La mañana siguiente llegó, y Sun empezó a hacer su rutina para hacer trabajos y ganar más yenes, aunque andaba un poco distraído pensando en cierto asunto, y mientras tanto, Moon caminaba a la casa del profesor Kukui.

-¿No crees que el mensajero Sun actuó raro ayer?- preguntó la Rotomdex, que acompañaba a la farmacéutica

-No veía nada raro en él, la verdad...aunque creo que me escondía algo, y no lo quiso decir...- sospechó la chica de cabellos negros- ¿tú que crees?

-¿Qué puedo saber? Conozco bien a los pokemon, no a los humanos

-Vaya que eres de muy buena ayuda...igual no eres mala compañía.

-¿Eso fue un alago??- dudó el aparato flotante

-Sí, lo fue- rió levemente la chica

Más tarde llegaron a la casa del profesor experto en movimientos de Alola y su esposa, experta en portales interdimensionales. Tanto la chica como la pokedex entraron al hogar, pero cuando abrieron, el profesor Kukui salió casi volando del lugar y chocó con la arena un poco lastimado y adolorido. La chica al asomarse vió que el ataque fue causado por unos pokemon, un Pikipek y un Wingull al parecer, al parecer el profesor practicaba ataques con esos siendo sujeto de prueba, como normalmente suele hacer. Típico del profesor de la región Alola.

-¡Esos ataques si que fueron poderosos!- exclamó el profesor levantándose de la arena y volteó a ver a la joven. -Ah ¡Moon! ¡Que bueno que llegaste a tiempo! Ya pensaba en ir a buscarte.

-¿Se encuentra bien profesor?- cuestionó la mencionada

-Claro claro que estoy bien, no me sorprende de dos pokemon pájaro que los ataques tornado fueran potentes- el profesor sonrió y se dirigió a su hogar- seguiremos esta sesión de entrenamiento después, vamos Moon, pasa, también tú rotomdex.

Los mencionados entraron sl lugar, no había cambiado nada desde la primera vez que llegaron Moon y Rotom a Alola para conocer al profesor y terminar la rotomdex, lo cual fue un éxito, la primera razón por la que ha logrado llegar a la región tropical. Era un poco nostálgico y agradable a la vez.

-Bien, te pedí que vinieras para actualizar a la Rotomdex sobre algunos datos y funciones, lo mismo hice con la pokedex de Sum- Explicó el profesor. -Tambien quería saber como va tu progreso de recolección de datos y tu viaje a Sinnoh.

-Pues, respecto a la Rotomdex, ya casi hemos acabado de tomar datos, nos falta poco, pero no sé si entre hoy y mañana podremos hacerlo antes de volver a Sinnoh, aunque podría traerle información de allá para usted.- dijo Moon mientras le acercó la Rotomdex al profesor.

-Eso me encantaría- empezó a hacer su trabajo con la Rotomdex después de apagarla. -¿Hablaste con Sun?

-Sí, lo hice- asintió

-¿y bien? ¿Qué te dijo? - cuestionó el profesor

-Parecía estar de acuerdo, pero a la vez no, no estoy muy segura al respecto- empezó a dudar la chica- Ayer me llevó al parque acuático de Akala, y pareció querer decirme algo, pero no me dijo que...¿Cree que esté molesto??- Miró al profesor, esperando una respuesta de este a su pregunta.

-Sun no se enojaría por algo así, se enoja cuando no le pagan lo suficiente o lo acordado, pero te considera una buena amiga, dudo se moleste contigo- dijo sonriente el profesor- sin embargo creo que es demasiada información para él que procesar, se acostumbró mucho al tenerte aquí, ¿ahora que hará cuando se lastime? Jeje

-Mmm...quizás tenga razón, pero aún sigo dudando

-No es muy común en ti dudar sobre algo así Moon, igual, deberías preguntarle directamente ¿no crees?

Al decir eso, se ve una pokemontura de Tauros pasar por frente a la casa, donde el mensajero Sun se estaba bajando con unas cajas y entra a la casa del profesor pokemon.

-¡4 cajas de crema de Pyukumuku para la profesora Burnet!- exclamó Sun mientras entraba con las cajas

-Hablando del diablo, déjalas ahí, ahora traigo tu paga de parte de Burnet- dijo mientras se alejaba

-¡Okay!- dijo mientras bajaba las cajas y Moon estaba frente a él, lo que lo sorprendió- ¡M-Moon! A-aah que sorpresa encontrarte Aquí

-Lo mismo digo- contestó la chica- El profesor dijo que tenía que actualizar a la rotomdex, por lo que estoy aquí

-Ya veo, yo vine aquí por trabajo, y mira, ¡no me he lastimado aún! ¡¿No es genial?!

-Eso me alivia un poco, pero eres muy propenso a accidentes..- dijo Moon un tanto preocupada

-No hay problema, no me lastimaré tanto...y si lo hago me curarás gratis ¿no?- miró a la chica con una tierna cara de ilusión

-Si Sun, te curaré gratis- asintió la chica

-Aquí tienes tu paga Sun- dijo el profesor mientras le entregaba dinero al mensajero

-¡Genial! ¡Gracias profesor! Llegó la hora de la siguiente entrega- dijo el chico bastante alegre

-¿Por qué no vas con él, Moon? Esto tardará un poco- le dijo Kukui a la joven. -Además alguien debe vigilarlo

-No necesito vigil...!!- sin terminar la frase el joven se había caído en las escaleras y cayó en la arena que mortiguó su caída

-Si profesor Kukui...- dijo dirigiéndose al chico preocupada- ¿te encuentras bien?

-Puag, sí, estoy bien- dijo levantándose -Solo es arena...

-Mejor te acompaño, así te curo mientras te lastimas

-...C-claro! No me molesta en absoluto!- dijo el mensajero desviando la mirada con un leve rubor en las mejillas.

Moon acompañó a Sun en sus entregas, y las dudas de Kukui fueron ciertas, pues el mensajero tuvo mala suerte cayendo, tropezando, e incluso se golpeó con un Exeggutor creyendo que era una palmera, en cada momento que se lastimaba, Moon lo curaba casi al instante, lo cual le gustaba al mensajero, que en algunas ocasiones se ruborizaba ante esos actos. Llegó el atardecer y Sun empezó a descansar de su arduo trabajo, acompañando a Moon a buscar a la rotomdex.

-Oye, Moon...- empezó a hablar el mensajero

-¿Qué sucede?- preguntó la pelinegra

-...¿todavía...piensas volver a Sinnoh?- preguntó el chico cabizbaja, un poco triste

-Debo hacerlo...ese Piplup es mi responsabilidad- respondió Moon- curarlo es lo mejor que puedo hacer por él, no puedo abandonarlo

-...l-lo entiendo...- respondió Sun cabizbaja

-Sun...¿estás en contra de que me vaya??- cuestionó Moon al ver el comportamiento de su compañero.

-¿¡e-eh?! Y-yo n-nunca dije eso, no estoy en-en contra de que regreses, después de todo es tu hogar...

-No parecer ser el todo honesto conmigo...- dijo Moon un poco preocupada al respecto.

-E-eh...Ah! Mira ya llegamos!- señaló Sun la casa de Kukui y fue adelantándose mientras Moon le seguía el paso y entraban al lugar-

-¿Profesor Kukui? ¿Está aquí??- preguntó la chica mientras buscaba al nombrado con la mirada

-Aquí estoy Moon- la voz del profesor se escuchó subir las escaleras de su laboratorio en la parte inferior de la casa con la rotomdex en manos- la pokedex ha sido actualizada con éxito, ya te la puedes llevar

-Gracias profesor Kukui- respondió Moon con una leve sonrisa

-Sun ¿te lastimaste otra vez??- dijo preocupado el profesor al ver al chico mensajero con vendas en el brazo izquierdo y en su cabeza

-No es nada profesor- dijo el mensajero con una sonrisa- Moon me curó, esto es solo medicina

-En efecto...bien, debo regresar a mi casa y empezar a empacar para mañana en la noche- dicho eso la chica se empezó a dar la vuelta mientras la rotomdex la seguía levitando- Nos vemos profesor Kukui, nos vemos Sun- y dicho eso se retiró

-¡M-Moon!- trató de evitar que se fuera pero era tarde porque se había ido- hum...- suspiró ante su nuevamente fracaso

-Sun, últimamente estás un poco extraño, ¿te sientes bien?- preguntó el profesor mientras se acercaba a él- últimamente no estás siendo muy honesto, hasta yo puedo verlo

-Profesor Kukui...creo que estoy siendo egoísta...- dijo bajando la cabeza

-¿Egoísta? ¿A qué te refieres? ¿Por el dinero o algo así?

-No...Hace poco supe que Moon se irá mañana...pero- empezó a tartamudear- yo...no quiero...

-¿No quieres...?- preguntó el profesor

-No quiero...no...no quiero que Moon regrese a Sinnoh...¿y si no regresa y vuelve a vivir allá? Suena un poco egoísta porque entiendo que quiera curar al Piplup pero...yo no quiero dejar de verla...-dijo aún tartamudeando y con una lagrimita saliendo de sus ojos- ¿Eso está mal??

-Jeje, con que es eso, claro que no está mal Sun- dijo el profesor poniéndole la mano en el hombro- no tiene nada de malo, créeme, te importa Moon ¿no es verdad?

-Sí...si me importa mucho...

-Entonces ¿por qué no le dices la verdad? Ella cree que estás molesto con ella, deberías ser honesto- dijo el profesor sonriendole al menor.

-Mmm...tiene razón profesor Kukui, ¡voy a decirle!- dijo para finalmente irse del lugar, no sin antes despedirse del profesor de la región y salir despavorido.

-Este muchacho... Jeje me pregunto que hará al respecto- dijo el profesor para volver a su trabajo junto a los pokemon.

Sun corrió de camino a la casa de Moon, con la esperanza de que esta vez le salgan las palabras de la boca, y decirle la verdad a esa persona que tanto aprecia. Más sin embargo no estaba al 100% de que le saldrían, pero al menos un poco más de tiempo con ella basta y sobra para él. Justo apunto de llegar a su destino.

-Casi llego, ¡Ya casi llego!- dijo el mensajero mientras corría a su destino, pero se tropezó con una piedra y cayó boca arriba golpeándose la cabeza- A-ay ay ay ay...d-duele...

-¿Sun?- preguntó una voz a sus espaldas con un tono de preocupación

-¡A-Ah M-Moon!- dijo pero se tocó la cabeza siendo molestado por el dolor que sentía

-¿Te lastimaste de nuevo la cabeza? E incluso se te quitaron las vendas que traías con la medicina- dijo acercándose al lastimado y ayudándolo a levantarse- te llevaré adentro para curarte ¿bien?

-Bien...- respondió el mensajero cansado y adolorido

Los 2 entraron a la casa, Sun se recostó en el sofá de la sala a esperar a Moon para aliviar sus dolores, lo que no tardó mucho, y la mencionada llegó y se sentó a su lado empezando a preparar la medicina.

-Por favor no te muevas- dijo la enfermera preparando el medicamento en un tazón

-Duele muchoooo- dijo como si fuera un niño pequeño

-No seas infantil Sun- dijo empezando a aplicar la medicina en su cabeza con su mano, levantando con la otra el cabello despeinado del mensajero

-¿solo debo quedarme recostado?- preguntó Sun aún adolorido

-Sí, estaré cuidándote que no hagas nada brusco mientras te curas ¿ok? Posiblemente debas quedarte a dormir aquí- contestó mientras seguía aplicando la medicina

-Está bien...

-Yyy ya está, solo debes quedarte ahí ¿bien? Te traeré algo de comida- dijo apunto de levantarse, pero sintió algo que le impedía moverse

-N-no me dejes aquí por favor- dijo Sun agarrándole la muñeca a la farmacéutica evitando que se mueva.

-¿Mm? ¿Qué te sucede? Solo voy a traerte comida para que no agonices de noche por el hambre, volveré ahora ¿sí? Espérame- le respondió la chica tratando de persuadirlo, hasta que la soltó, dejándola ir a la cocina.

-...¿qué me está pasando? ¿Por qué pienso tanto en eso? ¿Por qué...? Creo que he escuchado esto del profesor Kukui y la profesora Burnet, pero no me acuerdo- pensó el mensajero sumido en sus pensamientos, tratando de identificar los sentimientos que tenía últimamente desde que se enteró que Moon se iba. -¿Cómo se llamaba esto? A ver si recuerdo que me dijo una vez..."si sientes preocupación por una chica, que te importa y la aprecias, no como una amiga..." ...eh...¿qué seguía...? Mmm...- siguió pensando el mensajero, hasta que su dolor cabeza le empezó a afectar a su pensamiento- ay ay ayyyy... Mooooonn

-Sé paciente Sun, por favor, ya casi acabo- dijo la chica desde la cocina

-¿Qué decía también el profesor...? Entonces esa chica...puede que te...te...- siguió pensando el chico.

-Ya está listo- dijo la chica regresando con un arroz con curry para el chico.

-¿Uh? ¡Genial!- dijo apunto de pararse

-¡No! Debes quedarte acostado- exclamó la chica recostadolo de nuevo en el sofá

-¿Y cómo comeré el curry gratis??- dijo con una carita triste

-Moon suspiró- vamos, abre la boca- dijo tomando una cucharada de la comida y soplándola

-¿E-eh?- preguntó un poco nervioso

-Vamos, debes comer, di "aaaahh"

-Eeh...A-aaahh- sonrojado empezó a abrir la boca mientras Moon le daba la comida- mmm eshta muh ricuh

-No hables con la boca llena- dijo Moon riendo un poco mientras servía otra cucharada.

Así Moon siguió dándole la comida al mensajero lastimado hasta que no quedó nada, incluso encendió el televisor en el que se transmitían peleas de Royal Mask, hablaban, disfrutaban del tiempo juntos y Sun no se aburría mientras estaba recostado. Pero llegó un momento en el que las cosas cambiarían.

-Bueno, ya es muy tarde, debo irme a acostar- dijo Moon mientras se levantaba del pequeño sofá al lado de Sun- también te debes dormir, tu cabeza estará mejor para cuando acabe de empacar

-E-empacar...- Sun recordó la partida de Moon a Sinnoh, su sonrisa se fue en ese instante, dado que su tiempo se había acabado

-...¿Quieres hablar al respecto?- preguntó Moon preocupada por su compañero

-...- Sun estaba callado, las palabras querían salir pero estaba nervioso para decirlas

-...Bien, descansa ¿sí?- dijo apunto de buscar una manta para taparlo, pero nuevamente la mano de Sun la detuvo- ¿S-Sun??

-N-no...

-Solo voy por unas mantas para ti...

-N-no es eso...yo..yo...- empezó a tartamudear tratando de que las palabras le salgan de la boca e intentando pararse, aún sabiendo que le dolería la cabeza

-Sun, te dolerá la cabeza, no te levantes- dijo preocupada por su bienestar

-Moon...n-no...¡No quiero que vuelvas a Sinnoh!!- dijo en alto finalmente

-¿Q-Qué..?- dijo Moon sorprendida

-¡N-no quiero que te vayas! ¡Sé que es egoísta considerando tus buenas intenciones con el Piplup!!- exclamó con unas pequeñas lágrimas- pero...pero... ¡¡Q-Quiero que te quedes conmigo aquí en Alola!! P-porque tú...tú...me...g-g...-trató de decir el chico- así que esa es la palabra...- pensó para finalmente decir- ...gust...gustas...- dijo finalmente con un notable sonrojo.

Después de decir eso, la sala se quedó en silencio, Moon estaba sorprendida ante las palabras del muchacho, no sabía bien que decir o responder, pero notó sinceridad en sus palabras que ni siquiera creyó oír alguna vez de su boca, también se notaba un leve sonrojo en la cara de Moon, lo que sorprendió a Sun, haciendo que voltee la vista un poco avergonzado.

-L-lo siento...n-no creí reaccionar así- dijo volteando su vista aún recostado en el sofá- n-no tienes que...responder a lo último...p-pero igual...q-quiero que te q-quedes...

-Sun...-dijo sentándose a su lado- ¿eso qué dijiste... es verdad?

-...- solo sintió callando sus palabras aún con su sonrojo

-ay Sun...¿por qué no me dijiste nada de eso antes?- dijo acariciando su cabeza

-N-no sabía como reaccionarías al respecto...pero quería convencerte de que te quedes porque...¿y si no vuelves?- dijo evitando mirarla

-Debo admitir que esa faceta tuya es tierna- dijo riendo un poco- pero...debiste ser honesto conmigo en un principio

-¿E-entonces me perdonas? ¿Y-y no te irás?!- Preguntó ansioso mientras la veía

-Sí, te perdono...pero igual- dijo mientras lo veía- aún debo volver a Sinnoh...se lo prometí al Piplup...

-...Lo entiendo...

-Pero, te aseguro que...pienso volver- dijo Moon sonriendo

-¿E-en serio?! ¡¿L-lo harás?!

-Lo prometo- dijo juntando su meñique con el de Sun

-Jeje...y-y...sobre...l-lo segundo....que te...te dije...- mencionó tartamudeando el chico pero fue interrumpido

-Es hora de dormir- arropó a Sun antes de que hablara- mañana hablamos, me acompañarás al aeropuerto mañana, descansa- y así empezó a irse a su habitación

-M-Moon...ha-hasta mañana...- el chico solo la vió irse y se empezó a dormir- quisiera...que me correspondiera...el profesor Kukui tenía razón...aún cuando decía que no me pasaría...que tonto de mi parte...

Mientras con Moon...

-Vaya...por un momento creí que soñaba...pero...es tierno saber que el sentimiento es mutuo- dijo la chica en pillama en voz muy baja mientras se recostaba en su cama.