Flashblack:

—cuando yo sea jefa haré que todos me respeten y me noten.

—¿por qué dices eso,noona?.

—¿qué no lo ves? Siempre robas la atención de todos, eres el favorito de papá y el abuelo—dijo mientras subía las escaleras de la mansión siendo seguida por el menor.

—¡eso es mentira!—chilló—a ambos nos quieren por igual—infló sus mejillas.

—nunca puedo tener amigos como tú, ellos se burlan de mí porque no soy tan inteligente y bonita—llegaron a una oficina decorada con una alfombra color bordo.—cuando yo sea la jefa del imperio se arrepentían por no haber sido amables conmigo.

—yo siempre fui amable contigo noona,yo te apoyaré en todo,¡eres la mejor hermana mayor del mundo!—expresó corriendo hacía la gran silla detrás del escritorio.

—eres muy persuasivo ¿sabías?.

—no sé que significa eso.

—te lo explicaré. Significa que siempre estarás de mi lado pase lo que pase porque yo te lo ordeno...

—la familia siempre debe estar unida Jennie pero,no siempre es así,una vez que traicionas a la familia es de esperarse que lo mismo harán contigo,por eso debes mantenerte fiel a la familia porque ella puede ser tu escudo y al mismo tiempo una espada para ti—habló una tercera voz asomándose por la puerta—¿qué hacen en mi oficina niños?—preguntó divertido.

—¡abuelo!—gritó el menor saltando de la silla yendo a abrazar al nombrado.

Fin del Flashblack:

Sus lágrimas nublaban su visión,jadeaba de dolor mientras intentaba respirar,había recibido un golpe que la dejó sin aliento.

En un momento así,había recordado lo que su abuelo le había dicho hace mucho tiempo. Se arrepentía totalmente,hubiera preferido que las cosas sean mil veces diferentes,lo único que tenía era el amor de su familia y ella había jugado con eso,se había vuelto en la peor mierda.

Otro golpe cayó sobre su doloroso cuerpo,el dolor físico comenzaba a ser de menos,no le dolía las costillas rotas o la mano donde le habían cortado algunos dígitos,no le importaba si  tenía alguna hemorragia interna,le dolía el alma.

Medio aturdida escuchaba la risa alegre del castaño enfrente. De pequeño era alguien idéntico a su hermano,muy inocente y amable, siempre buscaba la forma de ayudar a los demás y de agradarles incluso cuando él estaba peor.

¿Donde había quedado ese pequeño niño?.

Ahora comenzaba a recordar.

Ella lo había convertido esa versión de joven psicópata,amante de la muerte de las personas que odia,se encargaba de todas las molestias él mismo,su angelical rostro ocultaba la gran maldad que tenía escondido dentro.

¿Sería lo mismo si ella se hubiera detenido a tiempo?,quizá ahora todos estarían bien,mientras comenzaban a cerrar los ojos para dormirse en una cómoda cama.

Un jalón brusco sujetando sus cabellos hizo levantar su cabeza para conectar mirada con Park.

—jamás te perdonaré,te vinculaste con taekWoon en mi contra y en contra de tu hermano, mataste a tu abuelo y ordenaste a Jung que envenenara a mi padre—dijo entredientes cerca del rostro contrario donde la mujer podía ver claramente el odio incrustado en los ojos del menor.—no tienes idea de lo mucho que sufrí pensando que mi padre estaba enfermo y yo jamás lo noté... Pero cuando Jeon me dijo la verdad,sentí que... Sentí que no era mi culpa y me juré que esa persona lo pagaría con cada gota de su sangre.

Jimin había guardado rencor hacia él mismo y cada día que pasó intentaba buscar la forma de perdonarse mientras con sus esfuerzos hacía que  el imperio se expandiera tal y como chanyeol lo había querido siempre.

Pero,ahora que sabía la verdadera razón de la muerte de su padre todo ese rencor cayó sobre Jennie,la odiaba no cabía duda,quería destrozarla pedazo por pedazo,hacerla sufrir como nunca antes,el castaño se caracterizaba por no tener piedad por las mujeres como ella.

Había soltando el amarre que tenía la contaría sobre sus muñecas haciéndola caer al suelo,sus piernas repletas de hematomas al igual que su rostro.

—¿te duele no?—preguntó acomodando sus cabellos castaños hacía atrás,miró desde arriba al agonizante cuerpo—te duele lo que has hecho a tu familia—aclaró acuclillandose para poder estar a la altura de Jennie.—también duele que tu hermano te haya entregado—suspiró.

—detente.

Apenas había sido un susurro,mientras volvía su mirada al pálido quien no se había inmutado en ningún momento.

—pero ¿sabés algo?,¿sabés a quien más le dolió la traición?— gruñó levantándose dándole una patada al rostro.—¡si! a Taehyung, a mí y a TaekWoon... Él quizá sufrió más físicamente—soltó una pequeña risita acercándose a Min quien le entregó un arma cargada junto a un silenciador. —Tu hermano me contó que TaekWoon rogó hasta el último momento para que te salvaran ¿puedes creerlo?.

Ella ya estaba tirada en el suelo,no podía levantarse,las manos no podían ser apoyadas al tener un dolor inmenso en ellas,no tenía todos los dedos realmente y no paraba de toser sangre,todo en ella estaba destrozado y para Park parecía que ese sufrimiento era poco.

—los imperios se volvieron enemigos y,gracias a eso los clanes en contra nuestra surgieron tratando con policías corruptos... Todo se volvió un caos—explicó cuando Min había salido para encender el vehículo.

—y-yo solo... ¡S-solo quería dejar de estar bajo la s-sombra de T-taehyung!—gritó sollozando,sorprendentemente todavía podía soltar lágrimas.

—pudiste conseguirlo—le dijo captando la atención de la mujer quien apenas levantó la cabeza un poco para mirarlo.—trabajando duro en tus propios logros,demostrándole a todos que eras mejor que él pero, en lugar de eso... Elegiste una alternativa desastrosa—suspiró mientras levantaba una bolsa negra en sus manos—tu envidia,tus celos,tu profundo odio hacía Taehyung nublaron completamente tu juicio haciendote una personas tonta.

—¡dices eso porque tú siempre lo has tenido fácil en todo!—escupió con bronca.

¿Fácil?,Jimin jamás la tuvo fácil en nada,solamente vio una vez a su padre biológico en la vida,su madre trabajaba todas las noches y aveces soportaba a los hombres que llevaba en la casa y los ruidos extraños que provenían de la habitación de su progenitora,ruidos que a la edad de 4 o 5 años no lograba diferenciar que eran.

No sabía que hacer cuando pasó dos días sólo en su casa después de que una noche su madre había desaparecido,pasó casi toda una tarde tratando de buscarla cuando alguien más lo encontró y para su fortuna ese hombre había sido amable con él pero no lo tuvo fácil, lidiaba con pesadillas y el miedo de ser abandonado. Cuando supo que su madre fue asesinada en un muelle,algo en él cambio,se sentía extraño,como sí todo el dolor se ocultara en una parte de él para no hacerle daño,aunque nunca la tuvo tan fácil,había momentos donde se bloqueaba y no sabía lo que hacía o decía hasta que reaccionaba de la nada,eso lo llevó a tener muchos problemas en la escuela.

Amaba mucho a su padre adoptivo, el hombre que lo trataba como si realmente fueran familia de sangre pero,vivía en un tormento,siempre evitaba perder el control de sus impulsos,evitaba cualquier situación donde implicaba enojarse,no quería que cristal se rompiera,un cristal que había en medio.

Pero el cristal se rompió después de perder al hombre que lo crió,nuevamente estaba solo,hacía frío y de repente temía por niños como él,¿estarán bien en las noches heladas?.

—perdí a mis padres biológicos... Ni siquiera sé sus Nombres,aveces me pregunto quién soy realmente,tú fuiste la que lo tuvo fácil siempre— respondió simplemente.

Dejó la bolsa en el suelo mientras llevaba el arma en la frente de la mayor,era el momento,eso era la solución. Por Taehyung,por Hoseok pero,más por él mismo.

Los ojos opacos de la pelinegra lo observaban atentos,por un momento creyó que muy en el fondo,Jimin sentía lástima por ella y la dejaría vivir,que la comprendía y le daba su perdón.

Pero sí Taehyung no la perdonó,nadie podría.

"La familia puede ser un escudo y al mismo tiempo una espada para ti".

—sin sobrevivientes,sin evidencias.

La mirada pérdida en la ventanilla del automóvil,aún permanecía en silencio mientras el contrario continuaba conduciendo.

—¿qué haremos con el cadáver?—preguntó finalmente mirando de reojo al castaño quien giró para responderle.

—tengo una bodega—exclamó soltando un pequeño bostezo—ésto era algo que yo quería hacer,me encargaré de eso,no te preocupes Min, fuiste muy confiable y eso es satisfactorio para mí—confesó esbozando una pequeña sonrisa.

El mayor detuvo el auto al llegar a la empresa,la noche había caído hace horas y el susurrante viento afuera daba un poco de miedo.

Veía a Jimin y algo dentro de él quería permanecer todo el tiempo a su lado,es que no encontraba una explicación a la tormenta que había en su interior tampoco podía decir con exactitud lo que el menor le  causaba al sentir su piel. Tenía tanto poder sobre él,no importaba como le manejase,Yoongi lo dejaría... Simplemente sí.

Al momento de bajar del auto,Kyungsoo y Félix aparecieron dándole la bienvenida al castaño. Estuvieron mucho tiempo sin saber de Jimin y,cuando lo supieron era porque pasó tres días en prisión,un corto plazo pero eso no era agradable para ellos quien juraron proteger a Park Jimin,quien era realmente valioso,el tesoro de Chanyeol.

—¿dónde está Hoseok?—inquirió curioso una vez dentro,con una expresión de pena plasmada en su rostro miró a los mayores.

—¡aquí estoy!—respondió el pelirrojo quien salía de un ascensor con su típico traje gris y sus ondulados cabellos apuntando a todas direcciones.

Jimin corrió a abrazarlo, sabía cuanto estaría sufriendo y sabía lo mucho que quería aparentar ser fuerte pero,eso lo dañaría aún más.

—puedes llorar hyung,todo terminó.

Se aferró al menor,necesitaba ese abrazo cálido,algunas lágrimas cayeron al hombro contrario.

—ChanWoo t-tuvo una r-recaída y a TaekWoon poco le importó—dijo entre sollozos desahogándose mientras el castaño escuchaba atentamente dándole palmaditas en la espalda.

Kyungsoo y Félix salieron de la escena dejándolos solos,Min al verlos también decidió darle su espacio.

—todo estará mejor de ahora en adelante,Hoseok hyung. Ayudaremos a ChanWoo,estudiará medicina como siempre quiso. Estaremos bien,lo prometo—sonrió alejándose un poco para mirarlo.

El mayor asintió limpiándose la cara un poco,era un poco divertida la escena,Jimin quien era menor lo estaba consolando,eso solamente quería decir que era alguien fuerte,confiable,no era solamente su jefe también lo considera como un gran amigo,familia también,cada día que pasaba Jimin lo sorprendía todavía más.

—¿qué pasó con ella,Jimin?.

—en el baúl,una bolsa negra,quiero quemarla en la bodega.

—puedo hacerlo yo.

—¿estás seguro?.

—claro que sí,tú debes estar cansado... Diré a Min que te lleve a la mansión, aparte apestas—dijo sonriendo,nuevamente volvía a ser el Hoseok alegre de siempre,solamente había faltado desahogarse,solamente faltaba que su jefe volviera a casa.

—gracias—murmuró después de bajar del auto,comenzó a caminar adentrándose a su casa.

Todo estaba como lo había dejado,se sentía a gusto,aliviado,quería tomar una ducha para relajarse y sentirse limpio pero entonces recordó algo,giró encontrándose con la figura de Min subiendo unas cajas, ¿Qué eran?.

—¿me esperas unos minutos?— preguntó señalándole su habitación de arriba. 

—¿seguro? Pensé que querías dormir un poco—le dijo mirándolo atento.

—eso haremos,Min.—Aseguró sonriendo de lado mientras subía algunos escalones para llegar hasta el baño de su habitación.

El mayor se tensó,todo su cuerpo comenzó a arder de inmediato, había hombres de Jimin vigilando la mansión,todos ellos se preguntaran porqué el guardaespaldas duerme allí, bueno, como si las otras veces le hubiera importado, después de todo es el guardaespaldas y esa noche iba vigilar también,solamente era un procedimiento de seguridad.

Sí,claro.

Una vez que ingresó a la habitación del menor se sentó en la cama,había apagado todas las luces,se veía una luz tenue que provenía del baño de la misma habitación donde Jimin estaba duchándose, también se oía el sonido del agua cayendo y un suave tarareo.

La curiosidad le picaba un poco pero,contuviendose aguardó pacientemente en la cama,hasta que el castaño salga vestido y aseado para que ambos durmieran juntos como había dicho el menor con anterioridad.

Pero se quedó sin palabras cuando la figura de Jimin apareció lentamente vistiendo una bata blanca,Yoongi tragó saliva,¿llevaba algo debajo?.

El menor se acercó para acariciar el pecho bajando sus manos hasta la entrepierna de Yoongi mientras éste sujetó con firmeza la pequeña cintura del contrario para atraerlo sobre su regazo,donde un bulto comenzaba a crecer sintiendo a Jimin quien no tenia nada debajo de aquella bata.

Comenzando a moverse un poco sobre la entrepierna,Jimin, sonrió ladino cuando la respiración del mayor comenzó a agitarse sin notar que también él estaba ansioso.

Yoongi atacó los voluminosos labios de Park,saboreandolos nuevamente, sintiendo esa dulce droga que lo volvió adicto desde la primera vez que los probó.

Jimin gimió a gusto cuando en su cavidad bucal,la húmeda lengua del mayor ingresó para comenzar una guerra con la suya.

Las grandes manos de Yoongi movieron un poco la vestimenta de Jimin para dejar expuesto su cuello y clavículas,sin dudarlo sus besos bajaron hasta allí dejando algunos chupetones.

—ah~ Yoon~.

Jimin no notó cuando el contrario se había deshecho de la bata que ocultaba su cuerpo,ahora estaba siendo observado sin una pizca de vergüenza por Yoongi.

Su pulso acelerándose en cada contacto,soltando suspiros y gemidos leves en cada caricia. Yoongi tenía ese efecto en él,podía estremecerlo con solamente un toque suyo.

Con sutileza el mayor acostó el delicado cuerpo de Jimin sobre la cama para después separar las bronceadas piernas y colarse sobre ellas.

Miró los relucientes ojos azules perdiéndose una vez más en tan magníficos iris,no sólo era esa mirada de deseo que tenía en ese instante lo que hacía que Yoongi se hundiera sin resistirse,era también el brillo que desprendía cuando sonreía o como se oscurecían al ver algo que lo disgustaba o cuando pensaba en un recuerdo triste.

¿Cuando fue qué Jimin se había vuelto el centro de su mundo?.

Se quitó la camisa arrojándola al algún lugar,comenzó a desprenderse el pantalón pero las suaves manos del menor lo detuvieron.

—deja que yo lo haga.

Pidió bajando la cremallera sonriendo levemente, Yoongi lo dejó ser mientras se acercaba para seguir marcando al castaño en el cuello.

—y-yo... también quiero ah~.

El pálido lo sabía, sabía que Jimin también quería dejar marcas,sabía lo celoso que era y no desaprovecharía una oportunidad como esa,le encantaba verlo de ese modo.

—¿por qué?—preguntó divertido.

El menor enredó sus piernas en la cintura del peliplateado.

—es por S-seokjin ¡ah~!—gimió al sentir una falsa embestida.—él te mira como yo lo hago—expresó muy cerca de los labios opuestos.

—y ¿cómo me ves,tú?—inquirió acercando dos dedos a la boca de Jimin,el miembro de Yoongi dolía y comenzaba a desear tener atención en él.

—de ésta manera—aseguró robando un beso al mayor para después introducir los dedos contrarios en su boca y comenzar a lubricarlos con su saliva.

—extrañaba tu aroma,tu calor y...tus labios.

Las mejillas del menor ardieron,¿cómo podía sonrojarse con solamente esas palabras?,ésta noche estaban siendo cariñosos, repartiéndose caricias,jugando un poco,prendiéndose más con sus toques,sonriendo,bromeando.

Cuando Yoongi sintió que sus dedos estaban suficientemente lubricados los sacó de la boca del menor, para después introducir uno en la estrecha y palpitante entrada de Jimin.

Escuchó un leve gemido y pudo sentir como todo el cuerpo del ojiazul se tensaba.

Volvió a besarlo al introducir otro dedo más, comenzó con los movimientos de tijeras preparándolo para lo siguiente.

Cuando sintió que la entrada estaba lo suficientemente dilatada sacó sus dedos escuchando un quejido departe del menor, sonrió de lado tomando su falo para alinearlo a la rosada entrada que tenía a la vista.

—¡ah~! Mgh... Yoongi~.

Gimió agudo cuando el nombrado había ingresado de una sola estocada.

Comenzó a iniciar un lento vaivén,deleitándose con las expresiones tan eróticas de Park.

—¿te gusta?— le preguntó alzando las  piernas a su hombro para  profanarlo más profundo.

Sus cuerpos ardían y temblaban ante el toque tan excitante de sus pieles. Jimin gemía aferrándose con fuerza a las sábanas,jamás había sentido al mayor ser tan brusco y no mentiría,eso le gustaba y mucho.

—¡s-si! Continúa... Por favor,continúa.

El pálido no se hizo el rogar y aumentó la intensidad de sus embestidas,saliendo completamente para después ingresar de una sola estocada, haciendo arquear la espalda del castaño.

—mgh~ ¡ahí! Si,ahí Ah~.

Medio gritó cuando en una estocada Yoongi había tocado su punto dulce,eso se había sentido tan placentero a otras veces que deseaba volver a sentirlo,su miembro chorreante ansioso por atención fue tomando por las grandes manos de Yoongi.

La sobre estimulación era demasiada para su cuerpo, a pocos segundos se había corrido manchando la mano contraria soltando el nombre del mayor en un dulce gemido.

Su entrada se contrajo apretando el gran miembro del peliplateado,Jimin lo observó soltar un ronco jadeo pero todavía no se había corrido.

—es mi turno ahora—dijo dándole la vuelta al menor haciendo que levante sus caderas.

Jimin al sentir aquello se había puesto duro de nuevo y movió un poco su culo incitando al mayor para que lo vuelva a profanar como solamente él podría hacerlo.

El pálido estaba fascinado,todo en Jimin sabía a gloria y jamás se cansaría de probarlo,volvió a enterrar su dura polla en la entrada de su jefe.

—m-maldición Jimin—jadeó ronco sujetándolo de las caderas haciendo que fuera más fácil sentirse.

El castaño comenzó a ahogar sus gemidos sobre una almohada,estaba cerca de correrse nuevamente. Vio estrellas cuando sintió el pene del mayor comenzar a maltratar su próstata con rudeza.

Se corrió por segunda vez en la noche,manchando las sábanas,su cuerpo sensible todavía recibía las embestidas de Yoongi,quien a los poco segundos se había corrido finalmente llenando la entrada del menor con su caliente semen.

Se recostó a su lado tratando de regular su respiración,mientras Jimin imitaba su acción yendo a recostarse sobre su pecho.

—eso... F-fue intenso,estoy dispuesto a repetirlo las veces que quieras.

Confesó viendo la pequeña sonrisa de Jimin.

—seamos honestos Min. Me gustas, te gusto;¿quién te salvará de esto?.

Era verdad,nadie podría,él había caído hace tiempo y ya nadie podría rescatarlo.

—¿qué tal si no quiero que nadie me salve?— contestó abrazándolo,sintiendo el calor corporal y su aroma natural. El castaño lo miró unos segundos sin saber que decir.

Esa sensación que sentían ambos era tan placentera como peligrosa.

—debemos dormir,mañana tienes mucho que hacer,el gobierno te entregará ese cheque,también tienes que cancelar el contrato que  TaekWoon había hecho.

Explicó cubriendo el cuerpo de ambos con una fina sábana. Jimin mordió su labio inferior todavía mirando atentamente las expresiones contarías. ¿Qué podía decirle?.

—b-buenas noches,Yoongi.

Murmuró dejando un corto beso en sus labios sorprendiendo al mayor quien sintió su corazón latir con más rapidez ante aquella pequeña acción.

Yoongi volvió a unir sus labios,en un beso sin prisa,cálido y dulce. Ambos se dejaron llevar por esa sensación,una sensación que los hacía sentir en perfecta paz y armonía.

El mayor dejó de sentir movimientos en los labios de Park y entonces se separó para observarlo:se había quedado dormido.

Lo desgastó.

Se quiso golpear por haber sido un poco muy brusco con él, lo acomodó sobre su brazo para poder abrazarlo mejor,plantó un beso en la frente de Jimin y se propuso a dormir también, en la mañana se vendrían bastantes cosas.