Taehyung fue el primero en entrar a la habitación del motel. Había pasado de un hotel cinco estrellas con casino y barra libre a una habitación que se caía a pedazos y olía a pies.

──¿Estás seguro de que aquí estamos a salvo? ──insistió.

Jungkook no dudó ni un segundo cuando se dejó caer en la cama con un bufido.

──De momento sí ──reiteró.

Entonces Taehyung se tumbó al lado y exhaló por la nariz mientras se deshacía un par de botones de su camisa.

──Sigo queriendo unas disculpas ──dijo.

Como si hubiese sido un botón de impulso, aquello hizo que Jungkook se pusiera en pie rápidamente y buscase una silla para colocarla frente a la cama. Se sentó en ella de cara al respaldo, como en un interrogatorio clandestino, así que Taehuyng se incorporó y apoyó los brazos en la silla para estar cerca suyo.

──Sabes que lo siento ──aseguró Jungkook──. Lo que buscas son respuestas, así que pregunta.

El rubio carraspeó e ignoró que el menor también se apoyase en el respaldo para tener su rostro a escasos centímetros. Puede que aquello fuese su punto débil, pero nunca una completa distracción.

──¿Qué pasó la noche de nuestro aniversario? ──murmuró.

Jungkook tomó una gran bocanada de aire y la dejó ir con lentitud para que hiciera cosquillas en su piel.

──Si te lo cuento promete no interrumpir, es largo.

Taehyung asintió.

──Bien ──comenzó el de pelo morado──. Antes de esa noche tienes que saber que llevaba investigando un caso de desaparición meses atrás.

Taehyung apretó sus puños y tensó la mandíbula, pero no dijo nada.

──Sabes que yo me crié en el orfanato hasta que me reclutaron para A.S.T.R.O., pero nunca había investigado mis raíces. Pues lo hice. ──Dejó una pausa──. Y no encontré nada interesante sobre mis padres, de hecho lo que leí me hizo odiarlos aún más. Pero... encontré a mi hermana menor.

──Podrías habérmelo dicho, éramos una familia ──interrumpió Taehyung con el rostro enmarcado de enojo──. No puedo creer que me lo ocultases.

──Déjame terminar ──rogó Jungkook──. El problema era que estaba desaparecida, así que empecé a investigar para obtener cualquier pista que me llevase hasta ella, pero todo estaba confuso y erróneo, era como buscar en la superficie de un iceberg.

Del bolsillo interior de su chaqueta sacó una pequeña fotografía de una niña pelinegra. Era de ojos y nariz grandes, parecida a él.

──Es lo único confiable que encontré. Pero no me detuve, cosa de la que me arrepiento porque me apartó de tí.

Jungkook llevó su mano a la mejilla de Taehyung, pero él la apartó con formalidad.

──Sigue.

Jungkook carraspeó.

──Lo siguiente que encontré fueron videos de cámaras de seguridad. De... el mismo orfanato que el mío, pero el lado femenino. Allí también seleccionaban reclutas, ¿sabes?, mi hermana fue una.

──¿Qué? ──espetó Taehyung.

──Sí. Lo único que encontré creíble sobre ella eran cintas de videos de seguridad de A.S.T.R.O.

Taehyung se llevó las manos a las sienes y las masajeó con la vista en el suelo de madera oscura.

──Si te contaba algo de eso podrían haber pensado mal de tí, no sabían de qué eran capaces. ──Jungkook bufó──. En realidad sí, porque aquella noche me descubrieron y publicaron mi traición en todas partes.

──Podrías haber huido conmigo ──masculló Taehyung entre dientes──. Te juro que te lo habría creído todo.

──Jamás te arrastraría a un inferno de ese tipo ──replicó Jungkook──. No sabes todo lo que hice para sobrevivir.

──¡Pues mira dónde estamos! ──Taehyung se alzó con desespero──. He acabado huyendo junto a ti al fin y al cabo, como debería haber sido desde un principio.

El de pelo morado se alzó también y apartó la silla para que nada los separase.

──Pensé que serías más feliz odiándome, que seguirías adelante y te casarías con alguien que te amase al menos la mitad que yo.

Taehyung no lo soportó más y alzó su diestra para estamparla contra la mejilla de Jungkook. Él giró la cara, pero le dolió más el significado que el golpe.

──Te la mereces ──masculló el rubio, con lágrimas en los ojos──. Por mentiroso.

Jungkook asintió en silencio y colocó sus manos en los bolsillos del pantalón, esperando un segundo golpe que recibió poco después.

──Esa por pedirme que te matase ──dijo Taehyung con un hilo de voz débil──. ¿Cómo te atreves? ──añadió en un susurro.

Aquella vez Jungkook volvió a mirarlo y sus manos no descansaron, si no que rodearon su estrecha cintura y lo invitaron a recargar su peso en él. Taehyung se sujetó de sus hombros y lloró contra su cuello en tanto se decidía si todo aquello era real u otra de sus pesadillas.

──Te echaba de menos ──susurró entre sollozos.

Jungkook comenzó un vaivén suave en su cuerpo aunque no hubiese música en la habitación y en seguida Taehyung comenzó a calmarse, porque en ninguna de sus pesadillas podía volver a bailar tranquilamente con él.

──¿Sabes?, cada día me despertaba con la esperanza de que A.S.T.R.O. admitiera su error y quitasen la orden de arresto por traición ──susurró el de pelo morado──. Entonces volvería a casa contigo y podría abrazarte, besarte y explicarte todo.

Taehyung cerró sus ojos y mantuvo el silencio, imaginando una realidad en la que eso fuese cierto y no una fantasía.

──Después me di cuenta de que no quería estar bien con la agencia, lo único que quería era volver a verte ──añadió Jungkook──. Y lo hice varias veces, desde una distancia prudencial, pero parecías feliz sin mí.

Ante eso el rubio se limpió el rostro con el reverso de la mano y alzó el mentón para compartir una mirada con él. Sus ojos y nariz estaban rojos, pero seguía teniendo una expresión firme.

──Jamás me he sentido tan miserable y hundido ──murmuró Taehyung──. Estos dos años sin ti han sido peor que el infierno. Habría preferido quemarme antes que preguntarme cada día seguías con vida o no.

Esa vez las lágrimas acudieron al rostro de Jungkook, pero no las dejó salir.

──Esos traidores desde luego me intentaron matar muchas veces, pero siempre conseguía escaparme ──explicó──. Jamás debí buscar en archivos secretos, Tete, siento tanto haber puesto eso por delante de nosotros...

El rubio negó y tomó su rostro entre las manos.

──Ya pasó, no me hagas pegarte de nuevo, ¿vale? ──bromeó con una lágrima solitaria en su mejilla.

Jungkook la limpió con un beso y asintió.

──Al menos descubrí que A.S.T.R.O. no es de fiar, y que mi hermana está definitivamente muerta ──murmuró──. Y en parte me alegra haberte encontrado de esta forma, para avisarte.

Taehyung sonrió.

──En cuanto me dieron la misión y vi tu cara lo primero que pensé fue "bien, está vivo y puedo verlo de nuevo" ──dijo.

──En el hotel parecías dispuesto a matarme ──apuntó Jungkook, siguiéndole el juego.

──Primero quería comprobar que eras real, después recordé el dolor que me hiciste sentir al dejarme y descargué la rabia contra ti, pero jamás habría cumplido la misión ──aseguró el rubio.

Jungkook tomó su cintura para estrecharlo un poquito más contra su cuerpo y así descansar la cabeza en su hombro, aunque fuese más bajo que él de altura.

──Somos dos suicidas ──susurró.

──Nos enseñaron bien en la academia ──respondió Taehyung, recordando algo de pronto──. Por cierto, ¿cómo acabaste en K24?

Jungkook alzó la cabeza y le dedicó una sonrisa melancólica.

──Me reclutaron ellos, siempre están pendientes de lo que pasa en las demás agencias.

──Todo el mundo los odia por eso ──replicó Taehyung con una risita.

──Porque somos los buenos ──contraatacó él.

──¿Cómo puedes decir eso cuando te han enviado a matarme? ──bufó el rubio.

──¿Sigues creyendo eso? ──Jungkook soltó una risa irónica──. Piensa: me enviaron sin información y sólo un arma y ninguna de las balas que dispararon nos acertaron. Ninguna.

──Eso... Sigo sin fiarme.

Jungkook entonces llevó sus manos hasta la zona de cosquillas en la cintura de Taehyung y no se detuvo hasta que le hubo sacado unas cuantas carcajadas.

──¡Ya basta! ──chilló el rubio──. ¡Ya confío!

Ante la queja Jungkook lo alzó en sus brazos y lo llevó consigo hasta el colchón, dejándole debajo de su cuerpo sin opción a salida.

──¿Eres consciente de que tu cara saldrá en todas partes y A.S.T.R.O. le pondrá precio a tu cabeza? ──preguntó el de pelo morado en un intento por seguir adelante.

Taehyung asintió.

──¿Quieres seguir a mi lado a pesar de ello? ──añadió.

Taehyung no le dio una respuesta, sólo estiró de su camisa hasta que cayó sobre él y sus labios chocaron en consecuencia.

──Así es como debería haber sido dos años atrás, cielo ──susurró en tanto sus manos deshacían con destreza los botones de la camisa contraria.

Jungkook ronroneó contra su boca, demasiado ocupado en frotar sus caderas contra las de él para provocarle. Y aunque ambos seguían con el pantalón puesto, sus erecciones se notaban en cada maldito roce, así que Taehyung se apresuró para quitarle la prenda. Una vez fuera, no perdió tiempo para acariciar todos sus abdominales y el definido pecho de su mejor amigo, confidente, enemigo, ex novio, rival y amante.

──Te amo ──susurró Jungkook sobre la piel de su cuello, en tanto mordisqueaba esta.

Taehyung retuvo las ganas de llorar, seguía excitado pero los sentimientos ganaban la batalla esa noche. Ese momento era de perdonarse y comenzar de nuevo.

──Yo también te amo ──aseguró el rubio──. Y no dejé de hacerlo pese a todo.

Jungkook presionó sus caderas contra él mientras un sonido ronco escapaba de sus labios.

──Joder Tete ──murmuró──. No sabes cuánto he imaginado este momento.

El rubio sonrió para sí sin abrir aún sus labios, si no buscando el pantalón del contrario para desabrocharlo en un movimiento hábil. Entonces, impaciente, colocó sus manos por debajo de la tela y apretó su desnudo trasero.

Jungkook jadeó y buscó su venganza con una risita socarrona y su diestra quitando el botón de los pantalones de Taehyung. Entonces bajó la ropa interior y sacó su miembro para acariciarlo antes incluso de estar desnudo.

──Eso es trampa ──refunfuñó el rubio, reteniendo un gemido en lo alto de su garganta.

Siempre había sido el más rápido e impaciente de los dos, así que esa vez no fue menos y Taehyung bajó los pantalones y la ropa interior del de pelo morado de una sentada, al menos hasta las rodillas. Lo siguiente fue la desesperación misma de Jungkook, que mordió con fuerza su labio inferior antes de prácticamente arrancarle la ropa que le quedaba en el cuerpo.

──Maldito salvaje ──rió el rubio.

Entonces Jungkook, con una risa juguetona, tomó la cintura de Taehyung y con fuerza lo giró sobre sí mismo para tumbarlo boca abajo en la cama. Él jadeó cuando se vio atrapado y sus piernas abiertas sin remedio a los lados de Jungkook.

──Si no me besas la espalda me giro ──amenazó el rubio.

El menor usó su lengua para dejar un rastro húmedo desde la mitad de su espina dorsal hasta arriba. Justo antes de chuparse los dedos y buscar la entrada de Taehyung.

──Tranquilo, conozco bien tu cuerpo, amor ──susurró Jungkook en su oído.

Mientras besaba sus hombros, nuca y parte de la espalda, Taehyung se deshacía en gemidos al sentir el índice y corazón penetrar su pequeño agujero. Lo mejor era sentirse incapacitado por las piernas y la mano libre de Jungkook, estaba a su completa disposición y amaba el sentimiento.

──Date prisa ──ronroneó el rubio.

──Paciencia pequeño tigre. ──Le picó Jungkook.

Acto seguido añadió un tercer dedo al juego, uno que arrancó un melódico gemido de parte de Taehyung, que a su vez causó un escalofrío al menor. No había nada más excitante que ver al rubio deshacerse de placer bajo él. Entonces perdió la paciencia.

Sacó sus dedos y escupió una gran cantidad de saliva a la palma de su mano para poder lubricar su propio miembro. De esa forma se apoyó en sus rodillas, en el interior de las piernas de Taehyung para que no las cerrase, y tomó sus cachetes con ambas manos para abrirlo y tener el redondo y pequeño agujero dispuesto para ser follado.

──¿Quieres que lo haga? ──insistió Jungkook, deleitándose en las vistas.

Taehyung atrapó las sábanas en sus puños y miró por encima de su hombro para contemplar el definido cuerpo del menor, con sus tatuajes brillando de sudor y la respiración agitada de la excitación. Entonces se fijó en su pene, grande y venoso, listo para follarlo de la forma ruda en que lo había hecho años atrás.

──Me es imposible negarte nada ahora mismo ──musitó Taehyung.

Alzó su trasero ayudándose de las rodillas para provocarlo aún más y Jungkook jadeó de solamente imaginarlo. Entonces escupió al agujero de Taehyung y con una seca y fuerte estocada penetró en él.

El rubio ahogó un grito y se tumbó de golpe en el colchón. Le había dolido, pero a él le gustaba el dolor, gajes del oficio.

──Así, Kookie, más. ──Le animó.

El de pelo morado soltó uno de sus cachetes para tomar el cabello rubio del otro espía y alzar su cabeza en defecto. Esa posición era de sus favoritas para ambos, pero sobretodo para Taehyung, que sentía la corriente de placer desde el primer segundo.

Sin perder tiempo, este último comenzó a masturbarse mientras Jungkook follaba su culo de forma incluso salvaje, moviendo la cama con un ruido metálico seguido del estruendo al golpear la pared. La guinda del pastel fue cuando Taehyung le hizo uno de sus regalos: gemir en alto como si fuesen gritos, incluyendo su nombre de vez en cuando.

──¿Habías extrañado esto? ──preguntó Jungkook, recreándose.

Taehyung, algo cansado, balbuceó algo ininteligible y siguió gimiendo con la cara enterrada en la almohada.

──No te oigo ──insistió Jungkook.

──¡Sí! ──gritó Taehyung con la voz débil──. Joder echaba de menos tu polla y cómo me follas ──farfulló.

El menor también estaba algo cansado, así que relajó la pose de ambos cuando se apoyó contra la espalda de Taehyung y volvió a besar su cuello con gemidos roncos. Le gustó poder sentir todo el cuerpo del rubio temblar contra él, y a Taehyung le encantó ser mimado a la vez que embestido.

──¿Dónde quieres correrte? ──musitó el mayor con dificultad.

Jungkook tomó aire para poder hablar, relajando su mano en el cabello rubio para solamente darle masajes.

──¿Puedo dentro? ──susurró.

Taehyung gimió de sólo imaginarlo, pero retuvo su impulso de apretar las piernas para dejarle libertad. Poco después Jungkook se corrió y llenó el interior del rubio hasta el punto que cuando sacó su miembro el semen llegaba hasta la base del miembro.

──Me voy a correr, no puedo aguantar más ──farfulló Taehyung.

Sabía que Jungkook amaba chupar su pene, así que se volteó en la cama y este finalizó el trabajo para hacerle llegar al clímax y después tragó toda la cantidad de semen que expulsó.

──Mierda, mierda, mierda Jungkook ──gritó Taehyung.

Después de que el otro espía chupase hasta la última gota, se dejó caer a su lado y ambos dedicaron unos segundos a solamente respirar.

──Ha sido el mejor polvo de reconciliación ──susurró el rubio.

──Ha sido increíble, Tete ──juró Jungkook mientras se giraba para poder abrazarlo.

Taehyung dejó que escondiese la cabeza en su cuello y él apoyó su pierna por encima de su cintura.

──¿Podremos ir a K24? ──preguntó de repente el rubio──. Porque me gusta trabajar contigo y... No pienso volver a separarme de tí.

Jungkook besó su cuello y acarició su pecho.

──Claro, estoy seguro de que ellos lo planearon todo y quieren reclutarte ──aseguró──. Y, si no, podemos cambiarnos de identidad y vivir en el campo, con vacas y cultivos.

Aunque la idea le hizo reír, Taehyung terminó asintiendo.

──Me gusta el plan B ──dijo.

──Podríamos cambiarnos de nombre y de país, no sé, hacer lo que quisiéramos ──sugirió Jungkook con una sonrisa inconsciente.

Taehyung lanzó un largo suspiro al aire y besó la frente de su amado.

──Hagámoslo.