto, se suponía que nos reuniríamos aquí pero después de la situación de Pilo no llegué a la ciudad esa de la torre esta- respondió mirando al están! ¡Senpais!
Sapphire se asomaba al cielo donde sus ojos claramente no le fallaron, ya que se asomaban Togetaro y Charizard a la vista apunto de aterrizar en el patio trasero de la casa donde se encontraba Pilo.
-X, ese es...- decía asombrada Y.
Ambos pokemon voladores aterrizaron.
-¿Qué tal chicos?-preguntó el castaño con una leve sonrisa.
-¡Señor Green!- se alegraron los más jóvenes llendo a su senpai.
-Joooo, ¿ves eso chica salvaje? Nadie me saluda siquiera- refunfuñaba Gold.
-Ya Gold-senpai- sonrió- que bueno que hayan logrado llegar.
-Señor Green, ¿quiénes son ellos exactamente?- preguntó Y dudosa de las personas que él conocía.
-Son mis Kohais y sus senpais, Sapphire y Gold- respondió.
-¿A qué se refiere con senpais? ¿Por qué?- preguntó X dudoso.
-Es hora de decirles la verdad, pero no podemos hablar aquí afuera- dijo regresando a Charizard mientras Gold regresaba a Togetaro.
-¿Podemos pasar?- preguntó el oji dorado.
-Por supuesto, quiero saber más a detalle...- dijo la chica pelimiel dejando entrar a sus senpais.
-Pilo, escóndete en el bosque más cercano- le dijo a su pokemon, el cual obedeció y fue volando hacia el bosque Santalune, donde se escondió.
Los 5 entraron a la casa de la pelimiel, quien les ofreció galletas y leche mu-mu después del largo viaje que habían emprendido desde sus regiones respectivas a la lejana Kalos, esperando escuchar sus razones.
-Déjenme hacerles un pequeño resumen sobre la situación- empezó a hablar para explicar la situación- ¿Tienen sus pokedex cierto?
-Sí señor Green- respondió la pelimiel sacando la suya junto a su compañero pelinegro- Nos ha ayudado bastante, pero no sabemos exactamente que tiene que ver.
-¿¡No les explicaron nada cuando se las entregaron?!- preguntó Gold.
-El profesor Sycamore son mandó las pokedex en una caja junto a nuestros pokemon, un Froakie y un Chespin- respondió X serio y dudoso a la vez.
-¡¿Es enserio?!- preguntó exaltado la oji-zafiro.
-Gold, Sapphire, basta de interrumpir- decía el mayor presente tratando de buscar la paciencia ante sus imperactivos compañeros de iniciales de fuego.
-Lo sentimos- respondieron ambos.
-Ufff, una pokedex es más que solo la enciclopedia de su región, los convierte en Pokedex Holder, pocas personas elegidas para poseer tal aparato importante- dijo finalmente el castaño.
-¿Pokedex Holder? ¿¡Por tener esto?! ¡Asombroso!- se emocionó la pelimiel.
-Ustedes nos dicen esto porque...- empezó a decir el pelinegro.
-Exacto- dijo Green sacando su pokedex seguido de sus acompañantes- Somos pokedex holders más viejos que ustedes, técnicamente somos sus senpais junto a otros chicos que pronto les vamos a presentar.
-¿Más chicos...?- preguntó el pelinegro.
-Así es- asintió nuevamente Green- Les presentaremos al resto de pokedex holders en Sinnoh.
-¡¿Sinnoh?!- preguntó Y exaltada- ¡¿Por qué tenemos que ir allá?!
-Tanto nosotros como ustedes están en peligro, en Kanto un par de chicos de una organización malvada nos atacaron, vienen por todos nosotros- siguió hablando el criador a los menores, los cuales se sorprendieron.
-...Eso...¿Es cierto? ¿Otra persecución? ¿Otra vez quieren deshacerse de nosotros? ¿Son adultos?- preguntó el pelinegro un poco nervioso, después de tantas situaciones por culpa de los adultos, se preocupó de que empezar a confiar en esto fuese un error.
-Quisiera decir eso- empezó a hablar Green- Pero eran chicos jóvenes, no tenían edad adulta, un poco más grandes que ustedes y tienen gran experiencia en batalla.
-No conocemos sus intenciones- siguió Sapphire- pero una de ellos, Alix, mencionó que somos 21, por eso debemos reunirnos y planear algo lo más pronto posible.
-21...- empezó a murmurar la pelimiel quien inmediatamente miró preocupada a su compañero de región- ¿X? ¿Sucede algo?
-Yo...no creo que pueda, no...- se levantó de su asiento serio pero ocultando su miedo- lo respeto mucho señor Green...quiero decir, senpai...pero aunque seamos compañeros en esto de ser pokedex holder, no creo que quiera salir de la región así como así...
-X...
-Después de los problemas entre Xerneas e Yvelta, no sé si pueda viajar de nuevo...lo siento- dijo y empezó a salir de la casa de la Pelimiel.
-¡X, espera!- empezó a seguirlo su compañera de región que miró a sus senpais antes de irse- Pueden quedarse a dormir aquí, se hace tarde, iré a hablar con él...
-Por supuesto Y, ve..- respondió el mayor.
-Gracias Seño- digo Green-senpai- dijo y salió a buscar a X.
-Green-senpai, ¿Qué haremos si no nos hacen caso?- preguntó Gold a su senpai.
-Lo vamos a lograr, por ahora, hablaremos con el resto mañana para ver como les ha ido con los demás holders- respondió el mayor.
Mientras, X subió a su habitación cerrando la puerta y sentándose en su cama para pensar en lo sucedido, solo que no contó que su amiga entraría más tarde por la ventana de la habitación con su traje aéreo, la cual estaba sin seguro. Entró a su habitación y se sentó junto a él en una silla. Hubo un poco de silencio hasta que Y empezó a hablar con él.
-Fue muy sorpresivo ¿no es así?- le preguntó, a lo que él asintió- ¿Estás nervioso?
-...Un poco asustado...apenas empecé a confiar en los adultos y le creo al señor Green, digo Green-senpai...pero salir del pueblo es una cosa, y salir de la región...siento que es demasiado- empezó a mirar la pokeball de Kanga- ¿Crees que Kanga y Kangui estén de acuerdo?
-Si hay algo que sé, es que seguro querrían que estés a salvo, y si nos atacan te protegerán, y yo también lo haré- le respondió para reconfortarlo- estoy segura que Tierno, Trevor y Shauna entenderán porque nos fuimos cuando les expliquemos.
-...Pero nos vuelven a perseguir...pero seguro son chicos de casi nuestra edad siendo controlados u obedeciendo las órdenes de un adulto...- siguió pero un poco desanimado y asustado.
-Si es así, podemos encontrar una manera de liberarlos de tal control- le sonrió y tomó su mano- hay que estar unidos y resolver esto...Piénsalo ¿Si?
-...- el pelinegro la miró analizando sus palabras y asintió- Está bien...
-Perfecto, los 3 se quedarán en mi casa mientras mamá está en la carrera de Rhyhorn de Santalune- se levantó la pelimiel apunto de soltar su mano pero este no lo hizo- ¿X..?
-...Y...por favor, ten cuidado...- le dijo escondiendo su cara sonrojada y sosteniendo su mano.
-Siempre lo tengo- le sonrió y lo abrazó- nunca te dejaría solo...jamás lo hice y no lo haré.
Se quedaron abrazados un rato y Y lo dejó de abrazar, y así fue a la ventana volando hacia su casa, mientras el pelinegro se quedó mirando por dicha ventana pensando un poco, hasta que finalmente decidió ir a descansar para reacomodar sus ideas, no solo por lo que repentinamente le dijo a Y, sino también sobre el peligro que los estaba asechando.
. . .
-¡Números 4 y 5 listos y en posición mi señor!- decía animada una chica en la cima de la torre prisma mirando en un holograma Pueblo Vaniville.
-¿Lista para divertirte?- preguntó un chico a su compañera.
-Más que nunca, vamos a dar unos sustos...
¿Quiénes son estas personas con números claves? ¿Las 6 tormentas? ¿Cuáles son sus identidades?
Solo sabemos...que esto continuará...
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